Black Lives Matter está democratizando las instituciones de EE.UU.
Una banda de jazz estilo Nueva Orleans tocaba St. James Infirmary, un blues sobre la muerte de la novia del que la canta, en el centro de Washington Square, poco antes de que cientos caminaran detrás de ese conjunto unas 30 o más cuadras para ser recibidos en Ocupa Alcaldía, un plantón de manifestantes bajo el lema de las Black Lives Matter (Vidas Negras Valen), parte de un movimiento nacional sin precedente en medio siglo que, por quinta semana, sigue sacudiendo a las cúpulas del país.
El campamento de cientos de personas que se estableció sobre una placita al lado de la alcaldía tiene una “bodega comunitaria, (toma lo que necesites, ofrece lo que puedas), una biblioteca popular que solicita libros radicales para compartir, una carpa de atención médica y mesas para alimentar a todos. De repente hay foros sobre historia, raza y género, y sobre la violencia oficial. Una mujer lee un libro sobre Angela Davis, mientras a unos metros, un DJ pone música hiphopera y algunos bailan, mientras otros tejen. No hay policías, su paso está prohibido (por ahora). Hay líneas pintadas con gis que decoran no policía más allá de este punto. Se solicita que todos usen cubrebocas.
El plantón tiene una serie de demandas, pero la central para esta acción es la del traslado de mil millones de los 6 mil millones de dólares anuales en el presupuesto de la policía de Nueva York a programas sociales, y por ahora se ha logrado un triunfo parcial, algo casi impensable hace un mes. Esto o escenas parecidas se repiten por cientos de ciudades y pueblos a lo largo del país
Por quinta semana, estas expresiones –marchas, plantones, mítines, brigadas de ciclistas y otras de muralistas, conciertos, conmemoraciones de las víctimas que se detonaron con el asesinato de George Floyd por la policía en Minneapolis, el 25 de mayo, siguen sin cesar. Son menos numerosas y los enfrentamientos con la policía son menos dramáticos (aunque la represión sigue), pero persiste cada día en múltiples ciudades.
Este movimiento que estalló dentro del silencio de la pandemia ha obligado a cúpulas políticas a enfocarse y responder a sus demandas, logrando que se promuevan decenas de iniciativas de reforma policiaca y obligado a políticos nacionales y locales a proclamar de qué lado están sobre el racismo sistémico y su historia desde los inicios de este país. Mientras un presidente asustado ha optado por responder con amenazas de represión militar, denuncias de que todo es un complot de la izquierda radical calificando lo que ha visto frente a la Casa Blanca como un movimiento de odio. Uno de sus legisladores favoritos, Matt Gaetz, de Florida, declaró por tuit que “Black Lives Matter es un movimiento marxista”.
El movimiento multirracial e intergeneracional incluye desde los jóvenes (sobre todo mujeres) que lo encabezan, a veteranos del movimiento de derechos civiles de los 60, a sindicalistas, religiosos, académicos, músicos y otros artistas, como también indígenas e inmigrantes. El legendario comediante Carl Reiner, quien acaba de fallecer a sus 98 años, se tomó una foto con su hija y su gran amigo Mel Brooks, todos con camisetas de Black Lives Matter.
De pronto, políticos y directores de instituciones ofrecen retirar monumentos y símbolos de la historia racista, desde el de algunos ex presidentes como Woodrow Wilson a la casi increíble decisión del gobierno estatal de Mississippi de retirar el símbolo de la Confederación de su bandera oficial después de 126 años, entre otras. En Nueva York, la famosa estatua de Teddy Roosevelt, montado sobre su caballo y a su lado dos figuras caminado, un indígena y un afroestadunidense, que da la bienvenida a la entrada del Museo de Historia Natural, será retirada por decisión de la institución. Este movimiento ha obligado un rendimiento de cuentas históricas.
Todos saben que este tipo de movilizaciones tiene que evolucionar en otras expresiones políticas, algo que ya ocurre a un paso relámpago incluso en lo electoral.
“Cualquier momento en que ves a seres humanos enderezar sus espaldas y estar dispuestos a caminar juntos, luchar juntos, cantar juntos –sean del color que sean– hay una majestad moral y una belleza espiritual que no puede ser negada. Pero tenemos que prepararnos para la respuesta represiva neofascista, sobre todo cuando el imperio está débil y desesperado”, afirma el filosofo, y profesor en Harvard y Princeton, Cornel West, en una entrevista reciente con Salon. Tenemos que democratizar plenamente a EU para rescatarlo sin miedo ni a medias.
(Tomado de La Jornada)
Para mi es un error quitarle presupueto a la policia, este país tiene muchas libertades que alguien debe cuidar porque sino se convertirá en libertinaje, solo tienen que ver que han convertido a un delicuente en un héroe a la altura de Luther King, han salido a protestar y lo que han hecho es vandalizar las ciudades, robar y matar policias, así no se lucha por derechos que tienen y no saben usarlos, es más fácil vivir de la ayudas del gobierno que trabajar...no son todos, los hay muy buenos trabajadores, en mayoría, los hay científicos,políticos, millonarios, pero a la minoría la izquierda la utiliza para crear el caos.
Mmm, que poco usted conoce de la historia de Estados Unidos para emitir un criterio sin base. Crimínales hay muchos, pero ni usted, ni yo, ni nadie tiene porque discriminar a una persona por su color, etnia, religión, etc y mucho menos quitarle la vida.
Lo que ha pasado en Estados Unidos por siglos, es algo qué ha arrastrado un odio sin precedente. Y con la muerte de George Floyd este odio ha estallado de una forma nunca antes vista en el país americano.
Sin embargo hay algo que aún muchos no ven, y es que la reprensión policial en USA, es algo que va más allá de los propios Departamentos de Policía de cada estado. Este mal está impregnado en lo más profundo de la clase política norteamericana y pasará un buen tiempo en el que se logre transformar por completo el sistema para el benefició y bienestar de todos.
En vez d Ell Montero debería ponerse el mote de " El racista"
Su discurso es el clásico discurso de los supremasistas blancos que abraza el gobierno de EE.uu.
Ah, ¿ahora se le llama racista a quien no esté de acuerdo con el vandalismo y la delincuencia?
Aquí hay un error del periodista, este movimiento no surgió durante la pandemia, existía ya, por lo menos desde el 2016. En julio del 2016, en Times Squar, durante las protestas por el asesinato de otro negro por parte de la policía, ya se protestaba bajo ese lema
El movimiento contra el racismo o mejor dicho por la igualdad racial está mas que bien, lo apoyo en un 100 %.
La violencia y el odio contra negocios, personas y estatuas de personas que no tienen nada que ver con el racismo lo hace perder muchos puntos, eso es anarquía, delincuencia. Deben tomar ejemplo de Martin Luter king que en los sesentas siguió un camino pacífico o de Mahatma Gandhi que en la India logró la independencia de Reino Unido con movimientos pacíficos.