Cubadebate

Que lujo esa actuacion , de primerisima categoria, bienvenido a nuestro pais.

Vedadero arte, muy buen concierto....

Hace falta que se pongan de acuerdo a la hora de hacer público las noticias, ayer dijeron una fecha y hoy otra, los periodistas deben ser serios, esto causa dudas en la población y pierde credibilidad el sitio que publica.

Sobre el concierto de Andrea Bucheli, a quien se le cree, ayer se informó por el ministro de Turismo que era en saludo a los 500 años de la Hanana y que era el 28 de diciembre. Ahora el instituto de la música dice que es en el 2020.
Tambien veo lógico la información por el instituto de la música, que un ministro informando sobre la actuación de un cantante

Todo un honor para nosotros q este artista de la canción nos cante

Me equivoqué...es ¨celebrar¨

SERA BIENVENIDO EXELENTISIMO CANTANTE LOS CUBANOS LO APRECIAMOS MUCHO ANDREA USTED LO PODRA CONSTACTAR CUANDO NOS VISITE LOS ESPERAMOS CON LOS BRAZOS ABIERTOS PARA NOSOTROS ES UN GRANDISIMO PRIVILEGIO AUNQUE LO TENGAMOS QUE VER POR LA TV YA QUE VIVIMOS LEJOS DE LA CAPITAL PERO LO DISFRUTAREMOS COMO SI ESTUBIERAMOS ANTE USTED BIENVENIDO HERMANO

Será un gran privilegio disfrutar de Andrea Bocceli en nuestro país. Nos honra su presencia.

Sí, que no pase cmo el esperado concierto de Plácido Domingo, que al final todo el mundo calló y no dijeron ni pío.

Crónicas de un paseo inolvidable por la Ciudad y la Historia.

El sábado decidí dar una vuelta por las calles de la Habana vieja con mi pareja. Después de un largo caminar y recrearnos de las bellezas de mi ciudad y todo lo que se ha podido rescatar del olvido y el deterioro, decidimos entrar a un restaurante de estilo rustico y natural. Se trataba de La casa de Parra (Hanói), situado en Teniente Rey y Bernaza, que está justo en una esquina. Entramos y nos atendieron al momento, un dependiente muy jocoso y campechano pero totalmente correcto en su expresión. (Le puse, el chino) Lógicamente pedimos el plato elegido y nos sentamos a deleitarnos del exquisito sabor del mismo. El plato fuerte era carne ripeada o ropa vieja, como se conoce tradicionalmente en nuestro país. Al cabo de diez minutos aparecieron los músicos encargados de animar el ambiente. Se trataba de un conjunto de muy pequeño formato que constaba de percusión, contrabajo, tres, guitarra y cantante, se hacen llamar (Somos de aquí). Realmente sin impresión ninguna pensé en voz baja y me dije: Me gusta la música tradicional cubana así que me alegró mucho saber que tendría también la oportunidad de disfrutar de esa actuación acompañado de mi mujer. De pronto empieza la función y FUAHHH!!, deje por un momento de digerir mi delicioso manjar y empiezo a erizarme de arriba a abajo. Mi emoción era tan grande al oír lo que hacían con esos instrumentos y la voz, melodía y sentimiento del cantante que de pronto mi mente empezó a viajar de nuevo a mi infancia y me pareció ver a mi madre cantando a la par del tocadiscos y recordé tantos momentos bellos al oírlos tocar y cantar que decidí buscar algo más de dinero en un cajero cercano para disfrutar un tiempo más de estos increíbles músicos que nadie importante de la música cubana se ha parado a decirles en verdad cuanto talento y corazón derrochan a la hora de hacer su trabajo. Al cabo de una media hora de oírlos, al ver mi emoción disfrutando de su estilo musical decidieron acercarse a mí a hablarme y preguntarme sobre mis inquietudes musicales. Mi esposa que no tiene tanta cultura sobre la música cubana también estaba emocionada y hasta lloraba cuando oía una y otra canción. Ahí les conté sobre mi madre, la cual perdí desgraciadamente hace unos 8 meses. Era muy musical y le gustaba cantar y aunque no lo hacía profesionalmente si nos cantaba desde pequeños a mi hermana y a mí y también se oía mucho disco de música antológica y tradicional en casa, además de alguna que otra música del mundo que estuviera de moda en aquellos años, como ABBA, Demis Roussos, Andy Gee, Beatles, Mocedades, Peret, Pasteles verdes, Wilfrido Vargas, Oscar de León, etc.
Hablé mucho con su cantante, el cual me conto de su vida, pues primeramente era deportista, campeón de artes marciales en su momento pero una lesión le hizo tener que abandonar la práctica de ese deporte. Me comentaba que su padre lo ayudo a no deprimirse y le enseño que había otros talentos en el para ganarse la vida y uno de ellos era que lo había oído cantar y que lo hacía muy bien. Entonces ahí fue cuando empezó su vida musical pasando por diferentes grupos de la Isla. Decidió salir de Guantánamo y radicarse en la Habana. Entonces hoy día actúa en el restaurant y un Hotel de lujo con su pequeño grupo musical, pero músicos con gran talento, además de alguna que otra gira extranjera. Con los músicos también pude hablar un poco de sus vidas. El trasero me decía que el también estuvo trabajando en el extranjero y me hizo una anécdota de una vez que tocaron en una discoteca, propiedad de un cubano radicado fuera, hijo de un dirigente de aquellos tiempos, el cual quedó asombrado al ver lo contento que quedaron los clientes con el trabajo que hicieron y lo bien que fueron acogidos por los asiduos al lugar que le pedían más y más música cubana.

