Imprimir
Inicio »Especiales, Cultura  »

Sara, los inciertos caminos de la eternidad

| 77 |

Sara González. Foto: Roberto Chile/ Archivo

A diez años de la desaparición física de Sara González.

Ni en mis peores pesadillas me vi escribiendo sobre Sara algo que no podrá leer. Cada texto, cada verso, cada canción y hasta mis especulaciones literarias más disparatadas encontraban en ella abrigo y entusiasmo. Me llamó Amaurito siempre, así, con el diminutivo de la terneza y como solo lo hacía un par de miembros de mi extinguida familia. La Gorda también podía ponerse difícil pero con todo, hierática, seguía diciéndome Amaurito, porque aquellos imberbes desencuentros, en vez de lacerar nuestra profunda amistad, la lanzaba a ese intangible confín donde el amor perdura por inexplicable.

A Sara primero la escuché y muy pronto nos vimos allá por los inicios del año 1972. Fue en la intersección de las calles 23 y 12 en El Vedado. Ya ambos trabajábamos en el ICAIC (Instituto Cubano de Arte e Industrias Cinematográficos) y dos horas después de aquel frugal vistazo nos acercamos, la juventud alberga esas espontaneidades, como dos gladiolos tropezando en un espeso jardín. La Gorda, que entonces no lo era, vestía un pullover verde que se posaba juvenil sobre un jean de discreto terciopelo negro, tenía el pelo muy largo, lacio y claro, y unos ojos que emulaban el azul veraniego del mar. Su porte y carisma eran impresionantes. Luego de aquel topetazo, jamás nos separaríamos durante 40 años.

Vivía, lo supe temprano, en un humilde apartamento de Marianao junto a sus padres Berto y Rosa. Por esa estrechez doméstica, era común que se pasara meses conviviendo en nuestra casa, porque si mi extravagante familia estuvo alguna vez de acuerdo fue en que todos festejábamos y necesitábamos de la presencia de Sara, de su música, su voz, su risa, su sentido del humor tan criollo, su equilibrio y su amor por lo que vale la pena amar... y lo que no.

Ya en 1974 La Gorda comenzó a llevar su arte, cada vez más depurado y profesional, por Europa. De Italia me trajo como regalo, con el exiguo viático que le dispensaba su auspiciador, mi primer jean, “¡no muy escandaloso para que no te critiquen, Amaurito!”, me dijo entre carcajadas. Así comencé a valorar una de las virtudes que con el paso de los vientos sería su mayor tesoro; la generosidad. Una generosidad que muchas veces provocó que su Ángel de la Guarda trabajara horas extras. Sara era un ser que combinaba agudeza con ingenuidad y eso le propició más de un traspiés en el cotidiano trasegar de los días.

Grabamos nuestros respectivos y primeros discos entre 1975 y 1976. Recuerdo las decenas de llamadas telefónicas diarias cantándonos los temas y sugiriéndonos cuál debíamos grabar. Sara sufría por entonces las incomprensiones de las primeras pasiones, fui confidente de sus vicisitudes por sentirse y amar “diferente”. Presentía, y me congratulo por ello, de que en mí encontraría al cómplice que su alma necesitaba con urgencia y que mi mesura, nada común por entonces, defendería hasta los límites del socorro.

Durante décadas viajamos, cantamos, grabamos, bebimos, fumamos, jugamos dominó, un juego que le apasionaba (era muy competitiva). Discutíamos sobre lo humano y lo divino; sexo, política, lealtades, de los errores nuestros, porque supimos desde muy temprano que la amistad es un sentimiento que puede crecer también en la duda.

Sara fue una cubana que disfrutó de la música toda, nunca excluyente, se asomó tanto al son como al rock, hizo pop, cantó baladas y boleros, y grabó fonogramas que escapan a cualquier discriminación de géneros.

Siendo profundamente anti-dogmática y martiana jamás se dejó etiquetar como miembro de partido alguno, su signo político era La Patria y todo lo que de ella se deriva. Amé su consecuencia y la admiré por ello. Fue por eso, o también por eso, que se convirtió en mi mejor amiga.

Cuando enfermó, Peti (mi esposa) y yo la visitamos en el hospital con inalterable frecuencia y allí, siempre Diana, la compañera de su vida. Con el fallecimiento, no por esperado menos duro, perdí una parte de mí ya irrecuperable.

