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Ver Venecia en carnaval

Por: Mireya Castañeda
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En un anterior carnaval, venecianos con sus disfraces frente al famoso Puente de los suspiros. Foto: elespañol.es.

Venecia es una de las ciudades más encantadoras y más románticas del mundo. Verla y experimentar su ritmo, su magia, es un sueño hecho realidad.

Tuve esa suerte hace unos años por la gentileza de una colega y resultó además en pleno carnaval veneciano. Precisamente, una información acerca de la fantástica fiesta este año, me ha llevado a compartir estos recuerdos.

Me resultó absolutamente surrealista que el colorido carnaval, entre los más importantes del mundo, fuera a celebrarse online y los diferentes eventos entonces se transmitirían en vivo .

Esa gran fiesta en la que participan miles de turistas, pero que es veneciana hasta la médula, se celebra anualmente, en una fecha variable que va de mediados de febrero y hasta marzo, depende del calendario litúrgico católico, pero siempre es a partir del Miércoles de Ceniza, día en el que inicia la Cuaresma, los 40 días antes de la Semana Santa.

Se asegura que nació en el año 1020 y en su larga historia nunca antes había sido suspendido por una enfermedad, ni siquiera la peste que azotó Europa en el siglo XIV.

Por el camino, sin embargo, una parada. En 1797, Napoleón Bonaparte, durante su ocupación a Venecia, prohibió los festejos por temor a que se generaran conspiraciones.

Pero hoy vivimos la pandemia de un virus altamente contaminante y 50 000 personas en la Plaza de San Marcos, provenientes de todas partes del mundo, era un riesgo de contagio muy peligroso. Entonces: carnaval sin la asistencia en persona.

Llegar a Venecia

Viajé a Venecia en tren y en la mismísima estación Santa Lucía fue el punto de inicio de un recorrido inolvidable. El primer impacto es grandioso: ahí está la bellísima ciudad en todo su esplendor, con el Gran Canal justo frente a ti, y el descubrimiento feliz de que, por lo menos en aquel momento, sus aguas eran azules, nada de la contaminación esperada por lo que califiqué de pérfidas algunas lecturas.

Atravesar el Gran Canal en vaporetto hasta la Plaza de San Marcos, te permite asegurar que Venecia es un museo al aire libre. Pasas por el Puente de Rialto, el más famoso, y en las dos orillas más de 200 bellísimos palacios, entre ellos Ca’ Pesaro (hoy Galería de Arte Moderno), Ca’Rezzonico (Museo del Settecento Veneziano), Ca’Corner (Museo de Arte Contemporáneo), y la más bella de todas: Ca’d’Oro.

El vaporetto te deja justo en la Plaza de San Marcos, para muchos la más bella del mundo. Es el corazón de la ciudad, con la Torre del Reloj del año 1496, el famoso Café Florián, el León alado, que rememora al festival internacional de cine de la ciudad, y la majestuosa Catedral de San Marcos, con su imponente fachada bizantina.

Justo al lado, como una extensión, nace la plazoleta de San Marcos, en la cual se alza el Palacio Ducal, cuyo color cambia según la luz del día, adquiriendo tonalidades rosas. Desde allí, un paseo al embarcadero de góndolas hasta llegar de súbito al Puente de los Suspiros, construido en piedra blanca, que comunicaba del tribunal a la prisión.

Ya se sabe que no toma su nombre por suspiros románticos, sino porque –dicen– los prisioneros se detenían por pocos segundos a mirar por las ventanitas la bellísima vista de la laguna, suspirando al saber que quizás no volverían a verla.

Pero llegó la noche y con ella nada menos que el carnaval. Entre el frío y la niebla de febrero o marzo, descubrí la pasión de los venecianos por esta tradición. La Plaza de San Marcos a plena capacidad, y entre nosotros los turistas, familias venecianas con disfraces de época, casi todos inspirados en la commedia dell’arte: Arlequín, Polichinela o Colombina, y las típicas máscaras.

Por cierto, una de las más vistas fue Dottore Plague, originalmente utilizada por los médicos que atendían a pacientes con peste, así creían evitar el contagio. La máscara tenía una nariz larga, en la que introducían hierbas aromáticas.

Visitar Venecia, con sus cientos de pequeñas islas, sus canales, los puentes que las comunican, y si es en carnaval, tiene el éxito asegurado.

Pude disfrutarla en vivo, sin pandemia, y ahora, surrealista o no, vuelvo a revivir aquellos momentos online. ¡Oportunidad única!

(Tomado de Granma)

Se han publicado 8 comentarios



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  • El Catalán dijo:

    Es verdad que tremenda suerte !!!

  • Marga dijo:

    Yo la visite en el mes de julio, lastima que no estaba en carnaval, pero es una de las ciudades mas maravillosas que he visto...

  • li dijo:

    me hizo recordar mucho este escrito, pues hace 3 años tuve la posibilidad de disfrutar de venecia junto a mi madre y tambien en pleno carnaval veneciano.una experiencia inolvidable!!!!

  • Anabel dijo:

    Yo también tuve la suerte de estar en Venecia justo en tiempo de carnaval. Las máscaras son preciosas. Con un frío inmenso recuerdo q disfruté ese día y lo aproveché al máximo.

  • Luna llena dijo:

    ... Que triste y sola está Venecia sin mi ...

  • Lena dijo:

    Me gustaría vivir esa fantástica experiencia.

  • Maggie dijo:

    Hola. Bella descripción, una aproximación certera a Venecia. Gracias Mireya Castañeda.

  • UNA TARDE DE NOVIEMBRE dijo:

    Ohhhh Venecia!!!!!!........mi amor!!!!!!!

Se han publicado 8 comentarios



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