Cubadebate

La canciller de Alemania, Angela Merkel, advirtió que la propagación en su país de la variante británica del coronavirus podría multiplicar la incidencia acumulada por diez en los próximos tres meses, informó el diario local Bild. 

Merkel realizó estas declaraciones en una reunión con el grupo de trabajo de Interior del bloque de diputados conservadores en el Bundestag (cámara baja alemana) en la que defendió la necesidad de aplicar “medidas duras” durante los próximos dos meses. 

“Si no logramos parar esa variante británica tendremos para Semana Santa una incidencia diez veces mayor. Necesitamos aún entre ocho y diez semanas de duras medidas”, aseguró la canciller, según asistentes al encuentro. 

Alemania inició el pasado lunes una fase más estricta de su segundo confinamiento, en la que se prolongan hasta el 31 de enero las medidas vigentes a la vida pública y la actividad económica, y se endurecen algunas de ellas. La incidencia acumulada (la proporción de personas que enferman en un periodo de tiempo concreto) en los últimos siete días aumentó a 164,5 casos por cada 100.000 habitantes. 

La cultura, el ocio, la gastronomía, los comercios no esenciales y los colegios permanecen cerrados, mientras que las reuniones privadas fueron limitadas a los convivientes más una persona de fuera del domicilio. 

Además, los residentes de los distritos con una incidencia acumulada en siete días de más de 200 casos por cada 100.000 habitantes -como puede ser el caso de Berlín a partir de hoy- no pueden alejarse más de 15 kilómetros de su localidad. 

Merkel y los jefes de los 16 Ejecutivos regionales tienen previsto volver a reunirse el 25 de enero para analizar la evolución de la pandemia y decidir el camino a seguir. 

Alemania registró 12.802 nuevos casos de coronavirus en las últimas 24 horas y 891 muertes. Desde el inicio de la pandemia acumula 1.933.826 contagios y 41.577 fallecidos. 

Ciudadanos en Shijiazhuang (provincia de Hebei, China), 12 de enero de 2021. Foto: China Daily.

China ha registrado este miércoles la mayor alza diaria de los contagios en más de 5 meses, informa Reuters con referencia a los datos de la Comisión Nacional de Salud del país.

Se han reportado 115 nuevos casos confirmados, en comparación con los 55 del día anterior, lo que representa el aumento diario más alto desde el pasado 30 de julio. La mayoría de los nuevos contagios (90) han sido detectados en la provincia Hebei, cercana de la capital, mientras que la región nororiental de Heilongjiang ha informado sobre 16 nuevas infecciones.

El número de las personas asintomáticas, que China no clasifica como casos confirmados, ha pasado de 81 a 38. Según el recuento de la Universidad Johns Hopkins, la cifra total de contagios registrados en China desde el inicio de la pandemia es de 97 095, mientras que 4 793 personas fallecieron a causa de la enfermedad.

El número de nuevos casos notificados en los últimos días sigue siendo una pequeña fracción de lo que vio China durante el brote inicial, a principios del 2020. Sin embargo, las autoridades decidieron implementar una serie de medidas con el fin de contener la propagación del virus. Por ejemplo, cerraron varias ciudades en la provincia de Hebei y extendieron un programa de test masivos.

Vladímir Putin expresó la necesidad de pasar de la vacunación a gran escala a la vacunación masiva. Foto: AFP.

El presidente de Rusia, Vladímir Putin, ordenó este miércoles comenzar la vacunación masiva contra la COVID-19 de la población a partir de la próxima semana.

“Ya hemos empezado la vacunación a gran escala. La semana pasada, [el primer ministro Mijaíl] Mishustin me informó que la industria no solo cumplió con todos los estándares y volúmenes prometidos, sino que también superó los volúmenes de producción de vacunas planificados. Necesitamos pasar de la vacunación a gran escala a la vacunación masiva”, declaró el mandatario durante una reunión con los miembros del Gobierno.

En este sentido, Putin pidió crear un calendario de trabajo respecto a la vacunación masiva contra el coronavirus tal y como se hace con otras enfermedades, como la gripe.

“Vemos que el mundo, desafortunadamente, todavía no puede sofocar esta enfermedad ni se pueden prevenir todas las consecuencias negativas asociadas con ella”, dijo el presidente. “Pero antes que nada, por supuesto, deberíamos interesarnos por la situación en Rusia. Vemos que hay una ligera disminución [en el número de contagios diarios], esto no debería tranquilizarnos”, subrayó.

Moscú está observando con preocupación la situación con el coronavirus en otros países, en particular en el Reino Unido, y está en contacto con los socios europeos sobre estos temas, agregó Putin.

La vacuna rusa Sputnik V

La vacuna rusa contra la COVID-19, bautizada Sputnik V en honor al primer satélite artificial, lanzado por la URSS en 1957, ha sido desarrollada por el Centro Nacional de Investigación de Epidemiología y Microbiología Gamaleya de Moscú y fue registrada el 11 de agosto.

Sputnik V utiliza una tecnología de adenovirus humano de dos vectores diferentes, Ad26 y Ad5, que se aplican en dos inyecciones. Esta solución no contiene adenovirus humanos vivos, sino vectores adenovirales, que no multiplican y resultan completamente seguros para la salud. De hecho, el fármaco se basa en una plataforma de dos vectores ya existente con la que ya se crearon otras vacunas.

Los resultados obtenidos durante la fase 3 de los ensayos clínicos de Sputnik V mostraron que la eficacia del fármaco ruso es del 91,4%.