Cubadebate

Tarde

Me tomo, mientras te espero
Mi paciencia con café,
Pasa un mendigo que fue
Intrépido marinero,
Me saluda un basurero
que expone nuestra miseria,
un latido en una arteria
me recuerda que aun respiro
y pienso, mientras suspiro
¿Por qué mi cara tan seria?

Llegas, y el aire que empujas
Me calienta las mejillas,
Vacías, las otras sillas
Se elevan como burbujas,
Siento en la piel las agujas
De un invierno que no existe,
Fuerte, tu mano me enviste
Y yo que apenas la toco,
Caigo en un delirio loco
Que mi carne no resiste.

Para el concurso de microrelatos:

Autor: Ernesto Galbán Rodríguez. La Habana. Cuba

PRÍNCIPE AZUL

Pagó en asfixia el título nobiliario

EL DESEO DE APRENDER
Este año se cumplen para mí 40 años de mi priemra misión internacionalista como trabajador de la educación, en este caso en la República Popular de Angola. Recién liberada, se abrían las escuelas para todos los que nunca habian ido a una. Vi con asombro, adolescentes lisiados parcialmente por la poliomielitis, desplazarse con mucha dificultad grandes distancias para asistir a su escuela. Una muestra de lo que puede la voluntad humana cuando el afán de aprender predomina y se es consciente de que se deben aprovechar las oportunidades que nos da la vida en el monento en que estas se dan.

Saludos a Cubadebate y sus lectores, gracias por la oportunidad. Me gusta escribir e hice una selección de algunos de mis poemas y relatos (tengo algunos más). Espero los disfruten y perdonen las licencias poéticas.

1. Locura

Mi funda tendrá la medida de tu espada,
tus manos estarán al nivel de mi cintura,.
mis piernas abrazarán la envoltura de tu cuerpo
y juntos sin pensarlo....estaremos volando sin regreso.

2. Alegato

Me declaro culpable
Culpable por vivir de tu voz
y querer hacerla mía para siempre.
Admito además que quiero penetrar en ti
arriesgándome a no encontrar la salida.
De no ser absuelta, cumpliré la pena.
Pero ante todo
y porque te estoy queriendo
Me niego a renunciar.

3.
Tú eres el día y yo la noche o tú eres el Sol y yo la La luna, por eso desde que has compartido tu luz conmigo, yo salgo cada vez más radiante.
Pero este hecho no nos mantiene aislados, por el contrario. No conozco dos momentos que estén más unidos que la sucesión del dia tras la noche y el hecho de que la noche llega de la mano del día.
El día regala su luz, deja ver el color de las cosas, te anuncia que estás vivo y eso me transmites tú.
La noche se hace yo o mejor dicho, yo me debo a la noche porque no te tengo a ti, que eres mi día.
Y es cuando la noche (yo) escribe lo que le hace sentir el día (tú)
y es que juntos el dia y la noche han sido muy felices y se han puesto de acuerdo para compartir la luz del Sol con la magia de la Luna.
Entonces los dias se haran interminables y las noches eternas.

4. Para siempre

Llegaron y sus miradas los desalojaban de toda prenda sobre el cuerpo. No admitían palabras. Se conocían tan bien que bastaba mirarse para caer desnudos sobre aquel lecho que habían dibujado en sus mentes.
Entrelazados quedaron una y otra vez, conscientes del deseo e inconscientes por placer.
En más de una ocasión volaron sin rumbo fijo, sólo sabiendo que debían despojarse de gemidos incontenibles.
De repente, extraviados......... Él estaba con las manos bien sumergidas en el delirio de la fruta, deseosamente dejaba mojar sus labios en ella. Su jugo y dulzor, su frescura y forma características hacían que su mente gozara de placer, chorreando sobre su rostro y demostrando la adoración por aquel manjar.
Y estaba ahí abierta de par en par, dejándose pasar la lengua por todas las esquinitas y rebordes. Su forma llamaba muy dentro a seguir disfrutando ciegamente sin el menor detenimiento la euforia sobre las masas y dulzor, haciéndole recordar el calor del caribe, al concentrarse en un solo lugar, una playa virgen.
Al abrir los ojos, porque hasta ahora eran dos ciegos amándose, estaban frente al mar en la Isla soñada donde la embarcación los esperaba.

