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Demasiados gays o desmedida homofobia

En este artículo: Cine, cine cubano, Cultura, Homofobia
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Copia Vestido de noviaLa sentencia respecto al exceso de películas cubanas con temática gay, que le escucho decir a gente culta, hombres y mujeres, viene a ser testimonio irrefutable de la homofobia rampante que existe en Cuba. ¿Quién está autorizado para determinar la cuota de “lo correcto y adecuado”? ¿Por qué escucho a tan pocos espectadores quejándose de los estereotipos machistas, sexistas, racistas (muchas veces asociados) que pululan en ciertas películas adoradas por la mayoría? ¿Cuál es el impulso que motiva a cierto sector del público a criticar las políticas del cine cubano porque dos de los cinco largometrajes cubanos estrenados en diciembre ostentaban protagonistas homosexuales?

Pienso que las razones de cierto rechazo de una parte del público habría que buscarlas, sobre todo, en la homofobia arraigada culturalmente desde hace siglos, un padecimiento crónico que nos ataca a todos en mayor o menor grado, y también es válido el señalamiento a cierta insistencia en la tipología de “hombres atrapados en cuerpos de mujer”, transexuales, o travestis que asumen la apariencia femenina porque les sienta bien y les parece un medio legítimo de ganar dinero.

Vestido de novia (2014, Marilyn Solaya) y Fátima (2014, Jorge Perugorría), por solo hablar de los dos filmes cubanos más recientes, giran en torno a estos personajes y temáticas, y tal vez la semejanza provoque cierto distanciamiento del público ávido de apreciar otras cuestiones actuales en los escasos filmes nacionales que logramos estrenar cada año.

Más allá de la producción reciente, me parece percibir un hilo evolutivo, más que insistencia desmedida, en la temática homosexual, si consideramos algunos títulos producidos en lo que va de siglo XXI.

Puede concluirse con certeza que hemos avanzado a partir de las timideces y ocultamientos en Las noches de Constantinopla (2001) de Orlando Rojas. Porque si Fresa y chocolate (1993), de Tomás Gutiérrez Alea y Juan Carlos Tabío, le confirió rostro e identidad al personaje homosexual en el cine cubano, Las noches de Constantinopla glorifica banalmente la figura del travesti, al cual no se le confiere demasiado relieve sicológico ni tan siquiera identidad discernible, ni homo ni hetero, puesto que vestirse de mujer es un acto fortuito, banalmente provocativo, que solo expresa el deseo de contravenir las restrictivas imposiciones de la abuela.

Encabezados por Pachi, los travestis son mostrados con toda la pluma de vodevil y caricatura que pudiera esperarse, y por supuesto son personajes secundarios e intrascendentes, traídos a cuento nadie sabe por qué ni con cuál objetivo dramático, como no sea sugerir, en sordina, la habilidad del cubano para el disfraz y la impostura.

Y si bien el carácter fortuito, accesorio y circunstancial de “lo homosexual” se repite en Lista de espera (2000, Juan Carlos Tabío), Suite Habana (2003, Fernando Pérez), Barrio Cuba (2005, Humberto Solás) y en la muy posterior Fábula (2011) de Lester Hamlet, este mismo director le había otorgado considerable peso específico al protagonista de Casa vieja (2010) un homosexual asumido, y bien distante del esquema del afeminado al que estamos acostumbrados por los medios.

Esteban regresa a Cuba después de que decidió vivir en España, tal vez huyendo de los prejuicios homofóbicos de su entorno, prejuicios que encuentra casi intactos a su regreso, cuando su hermano apenas puede vocalizar el insulto que todos los espectadores asumen con total nitidez.

