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Mujeres y empleo, ¿dónde están las brechas?

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Mujeres. Foto: Ismael Francisco/ Cubadebate.

Alicia está casada con el padre de su hija. Cuando la pequeña nació, decidieron que ella se quedaría en casa cuidándola y él se ocuparía de mantenerlas. Carmen trabajó como maestra hasta que su madre enfermó y tuvo que encargarse de sus cuidados. Sus hermanos prometieron ayudarla económicamente para que dejara el empleo. Elizabeth dirigía el departamento de contabilidad en la empresa donde la ubicaron al graduarse. Tras regresar de la licencia de maternidad, tuvo que rechazar la plaza como directiva con su salario más alto. No alcanzaba el tiempo para tantas reuniones.

Las historias de estas tres cubanas, reales, no son únicas en nuestro país: mamá que se queda en casa, papá que sale a trabajar; mujer cuidadora, hombre proveedor; madre que insiste en trabajar, con agotadoras dobles jornadas, limitada en el ámbito profesional. Son escenas cotidianas en una sociedad que todavía arrastra más de un prejuicio machista. A pesar de las tantas políticas diseñadas para incorporar a las mujeres en equidad a los diferentes sectores, aún queda mucho por hacer en materia de trabajo y empleo. Los roles de género aprendidos durante décadas no se borran de un plumazo.

No por gusto las diez especialistas entrevistadas por esta sección a principios de año consideraron “la responsabilidad de las tareas de cuidado, con sobrecarga para las mujeres”, como uno de los “retos acuciantes” en materia de género para el 2021, aún más en tiempos de pandemia y confinamientos. Sobre todo, explicaron, porque profundiza las diferencias en la distribución del tiempo entre unas y otros, de las que se derivan desigualdades en términos de oportunidades, acceso a recursos y beneficios que limitan su desarrollo personal y profesional.

Estudios y estadísticas presentados recientemente en la Isla confirman las urgencias tras estos desafíos. Según el nuevo informe voluntario de Cuba sobre la implementación de la Agenda 2030 y los Objetivos de Desarrollo Sostenible (ODS) -al que esta columna dedica un par de entregas-, la sobrecarga de trabajo de las mujeres, especialmente en el trabajo no remunerado y de cuidados, constituye un obstáculo para su participación igualitaria en el trabajo remunerado y para su autonomía económica.

Nadie duda que las cubanas tienen muchas batallas ganadas en términos de participación social, política y también económica. Ellas son, por solo poner un par de ejemplos, el 51,5 % de los dirigentes en el Estado y el Gobierno, el 53,2 % de los parlamentarios y el 53,3 % de los gobernadores y vicegobernadores.

Además, representan más del 60 % de quienes se matriculan y gradúan de la educación superior en Cuba, son mayoría en la fuerza técnica empleada (66,2 %), constituyen el 60 % del total de ocupados en la economía con nivel superior y más de la mitad de los ocupados en las ramas de Intermediación Financiera, Educación, Salud Pública y Asistencia Social.

Tras estos números existen políticas claras para fomentar un mayor liderazgo femenino en todos los ámbitos de la vida del país. Sin embargo, este proceso está limitado por la aún alta carga de trabajo no remunerado doméstico y de cuidados que ellas enfrentan.

De hecho, al informar sobre el estado de cumplimiento del Objetivo de Desarrollo Sostenible (ODS) 5, referido a la igualdad de género, el informe señala que “a pesar de los avances alcanzados, el envejecimiento demográfico (20,8 % de la población total con 60 años o más en 2019), la reducción del tamaño medio de las familias, el aumento en la esperanza de vida y el efecto de la emigración internacional, inciden en la disminución de las personas que puedan ocuparse del cuidado y en el aumento del número de mujeres solas al frente de los hogares”.

El documento rescata datos ofrecidos por la Encuesta Nacional de Género de 2016 y advierte que las cubanas dedican más tiempo (14 horas más como promedio en una semana) que los hombres a las tareas domésticas en el hogar. Esta división se intensifica en la población no ocupada: las desocupadas destinan alrededor de 18 horas semanales más a este tipo de trabajo que los hombres en igual situación.

Imagen: “Ascenso a la raíz. La perspectiva local del Desarrollo Humano en Cuba 2019”.