Aquella tarde soleada zarpa el velero con los dos a bordo y con rumbo desconocido. Es un viaje a lo largo del litoral norte, el cielo es azul y despejado, no hay ninguna nube. La marea es calmada y se ve el fondo del mar en la costa, unos delfines rodean el velero y la brisa acaricia sus rostros. El salitre hace el aroma de los mares y el brillo en la piel.
Una bandada de gaviotas los ha estado escoltando todo el tiempo. El día se vuelve cada vez más iluminado, se puede ver en sus ojos. En los de ella....,que al mirarlo,.....brillan cada vez más intensamente.
Él la mima, acaricia cada espacio de su cuerpo y durante un buen rato ha jugado con sus rubios cabellos.
Ambos tiemblan a pesar de no existir ni sombra de frío. ¡Es que se están amando!.
No existen, ahora mismo, dos seres más felices que ellos dos. Han quedado desnudos como par de recién nacidos y no se nota ni un sólo movimiento que no contenga ritmo. No hay nada forzado.......todo fluye.......van al compás de las olas que de vez en cuando chocan "sin querer" contra el velero.
Sus cuerpos, cada vez más fundidos, se les ve brillar. El salitre los baña, el Sol los calienta, pero es el amor quien los atrapa.
Tras un fuerte grito han quedado inmóviles, se les nota fatigados pues es que han volado juntos durante un largo rato.
Se les ve sin aliento, pero es ahora que el mar los invita a despojarse de todo el cansancio.
Han caído como plumas sobre el azul del mar y él los recibe como si ambos pertenecieran a ese reino.
Ellos continúan fundidos, ya no son dos.
La silueta se ve a lo lejos sobre un pequeño velero, el Sol se está poniendo y el astro los recibe allá en el horizonte.
Ya en el camarote disfrutan de una cena marina: mariscos y pescados de blanca carne, que hechos con jugos cítricos, ayudan a sentir como néctar los nutrientes. Las miradas son ansiosas, delicias reflejadas en los rostros por el deseo y la pasión, brindan a los tórtolos, gaviotas de mar o energías mientras visten sedas sobre sus cuerpos ya sin prendas interiores. Miran y comen y hacen gemidos por la comida exquisita, afrodisíaca, que vuelve a conectar los deseos de mirar a las estrellas y entregarse mutuamente. Comen, se acercan como atraídos por imanes hasta comer en una vasija de barro. La vista perdida se entrelaza cada vez más y comiendo camarones chupan hasta sus propias miradas, la boca hecha agua y la piel ardiendo, acercando sus cuerpos que piden más llamaradas. Se vuelven como locos y ya es marisco su piel escamada y ya sus cuerpos gustosos de caer unos con otros saboreándose directamente sus entrañas. Manos, pies, toda su piel es divina, todas las curvas exploradas, buscando en el paisaje de su cuerpo el río que vierte fragancia. Piel con piel, boca y cuerpo, pechos y labios, sexo con sexo, consumen en un ritual la viveza de sus encantos, el deseo y la pasión son locura y ternura, es amor? Es locura que surge desde el fondo de sus deseos, es la manera del encuentro con ellos mismos, con sus cuerpos entrelazados, formando diversas formas de erotismo, probando diversas formas del amor.
El sudor los empapa, salados aparentemente, pero bien dulces pues de los dos han brotado manantiales de miel mezclados con ternura. Saciados de la cena pero no del manjar de su piel, continúan mordisqueándose, bebiéndose lentamente cada gota de néctar que emana de sus cuerpos. Ya, hasta se atropellan en el aire las miradas. Las estrellas dibujan en el cielo eróticas figuras, es, sin embargo que el manto negro se ha convertido en su espejo, lo que se ve no es más que el reflejo de aquellas siluetas ya convertidas en una. La Luna ha quedado brillante para siempre, el Sol será incapaz de salir esta mañana...........Habrá una noche eterna pero será imperceptible porque la luz los ciega.
El vaivén los mece, la música que sale del mar los embriaga, el aire los acaricia y ellos dos, sólo se AMAN.

