Cubadebate

Los Medias Rojas de Boston derrotaron 14-6 a los Rayos de Tampa Bay, igualando a un triunfo por bando el duelo de la Serie Divisional de la Liga Americana.

Los ocho equipos envueltos en la postemporada de las Grandes Ligas salieron al ruedo a estadio lleno este viernes, cuando se jugaron los segundos partidos de las Series Divisionales de la Liga Americana e hicieron su debut los conjuntos de la Liga Nacional, en series de cinco partidos a ganar tres.

Los Astros olfatean el pasaje a la Serie de Campeonato

Con un ramillete de cinco anotaciones en la séptima entrada, los Astros de Houston derrotaron 9-4 a los Medias Blancas de Chicago, para lograr su segundo triunfo al hilo en este play-off divisional al mejor en cinco partidos, y poner un pie y medio en la ruta que les llevará a la Serie de Campeonato de la Liga Americana por quinto año consecutivo.

Con un imparable menos que sus rivales, los dirigidos por Dusty Baker fueron muchos más productivos y continuaron demostrando la fuerza de sus maderos, frente a uno de los mejores cuerpos de picheo de las Grandes Ligas.

Con el desafío igualado a cuatro carreras en el inning de la suerte, los relevistas Aaron Bummer (perdedor del juego) y Craig Kimbrel fueron incapaces de contener la ofensiva de los anfitriones.

Cañonazo al central de Yordan Álvarez que trajo la ventaja a casa, doblete de Carlos Correa a lo profundo de las praderas que remolcó dos, y bambinazo demoledor de Kyle Tucker con un compañero en circulación, completaron el paquete y sepultaron todas las esperanzas de los Medias Blancas en esta jornada.

El espirituano Yuliesky Gurriel, líder de bateo de la liga en la temporada regular, pegó un sencillo en cuatro turnos y empujó un par de anotaciones, para convertirse en el pelotero nacido en Cuba con más imparables (52) e impulsadas (27) en la historia de las postemporadas.

Los de Chicago también dejaron huellas. José Dariel Abreu (4-2), Luis Robert (4-3) y Yasmani Grandal (3-0) empujaron una carrera cada uno, algo que nunca habían hecho tres cubanos de un mismo equipo en un partido de play-off en la historia de la MLB.

La victoria fue a los récords del relevista Ryne Stanek, al lanzar un capítulo en blanco con dos ponches recetados, a pesar de permitir un indiscutible y regalar una base por bolas.

El duelo se reanudará este domingo en los predios del U.S Cellular Field de Chicago.

Un swing de Téllez… y cerveza para todos

Un swing del inicialista Rowdy Téllez, que se llevó la barda del jardín central con un hombre a bordo, fue suficiente para que los Cerveceros de Milwaukee vencieran a los Bravos de Atlanta 2-1 en el debut de ambas escuadras en la postemporada.

Corbin Burnes y Charlie Morton llenaron la pizarra de ceros desde sus montículos durante seis episodios, pero el bambinazo de Téllez en el séptimo le puso número a la casa y sacó del box a un Morton que había recetado nueve ponches.

Burnes se había ido antes a la cueva y no pudo aspirar a la victoria. El crédito se lo llevó Adrián Houser tirando un par de entradas, aunque soportó un estacazo de cuatro esquinas del emergente Doc Pederson en el octavo capítulo.

Josh Hader permitió un hit y regaló un boleto a la hora de recoger los bates, pero metió el brazo para mantener el plato cerrado y anotarse el salvamento.

Esta es la cuarta ocasión consecutiva en que los Cerveceros están presentes en la postemporada y la número 16 al hilo para los Bravos, la mayor cantidad por un equipo en la historia de la MLB sin poder alcanzar el título.

Medias Rojas bailan bajo lluvia de jonrones en el Tropicana Field

Los Medias Rojas de Boston dispararon cinco bambinazos en terreno ajeno (récord para la franquicia en postemporada) para quebrar 14-6 a unos inspirados Rayos de Tampa Bay e igualar a un triunfo por bando el otro duelo de la Serie Divisional de la Liga Americana.

Los chicos de Alex Cora remolcaron ocho de las 14 carreras gracias al poder de sus muñecas, ante el asombro de los miles de aficionados reunidos la noche de este viernes en el Tropicana Field.

Parecía que las cosas no les irían bien en esta jornada, cuando sus rivales sureños marcaron cinco carreras en el mismo primer episodio al abridor Chris Sale para dinamitarle el box temprano, gracias a un sencillo impulsor del cubano Yandi Díaz y a un jonronazo con la casa llena de Jordan Luplow, pero la noche tenía reservadas muchas más emociones.

Un show tremendo de cuadrangulares se desató a partir de la tercera entrada para levantar el ego de los habitantes de Nueva Inglaterra. Sendos estacazos consecutivos de Xanders Bogaerts (5-3) y Alex Verdugo (5-3), que sacaron del montículo al abridor Shane Baz; otro solitario de Enrique Hernández (6-5), uno de J. D. Martínez (5-4) con dos a bordo en el quinto, y otro más de Rafael Deves (4-1) con un compañero en base en el octavo sentenciaron a sus contrarios.

Al final de la contienda completaron la masacre con un trío de carreras, para redondear una ofensiva cruel de 20 imparables, dejar humeante el ruedo y poner caliente la batalla por el banderín divisional.

La otra carrera de los Rayos la remolcó el coreano Ji-Man Choi con cuadrangular en la sexta entrada frente a los envíos de Tanner Houck, a la postre ganador del choque al aceptar solo esa rayita en cinco episodios de relevo.

Collin McHugh cargó con el revés al soportar tres anotaciones en apenas un inning y dos tercios de labor.

La fuerza de los Gigantes venció a los campeones mundiales

Tres swings que sacaron pelotas fuera del parque fue todo lo que necesitaron los Gigantes de San Francisco para derrotar a los Dodgers de los Ángeles 4-0 en su casa del Oracle Park y comenzar arriba en el duelo por uno de los títulos divisionales de la Liga Nacional.

Un jonrón de Buster Posey con una almohadilla ocupada en el mismo primer inning, y dos solitarios de Kris Bryant y Brandon Crawford en el séptimo y octavo capítulos, fueron todas las acciones productivas del partido entre las dos escuadras con los mejores récords de la temporada.

Logan Webb se llevó el triunfo ante los actuales campeones mundiales ponchando a 10 rivales durante cinco entradas y dos tercios; Tayler Rogers se anotó un hold al sacar un out en el octavo, y Camilo Doval cerró a paso chévere con un ponche incluido para salvar el desafío.

El abridor Walker Buehler se fue derrotado tras tolerar tres anotaciones en seis entradas y un tercio, mientras ponchaba a cinco y concedía una base por bolas, la única que dieron en el partido los serpentineros de ambos equipos.