Redes sociales en el ojo del debate cubano, ¿cómo usarlas en medio de la polarización? (+ Podcast)
Las redes sociales ya no son sobre sitios webs, se tratan de experiencias. Ya no buscamos las noticias, ellas nos encuentran. La privacidad y el debate razonado han muerto y el social media los mató.
En Cuba, ¿estamos tan distante de lo que pasa en el mundo? ¿Podemos hablar de una polarización del debate en el escenario digital cubano? ¿Cómo combatir las fake news? Sobre el asunto, hablamos en El podcast de Cubadebate, en tiempos donde las provocaciones, las denuncias, y los medios contra la Isla incrementan la tensión en la opinión pública. Ejemplo, lo sucedido el 27 de enero frente al Ministerio de Cultura, de lo que se habla y comenta mucho.
Vía WhatsApp hemos contactado a varios especialistas que nos ofrecen su criterio del tema. Ellos son:
- Miguel Ernesto Gómez Masjuán, profesor de Periodismo Hipermedia y Jefe del Departamento de Periodismo en la Facultad de Comunicación de la Universidad de La Habana.
- Javier Gómez Sánchez, analista de medios de comunicación.
- Pedro Jorge Velázquez, estudiante de 5to de periodismo de la UCLV y bloquero en HorizontesBlog.
A partir de la emergencia de Internet y de nuevas tecnologías de comunicación e información, las fake news han proliferado a nivel mundial. Y Cuba, por supuesto, no escapa de ello. La divulgación de noticias falsas provocan un peligroso círculo de desinformación. Un fenómeno que se vuelve cada vez más peligroso y que influye de distintas maneras en las prácticas sociales y democráticas.
El podcast de Cubadebate hoy se centra en estas interrogantes. ¿Cómo ha impactado el proceso de informatización de la sociedad cubana, sobre todo, con la llegada de servicio de datos móviles en 2018? ¿Cuánto se ha polarizado el debate en redes sociales en los últimos tiempos? ¿Cuál ha sido la reacción desde el punto de vista mediático?
Escuche aquí
Las redes sociales son el presente de la comunicación, la manera qué tenemos de llegar a las más diversas audiencias. Pero hay riesgos y eso debemos tenerlo claro. Dejamos abierto el diálogo para sus comentarios.
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No podemos temer a las redes sociales y menos a las que tergiversan nuestra realidad. Se impone presentar resultados de nuestro quehacer diario, de nuestros éxitos y reconocer que tenemos que seguir avanzando aprovechando lo mejor de otras experiencias. El bienestar del pueblo es el logro fundamental que tenemos que ser capaces de mostrar al mundo.
La tolerancia con los criterios va de la mano del desarrollo social q tenga la nación. Hay un dicho en periodismo q dice algo así: no estoy de acuerdo con lo q tú dices pero daría la vida por entenderte. El respeto hacia la diferencia de criterios es esencial. Si no se tiene nada raro q esconder no se le debe temer al medio q lo difunde. Saludos
Las redes sociales en Cuba y el mundo se utilizan mayor mente para enfrentarse en discusiones que no ayudan,desde luego siempre que se hagan para imponer criterios que nada tienen que ver con realidades.Los que odian al sistema político en cuba se aíslan al ponerse al lado de la política reaccionaria del gobierno americano.las redes sociales deben ser para que los comentarios ayuden a allar las verdad y no los que unos piensan que solo ellos tienen el poder.Los enemigos de Cuba,los apátridas y con los que ellos se relacionan desde la distancia nunca podrán alcanzar sus objetivos.
Nunca ha sido bueno mezclar las cosas Luis Manuel. Las redes sociales nos abren un mundo d posibilidades. Depende d cada qien el uso q le de. Depende d cada qien en q creer o no creer. Ojala hubieran llegado antes. Probablemente estuvieramos mucho mejor q ahora.
chicos
han visto estos dias la pelicula de la lucha contra Wall Street. las acciones del mercado y valores , la gente luchando contra los fondos buitres y de inversiones que manipulan el mercado. esos que hacen trucos para sacar provecho hasta de las desgracias
y la gente se organizaron en las redes sociales
tremendo show
se los recomiendo
El acceso a Internet del público cubano, era más que necesario para situarnos a la par del mundo, aunque aún muy distante para algunos por no disponer de equipos de cómputo o un simple móvil, y limitado para otros por los altos precios.
