Imprimir
Inicio »Opinión, Política  »

Obsesión compulsiva

| 18 |

Brigada cubana con 52 doctores y enfermeros llega a Milán, Italia, para brindar su apoyo en la batalla contra la COVID-19. Foto: Consulado de Cuba en Milán.

En el portal del Instituto Nacional de Salud Mental de los EE.UU. en la red de redes aparece la definición del trastorno obsesivo–compulsivo descrito de la siguiente manera: “El trastorno obsesivo-compulsivo (TOC) es un trastorno común, crónico y duradero en el que una persona tiene pensamientos (obsesiones) y / o comportamientos (compulsiones) incontrolables y recurrentes sintiendo la necesidad de repetirlos una y otra vez”.

Si observamos la definición y el texto que allí se desarrolla para definir la enfermedad, solo una pequeña adaptación nos permitiría usarla para determinadas políticas de ese país hacia Cuba y los cubanos.

Un ejemplo claro aparece ahora cuando vemos que, en su cuenta de Twitter, la embajada de Estados Unidos en La Habana decía el 25 de marzo:

"NOSOTROS. Departamento de Estado | Democracia, Derechos Humanos y Trabajo @StateDRL · 25 mar.

El gobierno de #Cuba retiene la mayor parte del salario que ganan sus médicos y enfermeras mientras sirven en sus misiones médicas internacionales y los expone a condiciones laborales atroces. Los países anfitriones que buscan la ayuda de Cuba para #COVID ー 19 deberían analizar los acuerdos y poner fin a los abusos laborales”.

Evidentemente, refleja la opinión de la Administración actual del Gobierno de Estados Unidos hacia la innegable acción loable de Cuba que busca ayudar a los países para una mejor gestión de la tragedia que enfrenta el mundo entero con la COVID 19.

Las calificaciones que han usado son tan absurdas como que tratan de convencer a otros de que un médico que ayuda a personas pobres en lugares remotos de la selva de Brasil podría hacerlo como un “esclavo” del Gobierno cubano. El Departamento de Estado del Gobierno de EE.UU. calificó en septiembre del pasado año a las misiones internacionales médicas de Cuba como “una forma de tráfico humano y esclavitud moderna”.

Muy raros “esclavos” sin un custodio que los reduzca, que trabajan libremente en un país extranjero distinto al suyo y luego de firmar, de forma absolutamente voluntaria, un contrato mutuamente conveniente con el empleador de su propio país. Dicha contratación, que data de la Presidencia de Dilma Rousseff con su programa “Más médicos”, se gestionó bajo los auspicios de la muy neutral Organización Panamericana de la Salud, que así quedaría como “cómplice” de esclavitud moderna.

El hecho más extraño es que la calificación de “esclavo” proviene principalmente de un tercer país a los involucrados en dicho contrato: la actual Administración de Estados Unidos. El presente Gobierno de Brasil lo siguió sumisamente.

¿Cuántos brasileños están muriendo y morirán, por la falta de asistencia médica, originada al cancelar ese contrato? ¿Cuán absurda es ahora esta acción política del Gobierno del país norteño, en una crisis de salud mundial no vista desde hace un siglo, que solo puede dañar la oportunidad de vivir de muchos seres humanos si algún Gobierno ingenuo siguiera la recomendación del Departamento de Estado? ¿Por qué los grandes medios se pronuncian como que Cuba practica “diplomacia médica” en lugar de solidaridad humana?

Los evangelios cristianos coinciden en anécdotas donde los seguidores de Jesús fueron alimentados con unos pocos panes y peces que se multiplicaban milagrosamente al ser repartidos. Esto aparece en dos ocasiones y en situaciones de grandes multitudes siguiendo al profeta. Toda acción tiene muchos componentes, y es innegable que la ganancia de prestigio que pudo tener la prédica cristiana con la multiplicación de los panes y los peces para una población hambrienta puede ser uno de ellos. Si se desea desacreditar esa prédica a partir de este relato, también se pueden esgrimir otros argumentos, porque nada se multiplica por sí solo. Es preciso trabajar para tener sustento.

Afortunadamente, las personas de buena voluntad prefieren siempre ver que con ello se sació el hambre de una multitud gracias a una acción milagrosa de caridad. Preferimos siempre aprender de los valores positivos, los que refuerzan la condición humana. Cuba reparte lo poco que tiene, no regala lo que le sobra. Y si esas acciones sirven, además, para ganar un muy bien merecido prestigio y con sus eventuales ingresos sustentar un reconocidamente eficiente sistema de salud pública nacional, es aún mejor.

