Cubadebate

Foto: Ulises Ruiz Basurto/EFE.

Una nube de humo ha cubierto hoy la zona metropolitana de Guadalajara, capital del Estado de Jalisco

, sumiendo a la segunda población más importante de México en una crisis mayor después de cuatro días de incendio de La Primavera, el bosque de 30.000 hectáreas ubicado al surponiente de la ciudad que cada fin de año alberga la Feria Internacional del Libro.

El Gobierno de Jalisco ha informado de que desde el domingo se han consumido al menos 4.000 hectáreas del bosque de robles y coníferas, que es también conocido como "el pulmón de Guadalajara". Sin embargo, las propias autoridades han delimitado desde el martes un área de 7.500 hectáreas, en la que tratan de contener el máximo daño posible antes de que se puedan controlar totalmente las llamas.

"Se siente como el aire espeso, y pica la nariz. El ambiente está sumamente triste. Es tremendo lo que está viviendo Guadalajara", dice vía telefónica Karina, una trabajadora universitaria que ha padecido, como miles de personas, la mala calidad del aire. Hasta el martes, los vientos jugaron a favor de la población, pues soplaron hacia el poniente, dispersando el humo hacia parajes poco poblados. Pero la situación cambió la noche de ese día. El viento dejó de soplar, lo que ayudó a que el incendio no creciera, pero el humo se estacionó. "Toda la ciudad huele a humo, nos lo estamos tragando todo", comenta otro habitante de la zona metropolitana, que alberga a casi cuatro millones de personas.

El origen del fuego será investigado por la Procuraduría (fiscalía) General de la República ante las denuncias de que podría haber sido provocado. Álvaro García Chávez, secretario de Desarrollo Rural de Jalisco, ha afirmado que "el bosque tiene muchos enemigos" y denunciado un par de graves incidentes: el domingo, hombres armados impidieron el paso a brigadistas que se dirigían a combatir el incendio, mientras que después otro grupo que combatía el fuego escuchó disparos, en lo que García Chávez ha considerado un acto de intimidación.

Pero la actuación de las autoridades de Jalisco frente al incendio sido objeto de críticas de ciudadanos y medios de comunicación. Tuvieron que pasar tres días para que el gobernador Emilio González Márquez se personara en la zona, donde 900 brigadistas combaten el fuego. "El Gobierno del Estado reaccionó tarde y tímidamente. Dieron cifras del siniestro distintas a las que daba la Comisión Nacional Forestal, lo que habla de una escasa coordinación intergubernamental", dice David Gómez Álvarez, académico de la Universidad Iteso y director ejecutivo de la ONG Jalisco Cómo Vamos. En contraste con la actuación gubernamental, la ciudadanía se movilizó y ofreció ayuda y pertrechos a quienes combatían el fuego.

Las clases escolares se suspendieron el martes de manera preventiva en un centenar de escuelas, al tiempo que otros padres de familia optaron hoy por no enviar a sus hijos a los planteles educativos. Según las autoridades, el fuego está controlado en un 90%, pero tendrán que pasar otras 24 horas antes de poder cantar victoria.

Está previsto que el presidente Felipe Calderón viaje a Guadalajara desde Estados Unidos, donde se encontraba de gira de trabajo, para supervisar personalmente los daños del incendio, el segundo más importante en la zona desde que en 2005 el fuego consumiera la tercera parte de La Primavera, que forma parte de la red mundial de reservas de la biosfera y en el que habitan 38 especies de fauna en peligro.

(Tomado de El País)