En sentido general y precisamente por la limitante en datos móviles, la mayor parte de las personas se centran en las redes sociales, como vía de comunicación o búsqueda de información, sin buscar en sitios más serios y confiables.
Las noticias falsas siempre estarán presentes, y podrán o no crear desinformación a sus lectores, en la medida que estos estén en mayor o menor grado informados. El problema está que hoy en las redes sociales circulan noticias muchas veces verdaderas y que la prensa oficial cubana no las tiene, o no las informa, y esto hace que las personas se interesen por ellas.
Esto hace que si te publican una noticia falsa y no tienes la información que le haga contrapartida te la puedes creer.
Recordemos que en Cuba muchísimas de estas personas no leen un periódico o ven un noticiario, y muchas veces es motivado por un exceso de triunfalismo o de noticias poco atractivas para una gran parte del público que difunden estos medios.
La censura informativa aún presente en muchos de nuestros medios y periodistas no nos hace ningún bien, todo lo contrario, le estamos entregando las armas al oponente. La verdad por dura que sea en ocasiones es la verdad, y si no la decimos nosotros, las dirán otros, con tintes de fake news incluido.
Manuel, la prensa escrita en Cuba apenas trae noticias ya
Hay una alternativa: desenmascarar siempre las mentiras y manipulaciones, y a sus actores, hasta que estén totalmente desacreditados, faltos de credibilidad. Y mucho estudio, mucha capacidad de razonamiento y habilidades para discernir entre la verdad y la mentira, entre lo justo y correcto, y lo que va contra el bien de la Patria. Esto consume muchas energías y tiempo, pero no hay otra posibilidad. Las redes llegaron para quedarse.
En el centro de este de debate, me llama la atención un articulo aparecido en Cubasi, con fecha 29 de enero de 2021, cuyas ultimas lineas dicen: "Si una cosa real dice Lanier en su libro es que debemos abandonar las redes sociales, pero no solo por sus famosas diez razones. Irnos y no volver jamás."
Con 726 lecturas.
Si el autor propone abandonar las redes sociales entonces ya dejo de creer en su verdad y en su libro. Pues como seres libres tenemos el derecho de usarlas a pesar de sus pro y sus contras. Tal vez el autor busca que los cubanos no lean entre tantas mentiras las tantas otras verdades que se publican
Yo no le temo porque son excelentes pero depende el uso que les das .
De acuerdo con Usted. Quizás sea también el único medio eficaz para que la población denuncie con evidencia. Gracias a ellas, se resolvió el problema del edificio y el club imágenes, de los omnibus cobrando la barbaridad a pacientes y acompañantes oncológicos en Villa Clara, se hicieron ajustes en las tarifas eléctricas, etc. Yo les veo mucha más utilidad que cosas negativas. Es el mundo real y no podemos estar de espaldas a ese mundo. Tampoco deshabilitar la internet cuando algo suceda. Es un servicio pagado y bien caro son los paquetes.
En mi opinión el principal peligro está en que la mayoría de las personas cubanas , revolucionarias trabajadoras, y por supuesto que apoyan el sistema actual no son las que están «pegadas» a las redes sociales, y a todo tipo de debates y pueden tener sus propios criterios de los cambios necesarios, que manifiestan por vías más convencionales.Las tendencias de opiniones en las redes no son un único y verdadero indicador.
Es muy caro el conectarse a Internet. Hay países que al adquir una línea, ya tienes como valor agregado el Internet. Pero acá es cara la línea, caro el equipo y caro el servicio
Yo doy jubilada cuando cobro cargo el paquete más económico y no más. Cargo 1 vez al mes
Buenos días,
He escuchado atentamente este podcast y aporta elementos muy interesantes sobre el impacto de las fake news en las personas y el desinterés generalizado en corroborar las "noticias" que leemos o escuchamos a diario en las redes sociales y otros medios de comunicación.
Después de interiorizar lo que se comenta en el podcast, me gustaría saber qué proponen los especialistas para verificar las informaciones que se publican en Facebook, cubadebate.cu o el noticiero, de forma que podamos aprender a discernir entre fake o no fake, partiendo del hecho de que siempre debemos corroborar las noticias, independientemente de su fuente.
Muchas gracias
Pues mire, una pregunta interesante. Ud.tendria que leer al menos quince periódicos diferentes, que abarcaran todo el espectro político, desde la derecha a la izquierda, y en al menos dos idiomas. Después podrá discernir, en función de su intelecto. Gracias.
