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¿Hasta dónde el mercado?

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La relación mercantil puede entenderse como una función “metabólica” de la sociedad que se fundamenta en la necesidad de intercambiar bienes y servicios y en el derecho de las partes a recibirlos en magnitudes equivalentes a las aportadas. “Las partes” son en primer lugar personas, grupos; también entidades, organizaciones económicas, empresas productoras de bienes y servicios, etc.

El derecho a obtener equivalentes por lo aportado tiene un determinado contenido ético: considerar justo recibir en correspondencia con lo que se da. La experiencia advierte que por mucho tiempo no podrá prescindirse de las relaciones mercantiles y por ello el socialismo no puede pretender obviarlas en todos los ámbitos de la vida social desde los inicios del largo proceso de su construcción.

Las relaciones mercantiles son relaciones entre las personas mediadas por los bienes y servicios que estas producen o poseen y que tienen lugar en un contexto que influye sobre ellas de diferentes formas. El acto de intercambio mercantil no es “puro”, puede y de hecho suele estar contaminado no solo por las contingencias y los criterios, sino a menudo también por el engaño (mayor precio del que correspondería, menos cantidad, menor calidad), por la especulación, por la desinformación (por ejemplo, propagar un rumor sobre la escasez de un producto), por los precios monopólicos, por precios regulados en función de propósitos sociales, etc.

Por tal razón, en una sociedad de orientación socialista, el marco jurídico normativo que regule las relaciones mercantiles, los controles, y una administración proba,  constituyen factores imprescindibles para el ejercicio apropiado del mercado, para que funcione al máximo el lado constructivo que puede ejercer, en particular en lo tocante al estímulo al trabajo, y para que la educación encargada de cultivar el hábito de trabajar bien, de producir con calidad, de dar el servicio merecido, de conjurar el afán de lucro y el consumismo, prospere en la conciencia, en la actitud y en los hábitos de las personas.

La relación mercantil supone el intercambio de equivalentes entre sujetos desiguales. La desigualdad de las personas, dada por la división social del trabajo, por el lugar que ocupan en el metabolismo socioeconómico, por su origen social, por sus capacidades individuales y grupales, ha sido compensada por el Estado revolucionario cubano a través de importantes prestaciones sociales, en particular la educación universal y gratuita, la atención a la salud, los subsidios, la protección de la niñez y de la tercera edad, el amparo a las personas con discapacidad, la equidad de oportunidades, pero sin poder superar todas las desigualdades.

La relación mercantil basada en el intercambio de equivalentes es un hecho aceptado por los Lineamientos, pero no subordinando a ella la sociedad, por lo que resulta entonces fundamental para definir cómo abordarlo en lo sucesivo y rectificar cuando sea necesario, atender al marco interpretativo para su asimilación y tratamiento.

Como cualquier otro hecho puede tener diferentes interpretaciones. Su desambiguación dependerá del marco interpretativo desde el cual se haga. La recepción del hecho mercantil y su interpretación es, en consecuencia,  terreno de la lucha ideológica. Pueden darse, al menos, tres variantes:

  • Interpretar el mercado como panacea universal.
  • Restar importancia a sus efectos sociales.
  • Contrarrestarlo inteligentemente con las leyes, las normas, las políticas, la participación social, la educación y las convicciones acerca de su necesaria subordinación a los intereses generales de la sociedad.

Las dos primeras recepciones del hecho mercantil implican su aceptación o promoción. Solo la tercera tiene contenido y sentido socialista ya que cuestiona sus efectos en el ordenamiento y jerarquización de las relaciones entre las personas y necesita hacer una asimilación activa, crítica y constructiva de esa realidad en función del interés social.

Para la construcción socialista es fundamental que el mercado no desarrolle su tendencia natural a condicionar la jerarquización de las relaciones humanas en general, lo cual solo es posible a través de su regulación y de la educación, es decir, interviniendo la relación “natural” discriminante del mercado, desde la acción política y la conciencia de los seres humanos.

Suponer que no hay que prestar atención al impacto social de las relaciones mercantiles, o peor aún, promoverlas como “la solución a todos los males” es letal para la justicia social, para la equidad, para mantener el consenso, para la orientación socialista de la construcción social y, en perspectiva, para la identidad cultural y la propia independencia nacional.

