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Con las dos manos en el fuego

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Militares en Río de Janeiro. Foto tomada de El Observador.

Hay mucho que analizar en la intervención militar decretada por Michel Temer en la provincia de Río de Janeiro. Teóricamente, se intervino solamente en lo que se refiere a seguridad pública, a raíz de la explosión de violencia. Sin embargo, hay mucho más.

Para empezar, a lo largo de los últimos nueve años y medio las fuerzas armadas, en especial el ejército, intervinieron 12 veces en Río, especialmente en la capital. Pero lo hicieron siempre en situaciones puntuales, a pedidos del gobernador provincial de turno y siempre en conjunto con las fuerzas locales de seguridad. Los resultados han sido ínfimos, y las acciones dejaron, principalmente entre los moradores de las favelas, un sentimiento –justificado, a propósito– de violencia y humillación.

Ahora, es muy distinto: al nombrar un general –Walter Braga Netto– como interventor en todo lo que se refiere a la seguridad pública, el decreto de Temer deja bajo su control la policía civil (judicial e investigativa), la policía militar (vigilancia y actuación callejera), el sistema penitenciario, las inteligencias policiales y hasta el cuerpo de bomberos.

Y más: Braga Netto no se reportará al gobernador Luis Fernando Pezão, pero directamente al ministro de Defensa, Raul Jungmann, y al general-jefe de seguridad nacional, Sergio Etchegoyen. El mismo y muy inepto, inoperante e incompetente gobernador provincial reconoció ayer que su carrera ‘termina aquí’.

El general Braga Netto podrá nombrar, cesar, alterar o lo que quiera en toda la estructura de personal de seguridad pública. Podrá, y ciertamente lo hará, determinar acciones de represión en los bastiones del narcotráfico, que controla prácticamente todas las más de mil favelas de la ciudad, además de implantar medidas en la provincia, también bastante afectada por la disputa de territorios entre distintos bandos de traficantes.

La segunda más rica y poblada provincia brasileña, y principalmente su capital, especie de vidriera del país a los ojos del mundo, pasa a tener, concretamente, una intervención militar. Y hay un nuevo poder: el ejército controlará todo el cuerpo de seguridad de la provincia y además un gordo puñado de tropas militares, que realmente decidirá qué y cuándo hacer algo. Es una medida inédita, de especial gravedad y que seguramente será de escasísima utilidad. Los soldados del ejército son entrenados para combatir enemigos, no para investigar y efectuar prisiones. Eso, para no mencionar que en su abrumadora mayoría desconocen no solo la ciudad de Río, como los callejones y vericuetos de los cerros controlados por pandillas muy bien armadas y que poco o nada tienen que perder.

Prácticamente en unísono, los más prestigiados y respetados estudiosos del tema de la seguridad pública en Río se manifestaron de manera contundente contra la iniciativa de Temer. El español Ignacio Cano, que desde hace décadas estudia el tema, fue sucinto: “Es otro paso más en la dirección de siempre. Sacraliza el mito de que la solución pasa por el ejército, y que la militarización es la salida”. Su colega de oficio, la socióloga brasileña Julita Lemgruber, coincide en la ineficacia de la intervención.  En un cuadro complejo como el de la política brasileña, con un gobierno nacional que además de ilegítimo es ineficaz, la situación de Río es especialmente grave.

Literalmente, la provincia está en quiebra. La mitad de los vehículos de la policía están parados por falta de mantenimiento. Los sueldos del sector están siendo pagados con un retraso medio de dos meses. Los chalecos antibalas están, en su mayoría, fuera del plazo de validad. Mientras, el armamento de los traficantes es de última generación y supera, en poder, el de las fuerzas de seguridad.

Todo eso, sin embargo, no hace de Río un caso único en Brasil: la violencia y la inseguridad se extienden por muchas otras provincias, inclusive con un índice de terror mayor que el registrado aquí.

¿Por qué, entonces, la intervención militar exclusiva? Para empezar, por la visibilidad y por la campaña incesante de los grandes medios de comunicación, otra vez con la TV Globo a la cabeza. Ahora mismo, durante el carnaval, la emisora mostró la alegría de la fiesta en todas las capitales del país, pero concentró en Río las imágenes de violencia.