En ese contexto, reconoce que, aunque la tasa de desocupación femenina en Cuba (1,2 %) es una de las más bajas en América Latina y el Caribe, continúa siendo un desafío la elevación de la tasa de actividad económica femenina, que ha tenido una tendencia decreciente en los últimos años.

Otro estudio, el más reciente informe sobre desarrollo humano en el país, coincide con esta alerta. Titulado “Ascenso a la raíz. La perspectiva local del Desarrollo Humano en Cuba 2019”, en uno de sus acápites propone un análisis con matices de género del comportamiento de los indicadores laborales en el período 2007 - 2016.

Señala que, a pesar de los grandes esfuerzos para incrementar la participación laboral de las mujeres en igualdad de condiciones con los hombres, existe una brecha de género que tiende a aumentar en la mayoría de los indicadores analizados. Esta responde, entre otros aspectos, a un fuerte componente cultural, que a ellas les asigna ocupaciones “típicamente femeninas”, en sectores menos productivos, pues deben combinar el tiempo con labores de cuidado y administración del hogar.

En paralelo, aunque las cubanas reciben igual salario que los hombres por trabajo de igual valor, ellas siguen concentrándose en aquellas actividades con menor salario medio. Por solo poner un ejemplo, ellas son mayoría en la fuerza técnica del país, pero en la categoría directivos constituyen el 38,4 %. En la práctica lidian con desventajas porque el trabajo en el hogar sigue siendo una pesada carga sobre ellas. Como le sucedió a Elizabeth.

Imagen: “Ascenso a la raíz. La perspectiva local del Desarrollo Humano en Cuba 2019”.

Otros indicadores laborales ofrecen pistas necesarias. Al analizar por sexos el comportamiento de la tasa de actividad económica (TAE) -la relación existente entre la población económicamente activa y la población en edad laboral expresada en por ciento-, el informe confirma que las mujeres presentan menores tasas y que la brecha favorable a los hombres ha tendido a ampliarse ligeramente en los últimos cinco años.

“Se observa cómo se mantiene la brecha entre mujeres y hombres, siendo este indicador como promedio más de veinte puntos porcentuales menor en el caso femenino”.

En 2016, la brecha de género se mantenía alrededor de los 27 puntos porcentuales, cuando se compara la diferencia entre la TAE masculina (78,2%) en relación con la TAE femenina (50,9%). Es decir, proporcionalmente hablando, son más las cubanas en edad laboral que no poseen vínculo de trabajo activo. Ellas se encuentran menos representadas dentro de la actividad económica del país.

Luego, en 2019, la TAE femenina mostró una leve recuperación (53,3 %), aunque las diferencias con respecto a los hombres siguen siendo marcadas. Del total de ocupados en la economía, el 39 % eran mujeres. Ellas representan también el 45,7 % de los que laboran en el sector estatal (45,3 % en 2016), el 29,1 % del sector privado (20 % en 2016) y el 35,5 % de los trabajadores por cuenta propia (32,3 % en 2016).

Sin embargo, tras año y medio de pandemia y confinamiento, en que han sido ellas quienes más se han quedado en casa a cargo de hijos y ancianos, estos números podrían volver a moverse.

Imagen: “Ascenso a la raíz. La perspectiva local del Desarrollo Humano en Cuba 2019”.

En otro momento del reporte de derechos humanos, un análisis comparativo de la población no económicamente activa (PNEA) declarada en los últimos dos censos realizados en Cuba (2002 - 2012) reafirma los desafíos en torno a la distribución de los trabajos domésticos.

En ambos años las mujeres son mayoría dentro de la PNEA, representando alrededor de un 66 %. “Esta feminización de la inactividad en el país guarda estrecha relación con las actividades más representativas dentro de la estructura de la PNEA”.

Predominan las personas que se declaran inactivas por los quehaceres del hogar y los jubilados o pensionados, pero esta clasificación está claramente diferenciada por sexos. Es decir, ellas son las que más se dedican a los quehaceres del hogar y ellos los que más se encuentran entre los jubilados o pensionados, los estudiantes y los que no realizan ninguna actividad.

Imagen: Informe voluntario de Cuba sobre la implementación de la Agenda 2030 y los Objetivos de Desarrollo Sostenible (ODS).