La norma representacional del gay histriónico o carrocero, capaz de moverse en un registro entre lo divertido y lo patético como puede verse con toda claridad en Vestido de novia y Fátima, también se elude en Verde, verde (2011) de Enrique Pineda Barnet, que narra un acercamiento sexual entre dos aparentes “machotes”, de gestualidad muy poco afectada, en un ambiente marginal y decadente. Con su agresiva recreación de iconos gays como la masculinidad hipertrofiada (verde verde da maduro), los bares paraíso de la promiscuidad, y cierta tendencia a localizar el deseo homosexual como algo sórdido o pecaminoso, Verde, verde tiene la osadía de constituir el primer largometraje de ficción cubano creado para recrear cierta sensibilidad abiertamente homosexual.

Recordar que los temas dominantes de Fresa y chocolate, según sus propios directores, resultaban ser la intolerancia, la amistad y la emigración forzosa, y que Chamaco (2009, Juan Carlos Cremata) se propone más bien testimoniar la pérdida de valores en la familia y la sociedad a través de la historia de un joven dedicado a prostituirse, lo que suele llamarse en la jerga callejera “un pinguero”. Al igual que Verde, verde, Chamaco describe un mundo oscuro, opresivo y sin salida, relaciones gobernadas por la manipulación, el chantaje, la violencia y el fingimiento, pero en el filme de Cremata tales actos no se vinculan con la tendencia homosexual del personaje, algo que sí demarca Pineda Barnet en su película.

El documental, sobre todo realizado por los jóvenes, conoció de otras dinámicas evolutivas mucho más distantes de las convenciones y con mayor disposición a naturalizar el amplio margen de opciones, actitudes y posibilidades del personaje homosexual. Eliezer Pérez con Habana libre (2006), Jessica Rodríguez y Tacones cercanos (2009), Gretel Marín con Pero la noche (2013) o Juan Carlos Calahorra a través de la muy provocativa El evangelio según Ramiro (2014), por solo mencionar unos cuantos, proclaman la necesidad de respeto para cualquier preferencia sexual con mucha mayor elocuencia y desprejuicio que los filmes de ficción cubanos de estos mismos años.

También son grandes las expectativas respecto a Santa y Delfín, un guion de Carlos Lechuga, ganador del XI Premio Julio Alejandro, que convoca la Fundación SGAE. Según reportes trascendidos, Santa y Delfín nos sitúa en el año 1992 en Cuba. Delfín es un escritor cincuentón que años atrás fue considerado un “homosexual con problemas ideológicos”. Santa es una campesina de solo treinta años de edad que está encargada de vigilarlo. Santa y Delfín son completamente opuestos; no se supone que simpaticen, pero lo que ellos no saben es que tienen muchas cosas en común y muy pocas que los diferencian.

A juzgar por lo que se dice, Santa y Delfín propone un tratamiento distanciado de la reiteración en el homosexual que quiere ser o parecer mujer, y luego padece las violencias del machismo por andar jugando a vestirse de hembra. Estos conflictos ilustran solo una variante de un comportamiento sexual tan complejo y diverso como todos los asuntos humanos. Del cine cubano depende mostrar el fenómeno en sus innumerables aspectos, o continuar creyendo que se lucha contra la homofobia presentando siempre idénticas facetas de la discriminación.

(Tomado de Cuba Contemporánea)

Se han publicado 141 comentarios



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  • manolo dijo:

    Perdon ,continuo: decia que la historia de Cuba es muy rica, incluso la actual y creo que hay temas mas importantes que comentar en los guiones. En cuanto a la privacidad son estas personas quienes se caricaturizan al disfrazarse , por cierto con pesimo gusto y crear un nuevo tipo de espectaculo, el espectaculo gay. El que quiera ser gay que lo sea, pero no lo ayuden en sus relaciones publicas. A los guionistas les pregunto estan hablando de una realidad o es que son los verdaderos homofobicos.