AMOR DIGITAL

Él se levanta con ganas de amar y ser amado , para su suerte, tiene la oportunidad de estar en conexión con el mundo entero desde su habitación, donde todos nos
sentimos más cómodos y sin miedo a nada , sin embargo, en su mundo solo hay cinco personas activas; la primera, un amigo que a pesar de que da todo por su amistad
está a kilómetros de su vista, esto lo entristece. Se enoja por una chica que lo ve solo de color verde que le facilita así todas sus comodidades. Le gusta la foto q
le recuerda a ese amigo q ha estado todo su vida ahí cuando lo ha necesitado, también una imagen q a pesar de no estar a su lado, lo vio nacer y lo cargo en sus brazos
cuando por primera vez arrugo los ojos , en un momento se siente divertido al ver esos recuerdos de momentos q no se volverán a repetir aunque se planifiquen y cuando
la conexión no es lo suficientemente buena para el amor conoce a una chica de palabras sinceras y de una sonrisa humilde, en medio de la indecisión se ilumina la
palabra mensaje;
-Hola, ¿quién eres?
-Un fanático del amor que todavía no consigue su autógrafo. ¿Y tú?
-Digamos que un amor que ha firmado en corazones donde la tinta desaparece
-Quisiera conocerte y …
Lo sentimos la conexión ha caducado

Lo que callamos las mujeres...

Es increíble el sin número de mujeres que somos violentadas y ni siquiera conocen nuestros casos. Es muy común ser víctimas de amenazas verbales, insultos, ofensas, gestos, gritos, humillaciones, desprecio, indiferencia y falta de atención, a veces existe la posibilidad de salir heridas gravemente. En muchos hogares no somos valoradas, nuestros esposos solo nos ven como preparadas para los quehaceres domésticos y para complacer su apetencia sexual. Aún siendo muy jóvenes nos obligan a tener relaciones sexuales empleando chantajes, engaños, amenazas y hasta la violencia física.

Se cansó de estar en el banco de la paciencia y decidió paso a paso comenzar una nueva vida: Es una joven de 24 años, es muy hermosa e inteligente, desde pequeña criada por sus abuelos donde obtuvo un carácter fuerte y responsabilidad para las tareas que asume, siempre fue una estudiante brillante, ahora es toda una profesional Licenciada en Ciencias Informáticas, y comenzó su vida laboral en la UCI, fue allí donde conoció a José, su esposo, un hombre serio, locuaz y afectuoso, eran una pareja maravillosa, él le brindaba toda su atención y cariño. Pasado un tiempo decidieron tener su primer bebé, pues tenían su propio hogar y las condiciones necesarias para formar su familia, pero el dolor llegó pronto a sus vidas cuando se le confirmó que no podría tener hijos. La tristeza la consumió por completo, pero lo peor fue que su esposo con el transcurso de los días se notaba distante, agresivo, llegaba tarde a casa, ella solo estaba inmersa en las tareas del hogar y su centro laboral preguntándose qué pasaba con ese hombre feliz y atento que la consentía y mimaba; comenzó a beber y a tener relaciones extramatrimoniales de dónde provino un hijo que fue una catástrofe para su relación, pues existía la imagen de ese bebé que nunca pudieron tener; aunque sus vínculos se deterioraban ella lo aceptó y decidió continuar con el matrimonio. Pero las humillaciones, los insultos tornaron insoportables su relación, la comenzó a agredir físicamente, la maltrataba delante de sus compañeros de trabajo haciéndola sentir inferior, comenzó a romper objetos de su hogar, la obligaba a tener relaciones sexuales cuando ella no quería ni sentía nada por él tirándole en cara que solo servía para eso porque no fue capaz de darle un hijo, aunque él luego se arrepentía y prometía cambiar en el fondo ella sabía que ya no había solución, y un día desesperada acudió a la Casa de Orientación a la Mujer y la Familia y con ayuda de sus familiares y amigos cerró ese capítulo en su vida. Cambió de empresa en busca de mejoría económica, comenzó nuevos proyectos, aún sigue sola, no logra estabilizarse sentimentalmente por el trauma que sufrió.