Más o menos... Porque después de leer 15 medios en varios idiomas, al final, elegimos lo que mejor se acomoda a nuestra forma de pensar.
Así mismo es. Con frecuencia leo Cubadebate, El mundo, El país, Daily Mail, The Sun uk, Clarín, El Nuevo Herald, CNN, Fox News, Russia Today, Sputnik, Telesur. Es increíble ver la cultura que adquiere una persona en varios temas y saco yo mismo mis conclusiones en temas políticos, deportivos, culturales. Esa libertad informativa permite crecer como ser humano.
Vivo orgulloso de ser cubano y vivir aquí en Cuba. Me gusta leer los trabajos donde se exponen nuestras inquietudes y se habla de todo el heroísmo de nuestro pueblo.
También publico mis trabajos siempre desde ese punto de vista. Me gusta hablar de todo lo virtuoso y bueno que logramos cada día... Los agradecidos hablamos de la luz...
Seguir adelante es nuestro mérito.
Estudios demuestran que el tráfico de correo corporativo, el 80% no es de contenido corporativo. Si traspolamos podemos concluir que el tráfico de contenido en las redes todo los aplaudimos pero el 80% no sirve para nada, no son más que cosas triviales, falsedades para público poco instruido. Hay narrativas interesantes como los memes, por ejemplo, que es un excelente medio de comunicación.
El tráfico en las redes es el reflejo de la población que las utiliza. Busque páginas serias, amigos cultos e inteligentes, instituciones de reconocido prestigio y verá cuánto puede aprender, investigar y auto superarse, además de compartir con otros como usted. Si el 80 % es banal, súmese al 20 % restante.
Una persona con movil en mano, puede informar o desinformar que un órgano de prensa con toda su emplomania.
Las acciones fisicas no tienen, ninguna contindencia, es más, estas son sustituidas por la palabra, que falseada o manipulado hace mella en personas poco preparadas o con sesgo de interes.
Pienso que las redes sociales deben usarse como a cada quien le venga en gana, siempre que no se afecte ni ofenda a los otros. El libre albedrío con respeto.
Hoy lo que tenemos que hacer es desenmascarar, como lo hizo la televisión Cubana , a los personajes que la utilizan sin el mas mínimo respeto a los demas, a quienes pretenden crear disturbios y desorden público para llamar la atención, sobre todo de quienes les pagan por ser mercenarios, a quienes sin una gota de orgullo se rien y provocan que otros se rian de nuestros problemas. A todos estos repugnantes de las redes sociales, que en nada ayudan para que nuestro pais continue trabajando por lograr el bienestar para todos, que les caiga todo el peso de la ley.
Me refiero en el final a los dueños y creadores de las REDES SOCIALES.
Como combatir las fake news
Contamos con una Universidad de Ciencias Informaticas la cual puede crear un grupo de respuesta rápida para contraatacar estas noticias falsas pero para ello tiene que haber acceso a la información real ya que con consignas no se resuelve nada.
La desinformacion se combate con información rápida y precisa y en estos tiempos hemos carecido de eso, hoy en el ojo del huracán nos damos cuenta que el secretismo y la censura no ayudan en nada, la población necesita información y si los medios nacionales no la dan pues muchos suplen esa falta en las redes sociales. La tarea es muy difícil pero si se quiere se puede, nuestra lucha hoy es digital.
Disculpe pero la UCI está para formar Ingenieros muy necesarios en la informatización de la sociedad, crear proyectos innovadores, resolver cuestiones en las que todavía estamos bien atrasados. Utilizarlos para combatir las fake news en las redes sociales es subutilizarlos, eso no debe ser trabajo de un ingeniero informático.
¿ Su comentario ha sido recibido.= Lazaro El profe dijo?