No es lo mismo mantener adecuadas restricciones a la propiedad privada que facilitarlas con marcos jurídicos cada vez más flexibles, mirando solo los efectos económicos. En el caso de la distribución del poder político, hay una gran diferencia entre considerar como hasta hoy la plena igualdad de los ciudadanos para acceder a posiciones representativas en el Estado teniendo en cuenta solamente sus méritos, que considerar la representación desde determinado sector social (cuentapropistas, cooperativistas, campesinos, empresarios, etc.) que no obstante estarán siempre presentes en esos cargos electivos, pero representando a toda la sociedad y no a intereses corporativos.

Son suficientes los dos ejemplos anteriores para entender la importancia del seguimiento inmediato y cercano de las transformaciones económicas en curso. El conocimiento a fondo de los hechos, de los cambios y sus efectos no informará directamente lo que se debe hacer (aun cuando lo contenga potencialmente porque la propia apreciación, la perspectiva del marco interpretativo desde el que se haga ya le influye), sino que mostrará lo que ocurre, permitirá formarse un panorama más real de posibilidades de abordarlos, mientras la actuación ante ellos, aun condicionada por esas posibilidades, dependerá del sujeto de los cambios y de su ideología.

Por “sujeto de los cambios” hay que entender al sujeto que decide, lo que dependerá de la ubicación, complejidad y envergadura de los hechos analizados. Cuando se trata de decisiones que atañen a la sociedad en su conjunto y son  capitales para su desarrollo se impone consultar a todo el pueblo: “…vale la pena recordar a relevancia que tiene el principio de consultar de manera directa con la población las decisiones vitales para el desarrollo de la sociedad.”[i] La práctica de consultar y analizar colectivamente los hechos antes de tomar las decisiones es algo básico para la construcción socialista, decurso en el que se impone en todos los ámbitos de la vida del país socializar la información, consultar, enfocar colectivamente los problemas, aprovechar las potencialidades intelectuales de todos. Consultar, enfocar colectivamente los hechos es una práctica indispensable para el socialismo y una función social que es preciso incorporar como concepto, no solo por razones políticas e ideológicas sino también como principio organizativo y normativa jurídica.

Consumo: unas palabras sobre los criterios en la promoción

El entendimiento ponderado del papel del mercado en una construcción socioeconómica de orientación socialista tiene una arista particular referida al consumo y a la promoción de lo que ofrece el subsistema productor de bienes y servicios.

Hay dos fenómenos indiscutibles en las sociedades humanas, uno es precisamente el consumo. Todas las sociedades son “de consumo”, solo que no necesariamente víctimas del consumismo; el otro es la comunicación, todas las sociedades tienen entre sus actividades fundamentales e indispensables la comunicación, solo que los niveles de responsabilidad con los que tiene lugar la comunicación social difieren y en el caso del capitalismo tardío y su irrefrenable afán de lucro, la publicidad comercial para hacer necesitar al ser humano lo que no le hace falta realmente, o incluso aquello que daña su salud física y mental, es hoy una actividad lucrativa cada vez más especializada, influyente y no solo en el terreno comercial, sino también y muy especialmente en la psicología y la salud misma de las personas.

Si bien en este mundo el enriquecimiento material está limitado por la finitud del planeta, no ocurre lo mismo con el enriquecimiento cultural que no tiene restricciones, salvo las que emanen de las desigualdades presentes, los prejuicios o las arbitrariedades.

No puedo extenderme en este texto en el tema del consumo en una sociedad como la cubana, apenas apuntaré que este debe ser saludable, responsable y racional y que como variable socioeconómica fundamental debe ser estudiado con auxilio de la ciencia.[ii]

Por otro lado, la vida cotidiana de las personas va de la mano con la información y la comunicación. Es una verdad de Perogrullo, pero es imprescindible repetirla para referir que entre el innumerable flujo constante de información que existe en la sociedad está aquella que necesita el ciudadano para atender a sus múltiples necesidades personales y familiares. La información y la comunicación median entre muchas de las necesidades del ser humano y su satisfacción con bienes de consumo y servicios a través del cambio.

Los bienes y servicios que ofrecen las entidades estatales, en particular los nuevos que se produzcan como resultado de la ampliación de las facultades y proyecciones de las empresas, deben ser informados oportuna y exhaustivamente a la población. Junto con ello, el incremento del espacio para las relaciones mercantiles en la sociedad cubana va acompañado del surgimiento de numerosas actividades por cuenta propia, arrendamientos y cooperativas vinculadas a la satisfacción de las necesidades de la población, y es natural y conveniente que los bienes y servicios que ofrecen sean informados al público.

