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El silencio de los ¿corderos?

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"El caso de los Cinco es todavía muy poco conocido y muchas veces hay que explicar bastante para conseguir una firma".

Leía con interés un reporte que me llegó a través del Comité Internacional Justicia y Libertad para los Cinco sobre la más reciente visita que efectuara a la penitenciaría de Beaumont, Texas, donde está recluido Ramón Labañino, la activista Rosa Peñate, integrante del Comité Free The Five, en Estados Unidos.

Sus palabras corroboran lo que desde diversas partes del mundo han dicho personas que se pronuncian contra esta tramoya mal montada, que empezó en Miami y que esperamos sea derribada con la balanza de la justicia en Atlanta.

Unas 60 000 rúbricas avalan la solicitud de libertad para los Cinco alrededor del planeta. La cifra aún es insuficiente, pero refuerza la manera en que casi hombre a hombre ha tenido que ir abriéndose paso la verdad ante el férreo silencio de los más importantes medios de difusión del imperio.

Me maravilla tanta desfachatez en este sentido. No oyen, son ciegos, mudos, esa es la fórmula. Sin embargo, puede ser comidilla y colocarse en los titulares preferenciales, el más reciente escándalo doméstico de la cantante Witney Houston con su esposo o las debilidades -ciertas o no- de Michael Jackson con los niños.

¿Será que con esto a veces tratan de mantener una inercia, desviar la atención del norteamericano respecto a lo que ocurre a su alrededor? ¿Será que es más factible que ignoren a los muertos que siguen llegando de Iraq? ¿Será que causaría problema destapar la caja de Pandora a propósito de los presos de más de 40 naciones que están en condiciones infrahumanas en la base naval de Guantánamo?

¿Será que tienen miedo de que se sepa la historia de los cinco luchadores cubanos que entraron en batalla frontal contra el terrorismo? ¿Será que prefieren conservar tras bambalinas que violan los derechos humanos de estos cinco patriotas, que son sometidos a castigos crueles e inusuales, que les impiden el contacto normal con sus familiares más queridos?

¿Será tan grande la conciencia colectiva cuando se descubra que quienes se autoproclaman ante el mundo paladines de las ideas más justas, solo encubren el sucio rostro de la doble moral? ¿Qué podría ocurrir si tanto se supiera? 

Llevo varias jornadas haciendo un ejercicio que me afianzó la máxima de que en la Viña del Señor no hay peor sordo que aquel que no quiere oír. Redacté una carta tipo con cuestiones elementales del fraudulento proceso judicial que se siguió contra los Cinco y accedí a las páginas de algunos medios de prensa de Estados Unidos.

La carta iba personalizada para editores o algunos columnistas y preguntaba una cuestión que hasta hoy a ellos les ha sido difícil responder: "¿por qué no escriben sobre esto?" Los mensajes hasta ahora no retornaron, significa que fueron recibidos por sus destinatarios. ¿Qué hicieron con el correo?, esa constituirá siempre la incógnita.

Me duele el alma cuando leo en el relato de Rosa Peñate cómo Ramón desde su encierro confiesa que necesita a sus niñas como ellas a él, que ama con locura a su Elizabeth o que no deja de pensar en la posibilidad de un hijo varón que quiera a la Revolución tanto o más que él.

Sin embargo, en medio del dolor y la rabia, siento orgullo de su estirpe cuando habla a nombre colectivo y supera la realidad que se le impone, y confía en el mejoramiento humano, y mira el futuro con optimismo, y piensa en que pronto andará por las calles de Cuba para terminar todos sus proyectos inconclusos.

"Está en perfectas condiciones de salud, tanto física como mentalmente -señala Rosa-. Es un gran hombre en su contextura física; pero es mucho más grande aún en valores humanos. Ramón es la personificación del hombre nuevo, y si a mi me preguntan, yo diría es Perfecto. Los Cinco son increíblemente perfectos".

Las evidencias presentadas en Atlanta son contundentes, mas no podemos llamarnos a engaño. Este es un proceso político en el que están en juego demasiados intereses para el gobierno yanqui.

Por eso continuamos urgidos de utilizar las vías alternativas de información para tocar cada corazón de norteamérica. Dijo el poeta sudafricano Brian Williams en uno de sus versos que hay que actuar como una mano universal/ que no pueda ser quebrada.

A la vez debemos estar preparados por si los resultados de la apelación que está en curso no fuesen ciento por ciento lo esperado. La lucha no podrá decaer y habría que diseñar entonces nuevas estrategias para seguir logrando la victoria.

 

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Deisy Francis Mexidor

Deisy Francis Mexidor

Periodista cubana. Integra la redacción de la agencia Prensa Latina.