Con esos y otros datos como evidencias, el informe puntualiza que “la estructura productiva, la persistencia de estereotipos, los roles de género y la configuración de las familias, continúan naturalizando las actividades domésticas y de cuidado para las mujeres, como un deber y una responsabilidad gratuita. No se entiende todo esto como un trabajo sin remuneración, que garantiza la reproducción y desarrollo de las fuerzas productivas”.

Los documentos presentados dibujan un panorama de logros y avances, pero también de muchos desafíos en torno a la incorporación plena y equitativa de las cubanas al trabajo. Por tanto, en un contexto de actualización del modelo económico y social, las políticas diseñadas necesitan también ser sensibles al género. Por suerte, algunos pasos ya están dados.

Los retos en torno al empleo femenino son urgencias explícitamente reconocidas en el Programa Nacional para el Adelanto de la Mujer (PAM) aprobado este año. “Se trabajará con los Organismos de la Organización Central del Estado (OACE) para atenderlo, también en aquellos casos de compañeras que presentan obstáculos derivados del ejercicio del cuidado de otras personas, tanto de adultos mayores como menores”, precisó la secretaria general de la Federación de Mujeres Cubanas (FMC), Teresa Amarelle Boué, a esta columna hace un par de meses.

Pero hay que ir más allá. Mirar el desarrollo humano con equidad de género, resume la investigación sobre este tema, pasa por democratizar las relaciones de género al interior de los hogares; por dinamitar los estereotipos naturalizados desde la división sexual del trabajo y también por diseñar políticas que logren un adecuado equilibrio entre las diferentes actividades asumidas por mujeres y hombres.

Ya lo decía la economista Teresa Lara: no se puede hablar de desarrollo en general sin hablar de la mujer como sujeto activo, beneficiario y participativo de ese desarrollo.

Se han publicado 29 comentarios



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  • Leticia dijo:

    Y lo más triste es que aún se sigue educando a los niños en este esquema machista, por las propias madres, debemos empezar por el hogar a enseñar que niñas y niños, hombres y mujeres son iguales. Le habla alguien que si sufrió la discriminación por ser mujer, así mismo dijeron que necesitaban que la plaza la cubriera un hombre sin tener el cuenta nada más.

    • Hayek dijo:

      y crees que sea justo darle el derecho al estado a decidir como educa cada padre a sus hijos?

  • Phd dijo:

    El trabajo en Cuba sigue dando mucho que desear, se aposto por el pleno empleo muchos años a sabiendas de que podriamos tener en ocupacion a mas personas, pero cobrando menos (salario real) y sin una carga real de trabajo. El empleo debe ser la fuente de riqueza principal, y todo lo que fomente puestos de trabajos que sean decentemente remunerados se debe apoyar completamente, sea privado, o estatal, aunque este ultimo esta demostrado que no ha sabido gestionar eficientemente el numero de contratados y la distribucion del trabajo. Hoy por hoy algunas mujeres prefieren estar en la ´´lucha´´(trabajos subterraneos, etc) que en una oficina o fabrica, quizas asi pueda resolver mas en el dia a dia, ya que despues de esta reforma salarial, volvimos a quedar en pañales con la devaluacion de la moneda que se paga, y la inflacion a consecuencia de esta, el salario nominal aumento, pero el real sigue siendo bajo.
    Urge la Ley de Empresas y mas presencia de la Inversion Extranjera Directa, y por supuesto que se pague directamente al trabajador no a traves de empresas empleadoras parasitarias, esto seria un gran paso de avance para darle valor al trabajo, por ahi podriamos empezar.

