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Cubadebate y Ocean Sur convocan al III Concurso de Microrrelatos (+ Video)

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Ilustración: Edilberto Carmona Tamayo/ Cubadebate.

Cubadebate y la casa editorial latinoamericana Ocean Sur convocan a la tercera edición de nuestro Concurso de Microrrelatos, que desde 2017 este sitio web dedica al advenimiento de la Feria Internacional del Libro en Cuba.

¡Participa! Demuestra en un relato corto tus capacidades como poeta, guionista o narrador. El ganador obtendrá una colección de libros, cortesía de Ocean Sur, los tres textos que compilan los artículos más destacados de Cubadebate que presentamos en nuestro aniversario 15, y la oportunidad de publicar su obra en este sitio web.

Si quieres ser el ganador, solo tienes que escribir un texto, que no exceda los mil (1 000) caracteres (sin espacios), que nos permita descubrir al escritor que eres. Inspírate y echa a volar tu imaginación, escribe un poema, un cuento, una décima, el inicio de una novela o testimonio…

Deja tu microtexto como un comentario en esta entrada, el plazo de admisión vence el jueves 7 de febrero, el día que iniciará la XXVIII Feria Internacional del Libro de La Habana.

El jurado estará integrado por reconocidos escritores y periodistas cubanos. Nos comunicaremos con los ganadores a través de la dirección de correo electrónico que escriban al enviar el comentario con su obra.

Ocean Sur y Cubadebate quieren premiar a los amantes de las letras con este concurso dedicado a la microliteratura.

En video, la convocatoria

Se han publicado 783 comentarios



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  • Mayte Castrejon dijo:

    Habían pasado casi 36 horas de la desaparición de Ángel, todos los esfuerzos por localizarlo y comunicarnos con él habían sido en vano, su fotografía por las redes había circulado sin ningún éxito, nadie sabía nada de él.
    Con la mirada fija en la carretera alcancé a ver las oficinas del Servicio Médico Forense, no podía parar de pedirle a Dios no encontrar ahí a mi hijo. Quería encontrarlo con todas mis fuerzas, pero no ahí, no muerto. No podía verlo muerto. Mire a mi esposo y como le temblaban ligeramente los brazos mientras apretaba el volante con sus manos, su mirada iba perdida en el camino, este maldito camino que no terminaba, que parecía eterno. Volví a rogar: “Por favor Dios, que no esté ahí mi hijo”.
    Sentía nauseas, quería dar la vuelta y regresar a casa, ver el carro de Ángel estacionado afuera, correr hasta su habitación y encontrarlo ahí leyendo algo. Quería abrazarlo, sentir que estaba bien.
    —Vamos—me dijo mi esposo apenas en un susurro sin voltear a verme. Nos habíamos estacionado. No podía creer que estaba ahí, que tal vez vería el cuerpo de un joven para identificarlo como mi hijo o para seguir teniendo la esperanza de encontrarlo con vida, aunque siguiera desaparecido.

  • Clavel° dijo:

    Esa noche dormía acompañada. Se convertía en testigo de un amor ausente casi nulo. Convirtió los besos en algo mucho más grande que su dolor.No tenía ausencia de nada, ni pensamiento perdido. Solo el placer de sentirse viva, llena, feliz.. Al amanecer quedó sentada frente a ese cristal empañado mientras esperaba ese alguien que jamás volvió.

  • Glenda Royo dijo:

    Me quedé mirando la lejanía, más allá de sus ojos, sin saber que contestarle. Fue una de esas veces en que te quedas pensando “¿Qué rayos le digo?”, esos momentos en que las palabras sobran. Es que hay ocasiones en que las explicaciones se basan en vivencias, en situaciones vividas que permiten ese conocimiento intrínseco que permite dar una valoración acertada. Y esta no era la ocasión, y realmente me quedé en blanco total, pidiendo una intervención divina que me salvara del supremo mal rato que estaba pasando, tres y cuarenta de la tarde mediante, pleno boulevard de Obispo, ese callejón en el que cada habanero, y por qué no, cada cubano, sabe que la afluencia de público es casi asfixiante, que me permitiera responder la pregunta que mi poco discreta y para nada excedida en decibeles hijita de 4 años exactos, cuando me soltó en plena calle: ¿Mami, como se les mete a las mamás los bebés en la barriga? Me puse a pensar en ese momento épico en el que la abuela trajo al mundo al progenitor de mi hija (porque en el mío no, por supuesto), al mismo tiempo en que el resto de los transeúntes nacionales (e internacionales también, como no) se detenían a escuchar la proverbial explicación de la atribulada madre. A cuantos no le habrá pasado por la cabeza la consabida cigüeña, la abejita y la arañita, la Virgen María y la concepción milagrosa de Jesucristo, en fin, las historias que se les cuentan a los infantes en este caso. Y yo lo único que podía rumiar era: “¿Qué rayos le digo?”