  • DFPE dijo:

    La homosexualidad no es una enfermedad ni es contagiosa,la homofobia si.Hay que entender que eso era cosa del pasado ya estamos en el siglo XXI por favor no volvamos a los tiempos de antes, es verdad que a veces te encuentras con cada elemento pero que se le puede hacer son así y ese es su mundo.Quizás algún día logremos una comunidad unida donde no existan diferencias sexuales.
    ABAJO LA HOMOFOBIA

  • DFPE dijo:

    ABAJO LA HOMOFOBIA

  • alejandro dijo:

    Un paradigma de hosexual culto, flexibilble y maduro, un contexto internacional favorable y una crisis de valores en nuestra sociedad, han hecho que lo excepcional del pasado se vuelva casi la regularidad de presente y del futuro. Viva la libertad, la honestidad, el respeto y la tolerancia. Pero también creo que como nación tenemos retos y desafíos diferentes para no decir trascendentales o superiores, que merecen un abordaje y una reflexión inteligente desde el cine, como no ha acostumbrado su hitoria. Debemos creernos de verdad cuanto de bueno tenemos como sociedad y abordar con mesura nuestros problemas.

  • Curioso dijo:

    Vi recientemente "Vestido de Novia" y "Fátima...". Realmente la primera superó con creces a la segunda, sobre todo por la actuación de los papeles protagónicos. Excelente película con un tema muy bien y cuidadosamente tratado. Respeto todas las tendencias de credo, sexo, etc, etc, etc. Pero quiero dar mi opinión (también con todo respeto), sobre los argumentos que da el periodista: ¿No creen que ya está bueno de que el tema homofóbico predomine en el cine cubano? ¿No creen que lo grotesco y negativo tanto en el cine como en las telenovelas cubanas se aborda en exceso? ¿Es que no hay espacio para temas un poquito mas positivos y optimistas en estos medios audiovisuales?

  • Curioso dijo:

    Vi recientemente "Vestido de Novia" y "Fátima...". Realmente la primera superó con creces a la segunda, sobre todo por la actuación de los papeles protagónicos. Excelente película con un tema muy bien y cuidadosamente tratado. Respeto todas las tendencias de credo, sexo, etc, etc, etc. Pero quiero dar mi opinión (también con todo respeto), sobre los argumentos que da el periodista: ¿No creen que ya está bueno de que el tema homosexual predomine en el cine cubano? ¿No creen que lo grotesco y negativo tanto en el cine como en las telenovelas cubanas se aborda en exceso? ¿Es que no hay espacio para temas un poquito mas positivos y optimistas en estos medios audiovisuales?

  • Tapa toto dijo:

    Me parecen muy buenas las películas que han salido y así como le han dedicado tantas a problemáticas cómo el periodo especial, la guerra y tantos, la homofobia es un mal real y por tanto quedará reflejado en los medios. La solución está en que le gente no esté metida en lo que no le importa, que no se interesen tanto por saber con quién duerme el vecino y cada cual se dedique a lo que le toca y los verdaderos cristianos deben dedicarse a cultivar los dones del espíritu y acordarse de los mandamiento antes de estar juzgando, posiblemente a ellos mismos. ok Manuel la O

  • Benitin dijo:

    Creo que si queremos todos seguir construyendo una sociedad mas justa , diversa ,socialista y revolucionaria tenemos que estar de acuerdo con buena fe cuando escribieron su cancion todo el mundo cuenta, estoy en contra de la descriminacion de los homosexuales pero tambien creo que como cubanos que somos vamos a los extermos ,ultimamente la prensa , la television , el y otros medios ponen de relieve y en el centro del debate social , publico todo sobre la homosexualidad sin embargo existen otros fenomenos sociales que pueden franmentar la unidad y laceran los sentimientos de las personas como la descriminacion a la mujer , racial ,por el lugar de prcedencia que se pudieran mostrar en nuestro cine para que constribuyan como dice buena fe QUE TODO EL MUNDO CUENTA.