  • Yenis dijo:

    Pienso q si existe desigualdad visiblemente,la carga no,la sobrecarga de las labores q nos tocan nos impide desarrollarnos mejor y superarnos. Para q los de la familia crezcan o estén cómodos el 70% de las veces el sacrificio lo hace la mujer y si consigue trabajo el 90% de las veces tiene q adaptarlo al horario de sus hijos o padres,pues para trabajar tiene 1ro q pesar la entrada y salida de las escuelas;actividades extra clases muy importante para el desarrollo;cuidado de familiares;horario de comida y labores de hogar,sin contar la posibilidad de alguna enfermedad etc... Y por demás no le es suficiente lo q trata de ganar dignamente ni para la merienda de sus hijos por así decirlo y entonces tiene q inventar muchísimas veces porq "papá" no puede asumir los gastos o no existe. En fin hay bastante tema aquí y muy complicado. Pero al menos los directivos tratan de darle solución
    Dios les bendiga y a valorar y cuidar mas a la mujer q sin ella no crece la vida

    • Lorena dijo:

      Al fin un comentario sensato

  • Tere dijo:

    ¿Y cuántas mujeres trabajan como albañiles, peones de la construcción, en la agricultura, arando con bueyes o limpiando con guataca abajo del sol? Ahí sí la brecha es grande¡!¡!¡!¡ ¿Cuál es la proporción hombres y mujeres en actividades laborales como la jurisprudencia, contabilidad y finanzas y el comercio? Seguramente ampliamente mayoritaria la mujer y no el hombre.

    • Uno ahi... dijo:

      sin duda, el comentrio mas atinado del articulo. ahora resulta que los hombres tenemos la culpa de hacer todo el trabajo fuerte que la inmensa mayoria de las mujeres no hace. por que no nos dan trbajo como dependientes priorizando muchachitas lindas, por ejemplo? por que es una practica generlizada en todas las empresas de seguridad que los hombres hacen guardia de noche y en las posiciones mas peligrosas? por que en bancos y cadecas el 90% del personal son mujeres? por que no hay secretarios de los jefes... ni siquiera de las jefas!!!!! por que no hay mujeres mineras? por que no hay aeromosos? por que los hombres deben cederle el asiento a las mujeres(esto es supermachista desde cualquier punto que se mire) por, que por que, por que??? ahora me pregunto, la mujer que se queda en su casa cuidando de su familia, por su libre y expontanea voluntad, esta haciendo algo malo, algo incorrecto, algo inmoral, o sencillamente decidio tomar un camino diferente al que la nueva sociedad quiere que tome? no se sentira ofendida cuando lea esto y vea como la tratan de victimizar? yo siento mucho aprecio y agradecimiento por esas amas de casa y aun mas por esas mujeres trabajadoras que hacen lo que las nuevas no son capaces de hacer, y entonces vienen a escribir sus justificaciones. Saludos y nuevamente, ojala me publiquen!! santas palabras!!

  • Vaya dijo:

    Brecha de genero!!! En Cuba? No me hagan reir.

  • Yrr dijo:

    Hay un refrán común, las mujeres nacieron para pasar trabajo, no todas pero bien la gran mayoría, son cuidadoras, más que cualquier otra cosa son cuidadoras, de los hijos, padres, esposo, suegros, hermanos que lo necesiten y cualquier otro lazo consanguínero o no que los una a otra persona y necesite ser protegida, en una sociedad tan carente de recursos para aliviar el cuidado, son verdaderas esclavas del trabajo doméstco, llegan al final de la vida con un estado de salud deplorable y hasta con trastornos mentales, son realidades que veo a diario.

  • Mariana Lobaina dijo:

    A mi criterio el artículo está mal enfocado, el problema no está en la división de las tareas en el hogar, siempre tiene que haber una división de tareas. Tal parece que para que la mujer trabaje, el hombre tiene que ocuparse de las tareas del hogar, y lo que hacemos es invertir papeles, la mujer en la oficina y el hombre en casa, la misma situación, pero invertida.
    En mi opinión, las medidas deben ir dirigidas a facilitar las tareas del hogar para la familia, con asistencia social, con soluciones de ventas de alimentos pre-elaborados al alcance del bolsillo. Soluciones de lavanderías que trabajen las 24 hrs, al alcance del bolsillo también, extensión de todos los horarios de servicio las 24hrs del día, si cualquier persona (hombre o mujer) tiene que cumplir una tarea laboral que le ocupe la jornada completa, y además tiene que hacer 2 y 3 horas de colas en cualquier servicio, o emplear la mañana o el día completo en colas para garantizar necesidades de alimentación e higiene, además cocinar desde cero los alimentos a diario, cuidar la educación de los hijos, la limpieza del hogar, la atención a los ancianos de la casa, coser la ropa que se va poniendo vieja, y otros detalles menores; oigame, yo le digo que ni aunque se dividan las tareas alcanzan a pedacitos, no hay momento de descanso ni de relajación, todo para la pareja se divide entre atender la familia, la casa y el trabajo, pero así, de corre corre, sin incentivos y sin descansos ni tiempos para uno mismo. Es un estrés cotidiano, que acaba con el buen humor y la paz familiar. La decisión de quedarse en casa pasa, más por tratar de obtener ese tiempo necesario para uno mismo, recargando, en consecuencia, al que trabaja para "traer el pan" que se queda con la responsabilidad económica y material, que tampoco es fácil, eso es válido lo mismo para el hombre que para la mujer.
    Conclusiones, más soluciones que faciliten las tareas domésticas y de atención a la familia, y verán más mujeres incorporadas al trabajo.

