Cubadebate

Diseño: Boris Luis Cabrera/Cubadebate.

La semana pasada, muchos seguidores del béisbol pinareño perdieron sus apuestas, no lo podían creer. Era cuestión de buscar un solo triunfo en Sancti Spíritus, pero el terreno y la vida los sorprendieron.

Con las garras que no lucía hace años y sabiendo venir de abajo, el equipo espirituano rompió los pronósticos y superó 5-3 en cuartos de final a Pinar del Río, uno de los conjuntos que mejor juega playoffs en la historia de la pelota cubana.

Los discípulos de Eriel Sánchez clasificaron así a las semifinales de la Serie Nacional 61, poniendo fin a una racha de ocho series de playoffs perdidas de forma consecutiva.

Tampoco en postemporadas los yayaberos habían vencido en un séptimo desafío y acumulaban en sus récords ante los Vegueros cuatro derrotas en cinco juegos, cuando salieron a la grama del estadio José Antonio Huelga. Al acecho, la barrida de la última campaña, la cual inclinaba la balanza hacia Pinar del Río.

Con su abridor José Eduardo Santos explotado en el tercer episodio, y en la lomita rival un Erly Casanova inmenso en cuatro innings, varios dieron por sentada la victoria vueltabajera. Pero la pelota es de nueve entradas y en el octavo habría juego nuevo en el Huelga

Casanova, que solo había permitido un hit y un jonrón hasta el octavo inning, comenzó con síntomas de descontrol: dio un boleto, le pegaron un indiscutible y saltó del box después de un lanzamiento extraviado. La rebelión espirituana había llegado y resultó indetenible para los relevistas pinareños.

Erlys Casanova, lanzador pinareño. Foto: Archivo.

Erly, ¿considera que la dirección debió haberlo retirado del box antes del octavo episodio?

–Ningún jugador, esté bien o mal, quiere que lo saquen. En mi caso, me sentía bien, a pesar de tener más de 100 lanzamientos. Esa decisión la tendrá que valorar en su momento el director. No me corresponde ni me gusta responder otra cosa. El atleta que no piense así, no piensa bien. Cada pícher quiere terminar y cumplir su función.

Nos enteramos por las redes sociales de que se inundó su casa. ¿Lo supo antes o después de juego?

–Por la mañana, a eso de las nueve y pico, llamé a mi esposa Susana y de pronto me dijo: “Espérate Erly, te dejo. Se está inundando la casa”. Me quedé frío, superpreocupado…

“A esa hora, empezó a entrar el agua y el nivel fue aumentando. Ella estaba con los dos niños y subieron rápido a la quinta planta.

“En la zona se inundaron ocho primeros pisos, cuatro de mi edificio (el 26 de la calle A, Reparto Hermanos Cruz), y cuatro del que está enfrente.

“Precisamente, los vecinos del frente, que siempre me apoyan, nos ayudaron luego de sacar el agua de su casa. También vinieron vecinos míos de donde vivía antes, cerca del Nueve Plantas. Así, poco a poco, se pudo controlar la situación”.

Las redes sociales captan la inundación en casa de Erly. Foto: Tomada de Facebook.

¿Cómo pudo pichar con esa presión?

–Lancé preocupado. Aunque uno no quiera, eso siempre pasa. Tuve que poner de mi parte y confiar en que todo estaría bien con mi familia. Y fue así, por suerte.

“Se me echaron a perder camas, gavetas, closets, colchones, algunos muebles. Todo eso lo boté nada más que llegué de Sancti Spíritus.

“Desde que regresé no he parado. Estoy poniendo las cosas en forma, botando lo que se echó a perder y tratando de recuperar otras cosas que se mojaron. Mucho reguero por todos lados…En fin”.

¿Las autoridades de la provincia se han sensibilizado con su situación?

–A mi casa vino la directora provincial del Inder. También del Inder me prestaron colchones personales. Además, como afectado por las inundaciones, me dieron colchones individuales para los niños. El Gobierno ha estado al tanto, al igual que la delegada de la zona.

¿Qué hará Erly ahora?

–Como todos saben, el contrato en el exterior se cayó. Tenía que llegar a Francia en una fecha límite, pero no pude. Se pudo haber hecho otra gestión, pero dije que no, que seguiría jugando con Pinar del Río hasta que se acabaran los playoffs. Ha sido una lástima que perdiéramos en el primero.

“De todos modos, el séptimo juego frente a Sancti Spíritus fue bueno, o sea, la última imagen que dejamos, como también el campeonato para nosotros. Tendremos que esperar al año que viene”.

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Erly Casanova ganó nueve partidos en la etapa clasificatoria y dos en los playoffs, siendo un puntal en las victorias de los dirigidos por Alexander Urquiola.

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