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Estados Unidos: Ricos y pobres

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La repartición de las riquezas e incluso de las desgracias en los Estados Unidos es completamente injusta. Los gobiernos que rigen los destinos de esa sociedad se caracterizan por entregar o facilitar las riquezas a los más ricos y la pobreza y otras desgracias a los pobres.

 

La mayoría de las personas sensatas en los Estados Unidos comprenden que la sociedad ideal que proponen las clases dominantes de ese país como modelo universal presenta grandes deficiencias en muchos aspectos de la vida cotidiana.

Por una parte están los errores de la política exterior. Estos se  manifiestan fuera del territorio continental, en cualquier obscuro rincón del mundo y generalmente cuestan la vida a decenas de miles de inocentes, como en el caso de Iraq. Pero además,  su impacto afecta directamente a  los ciudadanos norteamericanos que mueren o resultan heridos en  la llamada guerra contra el terrorismo, y lo sufren además en diferentes grados los militares en activo y de las reservas y sus familiares. 

 

No se puede pasar por alto, que son las minorías más pobres las que aportan la principal carne de cañon" en las filas de las fuerzas armadas. 

 

Además, los norteamericanos en general fueron engañados desde el punto de vista económico, pues los costos de la guerra contra Iraq, supuestamente se pagarían con el petróleo iraquí, y en realidad los contribuyentes norteamericanos tendrán que sacar de sus bolsillos unos 200 000 millones de dólares para financiar una contienda en la que no podrán  vencer nunca, mientras las grandes compañías del complejo militar industrial engordan sus activos.

 

Pero hay otros errores que afectan a millones de ciudadanos estadounidenses, principalmente los que se cometen en el sistema de salud.

 

A pesar de que el tema sale a relucir en el marco de la campaña para las próximas elecciones presidenciales, despreciando lo que puede haber de propaganda y contrapropaganda por uno y otro candidato, se trata de una realidad que se viene agudizado en los últimos años como consecuencia de las reformas instrumentadas por la administración republicana que dirige George W. Bush.

Recientemente, el propio aspirante demócrata a la Casa Blanca, John Kerry, acusó en público a Bush de ocultar la verdad sobre los astronómicos fondos del programa de salud Medicare.

 

Existen informes que ponen de manifiesto que las personas mayores estarán en  obligadas en el año 2006  a pagar un 37 % de los beneficios de su Seguro Social y estas cifras han sido ocultadas hasta el presente.

 

Kerry manifestó que el actual presidente de los Estados Unidos aplica  "políticas inmorales" encaminadas  a transferir dinero del sistema de jubilación del Seguro Social a manos de las personas más ricas del país, en un hábil rejuego enmascarado en los recortes impositivos.

 

Errores e injusticias inimaginables presenta a los ciudadanos norteamericanos el sistema judicial de ese país.

Baste con decir que el dinero hace la gran diferencia. Son muy pocos los millonarios que saldan sus cuentas con la justicia  a través del dios dinero.

 

Los que no tienen esas posibilidades, se tienen que conformar con ir a la cárcel, a veces de por vida, e incluso al patíbulo.

La pena de muerte  presenta serias deficiencias, lo que se demuestra en el hecho de que existen decenas de casos que después de esperar la ejecución durante varios años, un simple análisis de ADN ha demostrado su inocencia.

 

El sistema judicial esta plagado además por la  discriminación racial, siendo los negros y latinos los más afectados.

Un último ejemplo, para no hacer más extenso este tema, es el relacionado con los derechos de ciudadanos para elegir a sus gobernantes.

 

Hoy existen millones de ciudadanos estadounidenses que no podrán votar en las elecciones del próximo 2 de noviembre por causa de las barreras judiciales, procesos defectuosos y otros problemas, afirman expertos en leyes y derechos civiles de ese país.

 

Hay unos cinco millones de ex convictos que han perdido su derecho al voto por haber cumplido una condena en prisión.

Según Mary Frances Berry, jefa de la Comisión de Derechos Humanos en  Estados Unidos, "Hay personas y funcionarios que intentan activamente evitar que voten aquellas personas que lo haría en contra de su partido y que generalmente, evitan que la gente negra vote por los demócratas".

 

Existen en el país muchas riquezas, una parte proveniente de otros países, donde por cierto, solo dejan más pobreza. Pero la repartición no es justa en Estados Unidos, sufren los pobres el enriquecimiento creciente de los ricos y además de injustas medidas de los gobiernos de turno que favorecen a las grandes compañías en detrimento de los que poco o nada tienen.

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Miguel Ángel Untoria Pedroso

Miguel Ángel Untoria Pedroso

Periodista cubano especializado en temas internacionales. Colaborador de Cubadebate.