  • GiselleGarcía Sánchez dijo:

    El escritor
    En su afán de narrar cuentos y tejer historias sorprendía su manera altisonante de ser, se había convertido de la noche a la mañana en un ventrículo de palabra ardiente, los problemas había que solucionarlos, pero la oración a golpe de expresión oral, al parecer no eran el vehículo, quedó sólo, callado, ausente y lo peor trastocado, por lo que empezó a emanar letras de todas partes de su cuerpo y la vida se le hizo insoportable. Redescubrió el papel y la pluma, justo entonces tuvieron validez sus asombrosas historias.
    Giselle García Sánchez

  • Marco Antonio Borrero Neninger dijo:

    Poema.

    Los libros nos observan,
    nos tocan,nos besan.
    Siempre nos quieren al mirarnos.
    y cuando nos tocan,y cuando nos besan.
    no importan si son finos o gordos,
    nos quieren igual y observan.
    liberan los sufrimientos,nos encuentran.

    ¡Que caricia aquella que desbordan
    cuando hojeamos sus paginas!,
    y el susurro infantil al tocar sus puntas.

    Aserquemos con el amor primario.
    que llevamos dentro.
    y el deseo oculto poir lo nuevo.

  • Eldris Rivero dijo:

    Malditas las paredes que me guardan a tu lado. Malditas las horas en que eres mi única compañía. Malditos los ratos en que necesito una voz de aliento y solo tengo tu silencio. Maldito el silencio que se refugia en estas cuatro paredes, donde además, estamos solas tú, maldita soledad que te aborrezco y yo, maldita mujer que me asqueo de ti.
    Cuatro paredes son testigo de mi angustia y de esta soledad que me acompaña.
    Cuatro paredes son la odisea de los días de ocio. Cuatro paredes atiborran mis horas de malos recuerdos, momentos de tristezas que solo borra una buena compañía; la que no tengo.
    Cuatro paredes me parecen un infierno; cuatro paredes son el oasis de angustia donde llego al éxtasis de la nostalgia, por tu culpa maldita soledad.
    Cuatro paredes y esta maldita soledad son mis únicas compañías en esta bendita vida en la que odio cuando no estás.

  • Mayte Castrejon dijo:

    El camino se desliza bajo nosotros y frente a mis ojos la carretera se difumina, disfruto infinitamente el antagonismo del paisaje entre el desierto de un lado y el mar inmenso, imponente y tranquilo del otro. Playa Balandra es nuestro destino, todos dentro del carro permanecemos tranquilos junto al susurro de la madrugada, pero internamente yo lucho por ignorar lo que se estaba generando.

    Bajo un cielo nocturno despejado y limpio, iluminado por decenas de estrellas, viajo sentada junto a él. Apenas y cabemos en el pedazo de asiento de copiloto que compartíamos en el pequeño auto.
    Lo miro ocasionalmente de reojo mientras pierde a ratos la conciencia durmiendo un poco, yo trato de sostener su cabeza para que no se golpee, pero no sé si debo hacerlo. Quiero cuidarlo. ¿Por qué quiero cuidarlo? Su piel roza apenas con la mía y yo me deshago en mí misma. ¿Como se puede querer a alguien tan pronto, tan sorpresivamente? Quiero que este camino no termine nunca, no quiero que se separe de mí.

  • Alba dijo:

    “Cobarde”
    Lo siento, pido perdón.
    Pido perdón porque estoy enamorada.
    Pido perdón porque hace 13 años estoy enamorada y no lo sabe nadie.
    ¿Qué diría mi madre, mi abuela, mis amigas, me verían de la misma forma si les contara que hace 13 años amo una mujer?