  • Jorge dijo:

    Al que le duela, que sufra!!! pero los Gay están presentes desde el inicio de la humanidad y seguiremos Aquí hasta que Dios venga a llevarnos al paraíso o hasta que eso explote!!! y como dije, al que le duela que sufra... lo siento, pero creo que será mejor que se metan en sus vidas

  • REFLEXIVO dijo:

    Pienso que el problema no está en que se admita la homosexualidad, pues de hecho existe y TODOS lo sabemos, sino más bien en la brutal explosión del tema en los últimos tiempos, en que para donde quiera que uno se vire, películas, Mesas Redondas, novelas y otros eventos, incluso marchas de homosexuales (no se producen marchas de "machos" ni de "hembras"), con ridículas expresiones exageradas, torpes, de varones-femeninos y hembras-masculinas, más femeninos o masculinos que los reales varones o hembras. Se ha disparado el asunto a una dosis demasiado alta en muy poco tiempo. El asunto se debe abordar de una manera más natural, menos artificial o como si se hubiera destapado la famosa Caja de Pandora. Para asimilar un tratamiento al tema, la dosis debe ser progresiva, pero sin grandes impactos. Lo natural se impone y se acepta, pero la imposición no funciona y es demasiado lo que se nos trata de meter como con un barreno en la mente. Que las cosas fluyan sin que se deban abrir las compuertas que las contienen bruscamente, porque las inundaciones, ni siquiera de felicidad terminan bien. GRACIAS.

  • REFLEXIVO dijo:

    Es cierto que hubo un tiempo en que los homosexuales que eran "descubiertos" o más bien, sorprendidos en actos sexuales homosexuales, de ambos sexos, eran expulsados de la universidad y esa era una política oficial apoyada por las autoridades. ¿Qué ha cambiado? Si lo que ha aparecido es la tolerancia, no hay necesidad de exagerar. Es discriminatorio aquello de los años 60 y 70, pues nadie tiene el derecho de expulsar a nadie de ninguna institución estudiantil, laboral o lo que sea, mientras se cumpla con las convenciones sociales, lo que pasa que en aquellos tiempo lo convencional era ese tipo de discriminación y ahora nos encontramos en un típico bandazo, a lo que tanmbién estamos acostumbrados en Cuba.

  • Milo dijo:

    Solo destacar un consejo que nos da Frei Betto para utilizarlo antes de abordar cualquier tema:

    ¨Arranca de tu mente todos los prejuicios y, de tus actitudes,
    todas las discriminaciones. Sé tolerante, colócate en el lugar del otro.
    La vida es breve y como totalmente cierto solo conocemos la muerte.
    Aprende a cerrar los ojos para ver mejor.¨ Frei Betto

    Y recordando otra frase muy hermosa que me gusta mucho del libro El Principito:

    ¨Lo esencial es invisible a los ojos¨

    Así que antes de valorar, juzgar, señalar, imponer, opinar o emitir cualquier juicio aprendamos a mirar con los ojos cerrados y a emitir nuestro juicio en base a la esencia de cada persona para no quedarnos en lo superficial ni dando vueltas en temas que solo destacan nuestra actitud muchas veces homofóbica disfrazada de religión (cristianismo), machismo o la fulminante neutralidad de no estoy a favor ni en contra.

    Como dijera Silvio Rodríguez en Cita con ángeles: ¨Seamos un tilín mejores y mucho menos egoístas¨.

  • Nianna dijo:

    Por dios!!! es abrumador ver cuánta homofobia hay en la mayoría de los comentarios, los que opinaron en contra de la peli, por el tema, ni siquiera entienden que no se les está imponiendo nada, es solo una forma de hacerles ver esta parte de la sociedad a los que muchos, por no decir la mayoría, le escupen el rostro. TOLERANCIA decía alguien más arriba, es lo que necesita Cuba, RESPETO...no pedimos que se nos ame y se nos acepte o se nos unan, solo pedimos que nos toleren. Es cierto, que muchos optan por actuar de manera escandalosa en público, pero los hetero también lo hacen, además que tiene de malo si yo quiero tomar de la mano a mi pareja ?¿acaso un hetero no lo hace?? por qué no podría hacerlo yo. Si las parejas hetero se casan como un acto simbólico de una unión eterna, unión que muchos no respetan, porque no hacerlo nosotros, ¿es que no amamos?o no tenemos derecho a mostrar a través de una ceremonia tan hermosa el cariño que le profesamos a la persona que pasará la vida a nuestro lado?. ¿es que nosotros no tenemos un alma gemela? Si los heteros tiene hijos y los reconocen, algunos porque otros se olvidan de la paternidad y de la maternidad, porque no podemos los homosexuales o las lesbianas criar a nuestros hijos, sea como sea la forma en que los tenemos, si son criados y educados con amor, nada más importa. NO es que biológicamente nuestros hijos estén predispuestos ser como los padres, todo lo contrario, tienen la libertad de elegir lo que quieren ser o a quién amar. Creo que el objetivo de todas las pelis, telenovelas y documentales que muestran a los homosexuales y las lesbianas, lo hacen para mostrarles a la sociedad machista cubana, a lo que nos enfrentamos, es para que de alguna manera, su humanidad, su capacidad de sociabilizarse, de sensibilizarse con el dolor ajeno, sea tocado..porque no importa la raza, el credo que profesemos o la sexualidad somo precisamente HUMANOS, y esa sensibilidad, esa humanidad es lo que nos diferencia de los animales.
    Y en cuanto a lo que los niños pueden o no ver o aprender, hay muchos que nos sabemos comportar delante de ellos, que no paguen justos por pecadores, además es responsabilidad de los padres inculcarle cierta o determinada educación a sus hijos y es su responsabilidad también el apoyarlos o aceptarlos si escogen ser homo o heteros, militares o bailarines, técnico medio o universitarios. Es cuestión de perspectiva.

  • JEPO dijo:

    El instinto de sobrevivencia es propio del hombre y de cualquier especie, el instinto de conservación individual es parte de la preservaciónde lo colectivo y la preservación colectiva forma parte del cuido de lo individual, luchamos por preservar nuestro globo terráqueo, luchamos en contra la contaminación ambiental, luchamos contra las armas nucleares, nos oponemos a las guerras en este mundo, todo esto ayuda a preservar nuestra sagrada especie humana y a todas las especies. Este homosexualismo sin descendencia no es innato de nuestra especie, no debe estar avalado de un respaldo genético. Los que han tenido la oportunidad de conocer países que por tradición cultural milenaria y se practica el bisexualismo es muy difícil encontrar a alguien que sea solamente homosexual (que no tenga pareja del sexo opuesto e hijos); algunos estudiosos del tema plantean que la especie humana tiene en su mapa genéticola predisposición a la bisexualidad (sin exclusiones), y que ciertas condiciones ambientales y socioculturales son las favorecedoras o anuladoras de su práctica, lo que no debe existir es la predisposición genética al homosexualismo o ser genéticamente homosexual, lo que no puede existir en la especie humana es un gen anti procreación dominante y determinante, nos negaríamos como especie, ya no existiéramos. Se debe estudiar cuales son las causas favorecedoras de una tendencia alcista, en la cual la modernidad en sociedad debe influir, no debemos mantener una posición homofóbica, pero si un motivo para la preocupación que estimule la investigación.
    Es algo muy importante el respecto a la cultura, a la idiosincrasia de un pueblo, el pueblo cubano en sentido general está en contra de la homofobia; lo diferente siempre llama la atención y mucho más si guarda relación con inclinación o identificación sexual, se ha ganado en positivo en este tema, no queramos correr, la adaptación y aceptación generalizada necesita tiempo; pero en sentido general nuestro pueblo no comparte la forma en que se tratade eliminar la homofobia (sería importante una encuesta), da la impresión que se estimula más el homosexualismo que lo que se educa en contra la homofobia. Este es un tema muy complejo y casi nada conocido, que nadie se crea dueño de la verdad sobre este tema, son muchas las corrientes, son muchas las teorías, son muchas las hipótesis, pero ¿Cuál es la acertada?; se deben evitar las conferencias, charlas y debates exclusivos de cierta y determinada corriente respecto a este tema que irrespetan el criterio colegiado nacional de expertos en el tema, observamos cierta anarquía en esto, en nombre de la educación y luchando contra la homofobia se trata de imponer solo un punto de vista, lo hacen a nombre de la verdad y la razón y simplemente es un criterio personal, también se irrespeta el derecho que tiene cada persona a mantener bajo reserva sus prácticas o preferencias; vivimos en Cuba, ¿se han reunido todos los sexólogos y los psicólogos cubanos a debatir sobre la forma de enfocar este tema, sobre cómo se debe llevar a cabo una educación sobre el tema teniendo en consideración las particularidades de nuestro país?, ¿esta forma de educar parte de un enfoque colegiado?
    No existe el superhombre, ni las súper mujer, ¿por qué un homosexual tiene que ser más mujer que una mujer, o más hombre que un hombre?, cuando un hombre sale a la calle no se propone al salir demostrar de que es hombre o más macho que nadie, tampoco lo hace una mujer, el excentricismo es inadecuado salga de donde salga, la perversión es mala venga de donde venga, el escándalo y la algarabía son opuestos a lo civilizado, el respeto debe de ser mutuo y reciproco entre todos. Toda la vida han existido los feos y los bonitos, sobre un feo siempre salen algunos comentarios, una risotada oculta, etc. Esto no quiere decir que exista fobia a los feos, ni que se rechacen los feos, ni tampoco contra aquellos que la naturaleza los desfavoreció, NO PRETENDAMOS HACER CREER QUE TODO ES HOMOFOBIA.
    No creo que existan ahora más homosexuales que antes por un problema de mutación genética, la homosexualidad no es una enfermedad, lo que si puede ser evitable es la tendencia a hacer de la homosexualidad una moda, ni debatir sobre este tema de forma enfermiza, se debe tratar como algo normal, cotidiano y común, pero sin exageraciones, tampoco podemos pensar que si un potaje no lleva un homosexual es de mal gusto o no es potaje o viceversa, en la calidad de una película influyen muchos factores, variados pero sin imprescindiblesy sin exaltaciones exageradas, lo que se repite con frecuencia tiende a repugnar. Joel impresiona un artículo chillón.

