Viglietti: Espejear la canción desde el recuerdo
Por Carla Valdés León
Daniel Viglietti regresó a La Habana la noche de este miércoles. Regresó a Casa de las Américas –su casa– para recibir, de la mano de Silvio Rodríguez, el Premio Noel Nicola que entrega el Proyecto para la Canción Iberoamericana Canto de Todos, el Festival Catalán de canción de autor Barnasants y el Instituto Cubano de la Música, en honor al fundador del Movimiento de la Nueva Trova Cubana. Premio otorgado como homenaje a aquellos trovadores y trovadoras en activo cuya obra y consecuencia cultural ha dejado huella en los pueblos iberoamericanos. Resumiendo: por su canción y su guitarra constantes.
El premio es como si uno tuviera un espejito, pero en vez de mirarse en el espejito –como jugábamos de niños– lo que hacemos es proyectar con la luz para iluminar otras cosas. Eso es lo que yo voy a tratar de hacer con este premio. Y con este espejo iluminaba los rostros de los amigos y amigas de siempre: Vicente Feliú, Roberto Fernández Retamar, Augusto Blanca, Frank Fernández, Estela Bravo, entre otros, algunos nuevos y desconocidos. Pero la luz, que es viajera rápida, lleva también en su estela pasado.
Y es ahí –frente al Árbol de la vida y guitarra en mano– donde el verbo “regresar” se confunde con recordar. Su regreso nos devuelve la memoria y nos deja libres para imaginar. Porque si nos olvidamos de soñar no nos quedará nada, tampoco la canción. Viglietti estaba ahí para darnos esa certeza. Vivir en plenitud es un acto de terquedad absoluta.
La sala Che Guevara estuvo extrañamente repleta. Las canciones, al salir de su guitarra, traían cada vez a más visitantes: fantasmas de otros tiempos, recuerdos como fragmentos de una película ya vista, y un público que escuchaba y cantaba y acompañaba. Daniel volvía a ser joven y la Casa volvía al Encuentro de la Canción Protesta, al año 1967.
¿Quién dijo grito?
Yo soy palabra tierna,
sobreviviente señal,
un pensamiento.
Otro que sigue
lo que tantos iniciaron,
uno que encontró
la sobrevida.
Y no quiere cantar siempre la muerte,
quiere cantar renacimientos
con los seres humanos en los poros,
contradicción cantarle a la alegría
con sangre en la memoria,
que duda siempre
si anuncian la derrota de lo nuevo.
(Canción Identidad, de Daniel Viglietti)
- LX Bienal de Venecia acoge muestra de arte cubano
- La Oficina del Conservador de la ciudad de Cienfuegos inaugurará su nueva sede
- Ajiaco cultural: Premio Literario Casa de las Américas y otras noticias (+ Podcast)
- El día que García Márquez me escribió en Cartagena su lista de clásicos imprescindibles de la literatura
- Falleció Ramona de Saá, una de las grandes maestras de la danza en Cuba
- ir aCultura »
Muy merecido el premio para Daniel. Estoy estremecido por la idea de nombrar el mismo con el nombre entrañable de nuestro Noel. Debí estar allí con mis amigos pero estoy maluco de esa gripe mala que nos ronda. Ya mejoraré.
Abrazos melancólicos a todos.
Que se mejore pronto Sr. Amaury!