  • Mayte Castrejon dijo:

    De pronto un silencio peculiar en la noche me permitió escuchar golpes contra una puerta. Era el momento de actuar. La despreciable Alissa Hart había aumentado en mi estima tras convertirse en nuestra mejor ayuda, atrapada era una perfecta distracción para Amber y Emma.
    Me di la vuelta para quedar frente a la enorme ventana de la sala de espera y sin dudarlo dos veces tomé una bola de decoración y la lance con fuerza contra el vidrio. El sonido fue estruendoso y los gritos de Sharon no ayudaron en nada. Pronto escuché pasos en las escaleras de mármol blanco y supe que era en ese momento o nunca.
    Nahomi tan instintiva y dispuesta como siempre corrió a prisa decidida a salir entre los vidrios rotos y en su carrera tomo a Sharon del brazo para sacarla junto con ella.
    Vi a mis dos amigas saltar hacia la oscuridad y la profundidad del bosque a toda prisa y ya no tuve más qué pensar; corrí sin echar una mirada atrás, sabía que de haberlo hecho habría visto las manos de Amber casi atrapándome.
    - ¡Niñas estúpidas!-grito Amber con todas sus fuerzas, con ira e impotencia.
    Nosotras no dejamos de correr, no sabíamos a dónde íbamos ni a qué nos enfrentaríamos, pero volver no sería nuca una opción.

  • Mayte Castrejon dijo:

    Está lloviendo. La lluvia me recuerda a ti, a nuestras caricias, a algunos momentos juntos. Quise refugiarme de las gotas pero después de unos segundos lo comprendí: eras tú. Me entregue a la lluvia; me empape de ti, después me enferme. Tú eres el virus y la misma cura. ¿Me ayudarás o me dejarás morir?

  • Mayte Castrejon dijo:

    No sé por qué Frank Sinatra me recuerda tanto a ti, si ni siquiera te gustaban sus canciones, jamás las escuchamos juntos. ¡Oh! Tal vez por eso me recuerda a ti: porque no estamos juntos. Es extraño no poder escaparme de ti. Te encuentro en los lugares donde estuviste y en los que jamás visitaste, te veo en las películas que amabas y en las que detestabas, en las fotografías que tenemos juntos y en las que no apareces. Te recuerdo porque estuviste o porque no lo hiciste. ¿Entiendes ahora mi problema? ¿Cómo se le llama a esto? ¿AMOR? ¡Que complicada palabra! ¿Por qué tenía yo que existir dentro de ella? ¿Por qué hiciste que esa palabra se convirtiera en la descripción perfecta de mis miradas, de mis pisadas, de mis pensamientos?
    ¡A-M-O-R! Sí, ya puedo pronunciarla, ya puedo entenderla, ya puedo temerle con razón. Ya te estoy temiendo. Can you understand?

  • Mayte Castrejon dijo:

    Estamos bajo la sombra de un viejo sauce, parece que llora; así como tú lloraste ayer. ¿De qué eran esos pequeños cristales que resbalaban por tus mejillas? ¿De tristeza, de felicidad, de melancolía? ¿Por qué las escondías de mi mirada? ¿Por qué te escondes de mí? Yo también les lloro a los espectros conocidos, a los años pasados, a los ecos de risas, a las caricias perdidas, a los abrazos vacíos. Yo también lloro, a veces sin razón. Confía en mí, yo sé bien que un hombre llora y me gusta que lo haga; un hombre que llora es lo bastante fuerte como para aceptar que está sufriendo. Tú eres fuerte, tú llora, sólo déjame secar tus lágrimas. Tú llora, sólo déjame saber por qué. Tú llora, pero déjame hacerte sonreír después.
    La tranquilidad te sienta bien. Suspira cuantas veces quieras, sigue soñando que yo seguiré aquí acariciando tu cara, despeinando tu cabello.
    Te haré feliz.

