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Atragantados de excremento

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La caricatura (del italiano caricare, ‘cargar', ‘exagerar') es el medio que utiliza el artista para comunicar sus ideas. La caricatura es un retrato -u otra representación-, que exagera los rasgos físicos o faciales, o bien el comportamiento, la vestimenta o los modales característicos de un individuo, con el fin de producir un efecto grotesco. El artista utiliza la caricatura como medio para ridiculizar situaciones e instituciones políticas, sociales o religiosas, y los actos de grupos o clases sociales. Sus intenciones muchas veces, alientan el cambio político o social. El caricaturista es un artista y el artista es un profesional. Es un profesional que transmite su mensaje por medio de sus representaciones gráficas.

 

El amor y el humor todo lo pueden es el título del libro de Gerardo Hernández Nordelo publicado en La Habana el 2002. Debido al propio bloqueo que viven nuestros países latinoamericanos, ignoramos todo lo bueno que se publica en Cuba. Gracias al Encuentro Solidario el pasado 25 de febrero en San José Costa Rica, con los familiares ( Elizabeth Palmeiro, Adriana Pérez y Magaly Llort) de los patriotas cubanos (Ramón Labañino, Gerardo Hernández y Fernando González, respectivamente) detenidos injustamente, tuvimos acceso a este libro de caricaturas.

 Gerardo Hernández Norrdelo

El autor, Gerardo, es uno de Los Cinco héroes cubanos presos del Imperio por luchar contra el terrorismo. Gerardo es Licenciado en el Instituto Superior de Relaciones Internacionales de Cuba (ISRI). Y como dibujante y caricaturista ha colaborado en varias revistas y periódicos de su país y ha participado en diferentes exposiciones. El texto contiene parte de su producción artística y refleja su amor por la vida y su humor contra la muerte.

 

En la caricatura "Las dos caras de Mr. Bush" (julio de 2002), el emperador aparece en el primer recuadro dando un ‘discurso' en Washington y afirma "Los terroristas son diabólicos, malvados y asesinos..." En el segundo recuadro -en Miami-, aparece abrazado con los criminales Orlando Bosch, Posadas Carriles y otros terroristas de la Fundación Nacional Cubano Americana, Alpha 66 y Comandos F-4, y sigue con su ‘discurso' "... pero si pueden decidir unas elecciones son "pobres exiliados luchadores por la libertad..." " (p. 150).

 

Razón tiene Gerardo cuando afirma que "el humor es algo muy serio" (p. 17). De esta forma el artista resume a cabalidad lo que ha sido la política farsante antiterrorista de Washington en los últimos cuatro años; afirmar por un lado que, los terroristas son la escoria del mundo, y por otro lado, identificarse, embarrarse y atragantarse con lo peor de esos excrementos.

 

El creador, desde su injusta prisión -condenado a dos cadenas perpetuas más 15 años-, en lugar de doblegarse o amilanarse (que es lo que el Imperio pretende lograr), se yergue con su arte combativo desenmascarando y humillando a la fauna de Washington y sus compinches terroristas de Miami. En su texto, Gerardo expresa dignidad, lealtad, amor, resistencia, esperanza, cultura, plenitud, vida; valores que jamás entenderán ni la bestia ni su corte. El arte no ha estado ni puede estar de lado de la brutalidad y de la demencia.

 

Mientras el Imperio se ensaña contra Los Cinco amantes de la vida, sometiéndolos a inhumanos castigos, los cuatro terroristas cubanoamericanos (Luis Posada Carriles, Gaspar Jiménez Escobedo, Pedro Remón y Guillermo Novo Sampoll) indultados el año pasado por la inválida moral y mental Mireya Moscoso, se pasean libremente en la ciudad de Miami. Aunque se dice que se desconoce el paradero del criminal Posadas Carriles, se sabe que goza de la protección del Imperio.

 

Los Cinco cubanos trabajaban silenciosa y pacíficamente para evitar muertes en Cuba y en Estados Unidos mismo; impedían que los planes criminales de los terroristas, amigos de Bush se materializaran. Ese fue el delito. Han pasado más de seis años, desde que fueron detenidos -el 12 de septiembre de 1998-, y en todo este tiempo el Imperio y su prensa servil trataron de crear una cortina de silencio e indiferencia, para que el mundo no sepa la verdad. Pero hoy, el nombre de Gerardo y de sus cuatro compañeros (René, Fernando, Antonio y Ramón) se agigantan y traspasan fronteras, pueblos y países; recorren ciudades, montañas, campos y avenidas. Sus rostros flamean impregnados en camisetas, mantas, banderolas, prendedores y afiches por innumerables rincones del mundo.

 

El Imperio ha perdido la batalla; no ha podido intimidarlos. Los Cinco desde sus injustas prisiones tienen arrinconado al Imperio. Y la verdad se abre paso entre los hombres y mujeres que han decidido vivir de pie, animados por palabras como las de Gerardo: "los que soñamos con un mundo mejor no podemos perder las esperanzas, y mucho menos dejar de luchar, de poner nuestros granitos de arena, para que algún día esos sueños lleguen a ser realidad" (p. 15).

 

 

Lic. Abner Barrera Rivera

Profesor del Instituto de Estudios Latinoamericanos (IDELA)

Universidad Nacional, Heredia, Costa Rica.

 

 

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Abner Barrera Rivera

Abner Barrera Rivera

Periodista y profesor del Instituto de Estudios Latinoamericanos de la Universidad Nacional de Costa Rica.