Cubadebate

La Crisis señala a Obama

La oligarquía, el tsunami de la Crisis, el ronroneo amenazante del Miedo y de la Furia, y el candidato Barack Obama

(Notas sobre las elecciones en Estados Unidos)

Antonio Maira

inSurGente

La elección de Barack Obama como candidato demócrata a la presidencia de los EEUU ha tenido carácter excepcional. Si bien fue su oposición a la guerra de Iraq -casi única en el Congreso- el factor desencadenante de su candidatura; la crisis económica de previsión catastrófica y su desarrollo explosivo en los últimos meses, le ha permitido vencer al establisment de su partido. El Obama candidato -y probablemente también el político Obama- ha ido creciendo poco a poco alimentado por factores estructurales no por elementos de publicidad y de mercado político electoral. Por eso la candidatura es muy firme, y Obama puede ser invencible si no rompe con el proceso popular que puede convertirlo en el futuro presidente de los Estados Unidos

El asombroso salto desde el candidato habitual: blanco, supermillonario, miembro de la gran élite política senatorial, "gobernante por la gracia de la Oligarquía Económica Globalizada más poderosa del Mundo"; hasta el negro Obama: hijo de blanca estadunidense  e inmigrante negro de Kenya -con ruptura de todos los tabús raciales-, y de origen humilde; es una expresión y una consecuencia del Miedo y de la Furia profunda, ronroneantes todavía, que van a agitar al país más poderoso del mundo. Un gigante que se ha despertado bruscamente sobre sus pies de barro.     

De momento, Barack Obama ha dejado en la cuneta nada menos que a la propia Hillary Clinton, candidata de un proyecto de dinastía que con el beneplácito de una parte importante del partido republicano seguiría a la de los Bush en el gobierno del Imperio.

El proceso de la crisis económica ha conducido a Obama mucho más allá de las previsiones que habían fabricado para él, y le ha hecho sortear los grandes obstáculos con los que el propio partido demócrata quiso controlar primero y liquidar después el progreso de su candidatura.

La candidatura Obama estaba prevista para lanzar una imagen de cambio -en relación con la guerra y la economía- que de ninguna manera se correspondía con las intenciones reales del partido demócrata. Obama cubría las carencias. Era un ariete suficiente para situar a los republicanos en una posición de derrota -como receptores de toda la resistencia y el malestar que estaba provocando la guerra y su gigantesco derroche económico-, sin comprometer la política complementaria y formalmente alternativa del partido demócrata. El candidato negro debía reforzar la candidatura de Hillary Clinton. Darle seriedad patriótica y hacer resaltar la experiencia de la ex Primera Dama.

En estos momentos las cosas han adquirido una naturaleza muy distinta:

-La dialéctica política que enfrenta a la oligarquía de la guerra y del desastre económico con un pueblo todavía perplejo pero aterrorizado por el futuro al que le han conducido sus "líderes", ha convertido a Obama en la referencia y el centro de una intensa y, sobre todo, muy creciente, movilización popular.

-Las "primarias" han roto con su dinámica y su función habituales: sustituir la participación habitual -nula- por una intensa campaña de publicidad; colocar todo el proceso electoral dentro del ámbito de poder y de influencia de la gran oligarquía económica y de su clientela política. 

-En contra de todo los que "nos vendió" Falsimedia, la larga disputa por la "candidatura demócrata" ha favorecido enormemente a la "candidatura Obama" para las elecciones presidenciales. Evidentemente, Falsimedia no es más que un eco de sus amos en Washington, sus interpretaciones del "proceso electoral" son las que plantean los estados mayores del "bipartidismo" sin partidos que sirve de coartada a la dictadura más cerrada del mundo.

-El próximo instrumento de control que ha lanzado la oligarquía -como propuesta de "unidad" para el partido demócrata"-, es la de la pareja "Obama-Hillary Clinton", como propuesta de presidente y vicepresidenta para "fortalecer la candidatura presidencial" de Obama.

La propuesta, burda y risible, debe ser rechazada por el flamante candidato demócrata.

A estas alturas él debe saber que su fuerza es antagónica a la que representa Hillary Clinton.

En estas opciones se va a ver con mayor claridad la consistencia del candidato negro, su relación real con la expectativa y la movilización que ha creado en el castigado pueblo estadounidense.

Tal como se plantean ahora, las elecciones en los EEUU tienen una importancia vital para todos.

Noticia comentada 

Obama, vencedor de las elecciones internas demócratas

Washington, 4 jun (PL) El senador Barack Obama comienza hoy una nueva fase de su campaña con el fin de llegar a la Casa Blanca, tras superar la cifra de delegados necesarios para lograr la candidatura demócrata.

Obama alcanzó la víspera los dos mil 118 delegados obligatorios para conquistar la investidura de su agrupación, tras las internas celebradas en Montana y Dakota del Sur y el apoyo de numerosos superdelegados.

Tras conocerse el dato, el congresista por Illinois se autoproclamó el candidato presidencial demócrata para las elecciones de noviembre venidero.
El político se convirtió así en el primer afroamericano en encabezar la fórmula presidencial de uno de los dos grandes partidos de la Unión.
El legislador venció luego de una prolongada batalla de cinco meses contra la senadora Hillary Clinton, que mantuvo preocupado a la dirigencia de la formación.

Desde hace varias semanas varios líderes demócratas presionan a la ex primera dama para que abandone la lucha, con el fin de unificar al partido, debilitado por la larga contienda.

Según la televisora CNN, Clinton afirmó hoy que está dispuesta a ser la vicepresidenta de Obama para fortalecer a los demócratas de caras a los comicios generales.

La cadena noticiosa citó a dos fuentes que participaron en una videoconferencia entre la ex primera dama y legisladores de Nueva York.
Yo estoy abierta a eso, contestó Clinton a un comentario de la congresista Nydia Velázquez, quien estimó que la mejor manera de ayudar a Obama a llegar a la Casa Blanca es que Clinton sea su compañera de fórmula.