Me gusta ver noticias en Cuba debate es una de las formas noticiarias que mantiene información sobre el mundo de esa manera no gasto mucho dinero porque en un mes e gastado lo que en un año no gasto
Buen día tema muy polémico y donde todos somos iguales dada la horizontalidad de la comunicación, hoy resulta una amenaza para la izquierda y la revolución, ya que entre planes de seguridad informática, regulaciones y leyes a los cubanos revolucionarios les ha sido por mucho tiempo una zona oscura y cuestionable, los jóvenes por su cuenta han inundado la red menos preparados políticamente para evaluar y hacer frente a las campañas, así la contrarrevolución desde miami pone sus reglas y desinformación y aquí un montón le hacen el juego, el reto de los científicos médicos será vencer la Covid, no veo aún los científicos políticos e ideológicos q nos salven de este fenómeno de las redes sociales que también llegó para quedarse sldos
CONSIDERO HAY QUE COMBATIR, LOS REVOLUCIONARIOS, A LOS ANTICUBANOS QUE UTILIZAN LAS REDES SOCIALES EN MENTIRAS, BOLAS Y OTRAS ACCIONES PARA CREAR PROBLEMAS, HABLANDO CLARO CONTRARREVOLUCIÓN. tENEMOS QUE COMBATIR A LOS QUE RECIBEN DÓLARES POR HACERLO. cON CUBA NO SE METAN, LA REVOLUCIÓN ES MÁS FUERTE QUE ELLOS, PARECE NO SE DAN CUENTA.
Yo no necesito y no tolero que alguien me diga que es o no es fake news,yo tengo mi propio cerebro y la herramienta del internet para corroborar en diferentes fuentes no en una sola y yo mismo saco mis propias concluciones no las que alguien me plantee como veraz ,porque ,¿Cómo puedo creer a quien me diga que esto o aquello es o no fake sea del medio que sea de izquierda o derecha?? Creo que con solo consultar varias fuentes la verdad te va a golpear en el pecho y la mente invariablemente y esa verdad se impone provenga de la fuente que sea,la verdad suena a verdad y la mentira a la mentira.
Internet estremece los cimientos de los medios tradicionales. Rompe paradigmas de comunicación y hace años terminó con el “nosotros hablamos, ustedes escuchan”. Esos cambios requieren el desarrollo de habilidades. No basta con impulsos, páginas oficiales de medios ni instituciones.
Todo esto forma también una especie de selva digital en lo ideológico, campo de batalla o cancha deportiva moderna, en que los internautas más inteligentes, preparados, intencionales, rápidos y con los recursos materiales indispensables tienen ventaja. Muchas de las estrategias políticas tienen como escenarios principales esas plataformas, con gran influencia en la conciencia de la gente, por eso toda la ética y formación moral y profesional de los ciudadanos será siempre base importante de cualquier comportamiento en las plataformas hipermediales.
Más allá de lo novedoso tecnológicamente, esos espacios virtuales se sustentan en particularidades de las relaciones entre los seres humanos, por eso varios investigadores, incluidos Samuel Martínez, José Luis Orihuela e Ignacio Ramonet, coinciden en definirlos como comunidades digitales.
Verdaderamente los cibernautas se agrupan según gustos, conversan mediante chats y foros e intercambian fotografías y videos. Con frecuencia, planifican encuentros en espacios físicos y hasta acciones en beneficio o no de la sociedad.
El carácter empírico o no de internautas y la atracción por el intercambio y la información caracterizan al nuevo entorno. Lo cultural y los recursos tecnológicos influyen en la fuerza que pudiera alcanzarse. Internet constituye un sistema complejo, que no alcanza total autorregulación porque es sensible a la información de medios tradicionales y de la sociedad en general.
Debemos estar conscientes de que suministrar constantemente información personal, incluida la sicológica, implica muchos riesgos, pues facilitamos nuestra propia manipulación con fines económicos, políticos o de otro tipo. Internet es también una mega empresa y una plataforma sin precedentes para recopilar datos y lograr grandes impactos en la política y la cultura. Es preocupante que sus hilos sean dirigidos mayormente desde EE.UU (donde fue creada y permanecen la mayor cantidad de servidores y otros soportes), cuyos gobernantes reconocen el propósito de terminar con la Revolución cubana y destinan cada año millones de dólares a la subversión con ese fin, especialmente mediante las redes.
¿Cuáles son las peculiaridades en nuestro país? ¿Cuánto se potencia la participación ciudadana en esos espacios? ¿Cuáles son las dinámicas de debate? ¿Cuánto más podemos aprovechar las particularidades de los blogs y las redes sociales para tomar decisiones y trazar estrategias gubernamentales, para construir entre todos y enriquecer las agendas mediáticas y políticas? ¿Cómo contrarrestar la campaña de descrédito e intimidación que se impulsa contra Cuba especialmente desde Estados Unidos?
La navegación en el ciberespacio ya forma parte de la cotidianidad de las mayorías aquí. Los niveles de acceso rebasan el 80 % de la población. Las personas se conectan mediante redes wifi, datos móviles, navegación en escuelas, hogares y centros laborales…
Verdaderamente, Internet pudiera contribuir a la construcción de sociedades más democráticas, como socializadora de experiencias, expresión de ideas cotidianas y de sentimientos de los pueblos, reveladora de la opinión pública, especie de imprenta y papel en época digital, en manos de muchos.