    • Preocupado dijo:

      Gracias Mariana. Iba a emitir mi opinión pero usted posiblemente haya expresado mejor lo que pienso que si lo hubiera escrito yo..

    • Idal dijo:

      Excelente comentario!!!!

    • Sy dijo:

      Mariana su comentario totalmente acertado¡!! 100% de acuerdo; no creo que sea un tema de género sino q no tenemos opciones en nuestra cotidianidad para tener una vida plena, podemos las mujeres tener todos los derechos y los tenemos pero si no tenemos alternativas para disfrutar de ellos...

  • vilma dijo:

    Es de gran valor humano que las mujeres en Cuba tenemos trabajo a diferencia de como esta el mundo, sufriendo la discriminacion de la mujer. Mi opinion en este caso es la edad de la jubilacion, la mujer despues de los 55 años algunas se mantienen saludables, fuertes para seguir trabajando incluso muchas continuan trabajando despues de los 60 años, y asi lo prefieren. He oido opiniones de muchas mujeres incluida yo que tengo 57 años, ya no tenemos las mismas fuerzas para atender la casa, los mandados, las colas, la familia, las enfermedades propias de la edad. Quiero saber si la ley de retiro puede ser con 55 años y 25 de trabajo. Hay mucha juventud sin trabajar incluso graduados con titulos tecnicos, universitarios, que estan esperando una oportunidad para optar por una plaza ocupada por una persona envejecida que sigue trabajando. hace falta incorporar a los jovenes al trabajo y que los viejos podamos descansar y disfrutar con salud del retiro. Las mujeres tenemos doble y triple jornada de trabajo. El trabajo, la casa, las colas, ya que somos amas de casa cuando termina la jornada laboral no hay descanso.

    • Hadasa dijo:

      Vilma tiene mucha razón hay muchos jóvenes deseando trabajar y otros no tan jóvenes pero con necesidad de un vínculo laboral para garantizar una jubilación, pero lejos de evaluar la posibilidad de menos edad para el retiro, aunque sea para incorporar al trabajo a tantas personas que se encuentran desvinculadas luego del aumento de salario y con una nueva estructura anunciada por directivos, donde deben quedar sin empleo muchas más personas, modificaron mediante norma jurídica la incorporación al trabajo de los jubilados, o sea ellos con doble ingreso y otros en las largas listas de desempleados en las Direcciones de Trabajo sin respuesta y sin posibilidades. Saludos.

    • Abran los ojos dijo:

      Like, yo me opuse al incremento de la edad de retiro de la mujer e incluso de los hombres, pero mi criterio no resultó ser mayoría... y ahora como joven mujer me veo atrapada y estancada en mi desarrollo profesional debido a que la plaza por la que sueño esta ocupada por una persona que tiene 63 años y que no se irá nunca ya que está súper cómoda la silla que tiene.

  • Mary dijo:

    A las mujeres por el sólo hecho del trabajo que tenemos en nuestras casas, más el de la oficina etc, más las colas + el trabajo para parir nos debían dar un gran estímulo

    • Hadasa dijo:

      Estoy de acuerdo con usted, saludos.