Se trata no solamente de la información acerca de las características de estos bienes y servicios y de sus precios, sino también de los derechos de las personas que necesitan adquirirlos, las reclamaciones, las devoluciones, etc.

Es evidente que esta información es todavía insuficiente y deberán encontrarse creativamente las vías y formas que permitan producirla, sistematizarla y ofrecerla al público para que este pueda decidir cómo canalizar mejor sus decisiones.

Sin embargo, el mundo simbólico que crea la publicidad de la oferta mercantil -sea estatal o privada- debe ser objeto desde el vamos de la más esmerada atención para evitar traspasar los límites entre la información de contenido acorde con lo que realmente se ofrece y con una estética atractiva  que siempre contendrá una dosis de estímulo, y el estímulo desmedido y contraproducente al consumo, en particular con el engaño, la superficialidad, la banalidad, las expresiones chabacanas, cutres, de mal gusto, etc.

La imagen que proyectan públicamente sus actividades, la promoción de lo que ofrecen es una variable que debe ser siempre atendida por las instituciones correspondientes de la sociedad para asegurar que la información que se brinda al público tenga contenidos y formas que, además de cumplir con la función de comunicar a la gente aquello que se ofrece, contribuyan a un ambiente alegre, sano, de buen gusto y educado.

Eso es parte también de la subordinación del mercado a los intereses de la sociedad.

 


[i]       Ver Raúl Castro, discurso por el 55 aniversario del triunfo de la revolución, periódico Granma, jueves 2 de enero de 2014, p. 5.

[ii]       Pueden consultarse de mi propia autoría “La persona y el programa del socialismo en Cuba”, Editorial Vadell y Hnos. SA, Caracas, 2010, pp. 107-115  y “Economía… política, valga la redundancia” Rebelión, 02-10-2012.

 

Se han publicado 10 comentarios



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  • aramendia dijo:

    llego a entender de su comentario que suspira por conceptuar la acción del estado, como estado-empresario, (teoría ya arcaica) y no como factor y órgano regulador.

  • blancomeridiano1 dijo:

    el estado es un acto, una empresa, un emprendimiento, en verdad en el estado actúan si de esto se trata lo de factual en el comentario de aramendia, diferentes órganos que hacen que sea vivo el sentido de sus obras.
    También se puede deducir que con algunos factores y otros órganos el actuar en la pornografía, esto al fin daría un estado conceptualizado aunque evoca otro..estado.

  • Rafael dijo:

    El mercado debe ser una fuerza importante del desarrollo social, los estados deben regular en ocasiones sus excesos pero nunca controlarlos. La propiedad privada debe ser incentivada a lo máximo posible para que capitalice generando bienes, servicios y capital, el estado debe asegurar que el capital no supere en importancia a la sociedad. Que la propiedad privada (como se llama en todo el mundo), sea un eje fundamental para el desarrollo de la sociedad y sea regulada meridianamente pero no controlada en exceso por el estado. Así lograremos una sociedad justa, humana y saludable.

  • rosawinba dijo:

    En el caso de nuestro país al reflexionar sobre el mercado, es oportuno señalar que los cambios que se producen no deben tratar de buscar más eficiencia y eficacia en la salida de las fuerzas productivas ampliando el sistema de propiedad o tomar índices de productividad, rentabilidad y competitividad al estilo capitalista, sino de concebir y desarrollar un modelo socialista propio que al incrementar las capacidades y motivaciones de los individuos, permita perfeccionar y desarrollar la sociedad en su conjunto, lo que correctamente instrumentado favorece la salida material y la riqueza moral. Para lograr este objetivo se hace necesaria una nueva afirmación de la participación popular, en la que la Planificación Social tiene que resultar determinante, independientemente de la existencia de elementos de mercado en la economía que tendrán que existir no se sabe cuanto tiempo.