  • Maytee Castrejon dijo:

    Siempre me ha gustado verte dormir, no sé por qué. Los gestos que haces inconscientemente revelan tanto de ti que te asustaría saber que tantos secretos he descubierto durante una noche de insomnio. Tu respiración tranquila me arrulla, me enternece lo frágil que luces y lo fuerte que me siento al rodearte con mis brazos, tus pestañas negras esconden tus sueños, tu cabello despeinado me divierte y la ligera sonrisa con la que siempre duermes me hace sonreír a mi también. Ahora que te tengo junto a mi me doy cuenta que te extrañé más de lo que era consciente. Soy fuerte, es bueno saberlo. ¿Qué pasa? ¿Te duele algo? ¿Por qué has fruncido el ceño de esa manera? Tantos misterios. Me gustaría saber qué sueñas.
    De verdad me gustaría…

  • Giselle García Sánchez dijo:

    Para el Concurso de Cubadebate
    El escritor
    En su afán de narrar cuentos y tejer historias sorprendía su manera altisonante de ser, se había convertido de la noche a la mañana en un ventrículo de palabra ardiente, los problemas había que solucionarlos, pero la oración a golpe de expresión oral, al parecer no eran el vehículo, quedó sólo, callado, ausente y lo peor trastocado, por lo que empezó a emanar letras de todas partes de su cuerpo y la vida se le hizo insoportable. Redescubrió el papel y la pluma, justo entonces tuvieron validez sus asombrosas historias.
    Giselle García Sánchez

  • Mayte Castrejon dijo:

    Sin conciencia alguna cerré los ojos y sentí sus labios rosando los míos, tomó entre sus manos mi cuello mientras nuestra respiración se hizo constante. Poco a poco comenzó a presionar sus labios contra los míos con más fuerza, respirábamos con la intención de robarnos el aire el uno al otro y nuestro deseo se hacía más grande, cada vez más insaciable.
    Me recosté sobre el piso sin dejar de besarlo y sentí podía quedarme así por el resto de mi vida. Nada era extraño, ni tampoco inusual, me daba la impresión de que el hombre con el que estaba no era un conocido de apenas unos días, sino que sentía conocerlo de casi toda una vida.
    Despegamos lentamente nuestros labios y sus manos se aferraron a mi cuerpo, desaparecimos esa ligera línea que nos separaba, de pronto era como si fuéramos uno sólo. Sentía el latir de su corazón en mi pecho y mis sentidos se desmoralizaban mientras recorría sus labios por mi cuello.
    Mantuve los ojos cerrados, escuchaba la lluvia golpeando la ventana, el chispear del fuego y el sonido de su respiración agitada. Morosamente nos despojamos de nuestras ropas deslizándolas con delicadeza por nuestra piel que ardía en una pasión inagotable, indescriptible.

  • J Alex Hernández dijo:

    Mi novia

    Un poco nervioso en este día, pero a la vez ansioso por saber y ver las caras de mis padres cuando te vean, y más cuando se trata de ti. Les he comentado un poco sobre nosotros y, al menos por una foto que les enseñé, les agradas.
    Desde que andamos juntos ellos han notado un gran cambio en mí. Tal vez el hecho de que seas mayor me ha hecho madurar temprano. A ellos les gusta el cambio, y me han preguntado muchas veces el porqué, pero no sé cómo decirles que es gracias a ti. Estar escondiéndonos todo el tiempo, el deseo de tenerte, de conquistarte cada día, de ser paciente, de arriesgar; todo eso de alguna forma me ha hecho más fuerte, y me ha enseñado a actuar ante ciertas circunstancias de la vida; sobretodo ante ésta.
    -Vamos entrando amor, estoy seguro que todo saldrá bien.
    Siento tus manos un poco sudadas, o tal vez sean las mías. El nervio nos consume. He esperado mucho por este momento. Yo también siento el mismo temblor de piernas y un tremendo nudo en la garganta. Espero poder dominar mis instrumentos vocales. Ya es hora.
    - Mamá, papá… les presento a mi novia… y sí, es casada.

  • Giselle García Sánchez dijo:

    Para Concurso de Cubadebate
    El escritor
    En su afán de narrar cuentos y tejer historias sorprendía su manera altisonante de ser, se había convertido de la noche a la mañana en un ventrículo de palabra ardiente, los problemas había que solucionarlos, pero la oración a golpe de expresión oral, al parecer no eran el vehículo, quedó sólo, callado, ausente y lo peor trastocado, por lo que empezó a emanar letras de todas partes de su cuerpo y la vida se le hizo insoportable. Redescubrió el papel y la pluma, justo entonces tuvieron validez sus asombrosas historias.
    Giselle García Sánchez

  • Florangel Valdés Jordá dijo:

    AUTOR: LINO MARTÍNEZ TAMAYO

    TÍTULO: HONOR A MI SOMBRA

    Dices que estás sola, es cierto, estás sola
    Mi sombra es la que te acaricia cuando haces los quehaceres de la casa
    Estás sola, pero mi sombra te recoge todos los días al salir del trabajo
    Y te pregunto cómo te fue después de besar tus labios
    No lo percibes porque es mi sombra.
    Cuánto le debo a mi sombra
    Que es capaz de acariciarte aunque yo no esté
    Y hasta entra en tu intimidad y te hace el amor
    No como tú necesitas, pero con amor.
    Sabes, si algún día te enamoraste, no fue de mí, sino de mi sombra
    Que siempre te acompañaba aunque yo estuviera
    Porque en fin, siempre estuviste sola
    La dejaré contigo
    Pero, por favor, nunca le digas que a pesar de ella estar, te sientes sola
    Porque yo me fui o nunca estuve
    Pero te quedarás sin sombra.

    LMT

  • Julio César Torres Gómez de Cádiz Toro dijo:

    Para concurso

    DE UNA ENTREVISTA

    ¿ Le avergüenza el hecho de que el minicuento sea considerado abiertamente un subgénero literario y que por cosiguiente no sea usted visto como un escritor con todas las de la ley?
    - ¡ No, en lo absoluto! Me asiste una musa enana.

  • Luis German Gonzalez Santiesteban dijo:

    A Fidel . por su ejemplo y Valía.
    Culpable

    Eres tú culpable de la verdad,
    De desnudar el cuerpo a la mentira.
    Esa verdad que quema a los impuros.
    A los falsos y esquivos de buen discurso,
    Que te mienten y engañan,
    Con filosofía abstracta y de mal gusto.
    Eres tú culpable del pensamiento que busca el bien,
    Allí donde existe ya el mal.
    El bien sin distinción de raza y sin frontera,
    Un bien común que nos abraza y alimenta la esperanza
    Eres tú culpable de la alegría,
    Que desborda el rostro de los niños
    En el círculo, la escuela y en nuestras casas,
    De esas madres y sus hijos, agradecidas,
    Que profesan amor a quien construye,
    Y a quien resguarda.
    Eres tu culpable de que yo piense,
    De inspirarme en tu ejemplo y seguir tú camino.
    De mantener la fe y la esperanza que tú imprimes
    Cuando los tiempos son duros.
    Eres tú culpable de que mis hijos,
    Te mencionen a diario, aquí en la casa
    Eres tú culpable de las polémicas
    Que desatas, el no verte en las tribunas.
    Eres tú culpable de que yo quiera,
    Encontrarte a mi paso todos los días
    Eres tú culpable de nuestra historia,
    De tu sabia valía y conducción
    De mostrarle a los pueblos la resistencia,
    Y el camino del triunfo
    Eres tu culpable del despertar, del oprimido y el desvalido
    , que hoy demanda por igualdad en América toda y mas allá.
    Eres tú culpable de tantas cosas que te sentencio a vivir por siempre,
    Para sentirnos pleno, para que no falte la paz
    Para que no muera la verdad.

  • Isael Popa F. dijo:

    EL CIELO ESTABA CUBIERTO TOTALMENTE DE NUBES NEGRAS, LAS QUE PRESAGIABAN UNA TEMPESTAD DE VIENTO Y AGUAS.
    MI ABUELA COGIÓ CENIZAS DEL FOGÓN E HIZO UNA CRUZ EN EL SUELO Y CON UN MACHETE LE PASÓ POR ENCIMA. LAS NUBES SE DISIPARON Y NI GOTA DE AGUA.
    MI ABUELA HABÍA CORTADO LA TEMPESTAD.

  • gustavo dijo:

    Confiar y esperar.
    Le aguardaban con impaciencia. La única cura para aquella inquietud, era verlo otra vez . Millones de ojos miraban hacia todos los sitios posibles por donde podía aparecer.
    No llegó.
    La máxima de Edmundo Dantés flotaba en el aire.