Uno de los argumentos controvertidos, aunque firmes, de la Administración Obama para cambiar la política agresiva hacia Cuba fue su obsolescencia. Fue una Administración sin demasiadas muestras de estos trastornos patológicos de recurrencia en acciones fallidas. Por supuesto que los cubanos en Cuba tenemos argumentos mucho más importantes acerca de lo aberrante e inhumano de esas políticas de agresión prolongadas por decenas de años. Pero la insistencia recurrente en revertir los bienes innegables de la anterior Administración estadounidense, que aceptó y hasta elogió lo esencialmente humanista del apoyo de salud cubano a otros países, es un claro trastorno del comportamiento.

Es una muestra de “obsesiones y compulsiones incontrolables y recurrentes” que algunos políticos actuales de ese país y sus sirvientes sienten la necesidad de repetir una y otra vez. Uno de nuestros médicos internacionalistas que ejerza la psiquiatría no vacilaría en calificarlo como un trastorno obsesivo–compulsivo a escala política, del que somos víctimas los 11 millones de cubanos que habitamos esta isla y otros varios millones de buena voluntad en la emigración.

Esa embajada es en sí misma un verdadero avance gracias a que la Administración Obama intentó cambiar la política de décadas hacia Cuba. Parecía que se iban a curar del trastorno obsesivo–compulsivo, pero la enfermedad de algunos, ahora con poder, es mucho más grave de lo que parecía.

Se han publicado 18 comentarios



Este sitio se reserva el derecho de la publicación de los comentarios. No se harán visibles aquellos que sean denigrantes, ofensivos, difamatorios, que estén fuera de contexto o atenten contra la dignidad de una persona o grupo social. Recomendamos brevedad en sus planteamientos.

  • Jose R. Oro dijo:

    Otro brillante escrito del destacado científico y pensador cubano Dr. Luis A. Montero Cabrera. Con respecto al "trastorno obsesivo-compulsivo (TOC)" es evidente que lo hay contra Cuba, aunado a una patológica arrogancia, que esta exacerbado al máximo en estos días de fascismo en la Casa Blanca.
    Donald Trump tiene una calculadora muy especial en su escritorio de la Oficina Oval, esta calculadora solo sabe hacer una única operación matemática que es calcular como logra la re-elección. Introduce en esa mítica calculadora como obtener los votos del colegio electoral de Florida, y la calculadora le dice “mostrar odio a Cuba hasta en sus más conmovedoras acciones en pro de la humanidad”. El debiera botar esa obsoleta e inexacta calculadora, pero no puede, su naturaleza no se lo permite.
    Creo que la cita del milagro de los panes y los peces, es un formidable ejemplo que trae a colación el Dr. Montero Cabrera. Hasta para mí, que soy un redomado no – creyente, me salta a la vista el carácter metafórico que indica que el desarrollo y la “salvación” deben ocurrir en el contexto de la solidaridad humana. No menos me evidencia que los elevados valores de Jesús se reflejan en la actual idea de la construcción del socialismo, “camino a lo ignoto” en donde hay algunas cosas que si sabemos, una de ellas es que no habrán políticas de choque, ni el bienestar de algunos a cambio del abandono o de echar por la borda, a otros. De esta manera los principios neoliberales y neo – fascistas son la antitesis de las prédicas de Jesús.
    Cuba practica la solidaridad humana hasta sus últimas consecuencias, eso me hace orgulloso de ser cubano. Mi mayores felicitaciones al autor, quien demuestra una vez más su característica profundidad de pensamiento y capacidad de comunicarlo.

  • miguel dijo:

    Me gusta el artículo, magnífico y contundente contra ataque, así deberia ser siempre, sin embargo últimamente noto demasiada diplomacia a la hora de responderle al imperio.
    Una pregunta al respecto, por qué siempre estamos a la defensivas ante los ataques de esas mentes criminales que conforman el gobierno de los EE.UU. Debemos pasar a la ofensiva, no esperar mas ataques, sin sabemos que siempre nos están atacando, hagamos una especie de ataque previo y preventivo. Un consejo: ellos (el gob de EE.UU) son muy débiles cuando les desemascaran las mentiras. Empecemos la ofensiva Ya !

  • Lázaro Borroto dijo:

    Errata de mi comentario anterior, el comienzo debió ser:
    Al primero que escuché hablar de Diplomacia Médica fue a Obama, ...

  • Mery dijo:

    Lo que pasa es que les duele que con bloqueo y sin bloqueo somos solidarios Fidel nos enseñó a compartir lo poco o mucho que tenemos como dice la canción llora sí les duele

  • FQM dijo:

    Por esa obsesion, tanto Brasil como Estados Unidos, son los 2 paises que mas casos positivos de coronavirus tienen declarados. Estan, como las viejas chismosas, encargandose de los problemas de los demas y ellos llenos de dificultades. La mejor forma de callarles la boca lo muestran los 45 paises que han solicitado la colaboracion medica de nuestra pequeña isla. Nuestro Comandante en Jefe nunca se equivocó cuando condujo nuestra Revolucion bajos los principios de la moral. Gracias Cuba tu has marcado una etapa de la historia de la humanidad.