  • Rosalia dijo:

    Estoy de acuerdo con rosawinba y tengo diferente punto de vista con relacion a Rafael, la solucion no puede ser la privatizacion, hay que mantener las conquistas sociales y la esencia. Debemos continuar trabajando para mejorar la economia, promover la inversion extranjera en los sectores que generen fuentes de trabajo, exportaciones y la poblacion vea la mejora de su nivel de vida en su esfuerzo cotidiano obtenido con su trabajo

  • Andres dijo:

    hola a todos, sobre el tema del mercado hay que acentuar que el redactor del articulo tiene grandes conocimientos de la economía politica capitalista, pero debemos abordar una ley de la fiolosofía la de la negacion de la negacion, negar lo viejo y caduco, de lo anterior, pero copiar lo bueno e incorporarlo al nuevo regimen que nazca, señores debemos entender que el desarrollo de las fuerzas productivas es algo que debemos copiar del capitalismo, como debemos hacerlo es lo que debemos pensar y crear, pero esta demostrado que nuetro sistema de gestion de la administracion publica a sido deficiente durante 50 años por esa razon nuestro mercado y nuestros dos elmentos fundamentales vendedor y comprador estan tan deprimidos en nuestra economia porque no hay desarrollo de las fuerzas productivas en nuestro país y al no crear una suficiente balanza de pago en los consumidores y una suficiente oferta no puede haber una respueta favorable en la circulación monetaria.

  • Reinaldo Batista Ruiz dijo:

    oferta mencantil estatal cubana-oferta privada es un signo de igualda de precios. vamos al tema polemico alimentacion- los precios son iguales pregunto si el estado hace lo imposible como es posible que se una al precio del sector privado en todo, con los salarios de los obreros

  • lolo dijo:

    Si la economia es un auto, creo que el estado es el timon , y el mercado es el motor. El auto funciona sin timon, avanza, pero va en cualquier direccion, medida e intensidad, el auto sin motor no avanza, por mas que se le quiera llevar a algun punto.
    El capitalismo fundamentalista, el de mercado neoliberal, es un absurdo, no construye ni sociedad ni desarrollo, el mercado es geneticamente incapaz de estructurar una sociedad o una economia. La historia economica lo demuestra, y en todas las economias exitosas el Estado ha sido un componente esencial, especialmente el llamado Estado Desarrollista.
    Ni tan siquiera la teoria economia neoclasica defensora ciega del mercado apuesta por el mercado como mecanismo del desarrollo, porque la categoria desarrollo ha desaparecido de su cuerpo doctrinal.
    Sin embargo, cuba no solo busca mas o menos bienes y servicios y satisfacer mas o menos necesidades materiales y espirituales, sino DESARROLLAR el pais, lo que equivale a cambio estructural, social e institucional, como se ve es algo mucho mas complejo, algo que el mercado nunca ha logrado resolver. Por solo poner una cuestion, como resolvera el mercado el envejecimiento de la poblacion cubana y el cumulo de acciones de politicas publicas que deben generarse? La complejidad de este tema es extrema, y la integralidad de las politicas publicas tambien debe serlo. Es solo un ejemplo.
    Por su parte, el socialismo fundamentalista, el socialismo de estado o socialismo real es otra aberracion, liquida la iniciativa privada, la espontaneidad y la eficiencia del mercado por la planificacion centralizada e hipercentralizada. Esta ultima, y no la propiedad estatal o social, son para mi, la verdadera falla del socialismo. La planificacion centralizada e hiperdetallada es innecesaria, indeseable y irealizable, sin embargo, en ese dogma este pais se ha estancado no uno sino decenas de a;os. No hay justificacion teorica para que eso haya ocurrido, y creo que en verdad son de los puntos mas opacos en la teoria economica y la economia politica socialista, el papel del estado y la planificacion.
    Los resultados de la hipercentralizacion planificada son empresas ineficientes, sin iniciativa, incapaces de generar innovacion ni preocuparse por los adelantos cientificos y tecnologicos de su epoca, el colofon, empresas que no generan bienes y servicios en las cantidades necesarias y con baja o escasa calidad. Esto es culpa de la propiedad estatal?, o es culpa de la planificacion centralizada que idiotiza a los empresarios cubanos? Me parece que es lo segundo, en el mundo de hoy hay empresas publicas de paises capitalistas sumamente exitosas, como el caso de SAMSUNG en Corea del Sur. Por supuesto, son empresas publicas con todo el arsenal tecnivo e instrumental de gerencia de las empresas capitalistas privadas mas avanzadas, es decir, los monopolios trasnacionales, pero el propio Che queria organizar el Ministerio de Industria a imagen y semejanza de como se organizaban los monopolios multinacionales de su epoca. Es decir, no es la propiedad lo determinante en la eficiencia. Una sociedad con un tejido empresarial debil no puede prosperar, nunca hemos querido entender eso.
    Otra cosa debe tenerse en cuenta. Cuba forma parte de la economia mundial, del mercado mundial, y mientras mas se abre cuba a esa realidad mas esa realidad externa innundara nuestra economia y sociedad, el nivel de desarrollo y poder de nuestros flamantes nuevos actores de mercado esta a siglos de atraso en relacion a las empresas trasnacionales que dominan esos mercados mundiales, es decir, en una apertura real, el espacio de mercado cubano seria copado inmediatamente por empresas de mucho mas poder, nada de libre mercado, nada de soberania del consumidor, y quizas nada de desarrollo endogeno. Asi es en gran medida el mundo en el que vivimos.