Es una pena que estos músicos con tanto talento estén escondidos en todo nuestro país prácticamente desconocidos, con talento suficiente para imponerse, así como le pasó al desafortunadamente desaparecido Polo Montañés en su momento que primero fue reconocido en Colombia donde hoy día es todo un ídolo y luego aquí en Cuba. Es penoso que esto suceda una y otra vez con nuestra música, con nuestros músicos y cantantes. Se conocen más fuera que dentro de Cuba y parte de la culpa la tienen nuestra radio y nuestra televisión. Todo está mercantilizado. Ellos mismos me contaban que para salir en la TV tendrían que pagar un monto de 300 cuc mínimo. Ese lujo hoy día se lo puede dar un reggaetonero, no ellos, que lo que pueden ganar no les da para pagar el pantallazo, como diríamos en buen cubano. Los buenos músicos y cantantes están derrochando talento por las calles de nuestro país y a poca gente les interesa que sigan pasando inadvertidos por la vida. Creo que vale la pena tratar de rescatar esta tradición musical, modernizarla, como lo han logrado estos muchachones que hacen versiones hasta de música Americana a ritmo de Son cubano con una calidad que te saca las lágrimas de la emoción. A los músicos que practican y respetan esta música tradicional y están arriba en la cadena alimenticia!, por favor, no se trata solo de sentarse a consumir deliciosos platos criollos en el restaurante y disfrutar de la música de estos guerreros del buen sonido y decirles que buenos son. Ayuden a estos artistas de barrio a llegar donde merecen por su talento, que es igual que ayudar a no perder nuestras raíces musicales.
Pues nada amigos. Si desean almorzar en un excelente lugar en La Habana, lléguense al restaurante Hanói con excelentes precios y si les gusta además disfrutar de la música tradicional cubana fusionada y modernizada, con ritmos americanos, latinos, caribeños, europeos de increíble factura, sin dejar de respetar su esencia sonera y trovadoresca criolla, allí podrá disfrutar también de este excelente pequeño, pero grande de corazón; Quinteto Tradicional, Son de aquí.

Muchas gracias.

Cuando es que llega andrea bocelli a cuba