  • Elvis lázaro. Martínez pelaez dijo:

    El amor comienza,con el choque de dos seres vivos que al intererartuar crea una química tan hermosa que ni el perfume, ni la hermosura de flores an podido superar, es tan fuerte como la fuerza de un huracán y tan dulce como el néctar de las flores la miel que de él brota endulza los corazones de quienes lo sienten, el amor sin duda es el mayor regalo que Dios nos dio con el todo se puede, se moldea ideas, se hacen amistades se unen los pueblos y se aman las personas, el es un vínculo perfecto de unión el amor es insuperable, viva el Amor

  • Héctor Placer Cervera dijo:

    …─ Antes del triunfo de la Revolución existían escenas que no porque fueran rutinarias y cotidianas dejaban de ser impactantes, como la inmensa cantidad de mendigos que había en las calles de La Habana, sobre todo, en las calzadas, cuyas estructuras constructivas tenían amplios portales. Mujeres y niños hasta de meses de nacidos, tirados sobre periódicos, semidesnudos, famélicos, con pestilencia de heces fecales y orine, en plena insalubridad, rodeados de laticas para que los transeúntes les dejaran caer algunas monedas y poder sobrevivir. Esto era, sencillamente, bochornoso y denigrante. No me lo contaron, lo vi, lo palpé. Estas imágenes se grababan como una pesadilla en la conciencia de cualquier ser sensible.
    ─ Como los presupuestos estatales para funciones públicas iban a parar a los bolsillos de los políticos, los servicios a la población eran un verdadero desastre, por ejemplo: la educación primaria pública era insuficiente y las familias pobres que querían educar a sus hijos estaban obligadas a dedicar parte de su precaria economía a pagar la educación privada. Como un reflejo del mal funcionamiento de la salud pública era significativo que en todos los barrios de La Habana existiera siempre, al menos algún muchacho que padecía de enfermedades congénitas, otros que habían sufrido la poliomielitis y les habían dejado su secuela de parálisis, trastornos y deformaciones físicas. Significativo también era la cantidad de niños con los “dientes picados” (con caries dentales) o sencillamente sin dientes. La falta de prevención de la salud en la población era evidente. Mi familia, mi barrio y mis amigos no estaban exentos de esos males y ello también tenía una repercusión en mi mente…

  • Amalia dijo:

    Fue un cruce de miradas lo que definió aquel instante como único. Él solo atinó a una aproximación certera y ella en lenguaje extraverbal sugirió un trago. Él entendió perfectamente la seña y tomando la embriagada copa se dispuso a dar los pasos que lo convertirían, al menos por esa noche, en un hombre dichoso. La vibra en la disco suponía, más que un diálogo, un cuerpo a cuerpo entre melodía y melodía. La copa fue puesta como en señal de iniciación, ritual al que la bella dama sucumbió. Un sorbo de la copa y el intercambio nuevamente de miradas, fue el pretexto perfecto para que en un instante él la tomara de la mano y comenzaran a bailar. La melodía era conveniente dando paso a caricias y hasta alguna que otra cargada. Las miradas eran pi constante, ya no hacían falta palabras, el deseo era más que suficiente. Al terminar, los cuerpos palpitantes de emoción, no pudieron contenerse y en señal de total rebeldía, se estrecharon en un beso. Un beso que sólo los dioses griegos pudieran describir. Esa noche, fue lo que marcó el inicio de muchas veladas. Una noche para recordar, un instante que marca toda una vida.

  • Héctor Placer Cervera dijo:

    …el día 4 de marzo de 1960 a eso de las 3 de la tarde, cuando me dirigía a estudiar en la Escuela de Comercio de la Víbora, en los momentos en que cruzaba la avenida de Santa Catalina, frente al cine del mismo nombre, sentí una gran explosión y de pronto por encima de los edificios que están frente al cine, por la calle Juan Delgado, vi un hongo ascendente de humo denso, grandísimo, como si fuera el de una bomba atómica. Corrí hacia la escuela que estaba a una cuadra y allí me uní con otros compañeros que no se explicaban qué había pasado. Por el lugar de donde salía el hongo pensamos que era por La Habana Vieja.
    Decidimos partir para el lugar de la explosión y fuimos a la calle Juan Delgado a buscar un ómnibus de la ruta 15 que llegaba a la Habana Vieja. En la guagua todo el mundo pensaba que habían bombardeado, pero nadie sabía dónde. En el trayecto, sonó otra fuerte explosión, la indignación, la ira era mucha. Nos bajamos de la guagua en la calle Monte y tratamos de ir por la calle Egido hacia la terminal de trenes, pero a las dos o tres cuadras ya las fuerzas del Ejército Rebelde no dejaban pasar a nadie hacia la zona de la explosión. Mucho pueblo quería ir hacia allá, pero estaba prohibido porque se temía que sucediera una tercera explosión. Era una tarde nublada, de la zona de los muelles se veían balas trazadoras surcando el aire y se escuchaban pequeñas explosiones.
    No sabíamos qué hacer y nos dirigimos a la Casa de Socorros que está en la calle Corrales. Aquello era horrible, las ambulancias que venían de la zona del desastre por las calles Cienfuegos y Cárdenas traían hombres destrozados, quemados, fragmentos de cuerpos, brazos, piernas. Aquello era una locura, la Casa de Socorros estaba saturada, era pequeña e insuficiente y las ambulancias tenían que seguir por la calle Reina hacia la avenida de Carlos III, en dirección al hospital de Emergencias o hacia el hospital Calixto García.
    Estando en la esquina de las calles Monte y Cienfuegos vi una ambulancia que dobló a tal velocidad que el chofer perdió el control del vehículo y estuvo a punto de volcarse. Tal era el estado de desesperación. La gente quería actuar más rápido de lo que se podía. En todos los rostros de las personas se apreciaba una mezcla de tristeza con indignación. Nos cogió la noche en esa aventura. Cuando llegué a mi casa por poco me matan, porque no sabían nada de mí y mi mamá pensaba que había guerra.
    Después supimos que la explosión se había producido en el vapor francés La Coubre que estaba atracado en el puerto de La Habana y de él se estaban descargando armas y municiones.
    Al otro día nos concentramos en las calles 12 y 23 cerca del cementerio de Colón, era un día triste, aplomado, nadie hablaba. En el multitudinario sepelio de las víctimas, Fidel mostró pruebas de la implicación del gobierno de Estados Unidos en el crimen. En este acto fue tomada, por el fotógrafo Alberto Korda, la célebre foto al comandante Ché Guevara que ha recorrido el mundo.
    En esa tarde gris e histórica Fidel pronunció, por primera vez, ante todos nosotros, allí en la esquina de 12 y 23 la impactante consigna de ¡Patria o Muerte!

  • yoisan dijo:

    Vida
    En la mayoría de los días despejados donde el cielo es azul intenso, donde las nubes blancas no se juntan para armar alguna figura que nos recuerde algo como cuando éramos niños, miro fijamente hacia arriba dejo perder la mirada y siento una sensación de esperanza con una mezcla de añoranza unos deseos de poder volar y perderme en ese océano tan profundo y a la vez tan vacío donde se me mezclan sentimientos con recuerdos unos muy vivos y otro ya borrosos por el tiempo porque en realidad no se ni que quiero encontrar. Cierro los ojos y a mi mente vienen recuerdo de mi infancia que nunca quisiera que se fueran de mi mente: cuando todavía la naturaleza bestia trajes de gala y era muy respetada por el hombre, cuando las estaciones del año cumplían con su propósito y cada vez que salían al escenario eran aplaudida por cada especie humana en agradecimiento de una linda y húmeda primavera, un verano lleno de sol donde hacían brillar las hojas de los árboles, un otoño impresionante que al mover las ramas de los árboles con ese ligero aire para mudar sus hojas se veía con tanta delicadeza que parecía que las mecía para hacerlas dormir y no sintieran la caída y un invierno venerados por la mayoría donde se sentía la lluvia fina, el aire un poco más puro, se notaba la elegancia de las personas al vestir y el romanticismo de las parejas, cuando todo eso sucedía yo aún no era adolescente y ya admiraba todo lo que me rodeaba. Recuerdo con claridad en los tiempos de zafra el sonido del central con sus inmensas maquinarias, el traslado de la caña en carretas y camiones, el inconfundible olor a melado que invadía todo el poblado, las aceras llenas gabacillos por los campos de caña quemados, el olor de la caña cortada por las combinadas, el ir y venir de los trabajadores, de los pobladores se hacía una rutina verdaderamente hermosa, a la hora de la salida de los estudiantes con sus algarabías, contentos de regresar a sus casas para comenzar hacer sus travesuras, recuerdo que cerca de donde vivía estaba la casa de una amiguita del aula rodeada por matas de mangos, de palmas colindando con una finca que casi siempre la sembraban de frijoles pasábamos la tarde jugando correteando por todos las lados merendando lo que la naturaleza nos brindaba con extrema modestia y orgullosa de sus frutos sanos y abundantes todo tenía un colorido, una humildad todo era tan sano …… Hoy me doy cuenta que la vida no es fácil al mirar al mismo cielo buscando una esperanza para lograr sobrevivir, que cuando pasamos por su transcurso es como si camináramos por una cuerda floja por tramos, ya muy pocos respetan y quieren a la naturaleza la que nos da todo para la vida y el desarrollo.