  • Elpidio Valdes dijo:

    QUE ENTENDER POR PROGRESO?????

    Antes de entrar en el tema senalado, los cubanos debemos de llevar a nuestras conciencias, deberes, obligaciones, auto-respeto y principalmente principios revolucionarios aprendidos a fuerza de fuego, sangre, muerte, victorias y reveses de nuestro actual proceso revolucionario, que no es mas que la continuacion historica de los casi 150 anos de luchas por la liberacion nacional, la independencia, la soberania, la integridad terrirtorial de nuestra Isla y nuestra dignidad patriotica, que no podemos, no debemos y no queremos cambiar lo aprendido, lo sufrido, lo carecido, nuestras necesidades y nuestro respeto a los heroes y martires a cambio de una sociedad consumista, individualista y egoista, esa sociedad es del pasado en la Isla, debe permanecer en el pasado para aprender de ella lo que no debemos y no queremos hacer y solo verla en su vivir diario en el campo del capitalismo salvaje, cruel, sanguinario, criminal y genocida que hoy representa el Gobierno de los Estados Unidos de America y sus socios del crimen y la explotacion global, la putrida y decadente Union Europea.

    Lo mencionado anteriormente es y debe ser lo que nos guie en esta lucha por el desarrollo y el progreso, no deseemos ser iguales a los paises capitalistas, los cubanos somos mucho mejores que ellos en todos los sentidos y en todas las opciones que hoy se nos ofrecen, lo hemos demostrado en nuestras luchas independentistas, en nuestras luchas por la toma del poder y en nuestras politicas internacionalista en todo el mundo actual. Cuando decimos que los cubanos somos mucho mejores que ellos, nos estamos refiriendo al capitalismo, ese que hoy trata de dividirnos, de llevarnos a sus redes de consumo, riquezas, falsa vida de lujos y pervercidad, rodeada de todo lo que puede pedir un ser humano, para no ser feliz, no ser honesto, no ser honrado, no ser digno de llamarse ser humano, no hay que demostrarlo, esta ahi mostrandosenos diariamente en sus politicas de intervencion, hegemonismo, ingerencias, ataques de todo tipo, desde los terroristas, politicas de bloqueos de todo tipo,ataques biologicos de todo tipo, es por todo ello y mas, que no queremos, no aspiramos y no deseamos ser como ellos, queremos ser como somos actualmente, capaces de sacrificarnos por nuestro pueblo, por otros pueblos de Latinoamerica, el Caribe y otros pueblos del mundo, y sin pedir algo mas que respeto y apoyo a nuestra lucha diaria y perenne contra el Imperio del Norte Revuelto y Brutal que nos desprecia con su prepotencia y arrogancia, pero que al mismo tiempo nos respeta y teme por el ejemplo que hemos y estamos dando dia a dia a otros pueblos del mundo.

    Hoy con dolor y sufrimiento extremo vemos como alguno cubanos, piensan y actuan con mentalidad de pigmeos ideologicos y politicos, pues en sus cerebros y en sus corazones solo esta el simbolo del dinero, esa mercancia que corrompe y trata de comprar conciencias a cambio de que se le sirva incondicionalmente y para todo tipo de fechorias que sus propietarios, el Imperio del Norte Revuelto y Brutal, pida que se haga en nombre de una falsa libertad, de una falsa democracia, de una falsa libertad de expresion, de un falso respeto a los derechos humanos y decimo falso en todo los sentidos, pues las acciones y hechos que hemos visto y vemos dia a dia en esas democracias capitalistas, es la negacion de su verborrea demagogica para con el mundo, pero eso no lo ver esos cubanos que viven para tener mas dinero, para tener mas lujos, para poseer no solo ya un automovil, sino dos y si es posible tres, para despreciar el pais donde nacieron y al pueblo que le dio todo para que se convirtiesen en hombres revolucionarios y dignos y no mercachifles del capitalismo que no existe ni existira nunca en Cuba.