    • Uno ahi... dijo:

      para nada, parir es una eleccion suya, no hay por que "premiarla". Las colas... ahi hay mujeres y hombres, no obstante, en mi casa las colas casi siempre las hago yo y desee que comenzo el covid no dejo que mi esposa se acerque a una cola. El trabajo en la oficina es parejo y en todo caso, cuando hay q hacer fuerza la hacen los hombres!! Y el trabajo en la casa debe estar dividido equitativamente, si en su casa no es asi todos estan cometiendo un gran error, incluida usted, lo que no es motivo de estimulo...

  • Yo dijo:

    Bueno y que es lo que se quiere que sean el 99% de los dirigentes y trabajadores en el país, y que sea como Haití que los hombres en la casa y las mujeres trabajando, me avisan que buena falta que me hace quedarme en casa y desconectar del ajetreo en la calle.

    • Hadasa dijo:

      Yo, no es eso lo que queremos, solo que no nos discriminen, que nos consideren y ni hablar de tantos dirigentes que cuando llega hasta ellos una profesional competente optando por un trabajo se las arreglan para desanimarla por temor a que sea mejor que él, de eso estamos llenos. Saludos.

  • vilma dijo:

    Es de gran valor humano que las mujeres en Cuba tenemos trabajo a diferencia de como esta el mundo, sufriendo la discriminacion de la mujer. Mi opinion en este caso es la edad de la jubilacion, la mujer despues de los 55 años algunas se mantienen saludables, fuertes para seguir trabajando incluso muchas continuan trabajando despues de los 60 años, y asi lo prefieren. He oido opiniones de muchas mujeres incluida yo que tengo 57 años, ya no tenemos las mismas fuerzas para atender la casa, los mandados, las colas, la familia, las enfermedades propias de la edad. Quiero saber si la ley de retiro puede ser con 55 años y 25 de trabajo. Hay mucha juventud sin trabajar incluso graduados con titulos tecnicos, universitarios, que estan esperando una oportunidad para optar por una plaza ocupada por una persona envejecida que sigue trabajando. hace falta incorporar a los jovenes al trabajo y que los viejos podamos descansar y disfrutar con salud del retiro. Las mujeres tenemos doble y triple jornada de trabajo. El trabajo, la casa, las colas, ya que somos amas de casa cuando termina la jornada laboral no hay descanso. Gracias

  • El economista. dijo:

    Mariana lobaina describe la realidad como realmente es. Aconsejo a todos y todas a leer y reer su comentario. Estoy totalmente de acuerdo con ella. Así de sencillo.

  • Holos dijo:

    Y la planificación familiar?, cantidad de hijos en el momento apropiado; prevención de enfermedades en las personas adultas (chequeos médicos), y la participación planificada de dm os géneros en el seno familiar:

  • Ivan Sanchez Llanes dijo:

    Realmente aún vivimos en una sociedad machista y en nombre de la igualdad y de un nuevo tipo de sociedad no se legislan leyes q ataquen determinadas actitudes, q no solo afectan a las mujeres, sino a todos los trabajadores pero q indudablemente son ellas quienes más lo sufren. De esta manera en Cuba no existe el acoso laboral y muchos lo hemos sufrido. Sl2.

  • Vamos por mas dijo:

    Es verdad que la mujer hace mas horas de trabajo en el hogar en el cuidado de hijos, adultos mayores y quehaceres domesticos pero estos no son 100 % por una cultura machista.
    Quien ayuda por ejemplo para que el horario de venta en tiendas y mercados abarque horarios nocturnos y fines de semana, que la venta de productos alimenticios no sea un arroz y granos que haya que dedicar tanto tiempo a escoger para su elaboracion igual productos del agro con tanta tierra.
    Con el envejecimiento de la poblacion entidades y preparacion de personal en el cuidado de estas personas para ayudar a la familia.
    Circulos infantiles para todas las madres trabajadoras, seminternados con condiciones que los ninnos no tengan que llevar sus alimentos.Planes vacacionales para que los padres puedan trabajar.
    Cuando haya un familiar en un hospital no haya que llevar alimentos, ropa, sabanas etc.
    Una gastronomia popular y precios asequibles que los trabajadores no tengan que llevar siempre almuerzo elaborado
    etc, etc