Toda mujer cubana y de otros países debe romper ese silencio y denunciar la situación, formalizar su denuncia ante el juzgado pertinente y solicitar ayuda. Nunca te sientas sola y nunca calles ese delito que pueden estar cometiendo contigo, se fuerte y enfrenta tus miedos, pues estos maltratadores siempre parecerán arrepentidos luego de dañarte; e intentarán alejarte de tus seres queridos para después controlarte. Hoy en día existen muchas instituciones donde puedes recibir ayuda, nunca debes olvidar que tú eres importante, que estás en una sociedad donde tus logros, sacrificio e inteligencia son elogiados. Las mujeres somos capaces de lograr muchísimas cosas, aguantamos dificultades, somos fuertes cuando creemos que ya no hay fuerzas, sin embargo hay un defecto en nosotras; que se nos olvida lo muchísimo que valemos, porque tenemos que pensar lo magníficas que podemos ser y la alegría que le damos a cada lugar donde nos encontramos, podemos desempeñar múltiples oficios y ser valoradas en nuestros hogares y centros laborales. Di “No” a la violencia, ese es el primer paso.

La sanción
El sol todavía alto en el cielo totalmente despejado, se siente intensamente sobre la piel y un hombre, con la cara compungida y una caja a cuesta, camina hacia las afuera de lo que hasta ese momento fuera su centro de trabajo. Por la forma en que camina, parece que llevara al mundo a cuesta y mientras se aleja, piensa en las tantas acciones cuyas connotaciones han sido mayores qué la cometida por él, y sin embargo, o las sanciones fueron más leves o nunca se analizaron.
Está muy seguro que la separación definitiva es más por su proceder y actitud intransigentes en todo momento, que por la indisciplina cometida.
Desde el cambio de dirección ya las cosas para él no fueron muy favorables. Su liberación como cuadro, y la asignación al nuevo departamento y cargo que ocupara, así lo denotaban. Cargo y departamento en los cuales no se sentía bien y todo esto lo fue decepcionando.
En este estado llega a la parada de la carretera central, pone la caja sobre el banco de cemento, se sienta y sigue en su estado de ensimismamiento. Poco tiempo después toma un ómnibus local que pasa. Como el carro viene casi vacío, se sienta bien atrás y pone la caja a su lado y, prácticamente sin darse cuenta, recorre los casi cinco kilómetros restantes de la ruta.
Baja del ómnibus, vuelve a echarse la caja a cuesta y continúa a pie hasta el entronque de la carretera que conduce a su pueblo.
Ahora por la orilla de la carretera ve a las niñas que frecuentemente se encuentra en este trayecto. Pasa junto a ellas y vuelve a ver esas caritas infantiles, colmadas de inocencia, las que muchas veces contempla extasiado con la alegría y la satisfacción de que están seguras. Van por el camino, retozando, jugando con las mariposas y la hierba, mirando los vehículos que pasan, pensando en sus sueños infantiles, escudriñando y preguntándose tantas cosas que hasta ahora son un misterio para sus cortas edades.
A la altura del entronque, dobla a la derecha y continúa hasta llegar a la parada. Pone la caja en uno de los bancos y se para próximo a la carretera.
Un rato después, por entre las personas que circundan el lugar, ve a las niñas de regreso con sus bolsitas abultadas por los mandados que llevan. Se acercan y el las sigue con la mirada; pasan junto a él, le sonríen y continúan. Próximas a la caseta del punto de transportación masiva, riéndose, les gritan a los trabajadores: amarillos feos, y salen corriendo.
Uno de los hombres vestidos de amarillo quemado se para, hace como que va a salir corriendo y ellas apuran el paso y se van riéndo, libres como el viento.
Después de aquel instante el hombre vuelve a su letargo y ahora piensa en su hogar, allá como de costumbre, lo esperan su esposa e hijo, a quienes debe explicaciones. ¿Qué pasará luego? Él ni siquiera lo puede intuir.