  • Leandro dijo:

    Como siempre, desde la ciencia el destacado científico, Dr. Montero trata este tema de suma importancia en momentos cruciales para la humanidad. Solo que tengo la certeza que de ese trastorno obsesivo–compulsivo a escala política, no solo somos víctimas los 11 millones de cubanos que habitamos esta isla y otros varios millones de buena voluntad en la emigración, sino que afecta a toda la humanidad, incluyendo al propio pueblo estadounidense.

  • Rafael Emilio Cervantes Martínez dijo:

    No se podría inventar un argumento más absurdo y torpe contra Cuba. Se suma a la lista de los ataques sonicos, el sostenimiento desde Cuba de la Revolución Bolivariana y otras mentiras que fabrican en los laboratorios de virus sociales. El mundo no los cree porque las personas y los gobiernos se reservan frente a esta enfermedad y conservan su lucidez.

  • J dijo:

    Ya el que les quiere creer a esos norteamericanos es porque le da la gana porque para desacreditar a la cooperación médica han utilizado de todo y sin ninguna prueba. Primero fue que eran soldados y no médicos, después que los médicos donde están amenazan a la población, después que son los que sostienen un gobierno, después se pasó para tráfico de personas y ahora es abuso laboral. Todas estas han caído por su propio peso porque resulta que la dicen los que si incitan la trata de persona, los que tienen abuso laboral extremo en sus suelo, los que mandan soldados y armamentos para " ayudar" y los que defienden supuestos presidentes sólo por interés.

  • Laura.G.E dijo:

    Nadie, ni siquiera Trump, por mucho que lo intente, podrá desacreditar la labor altruista y solidaria que realizan cada cada año los miles de médicos cubanos que laboran en países pobres de todo el mundo. Los números hablan por si solos, 45 países solicitando ayuda médica. A todos los héroes anónimos de batas blancas le decimos:"la patria os contempla orgullosa"

    • City Hunter dijo:

      Bonitas palabras! Laura.G.F

  • Lázaro Luis González Morales dijo:

    Magnífico artículo. Viva Cuba.

  • Lázaro Luis González Morales dijo:

    Magnífico artículo. Viva Cuba, país solidario

  • Tranquilino dijo:

    Profesor, usted que sabe mucho, debe saber que ese trastorno se alivia por periodos para luego, muchas veces, reaparecer con más fuerza, principalmente si el paciente no pone de su parte. Lamentablemente, este es el caso.

  • Walber dijo:

    Todas las naciones del mundo incluyendo USA están enfocadas en su situación epidemiologica por favor hagamos nosotros de la manera más rápida y efectiva todo lo posible para no tener que pagar un precio tan alto como el que están pagado muchos de esos países miremos nuestras debilidades y trabajemos más hacia adentro dejando a cada cual hacer lo que estime mejor para su nación

    • ORO dijo:

      Estás herrado Walber, el día que no miremos a los demás y nos enfoquemos en el mundo, del que somos parte, dejaremos de ser CUBA, esa es la diferencia, eso es lo que nos hace grande, por que además de mirar a los demás siempre estamos presto a ayudar.

  • City Hunter dijo:

    CUBANOS!!!! Solo de decir la palabra resulta impresionante! Grandes entre los grandes y valerosos como su tierra!
    Claro que sí! Hay que ayudar a quienes necesiten la ayuda!
    Lo dije desde un principio aquí no hay miedo y nuestros médicos tampoco comen miedo, ningún corona virus es suficiente para amedrentar a mi pueblo.
    Italia tienes nuestro apoyo, saldrás adelante, verás que si! Gracias China, también eres grande!

  • City Hunter dijo:

    Trump piensa que regalando dinero va a limpiar toda la mierda que a hecho!

    ¡TRUMP ASESINO, AYUDA A TU PUEBLO!!!

    Después de esto a ti no te van a elegir ni para votar la basura!!!

  • oscar luis dijo:

    No merecen nuestro tiempo, esos Trump y esos Bolsonaros. Tenemos cosas mas importantes que hacer.
    Que Cristo, Ala y Jehova los acojan en su Santa Gloria. !Solavaya¡

Se han publicado 18 comentarios



Este sitio se reserva el derecho de la publicación de los comentarios. No se harán visibles aquellos que sean denigrantes, ofensivos, difamatorios, que estén fuera de contexto o atenten contra la dignidad de una persona o grupo social. Recomendamos brevedad en sus planteamientos.

Luis A. Montero Cabrera

Luis A. Montero Cabrera

Doctor en Ciencias. Presidió el Consejo Científico de la Universidad de La Habana más de tres lustros. Miembro de mérito y coordinador de ciencias naturales y exactas de la Academia de Ciencias de Cuba.

Vea también