Varios internautas exponen sus criterios y refieren su desacuerdo con políticas gubernamentales mediante análisis profundos y pleno conocimiento de las problemáticas o desde el ímpetu, la inconformidad y el propósito de crear caos. Economistas, juristas, cineastas, historiadores del arte, ingenieros, campesinos, amas de casa, literatos… están en esa amalgama emitiendo y recibiendo ideas, informaciones, historias...
Pero cuidado, esa aparente democracia suele ser espejismo, pues esas plataformas y redes tienen sus propios algoritmos de funcionamiento, los cuales suelen privilegiar la hegemonía capitalista, con mayor alcance de sus contenidos. Quienes tengan más dinero poseen también una ventaja indudable con la posibilidad de pagar para que sus publicaciones sean vistas por millones de internautas con las edades preferidas, países y hasta ciudades determinadas. Sin embargo, otros contenidos pueden ser encerrados en burbujas digitales específicas.
Con buscadores como Google, pasa similar al poderse pagar por el posicionamiento web. Así, por ejemplo, un post cualquiera desde otra nación podría ser configurado para que sea visto por millones de personas en diferentes provincias de Cuba mientras que otro con una visión diferente del suceso podría ser limitado hasta el punto de ser prácticamente invisible.
En la situación de nuestro archipiélago influyen muchos aspectos desfavorables, incluida la deficiente infraestructura. Otra de las desventajas es que el posicionamiento de nuestros sitios webs, páginas y perfiles es solamente natural, o sea fruto del trabajo, por eso resulta fundamental comprender mejor las dinámicas de las diferentes plataformas, conocer su funcionamiento y las maneras de llegar a sectores de internautas más diversos, a partir de lo atractivo de las publicaciones y alternativas sin pagos para rebasar nuestras burbujas, en lo cual las formas creativas y sugerentes son primordiales.
El país enfrenta obstáculos adicionales. Rema desde hace más de medio siglo contra problemas de diversas índoles y recibe altas dosis de castigo por su herejía revolucionaria. Como parte del bloqueo económico, desde 1962 se le prohibió el acceso a las telecomunicaciones y a equipos de computación de cualquier compañía o subsidiaria estadounidense. Solo a partir de 1996, se permitió el uso de Internet con fines de penetración ideológica y subversiva, como resultado de la Ley Torricelli. A eso se unen dificultades económicas para invertir en grandes dimensiones en la tecnología y el acceso a la red, más allá de todos los avances.
Tenemos mucho por hacer. Aquí ninguna página o perfil institucional en redes llega, por ejemplo, al millón de seguidores. A eso sumamos que muchos de esos contenidos suelen lograr débil alcance en otras regiones, y son consumidos casi totalmente por el público cubano, aunque resulta justo reconocer las buenas experiencias impulsadas en el sector de la cultura, especialmente durante los meses más recientes, con conciertos on-line y una presencia más intencional en el mundo hipermedia.
Debemos continuar diseñando más y mejores campañas comunicacionales también para el exterior, realizar más alianzas con artistas y organizaciones de otras partes del mundo que nos permitan llegar más lejos. Es preciso compartir más contenidos en otros idiomas, además del Español, analizar estadísticas y readaptar el trabajo en función de lo que queremos, tener en cuenta los horarios más pertinentes para publicar según la hora a la que acceden nuestros públicos… En correspondencia con nuestros objetivos se pueden tener en cuenta otros elementos como sus edades, sexo, ciudad donde residen…, información que brindan con facilidad las administraciones de páginas en las redes.
En todo ese contexto la fuerza de los argumentos y las formas atractivas de presentar los contenidos son indispensables. Desafortunadamente en el caso cubano, suelen apreciarse dos bandos claramente opuestos, en el que algunos responden, sobre todo, con ofensas y visiones catastróficas y otros con criterios triunfalistas. Algunos hasta reciben dinero de fondos federales de EE.UU para lanzar su veneno.
Proyectos gestionados y sustentados económicamente desde el exterior, incluidos diferentes sitios webs con sus correspondientes extensiones en redes sociales, mantienen una activa labor alejados de la ética que debe acompañar siempre el ejercicio periodístico y comunicacional en general. Empeñados en mostrar una Cuba negra, tergiversan la realidad y presentan partes hiperbolizadas en su afán de cumplir una agenda impuesta sobre todo desde aquella nación norteña.