    Progreso es bienestar para todo el pueblo dentro de una sociedad inclusivista, una sociedad de respeto hacia el ser humano con el que convivimos como familia o como ciudadanos comunes, que vemos en la honradez y la honestidad uno de nuestros mas preciados tesoros, otorgados a nosotros por los que nos precedieron en las luchas contra el capitalismo, una sociedad en la que todos los ciudadanos respetan y cuidan los medios que son de propiedad colectiva, una sociedad que lucha contra el robo, el hurto, la droga, la prostitucion, la corrupcion y el uso de las propiedades sociales para beneficio personal, una sociedad defensora de su legalidad socialista y de los principios revolucionarios, eticos y morales que nos fueron entregados por nuestros heroes y martires con la obligacion, irrenunciable, de perpetuarlos y entregarselo a las generaciones que nos relevaran en esta ardua lucha por las ideas, el socialismo, el marxismo, la teoria martiana y la nunca renunciable permanencia de sostener un pais libre, soberano, independiente y digno por encima de todo lo que materialmente pueda danarnos y retrotraernos al capitalismo del que nos liberamos el primero de Enero de 1959.

    Nuestra cultura de la liberacion, de la solidaridad internacional, del respeto al ser humano, del respeto a la lucha honrada y humilde por una sociedad mas justa, digna y libertaria como nos la ensenaron y deseaban Jose Marti, Antonio Maceo, Maximo Gomez, Ignacio Agramonte, Julio Antonio Mella, Antonio Guiteras, Jose Antonio Echevarria, Abel Santamaria, Ernesto Guevara, Camilo Cienfuegos y otros tantos heroes y martires de la patria cubana, nunca deben de ser olvidadas o postergadas por un consumismo diletante e innecesario, un amor al dinero que como mercancia puede comprar lo que necesitemos, pero nunca nuestras conciencias, nuestra ideologia y patriotismo, nuestros sagrado e irrenunciable deber con el noble y valiente pueblo cubano que nos dio la vida y sus ensenanzas con la unica peticion inviolable y al mismo tiempo sagrada, de no traicionar a nuestros heroes y martires y sus lucidos conceptos de libertad, independencia y soberania, esto es el verdadero Progreso al que todos los cubanos aspiramos y aspiraremos siempre

    Propiciar nuestro desarrollo economico, que traera el progreso del pais y el pueblo, no implica entregar nuestras riquezas de todo tipo al capital extranjero, no implica entregarnos con las manos atadas a los que en su labor diaria y constante puedan contar con recursos financieros superiores a los necesarios para sostener una vida digna, honrada y honesta de el y su familia, no significa en lo absoluto sacrificar principios sagrados para el pais y el pueblo, por un Progreso que no conlleve al mismo tiempo a un Progreso en la conciencia, en los principios, en la etica, en la moral y en la ideologica marxista y martiana. El Progreso que buscamos no puede ni debe estar en contra de el Socialismo como sociedad mas justa y equitativa, no puede ir en contra de la proteccion del pais y sus riquezas, no puede ir en contra del reforzamiento de la conciencia social, no puede ir en contra del reconocimiento de toda la sociedad para aquellos que lo han dado y lo dan todo por mantener, defender e incrementar los valores individuales y colectivos que eleven la conciencia social de respeto a nuestros ideales y principios revolucionarios, marxistas, martianos y patrioticos.

    Un saludo revolucionario, marxista y martiano con la absoluta confianza de que nuestro pueblo no cejara en su lucha contra el capitalismo y sus decadentes conceptos de Progreso.

  • tf dijo:

    muy buenos sus artículos, no me pierdo uno.

Se han publicado 10 comentarios



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Darío Machado Rodríguez

Darío Machado Rodríguez

Licenciado en Ciencias Políticas y Doctor en Ciencias Filosóficas. Preside la Cátedra de Periodismo de Investigación y es vicepresidente de la cátedra de Comunicación y Sociedad del Instituto Internacional de Periodismo José Martí.

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