  • Hayek dijo:

    mi pregunta es. Es eso un problema? Que personas por la consecuencia de deciciones libre entablen roles con su pareja en el que se encarguen de las cosas como prefieran. Defienden la libertad de las mujeres porque según ustedes estan oprimidas. Y yo pregunto y si una decide quedarce en casa y que su marido trabaje por libre y expontanea decicion tambien esta siendo oprimida. O sera que a ustedes lo que les molesta es la libertad de elección? La única igualdad posible es ante la ley lo demás mientras parta de decisiones libres de cada persona aunque los resultados sean dispares son justos porque se parte de una igualdad ante la ley, no les parece algo loco esperan que partiendo de una base que de por si es desigual esperar que se obtengan resultados iguales? Las personas tienen gustos diferentes, diferentes niveles de prioridad, diferentes cosas en las que desean esforzarse y un sin fin de diferencias. Porque los números deberían ser iguales para hombres y mujeres?

  • yonnis dijo:

    "Ellas son, por solo poner un par de ejemplos, el 51,5 % de los dirigentes en el Estado y el Gobierno, el 53,2 % de los parlamentarios y el 53,3 % de los gobernadores y vicegobernadores.

    Además, representan más del 60 % de quienes se matriculan y gradúan de la educación superior en Cuba, son mayoría en la fuerza técnica empleada (66,2 %), constituyen el 60 % del total de ocupados en la economía con nivel superior y más de la mitad de los ocupados en las ramas de Intermediación Financiera, Educación, Salud Pública y Asistencia Social." CON ESTOS DATOS LOS HOMBRES ENTONCES DEBERIAMOS ESTAR LUCHANDO POR IGUALDAD DE DERECHOS, PUES NOS SUPEERAN EN ALGUNOS EN HASTA MAS DE UN 10 %. ¿entonces es correcto cuando ellas superan en cifras, pero cuando estan por debajo es malo? Eso es igualdad?.

  • Easy dijo:

    Pues yo la verdad es que renunciaría con gusto a todos mis "privilegios" como hombre, y cambiaría de rol con una mujer. Por desgracia ninguna nunca ha aceptado dicen que aunque yo lo haga todo en la casa no mantienen a un hombre, aunque claro esto es solo machismo si la mujer es la que se queda en casa. Renunciaría a mi derecho de tener que trabajar 5 años más que las mujeres para poder jubilarme. Renunciaría a mi derecho de construir con mis propias manos cargando arena y piedras y demás luego de llegar a las 7 pm a la casa despues de pasarme 12hrs en la calle (de 8hrs y 30min en la oficina y 3hrs de viaje ) todos los días. Renunciaría a mi derecho de no poder llorar (los hombres no lloran) cuando el agobio y el estrés me sobrepasan. Renunciaría a mi derecho de bancarme todas las quejas de me mi mujer porque esta obstinada de hacer las cosas de la casa, la covid y la situación económica del país, cuando ella "trabaja a distancia" 3hrs al dia (el resto ve peliculas y novelas). Renunciaría al "privilegio" de tragarme el estres del trabajo y el de la casa porque no cuidan nada y tengo que estar remendando (porque para eso soy el hombre). Renunciaría a que las quejas de mi mujer fueran en el tono en que lo hace (si lo hace ella esta bien, cuando mas, soy un flojo por no ponerme a su nivel. Si lo hago yo es violencia de género o violencia doméstica). Renunciaría a mi derecho de tener que aceptar trabajos de mierda adicionales porque necesito el dinero, como chapear, construirle a otros, y otros etc que conllevan mucho esfuerzo físico, y me tienen el cuerpo destruido(no por gusto los hombres viven menos que las mujeres como promedio). Y con gusto renunciaría a otros de mis "privilegios" no voy a poner aquí como el del infarto que debe darme dentro de poco por el sobre esfuerzo. Pienso que muchos otros hombres podrían poner aquí muchos de los "privilegios" con los que cuentan ellos. Ha una nota, no entiendo por que las mujeres no quieren cambiar de roles si ellas son las oprimidas y los hombres los opresores. Espero me publiquen pues aunque a muchas les paresca una broma o burla y las ofenda, es más una reflexión, los hombres están igual de cansados y oprimidos por el machismo. Saludos.

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Ania Terrero

Ania Terrero

Periodista de Cubadebate. Graduada en 2018 de la Facultad de Comunicación de la Universidad de La Habana.
En Twitter @AniaTerrero

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