Son muchos los ejemplos de mentiras, ofensas y hasta amenazas en las redes contra líderes, artistas u otros profesionales. Nadie tiene el derecho de asumir ese tipo de actitudes en plataformas digitales, como tampoco en espacios físicos. La crítica, el debate o el criterio diferente nunca debieran ser confundidos con la bajeza ni el propósito de dañar.
Poco a poco, deberán ser más crecientes las estrategias de participación, gobierno y control popular en línea aquí, lo cual tendrá que ser acompañado por mayor infraestructura y un pensamiento más distante de lo tradicional.
Las ideas y los modos de hacer deben seguir renovándose, según los nuevos retos. El continuar atados, de forma excesiva, a ciertos convencionalismos es negar las nuevas potencialidades. La web y todo lo que implica se unen a viejos desafíos, que exigen pasos seguros, pero valientes. Tampoco se trata de intentar correr, sin tener la base necesaria.
Resulta esencial formar una mayor conciencia crítica sobre las dinámicas y formas de funcionamiento de las redes sociales, lo cual debe comenzar desde edades tempranas. Nuestros planes de estudios y todo el sistema de enseñanza en la nación debieran tener en cuenta esos elementos.
Conscientes de las campañas realizadas desde esas plataformas en contra del país, se necesita un protagonismo siempre creciente de los intelectuales, artistas, maestros, profesores universitarios, másteres y doctores en ciencias, periodistas, historiadores…, que aporten con sus criterios. Los medios tradicionales, con gran impacto en la sociedad, deben mostrar análisis cada vez más coherentes y desenmascarar con inmediatez los shows que suelen montarse de manera intencionada en esos espacios contra Cuba y algunos de sus hijos.
Aquí, como en todo el mundo, resulta necesaria la implementación de leyes para sancionar conductas en el entorno digital, teniendo en cuenta que las restricciones de las propias redes suelen ser indefinibles en muchos casos o demasiado generales. El hecho de que los comportamientos ocurran en esos espacios no exime a nadie de cumplir la ley en su Nación–Estado. Si bien al principio, muchos defendieron el criterio de que el ciberespacio sería capaz de conformar su propia estructura regulatoria con eficacia, no ha sido así, en cierta medida por las dinámicas de funcionamiento que las caracterizan.
Desde 1998, el investigador Jack Goldsmith indicó que los problemas legales planteados en Internet son en esencia iguales a los presentes en el espacio físico, los que además han sido solucionados por el campo jurídico, por lo tanto el tratamiento no debe ser diferente. En ese sentido varias naciones tienen sus marcos regulatorios definidos. ¿Acaso se permitiría un crimen, solo porque sea mediante Internet? ¿Por qué permitir entonces ofensas, amenazas y ataques a las personas o lo que representan, lo cual podría provocar daños de diversas índoles? Cualquier paso en ese sentido debe ser con mucha inteligencia, flexibilidad y fruto de la construcción de las amplias mayorías.
En las redes pululan los jóvenes y adolescentes. A los códigos hipermediales se suman también los predominantes en esas etapas, elementos importantes a la hora de concebir y compartir contenidos. Algunos internautas reflejan lo personal casi sin límites, de manera consciente o no, al compartir o consumir imágenes, música, videos…, sus momentos o motivos de más alegría y tristeza, y a la vez suelen segmentarse a partir de esos gustos, amigos en común y actitudes como en comunidades, a veces con muchas de las mismas personas que comparten en espacios físicos. Las explicaciones de por qué ocurre eso están en las propias dinámicas sociales y en los aspectos generales y particulares de los individuos. Facebook, por ejemplo, para muchos suele convertirse en una especie de barrio digital, con todo lo que eso implica en cuanto a comportamientos, reacciones, opiniones…
Resaltamos que los criterios de los ciudadanos en el mundo hipermedial, incluidos no solo los comentarios, deben ser tenidos en cuenta para el desarrollo de políticas en el país o su perfeccionamiento. Es posible continuar incrementando los canales de comunicación entre los diferentes niveles de dirección y los ciudadanos.
Para Cuba, Internet es también la posibilidad de aplastar mentiras y mostrar a internautas de todo el mundo su realidad. Eso no se logra con sólo estar. Es importante situarse en la parte superior del iceberg.