En el altar donde guardo y reverencio a los que me faltan está su foto y el último inhalador que utilizó para aquel asma, que invasiva, no dejó de atormentarla jamás.

Sus cenizas, a petición propia, fueron depositadas en el mar frente a La Habana que idolatró y a veces pienso, cuando sumerjo mi cuerpo en las cristalinas aguas de la Isla, que sus ojos me rozan y que en los restos del salitre apuntalado por el sol del Caribe La Gorda me acompaña. Entonces, por un instante, la repienso, miro al cielo, y navegamos juntos los inciertos caminos de la eternidad.

Sara González y Amaury Pérez. Foto: Archivo

Sara González en "Con 2 que se quieran". Fotos: Petí/ Archivo

Sara y Amaury en "Con 2 que se quieran". Foto: Petí/ Archivo

En video, Entrevista a Sara en Con 2 que se quieran

En video, Sara González: Girón, la Victoria

Vea además:

Sara González en clave de repertorio (+ Video)

Se han publicado 77 comentarios



Este sitio se reserva el derecho de la publicación de los comentarios. No se harán visibles aquellos que sean denigrantes, ofensivos, difamatorios, que estén fuera de contexto o atenten contra la dignidad de una persona o grupo social. Recomendamos brevedad en sus planteamientos.

  • anitam dijo:

    Gracias amaury por tan hermoso homenaje a la cubana excepcional que fue (es ) sara . Siempre he admirado tu gran sensibilidad y tu lealtad.

  • george dijo:

    Gracias amaury por tan excelente articuo sobre sara, realmente extrañabamos tus escritos en estas paginas de cubadebate, tengo la certeza que el Señor mantiene a sara con su luz en la gloria.

  • Maribel dijo:

    Gracias muy hermoso, a Sara la vamos a extrañar siempre.

  • Tysan dijo:

    Amaury, me gustó mucho su escrito, hermoso, como ELLA se lo merece, siempre he pensado que USTED, silenciosamente, es muy cercano a nuestro pueblo.Gracias.

  • Mamayí dijo:

    He llorado leyéndote Amaury por lo que dices de Sara, me alegra escribieras de ella, créeme que busque tus declaraciones cuando perdimos a Vicente, que fue también un duro golpe a nuestra generación. Se te da muy bien escribir , deberías hacerlo con mas frecuencia. Saludos.

  • Daniel Noa Monzón dijo:

    Gracias, Amaury...por aparecer con esos bríos elegantes de siempre y sobre todo, por invocar la pureza de la amistad verdadera...esa que a veces resulta ideal pero que cuando se tiene, colma de dicha. Un abrazo fraterno, por traer el recuerdo imborrable e imperecedero de esa Sara que tanto cantó para Cuba y que nos hizo vibrar el alma al poner la suya en los cantos de la Revolución...que ustedes en la Nueva Trova llevaron por todo el Mundo como símbolo de Nuevos Tiempos.

  • Ale.H.H dijo:

    Hermosas y contagiosas palabras Amaury, sobre Sara que decir...., la escucho cantar y los pelos se me paran de punta, Sara fue una fuera de serie...

  • Rogelio Zarabozo dijo:

    MUCHAS GRACIAS POR ese hermoso artículo.

  • Niurka Sánchez dijo:

    Bello escrito, tan bello como ella. Gracias Amaury por no dejar pasar la fecha, siempre es lindo que se compartan los recuerdos. Sara siempre está.

  • Luis Marin dijo:

    Gracias Amaury por el sentido homenaje a la inigualable y querida Sara Gonzalez

  • Elena Sotolongo dijo:

    La sensibilidad extrema, y la manera de amar de Amaury Pérez, me llevo de nuevo hasta las lagrimas. Que hermosa manera de describir y de recordar a Sara‼️Debe ser un gran honor que un amigo te llegue a querer así. Y es un gran bendición que las emociones y las palabras fluyan desde su corazón con esa facilidad y belleza. ♥️

  • Robin dijo:

    Gracias Amaury por tan sentido homenaje. Estoy seguro que a partir de estas palabras tuyas algunos sentirán vergüenza de haberse burlado en las redes sociales de nuestra amada Sara González. Si Amaury, algunos canales de YouTube que se dicen representantes y voceros de un “movimiento contra el bloqueo” en Estados Unidos ofendieron a nuestra “Gorda” y barrieron el piso con su canción A los Héroes. Esa canción que tanto le gustaba a Fidel. !Que decepción, Amaury, cuando esos voceros y representantes de
    Puentes de Amor denigraron a Sara y ofendieron a una joven revolucionaria cubana! Cuánta rabia! Por eso Amaury, te agradezco o mejor dicho, te agradecemos, que la hayas vuelto a colocar ante nuestros ojos en el altar de la Patria que es el altar también de nuestra cultura. Esperemos que algún día como dijo el poeta “paguen su culpa los traidores” para que nunca más nos vuelvan a tocar a nuestra Sara, a tu Sara; a nuestra “Gorda”, a tu “Gorda”.
    Gracias otra vez, Amaury Pérez Vidal.

  • Regla dijo:

    Hermosas palabras, un poema para la inmensa Sara.

    • Regla dijo:

      Me sumo a lo que dijo mi tocaya, gracias, Amaury, por tu hermoso artículo, yo también te extraño en este foro...

  • ISMAEL dijo:

    Bello estilo para escribir tantos sentimientos de amor y amistad,hacia una extrordinaria y querida artista,gracias amaury por caracterizarnos una vez más a la Sara de todos los cubanos,eres genial,tus artículos se extrañan.

  • indocumentado300 dijo:

    Hay poesía en este merecido homenaje de Amaury a la inolvidable Sara.
    También hay bellos comentarios que demuestran la sensibilidad de nuestro pueblo. Gracias, Amaury, por hacer brotar esos sentimientos de los foristas.

  • Valdes Garcia Cecilio dijo:

    Amaury. Tremendo artículo. Honrar la amistad es un imperativo de estos tiempos. Gracia.
    Amigo, permitame llamarte a si, necesitamos, por los duros de estos tiempos, tu programa. Por favor vuelve con tu agudeza con nuevas entrevistas en con dos que se quieran basta. No espero repuesta de tu parte a este comentario, me conformo con que tengas en cuenta mi opinión. Sin más cvg

  • William dijo:

    Dichosos los que pudimos vivir su tiempo y oír su voz clara,fuerte,decisiva y siempre al lado de su pueblo que la quiere eternamente. Gracias, Amaury, por tus hermosas palabras

  • El Pane de Cuba dijo:

    Amaury.Bello escrito.Gran homenaje a Sara. La recuerdo un día a finales de la década de los 70 en Santiago de Cuba cerca de los estudios de grabación y al salir ella iba caminando con un grupo de otros artistas y al pasar cerca de mí la saludé y ella con ese espíritu jovial y sencillo me saludó.

  • Alejandro Greenidge Clark dijo:

    NUNCA ES TARDE PARA UN HOMENAJE
    SARA GONZÁLEZ, LA VOZ
    CANTOS DE MUJER, SIN IR MÁS LEJOS; (Clásicos) que con solo mencionar estos ejemplos bastaría para tenerla presente todo el tiempo; ataviada ella con ese temperamento cubanísimo que caló bien hondo en el sentir popular. El amor al terruño querido, a la música toda, a la Nueva Trova, al buen gusto; a los buenos amigos. Sin duda alguna, sus vibrantes interpretaciones en cualquier plaza donde actuó hicieron época difícil de olvidar: LOS COMANDOS DEL SILENCIO, GIRÓN LA VICTORIA, o cuando musicalizó poemas de Martí -inolvidable- o Guillén y nos deleitara una tarde en la UNEAC. Asimismo, AMOR DE MILLONES. Su paso por el Grupo de Experimentación Sonora del ICAIC, momentos cumbres de nuestro rico patrimonio musical que mi generación conserva con agrado. Cuánto trabajo para los estudiosos de la música en Cuba de ahora mismo, cuando se enfrenten a reescribir los apuntes que obligadamente irán incorporando con las voces que van cualificando nuestro mundo sonoro. Y es que el Panorama de la Música Cubana es tan vasto porque surgen como hermosos coralillos silvestres gracias a nuestra Política Cultural, un número exponencial de intérpretes incontestables. A nuestra Sara, hay que recordarla no solo por su entrega musical, sino también por su paso arrollador por las entregas de dramaturgia y humorismo inteligente en la época dorada que vivimos en las temporadas de Virulo, Carlos Luis y otros grandes de la escena en el Karl Marx que extrañamos tanto. A escasos diez años de su partida, la disfruto aún en lo alto del gran escenario concebido en la Plaza de la Revolución José Martí, entonando su icónico –a capella– (…) y eso me hace pensar que no han muerto al final, y que viven allí. Donde hay un hombre presto a luchar, a continuar… Se me eriza la piel con el recuerdo; y el imperativo deseo suyo de reposar en paz en las aguas que bañan nuestro emblemático malecón habanero que tanto amó.

