Cubadebate

Huracán Ian tocando tierra en la madrugada del 27 de septiembre de 2022. Foto: Archivo/CD.

Con la temporada ciclónica casi tocando a las puertas, hemos querido conversar en la entrega de hoy sobre los nombres de los ciclones tropicales, no vaya a ser que se nos adelante alguno. Recordemos que en 2022 se interrumpió la racha de siete temporadas seguidas con la formación de algún ciclón tropical antes del primero de junio.

Desde que se tienen registros, algunas de las tormentas— sobre todo aquellas célebres por sus daños—, era nombradas de manera distintiva, tomando como referencia en varios casos el nombre de algún santo del Santoral Cristiano correspondiente al día de afectación (Tormenta de San Francisco de Asís); algún elemento característico (Ciclón de los 5 días); la ciudad o zona que afectó o simplemente el año, como es el caso del “Ciclón del 26”, aunque no haya sido el único de esa temporada. Este modo de llamarlos resultaba confuso, porque una misma tormenta podía ser nombrada de manera diferente según el país.

La forma actual de nombrarlos, con nombres propios y de una manera coordinada, comenzó exactamente hace 70 años, en la temporada de 1953, solo con nombres femeninos.

Fue en 1954 cuando se comenzaron a retirar algunos nombres de las listas (tres en ese mismo año), sobre todo por ciclones que provocaron grandes daños.

Esta metodología para nombrarlos se mantuvo con cambios ligeros por más de dos décadas, hasta que en 1979 se pusieron en práctica las seis listas rotativas actuales, que se reutilizan cada seis años, sustituyendo algunos nombres. En esa ocasión se empezaron a usar nombres masculinos, Bob, en ese mismo año fue el primero.

En las listas se alternan nombres masculinos y femeninos en los idiomas español, inglés y francés, ordenados alfabéticamente. Cada lista consta de 21 nombres, ya que se dejan fuera letras del alfabeto que son muy poco comunes en los nombres propios como la Q, la X, la Y y la Z.

Unos meses antes del comienzo de la temporada ciclónica se reúnen los representantes de países miembros del Comité de Huracanes de la región IV, a la que pertenece Cuba, y se recibe la propuesta por uno o varios de ellos de los nombres a retirar de la temporada anterior, basados en los criterios de los daños materiales y humanos. De aprobarse se selecciona un nombre con la misma inicial, del mismo género y origen que el que se va a sustituir, para que se mantenga el balance.

De esa lista, solo hay seis nombres que nunca se han usado: tres con la letra V (Virginie, Valerie, Van) y tres con la letra W (Walter, William, Wendy), las dos últimas de cada año, ya que solo en tres temporadas se han formado 21 o más tormentas. Es decir que se ha tenido que usar la lista completa en los años 2005, 2020 y 2021, y en las dos primeras hubo que echar mano a la lista suplementaria formada por las letras del alfabeto griego.

En estos 70 años han sido retirados 96 nombres, la gran mayoría correspondientes a huracanes de gran intensidad (el 85 %). La letra más “retirada” es la “I”, en 13 ocasiones, algunos de los cuales los cubanos reconoceremos lamentablemente: Ione (1955), Inez (1966), Iris (2001), Isidore (2002), Isabel (2003), Iván (2004), Ike (2008), Igor (2010), Irene (2011), Ingrid (2013), Irma (2017), Ida (2021) e Ian (2022).

Algunos consideran a Iota, pero como no es realmente un nombre propio, sino el nombre de una letra del alfabeto griego, lo contaremos por separado. Esta incidencia de los nombres con “I” se debe a que normalmente la novena tormenta tropical de la temporada (a la que le corresponde dicha letra) ocurre en el momento pico de la temporada ciclónica, donde además de mayor cantidad de ciclones, también son más comunes los huracanes intensos.

Es curioso además que algunos de los nombres no sobreviven a más de un ciclo de seis años, es decir, que el nombre sustituto, cuando es utilizado, también es sustituido. Por ejemplo Ike (2008) había sido el reemplazo de Isidore (2002); como mismo lo fue Igor (2010) de Iván (2004) e Irma (2017) de Irene (2011).

Y si a usted le parece que señalar el año no es importante, recuerde que estos nombres se repiten cada seis años y que por eso Cuba tuvo dos “Lili” en 1996 y 2002, cuando finalmente se retiró. Es por ello que el nombre de Kate, que los habaneros recordarán por el “raro” huracán de noviembre de 1985, va a ser usado en 2027.

Volviendo a la competencia entre los nombres más retirados, el segundo lugar los llevan las letras “F” y “C” con nueve nombres retirados cada una, mejor dicho, lo llevaban, porque gracias a Fiona en la pasada temporada, las “efes” llevan ahora la ventaja con 10. Y aquí salta a la vista algo curioso, que pareciera contradecir a la lógica: ¿por qué no están escoltando a la “I” las letras más cercanas (“H” y “J”), que se supone se formen en fechas similares? Aquí el factor clave presupone un poco de casualidad, los nombres son retirados por sus daños, un huracán de gran intensidad, como lo fue José en 2017, no afectó ningún país, por lo que continua en la lista.

Los años con mayor cantidad de nombres retirados los lidera el 2005 con cinco, seguido por los años 1955, 1995 y 2017, con cuatro. En los últimos 30 años solo en seis ocasiones no se ha retirado ningún nombre de la lista, el más reciente fue en 2014.

Este año 2023 utilizaremos la misma lista de 2017, aunque con la ausencia de Harvey, Irma, Maria y Nate; que fueron sustituidos por Harold, Idalia, Margot y Nigel. De las seis listas que se usan desde 1979, además de los seis nombres que nunca se han utilizado, “sobreviven” unos 68, poco más de la mitad de los 126 que la conforman. El único nombre con “I” que no ha sido sustituido es Isaac y ninguno de los que comenzaban con “F” son los usados hoy en día.

También, y desde 2021, está disponible una lista alternativa de nombres, en sustitución de las letras el alfabeto griego, cuyos nombres resultaban confusos, además que no estaba concebida para que estos fueran retirados, como los casos de Eta e Iota. De ser necesario utilizarla y requerir la retirada de algún nombre, se haría bajo el mismo criterio de las demás.

Estos nombres son Adria, Braylen, Caridad, Deshawn, Emery, Foster, Gemma, Heath, Isla, Jacobus, Kenzie, Lucio, Makayla, Nolan, Orlanda, Pax, Ronin, Sophie, Tayshaun, Viviana, Will.

Agradecemos a Brian McNoldy, investigador de la Universidad de Miami pues parte de esta información la consultamos en su perfil de la red social Twitter y en su blog Tropical Atlantic Update. Valoramos su compromiso con socializar estos datos y colocarlos a disposición de la comunidad meteorológica mundial