  • pablo andres dijo:

    Mercado,estoy de acuerdo por lo usted expresado y efectivamente la imposicion de patrones a los que usted hace referencia en gran parte de los medios de comunicacion, incentivan aun mas a un rechazo de gran parte de la poblacion; no seamos ingenuos, somos una generacion forjada en valores a la que han obligado a realizar concepciones que va mas halla de un simple discurso

  • aobb dijo:

    De acuerdo con Manuel mercado, la vida privada es privada no hay que hacer tanta bulla con eso, errores y mas errores se estan cometiendo como no se dan cuenta que es una maniobra de europeos y americanos para eslavizar aun mas a los pueblos del tercer mundo, el chantaje con eso de derechos humanos

  • Sirio dijo:

    Con permiso de todos, este tema ya perdió frescura, todos tenemos derecho a tener la vida que nos plazca y a expresar nuestra libertad en primer lugar. En 2do lugar acepten que la mayoría de la población es heterosexual y por eso no disfruta de estos temas o le parecen excesivos, por otra parte las propuestas artísticas ruedan sobre lo mismo, y a ver si salen artículos de algo nuevo como matrimonios grupales, sexo entre edades muy distintas, no sé algo de eso. Ya pasomos en una época por los interraciales, no había una película dónde no aparecieran alguien negro con otro blanco, luego lo de los homo, seguimos con los metro, y los trans y ....es hora del siguiente paso, tiren una sobre la vida social de una mujer y dos hombres o dos mujeres y un hombre a ver qué dice la crítica, a lo mejor es un éxito..... pero pasen la página y dejen el revuelo.

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Joel del Río

Joel del Río

Reconocido crítico de cine. Colaborador de varias publicaciones cubanas y profesor en la Escuela Internacional de Cine y TV de San Antonio de los Baños.

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