  • Elena Sabina dijo:

    Excelente texto, como todo lo que escribes, tienes oro en la pluma.

  • Maria Montalvan dijo:

    Creo que muchos...los que coincidimos en esa época disfrutamos de su arte...la recuerdo también en su paso por el Teatro con Virulo.
    Hay personas que dejan en uno una huella imborrable. Tal es el caso ,también, de tu mamá, Amaury.

  • Victor Angel Fernandez dijo:

    Bello escrito. Solo una pregunta sobre estas lineas: "Siendo profundamente anti-dogmática y martiana jamás se dejó etiquetar como miembro de partido alguno, su signo político era La Patria y todo lo que de ella se deriva." O sea, que al ser Martí fundador del Partido Revolucionario Cubano, ella no hubiera sido martiana y de ese partido porque no era el simbolo politico de la Patria. ¿Tampoco hubiera comulgado con Mella o Rubén Martínez Villena? Ahora la onda es considerar que los no miembros del Partido son una especie de seres superiores.

  • Maria Cepeda dijo:

    Muy lindo los videos
    Sars fue es sera siempre SARA GONZALE,en EPD
    Dios la tenga en la Gloria siempre ......

  • Yrai dijo:

    Me encantan sus cronicas, y ella y el, sdos

  • Angélica dijo:

    Que bello escrito. Volví en sus palabras a mi niñez a las canciones que primero aprendí y canté...Sarita inolvidable..creo que todos de alguna manera nos sentimos abrazados así.

  • agustin dijo:

    Excelente testimonio.

  • Lazara dijo:

    Gracias Amaury, bella, amorosa y leal amistad, siempre hay alguna razón por la que de manera insospechada sale en una conversación o nos llega su recuerdo, soy Chicha Valdés, recibe mis saludos y afecto.

  • Mayra A. Martinez dijo:

    Hermoso reproducir el texto que Amaury nos dio para el libro armado entre un grupo de buenos amigos, "SARA GONZÁLEZ. Con apuros y paciencia", 1ra edición BAGUA/España 2014/2da ed. UNIÓN, Cuba 2017. Ya falta, y estará en alguna nube o quién sabe, Sigfredo Ariel, que apoyó en la realización de este título homenaje, tal vez junto con ella y Vicente, recordándonos "que el tiempo pasa...", pero que no haya olvido de tanto bueno vivido. 10 años ya!

  • Cristina Cruz Ranero dijo:

    Que hermosas palabras de Amaury recordando a Sara, una amistad verdadera que perdura después de la muerte. Bravo Amaury

  • Yanes Erasmo dijo:

    Muy lindo escrito para una excelente profesional y singular ser humano, eso es lo que nos hace grandes, la capacidad del reconocimiento a los demás y el amor y el respeto a la obra del resto de los humanos, por eso no entiendo de las intolerancias de algunos y mucho menos de las autosuficiencias. Cada cual tiene una misión en la vida y ella la cumplió. Su canción himno jamás la dejaré de escuchar.

Se han publicado 77 comentarios



Este sitio se reserva el derecho de la publicación de los comentarios. No se harán visibles aquellos que sean denigrantes, ofensivos, difamatorios, que estén fuera de contexto o atenten contra la dignidad de una persona o grupo social. Recomendamos brevedad en sus planteamientos.

Amaury Pérez Vidal

Amaury Pérez Vidal

Cantautor cubano. Fundador de la Nueva Trova. Ha conducido varios espacios exitosos en la televisión nacional. Ha escrito varias novelas y poemas.

Vea también