Y, además, porque Temer calculó que, al adoptar una medida que agradará a las clases medias y tendrá impacto en los sectores más conservadores del país, podrá provocar algún aumento en su casi nula popularidad. Y, por fin, una razón concreta: mientras haya alguna intervención federal donde sea en el país, ninguna enmienda constitucional podrá ser aprobada en el Congreso.

En el fondo, de eso se trata: la tenebrosa reforma del sistema de jubilaciones y pensiones defendida a hierro y fuego por Temer y los dueños del capital no podrá ser votada en el Congreso. O, mejor dicho, no podrá ser derrotada como fatalmente ocurriría.

Temer se libra de un tema impopular y busca darle algún brillo a su más que opaca figura. Lo que quizá no sepa es que en realidad puso las dos manos en el fuego. Y los que serán agredidos y humillados por su iniciativa no serán los traficantes, pero los moradores ya abandonados de las favelas. Que, a propósito, también son electores.

(Tomado de Página 12)

Se han publicado 9 comentarios



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  • Sergio dijo:

    TEMER es un HP, de eso no hay duda, pero lo que me parece INAUDITO es que en un momento de CERRAR FILAS contra un HECHO CONCRETO que afecta a TODOS los Brasileños por IGUAL, se pongan a estar buscando la PELUSA de la CONTRAPELUSA, de que si me dijiste o no me dijiste, de chisme y bretes.

    Las intervenciones anteriores que resolvieron, Sr.Nepomuceno?, por H o por B conozco Rio, y he subido a los MORROS, y conozco la Magueira, la Rocinha, y otras "COMUNIDADES" (está terminanate prohibido utilizar el término FAVELA), y no nos engañemos, no se resolvió absolutamente nada. El corrupto de CABRAL, ex-gobernador de Rio, creó las UPP (Unidades de Policia Pacificadoras) y fue un paliativo, pues como se ve, no resolvió absolutamente nada.

    Estamos hablando de un ESTADO (o provincia como le llama el autor) que ha sido ROBADO a mano y sin ARMAS por el ex-gobernador Cabral y su mujer, por otro ex-Gobernador, por vereadores (Diputados del Estado), Empresarios, etc., etc., etc,,,, y donde el nivel de corrupción ha alcanzado niveles insospechados a todos los niveles, y excusenme la redundancia. Hasta ha habido casos de corrupción en la POLICIA, tanto en la Militar como en la CIVIL, donde por ejemplo, y lean bien esto, la jueza Patrícia Acioli, a cargo de varios casos de corrupción en estado de Rio de Janeiro, fue ASESINADA, en el 2011, con 21 tiros salidos de las armas que portaban dos miembros de la Policia Militar de Rio, los Sres. Charles Azevedo Tavares y Alex Ribeiro Pereira. Pero esto no es lo mejor del caso, lo mejor de todo es que el asesinato de esta jueza fue encomendado por el Sr. tenente-coronel Cláudio Luiz de Oliveira ( le metieron 36 años por la cabeza), que era el jefe de un batallón especial de la Policia MILITAR de una región de Rio. Y entonces?.

    Vieron las Tropa de Elites, los "geniales films" de Jose Padilha. A diferencia de lo que seimpre se ha estipulado, la 2da. es mejor que la 1ra, para mi gusto, of corse. Pues bueno, en esa "ficción" se refleja fielmente la corrupción a todos los niveles en Rio.

    Yo repito, TEMER es un HP, pero el tema Rio de Janeiro llegó a un extremo, EXTREMIZADO (no se si esta palabra existe), y disculpenme de nuevo la redundancia (mi vocabulario es muy limitado), pero había que hacer algo, y Urgente,,,, da lo mismo si las inteciones son POLITICAS, PARTIDARIAS, IDEOLOGICAS, etc. etc, etc,,, pero había que hacer algo ante la INUTILIDAD del Gobernador, Luis Fernando Pezão, y el Alacalde de Rio, el Sr. Crivella, que andaba de viaje por Europa, con la candela en RIO.

    Este es un breve panorama. Evidentemente cada cual tendrá sus opiniones, la intervencion FEDERAL está prevista en la constictución Brasileña para casos como estos, siempre y cuando sea aprobado por el congreso y el senado. En el estado de Ceará también se está llevando a cabo un proceso similar.