Necesitamos articular estrategias a nivel de país con ese objetivo, incluyendo el aporte de la mayor cantidad de personas posibles. La izquierda internacional tiene también en las redes una oportunidad tremenda para fortalecer vínculos y trazar caminos de conjunto. Líderes de movimientos sociales y otras personas progresistas de todo el planeta pudieran mantenerse comunicados por esa vía e impulsar más acciones colectivas. Sin dudas Internet es fuente o reflejo de realidades, pero también de espejismos construidos en correspondencia con objetivos específicos, de lo cual debemos estar conscientes siempre.
Las redes sociales ya forman parte de la vida y ahora mucho más la necesitamos en tiempos de covid 19
Estoy segura que ETECSA puede mejorar para que nosotros los cubanos podamos tener un acceso a internet sin precios execivos
gracias por el material, es de mucha utilidad. Pienso que es imprescindible fortalecer la educación, la capacitación de nuestro pueblo en temas como este, promover concursos relacionados con estos temas, con el de las mentiras falas en particular. En los programas de estudio incluirlo, para darle el mejor uso a las plataformas digitales, que inevitablemente y por suerte forman parte del desarrollo de esta civilización
El problema no son las redes sociales, cada situación o evento tiene tres puntos de vista 1- la versión de una de las partes, 2- la versión de la otra parte y 3- la verdad, pero para todo tipo de juicio se deben oír las dos partes y la verdad siempre prevalecerá eso es un hecho la mentira tiene patas cortas, pero no podemos sensurar una de las partes y contar la historia en un solo color, tenemos que oír las dos partes y que cada cual saque sus conclusiones, eso va en la capacidad del ser humano de dejarse engañar por noticias fake, pero sensurar las noticias es también de mentes débiles y con miedo.
Ocurre frecuentemente que vemos noticias en redes , relacionada con Cuba, de las cuales no se ha dicho acá nada, y entonces a los dos o tres días aparece en el NTV o la prensa. Hay que dar rápido la noticia y después cada cual viendo la misma desde varios puntos de vista, saca sus propias conclusiones
De sierta forma. Deberían. Cuba abrir e mas. Al mundo pero al que tener en cuenta que se tiene que tener una actitud responsable ante las redes sociales. Y fomentar. Que cuba puede desarrollar mas la infraestructura para que. Mejore las conexiones ..también enseñar a nuestros estudiantes de edades mas tempranas. Los riesgos y ventajas del uso de las redes sociales.
Varios países que no son pocos, tiene cierto control sobre las redes sociales, unos más y otros con reglas menos estrictas, pero no las dejan sueltas así nada más, los países occidentales que se dicen democráticos, a los mejor no las controlan como quien dice, pero las espían, bastantes noticias sobre el asunto de vez en cuando salen a relucir, nosotros no podemos pecar de ingenuos y créenos que debemos dejarlas porque es un sinónimo de libertad, nada más falso, puede haber libertad pero no libertinaje que muy diferente. Miren les recuerdo una vez más la fábula de Esopo que trata sobre la lengua, quien la conozca estará de acuerdo conmigo de que lo mismo sirve para cosas buenas y como para cosas malas. Hay que tomar medidas sobre esto, crear nuestro propio Facebook, nuestro propio WhatsApp, tener nuestro propio Amazon, en fin, ser autosuficientes también en eso.
Señor, eso que usted escribe ni es realista ni tiene sentido, se puede intentar copiar algo pero la mayoría de las veces la gente sigue comprando la versión original o que planea que hagamos un nuevo internet y que comencemos a fabricar servidores.
Así que tu propio Amazon. En que país usted vive. Mira a ver con qué facilidad compras algo tan sencillo como el pan. Si se sigue su consejo mejor es encerrarse, estilo Corea del Norte.
Eso no es ni realista ,ni posible de hacer , uno puede intentar copiar algo pero la mayoría de la veces las personas siguen comprando la versión original y al final se pierde credibilidad y recursos, o que propone que hagamos un nuevo internet y que empecemos a fabricar servidores, uno tiene que ser consciente de su realidad
Las redes sociales, efectivamente, están aquí para siempre. Es verdad que tienen sus peligros. Pueden amplificar a un loco y hasta llevarlo a ser presidente. Pueden estafar a mucha gente honesta con noticias falsas. Pueden engrandecer en personas antisociales el odio. Las personas con bajo nivel cultural son manipuladas fácilmente (bueno y a veces hasta los de más nivel). Algunos de sus mismos inventores hoy le temen y recomiendan apartarse de ellas.
