Cubadebate

Anochece en la Loma de la Cruz y cada peregrino quiere tocarla y fotografiarse con ella. Foto: Susana Tesoro/ Cubadebate.

Un numeroso grupo de periodistas que asistió a la Feria Internacional de Turismo, FitCuba 2017 en Holguín, se unió a las celebraciones de las Romerías de Mayo, precisamente el 3 de mayo, día de la Cruz, subieron a la conocida Loma para observar allí una tradición, un pueblo y una fusión de culturas.

Fue un espectáculo ver al anochecer, cómo se aglomeraban holguineros, turistas, periodistas, creyentes y no creyentes, alrededor de la Cruz, ante la cual encendían velas, colocaban ofrendas: frutas, alimentos, en un sincretismo religioso, desconocido para los visitantes.

La posibilidad de tener una vista extraordinaria desde el punto más alto de la ciudad de Holguín, la sorpresa de ver cómo al caer la noche se iluminaba la Cruz, la gente cumpliendo sus promesas, provocaron un aluvión de fotógrafos con cámaras y celulares tomado aquellas maravillosas imágenes, que llevaban consigo a su país no sólo para mostrarla a familiares y amigos, sino también para insertarlas en sus publicaciones.

Se tomaban Selfies, entrevistaban a los pobladores y quedaron encantados con aquel espectáculo popular.

La Loma de la Cruz, se eleva a solo 261 metros sobre el nivel del mar, en Cuba al Norte de la Ciudad de Holguín, y según cuentan ha sido una parada obligatoria para visitantes y refugio de noctámbulos y artistas.

La Loma de la Cruz toma su nombre de una cruz de madera que existe en su cima, símbolo protector para muchos, depósito de promesas u original ornamento para otros.

La primera cruz se colocó en 1790, y fue subida por el fraile Francisco Antonio de Alegría, prior de la comunidad franciscana de Holguin. A partir de ese momento dejó de conocérsele como "Cerro Bayado" para tomar su nombre actual "Loma de la Cruz".

El fray Francisco A. de Alegría, que subió el cerro con la cruz a cuestas, instauró allí las Romerías de Mayo, una fiesta religioso-tradicional española, donde se recuerda la fecha en que Santa Elena, madre del emperador Constantino el Grande, murió en el calvario atada a una cruz de madera.

A principios del siglo XX, por iniciativa de un vecino llamado Oscar Albanés (historiador y padre de la Bibliotecología en Holguin), se llevaron a cabo obras de restauración en las laderas de la Loma de la Cruz, en la base y en la cima.

La restauración fue realizada por el arquitecto Vicente Biosca, concluyéndose el 3 de mayo de 1950, día en que se colocó la segunda cruz, pues la primera ya estaba muy deteriorada. Estas obras fueron financiadas por los pobladores de la villa en Holguin, los cuales recurrieron a rifas, colectas, verbenas, etc.

Con el tiempo sucedieron diversas actividades religiosas conocidas hoy como las fiestas de mayo, que adquirieron carácter popular, todas ellas teniendo como patrón la Loma de la Cruz de Holguín.

La tercera cruz fue colocada en los primeros años de la década del noventa, pues un rayo seco, de esos que caen solitarios, inesperados y sin tormenta, la destruyó al impactar directamente sobre ella.

La llegada de la primavera a Holguín se identifica con las de Romerías de mayo en un acto de tradición insertada en la vida actual del holguinero. Toques afrocubanos de tambores convocaron a la danza en los alrededores del parque Calixto García y pusieron en evidencia las raíces comunes de los pueblos Latinoamericanos y Caribeños, donde la introducción de esclavos africanos en la época de la colonia gestó sociedades mestizas.

Las Romerías de mayo favorecen la espiritualidad, y esta vez dominó 15 escenarios, que funcionaban de forma simultánea en conciertos, presentaciones de danza, teatro, cine, paneles teóricos, y cerca de 30 exposiciones de fotos y artes plásticas.

Populares artistas cubanos estaban allí: la orquesta Havana D’ Primera, David Blanco y su grupo, Toques del Río, Hayla, el conjunto Síntesis y los cantautores Eduardo Sosa, Polito Ibañez, Gerardo Alfonso, Raúl Paz y William Vivanco, la banda Zeus y la Orquesta Sinfónica de Holguín.

Estudiantes de más de 15 países se unieron el 4 de mayo en un abrazo gigantesco en plena calle, como acto simbólico de unidad entre el arte y el pueblo para denunciar la persistencia del bloqueo económico, comercial y financiero impuesto por Estados Unidos a Cuba.

Diversas actividades dentro de las Romerías fueron dedicadas al líder histórico de la Revolución Cubana, Fidel Castro al Guerrillero Heroico, Ernesto Che Guevara; y a los jóvenes rebeldes del mundo, estuvo dedicada la cita.

El propósito de los organizadores, de convertir la cita en un festival de culturas y juventudes artísticas, se cumplió espontáneamente, en ambiente de festividad y paz. No obstante, el presidente de las Romerías, Alexis Triana, aspira a una reunión mundial mayor donde se multipliquen el amor al prójimo, a través de los abrazos.

Un ir y venir de personas a la Cruz se mantuvo hasta altas horas la noche. Foto: Susana Tesoro /Cubadebate.

Este holguinero fue con su esposa y su hija a pagar una promesa hecha por la enfermedad de su madre. Foto: Susana Tesoro/ Cubadebate.

Con una botella de ron sobre su cabeza, subió este señor la Loma hasta llegar a la Cruz. Foto: Susana Tesoro/ Cubadebate.

Llevarse la imagen de la Cruz y de la ciudad de Holguín era el trofeo de la subida. Foto: Susana Tesoro/ Cubadebate.