    En resumen, es una situación compleja, muy compleja, que se venía agudizando y agudizando, y ahora nadie sabe como se resolverá. No sé si esto lo resolverá, repito, pero lo que no se podía era seguir como estaba.

    Sinceramente,

    Sergio

    • raiko dijo:

      Ok Sergio habia q hacer algo. La corrupcion, la violencia y los asaltos está tan arraigada en Brasil q eso no va a resolver nada. Tal vez va a disminuir un poco los indices de criminalidad mientras esten ahi q por cierto no será para siempre. Creo q será colocar mas leña al fuego. Mientras no se vayan a las causas q lo provocan todo será en vano. Y no solo en Rio de Janeiro están sucediendo esos aumentos de criminalidad. Es en todo Brasil. Ya has pensado quien va a pagar el costo de toda esa operacion? Cosas peores se pueden avecinar para la clase pobre y media del Brasil.

      • Sergio dijo:

        Yo estoy claro que no va a resolver el problema,,,, pero es que después de tantos años y tantos gobiernos sin hacer nada, la situación es insostenible. Infelizmente esta es la situación, nunca se estableció un programa conjunto Gobierno Federal-Gobierno Estadual para intentar resolver. Por eso se ha llegado a esto.

        Es lo que hay,,, claro que la soga siempre rompe por el lado más débil,

        Saludos,

  • Carlos dijo:

    Estimado Nepomuceno

    "La Cámara de Diputados de Brasil aprobó por mayoría de votos (340 a favor, 72 en contra y 1 abstención) el decreto que dispone la intervención en Río de Janeiro.
    El siguiente paso es el visto bueno del Senado Federal, que discutirá este martes el tema".

  • Copa dijo:

    Espero, que los militares se den cuenta del ridículo que estan haciendo, deteniendo a lis pobres desgraciados y protegiendo a lis atracadores y a los políticos.

  • Carlos Gutiérrez dijo:

    Me parece que la mayoría de los argumentos y suposiciones que esgrime Nepomuceno aquí, se neutralizan leyendo su propio artículo con un poco de sentido común.

    Por ejemplo; Se describe la paupérrima situación de la policía en Río , "mientras, el armamento de los traficantes es de última generación y supera, en poder, el de las fuerzas de seguridad". Entonces; ¿La solución más inmediata y menos costosa no sería emplear una fuerza bien armada y equipada, que está disponible y ociosa porque no hay guerra en estos momentos? Pero se nos dice que no, porque sólo se hace en Río mientras que el resto de las ciudades del país tiene una situación similar. ¿Entonces habría que militarizar todo el país al mismo tiempo? ¿Donde pondría el grito Nepomuceno en ese caso?. Y no aclara el mismo artículo que "la situación de Río es especialmente grave"?

    También se critica que"Braga Netto no se reportará al gobernador Luis Fernando Pezão, pero directamente al ministro de Defensa, Raul Jungmann, y al general-jefe de seguridad nacional, Sergio Etchegoy", para remarcar enseguida que "El mismo y muy inepto, inoperante e incompetente gobernador provincial reconoció ayer que su carrera ‘termina aquí’". Y yo pregunto: ¿Qué sentido tendría reportarse (que es lo mismo que subordinarse), ante a un jefe: "inepto, inoperante e incompetente", bajo cuyo mandato se ha creado la "situación especialmente grave" que se intenta controlar con los militares?.

    Yo no soy especialista en cuestiones de seguridad, ni en temas brasileños, y realmente creo que este asunto es un problema interno de ese país y sus pobladores, pero no puedo dejar de notar cuando alguien me está subestimando. Recuerden que la mayoría de los que entramos a este sitio tenemos cierta cultura y un mínimo de inteligencia.

    Saludos

    • Sergio dijo:

      ELEMENTAL WATSON

      Saludos, Carlos.

    • Aroldo dijo:

      En México Felipe Calderón hizo algo similar y todos sabemos como está ese país luego de eso, saludos.

      • Sergio dijo:

        Todos sabemos que no se va a resolver, y que esto tiene un TRASFONDO POLITICO en toda su dimensión, pero ha llegada a un punto de NO RETRONO, ante la INERCIA de los gobiernos anteriores. Es la realidad.

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Eric Nepomuceno

Eric Nepomuceno

Escritor, periodista, investigador y traductor brasileño.

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