Cubadebate

Mientras Haití conmueve al planeta desde el terremoto del día 12, seguido de fuertes réplicas , la comunidad internacional rechaza la presencia militar yanqui en la nación caribeña y clama ayuda para ese pueblo. La Mesa Redonda informativa de la televisión y la radio cubana informó de la presencia hoy en tierra haitiana de miles de soldados norteamericanos, lo cual ha generado el repudio de múltiples naciones y organizaciones internacionales.

Grupos de emergencia, médicos y otros expertos de países del ALBA que colaboran con Haití para intentar paliar las consecuencias del sismo del martes último, continúan hoy aquí sus tareas de cooperación en disímiles frentes sociales. Desde horas tempranas parten hacia sus destinos, unos a dar seguimiento a pacientes o a atender a personas que aún pueden ser encontradas con vida entre los escombros, otros a abastecer de productos centros de salud, o clasificar y cuantificar los daños estructurales.

El gobierno boliviano confirmó hoy que solicitará a la Organización de Naciones Unidas (ONU) una reunión urgente para que el mundo repudien la "injusta, inhumana y oportunista" ocupación militar de Estados Unidos a Haití. "No es posible que Estados Unidos use la desgracia del pueblo haitiano para invadir y ocupar militarmente a ese país", manifestó Evo Morales.

Estados Unidos enviará más de 4 000 soldados adicionales a Haití, devastada por un terremoto el 12 de enero, desviándolos de despliegues previstos en Europa y Medio Oriente, indicó el miércoles una fuente militar en Washington. Estas tropas podrían llegar a Haití antes del viernes. La decisión fue tomada por el jefe de Estado Mayor Conjunto, el almirante Michael Mullen, en base a las "necesidades urgentes incesantes" de ayuda humanitaria en Haití.

Al menos tres edificios se derrumbaron el miércoles en Puerto Príncipe, sin dejar víctimas, tras el sismo de magnitud 6,1 que sacudió la capital haitiana el miércoles, indicaron testigos. Una vivienda de tres pisos, que seguía en pie tras el primer terremoto del 12 de enero, se desplomó el miércoles 40 minutos después del sismo del miércoles, indicó a la AFP un gendarme que pidió mantener el anonimato.

Ya éramos muy pobres antes del sismo, ¿ahora qué somos?", se pregunta Frantz Saint Hilaire, estudiante de la barriada Ciudad de Dios, en Puerto Príncipe, cuyos habitantes aguardan desesperados el primer camión de ayuda internacional, rodeados de escombros y cadáveres. Una grieta serpenteante ha partido en dos las calles de este paupérrimo barrio desde el violento terremoto del 12 de enero, que redujo a montañas de ruinas numerosas casas del barrio y mató a decenas de vecinos.

Una bebé de 23 días fue rescatada viva de las ruinas de una casa de Jacmel, en el sur de Haití, por tres equipos de socorristas franceses, anunció el miércoles la radio France Inter. También fue rescatada la anciana Anna Zizi entre los escombros de la Catedral de Puerto Príncipe y una joven, Natalie, de las ruinas del Olympic Market, un mercado ubicado en el centro de la capital haitiana.

Un fuerte sismo de magnitud 6.1 sacudió este miércoles a Haití, informó el Instituto Geológico de Estados Unidos. El terremoto se registró 59 kilómetros al oeste de Puerte Príncipe que la semana pasada fue arrasada por un temblor de magnitud 7.0 que dejó al menos 75 000 muertos. El temblor ha causado escenas de pánico en Puerto Príncipe donde la gente que dormía en campamentos ha salido a las calles.

El presidente de Haití, René Preval, llamó a la población de Puerto Príncipe a organizarse contra los actos de violencia y saqueo, y advirtió que persisten los problemas de coordinación para distribuir ayudas humanitarias. "Tenemos cerca de 2.500 policías en Puerto Príncipe y hay 3.000 malvivientes que salieron de las prisiones" destruidas por el terremoto, sostuvo. El presidente pidió que la ayuda internacional esté presente en el mediano y largo plazo.

Día y noche, periodistas y locutores leen nombres de personas desaparecidas y noticias sobre tiendas abiertas y celebridades muertas, mientras reciben las llamadas frenéticas y correos electrónicos del país y el mundo. La estación de radio es la vida de la gente ahora, dijo Roselaure Revil. Sin la radio, no podemos comunicarnos. No tenemos nada.