  • Héctor Manuel dijo:

    CÓMO QUEREMOS VERTE, COMANDANTE

    No queremos verte como tú no quisiste:
    En el nombre de una calle, o de una escuela
    Ni ver tu rostro frío,
    Fundido en bronce, nombrando un parque.
    Queremos verte de niño, con tu carga humana,
    Bañándote en los ríos con tus amigos pobres de Birán;
    Y verte de joven, con recia mirada,
    Salvando a Céspedes con su campana,
    En la escalinata universitaria.
    Queremos verte en los días del Moncada,
    En el veraz torrente de tu histórico alegato,
    En tu inconmovible lealtad a los caídos;
    En la prisión fecunda;
    Y luego del exilio, verte surcando el mar,
    En el pequeño Granma enlentecido,
    Por la heroica carga.
    Y después del desembarco,
    En el frío surco allí tendido,
    Bajo la paja de la caña,
    Con el dedo en el gatillo
    Y el cañón en la garganta,
    Expuesto a una muerte temprana,
    Pero sin perder la esperanza;
    Y verte en la cima del Turquino,
    De gigante faro alumbrando el camino,
    Y verte al fin triunfante logrando los sueños,
    En la colosal obra de la revolución;
    Y verte, sí,
    Ya envejecido ¡pero invicto!,
    Con tu rala barba encanecida de sueños conquistados,
    Creando nuevos sueños que no podrás cumplir,
    Pero que otros cumplirán por ti.
    Y verte de científico y campesino,
    Volteando tus plantas de Moringa
    Un ratico antes de partir.

  • Héctor Manuel dijo:

    SONETO AL COMANDANTE
    Se dijo que te fuiste, Comandante,
    En una alocución inesperada,
    Anunciando tu muerte insospechada
    Que el alma estremeció por un instante.

    Pero pronto supimos, Comandante,
    Que no te habías ido ni te irás
    Que en todas las batallas seguirás,
    Más invicto que nunca y más triunfante.

    Con tu guía, tu estrella y su fulgor
    Seguirás con la patria en su destino
    De triunfos, socialismo y esplendor.

    Tu pueblo se erguirá con pleno amor,
    Construyendo contigo su camino
    Y labrando el futuro redentor.

  • RODOLFO CAMACHO BERNAL - ROCAMBER dijo:

    NÚMEROS

    Siempre le resultaron difíciles los números. En cada curso las malditas Matemáticas ¡Como las odiaba!, mas en el fondo su alma entendió que eran un mal necesario.
    Su especialidad eran las letras. Pero, no se hizo un hombre dedicado ellas como debió suceder, no. Finalmente comprendió que la vida es pura matemática.
    Fue aquel suceso que lo marcó tan hondo, provocándole que mirara a los números con rencor y resentimiento.
    Preguntó extrañado cuando en lugar de su nombre, la laboratorista le solicitó su número de caso índice.
    -¿Número de qué? No entendió.
    Mire, cuando le diagnostican de seropositivo, la persona es registrado con un número, algo así como su otro nombre, por respeto a su confidencialidad.
    !Bah! Agregó. Mírelo como la clave de la tarjeta magnética, o el pin de su teléfono. ¿Simple verdad? y acotó! Apréndaselo!
    No era un número cualquiera, era por siempre su número. Único e irrepetible. Pero suficientes para lacerar en lo más profundo.
    Él, con un doloroso nudo en la garganta, comprendió que más que una marca visible sobre la piel como hecha con hierro caliente, en lo adelante, aquel número sería una amarga e imborrable huella en sus entrañas, solo invisible para los otros.
    Habana 2 de febrero de 2019
    ROCAMBER.

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