Pero esas mismas redes han propiciado la libertad de expresión, sirven mucho en aquellos casos cuando los gobiernos tratan de amordazar la opinión pública, ayudan a movilizar a las masas en su lucha por algunos derechos. Actualmente los gobiernos tienen que tomar en cuenta las redes y eso los obliga a ser más cuidadosos que lo que eran antes y eso es bueno para los ciudadanos.
En Cuba pasa lo mismo que pasa en otras partes del mundo. Aquellos que se sienten excluidos, buscan en las redes y medios alternativos lo que no encuentran en los medios oficiales. Pero en Cuba nos distinguimos por la forma en que se trata a esas alternativas. Convencidos de que el mundo es en blanco y negro toda disensión es tildada de traición y los que proponen cualquier otra opción no prevista son mercenarios. Esos medios alternativos son acusados de no dar participación en ellos a los defensores de la versión oficial. ¿ Pero, los medios oficiales dan participación en sus publicaciones a los que disienten ya sean artistas, economistas, militares, ...etc ?
Yo, personalmente, no soy amigo de Facebook ni de otras redes, no me gusta que me estén enviando notificaciones a cada rato, no me gusta tener que ver 10 tonterías y hasta ofensas para hallar un mensaje importante y no me gusta que mi información personal circule por el mundo como un trapo, pero he tenido que optar por usar Facebook cuando quiero opinar en Cubadebate pues aquí no publican la mayoría de mis opiniones aunque no son "denigrantes, ofensivos, difamatorios, ni estén fuera de contexto ni atenten contra la dignidad de ninguna persona o grupo social". Por suerte la mano del censor no llega a Facebook ni Tweeter. En definitiva la gente lee más Facebook que Cubadebate. Ojalá publiquen este comentario y el que no esté de acuerdo que escriba su versión y busquemos la verdad sin llegar a Facebook.
Gracias
Muchos revolucionarios con suficiente preparacion profesional y politica, con interes de defender la patria en el campo de las ideas, la INTERNET llega hasta ahi hasta la misma PC conectada a la red , las intituciones pagan una cuota fija por su uso , pero no se nos autoriza, solo a determaindas cargos como comercial y cuadros princiaples que su responsabiliadades les limita de tiempo para participar en estos debates
Los que trabajan en areas funcionales, o los niveles jerarquitos mas bajo de la base de la piramide donde estan los que mas pueden participar del debate politico se les niega el acceso a INTERNET
Las redes sociales son algo muy importantes, esa es la teoría, lo esperado, pero lamentablemente no es del todo así, es mi opinión, yo a veces las llanos redes antisociales, y no me voy a meter en asuntos políticos, hablo de cómo esas redes se han desvirtuado y han degenerado en un monstruo, que lejos de socializar, aleja a las personas de sus familias, del mundo real, y las divide por sus creencias, preferencias, etc., aparte,cada vez se usan para difundir más fakenews, pornográfico, radicalismo, llamados a la violencia y al odio, otro punto es ese que se atribuyen los dueños de las redes de excluir personas, instituciones, pensemos en Cubadebate, Donald Trump, etc... en fin, creo que las redes son algo bueno, un logro de l humanidad de este siglo, pero deben controlarse, debe haber reglas, códigos de ética. respeto, en fin buen uso de ellas.
Recuerdo con mucha añoranza los años de mi niñez y posterior juventud cuando no existían los móviles, la TV en escasas casas, pocos radios y ni hablar de redes sociales, solo tenía para mi instrucción política e ideológica un libro que precisamente se llama así " Instrucción política revolucionaria", unos profesores que nos maravillaban con sus clases y nos profundizaban los conocimientos hablándonos de los ejemplos más puros y profundos de nuestros héroes y mártires, Martí, Maceo, Juan gualberto Gómez, Carlos Manuel, etc, más tarde Fidel, Che, Camilo y con ellos una lista de patriotas vivos y muertos y al final pasajes de la lucha revolucionaria desde Atuey, pasando por el partido revolucionario cubano, Mella, Baliño, El Moncada, La historia me absolverá, El gramma, Alegría de Pío que maestros y profesores aquellos, como los queríamos, los admirabamos y respetabamos, hoy con una tecnología tan importante como necesaria como son los móviles y las redes sociales no podemos olvidar a aquellos maestros y profesores, no podemos olvidar ni por un segundo aquel querido libro Instrucción Política Revolucionaria.