Cubadebate

Cimafunk no necesita demasiada presentación. Foto: Lariza López.

A Cimafunk le gusta la comida hirviendo, el caramelo con azúcar de caña. Lo de él, es la candela, sazonar hasta que se acabe el día y hacer lo que dé la gana en cada madrugada. A él le gusta la melcochera, mezclar hasta que suene y sepa demasiado rico, que se pegue el estribillo, el sabor, que suene alto El Alimento en un almendrón, en un solar de Marianao,  en una esquina de Nueva York o cualquier emisora de Madrid.

Cimafunk no necesita demasiada presentación. Ya sabemos que dejó los coros de una Iglesia y se fue hacer trova, se fue de la carrera de Medicina en tercer año, que nunca estudió música, pero que por ella salió de Pinar del Río. Sabemos que fue improvisando con nuevos ritmos y llegó de casualidad al funk, que revolucionó y conquistó con su primer disco Terapia y su Me voy se coló como himno en cada casa. No importó la edad, aquello fue una fiebre de 40 grados.

Este 8 de octubre, el Cima estrena nuevo disco. “El Alimento que tu cuerpa necesita”, anuncia en su cuenta oficial de Instagram. Lo que viene, para que tengan una idea, es para sacar del drama a cualquiera, para que dejes lo que estás haciendo y te pongas a bailar, para que descargues de principio a fin y hasta te pongas sentimental con Salvaje, que interpreta junto al mítico Chucho Valdés. “Yo vengo con to´”, canta este artista. Y hay que creerle.

“Lo que ha hecho Cimafunk es unir las dos tendencias, la afrocubana y la afroamericana”, ha confesado el propio Valdés,  agregando: “Ha convertido esto en una nueva escuela que hasta ahora no había escuchado”.

Cimafunk no me dijo que se metió en el reguetón por las chicas y “por el hecho de que cualquiera con tarjeta de sonido y micrófono puede hacerlo,” tampoco se lo pregunté. Pero el The New York Times lo ha hecho, y hablado de El Alimento como “la búsqueda para crear una nación bajo un surco”, y eso es válido recalcarlo.

Pasó el tiempo. Llegó la trova, las canciones exóticas, sus locuras. Y estamos frente a 13 nuevos temas que pueden servir de puente y viaje a varios estilos y épocas. En la olla que está hirviendo, hay ritmos afrocubanos con ritmos globales, y sobresale funk, el hip hop y el soul.

 

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También hay un nombre clave: Jack Splash, ganador de  varios Grammys, un productor que ha trabajo con artistas de la talla de Kendrick Lamar, Alicia Keys, John Legend, GoodieMob, Valerie June, Tank&theBangas.

Splash dice que El Alimento es "intrépido", y su enfoque "rompe muchos límites musicales". “Nuestro principal objetivo, al iniciar este proyecto, era mezclar todo lo que nos gustaba en una nueva versión futurista de lo que podría ser la música afrocubana. Sin reglas, sin límites... sólo mucho amor, funk y diversión", refiere Jack.

Pero para Cima el mejor alimento “se llama sabiduría”. Y ese es quizás el ingrediente especial de este nuevo fonograma, unido a las potentes colaboraciones que más adelante citaremos. Pongan de fondo el tema que desean, calienten, tiren su pasillo y tómense su pastillita de Funk Aspirin.

Portada del nuevo disco de Cimafunk.

—¿Qué fue lo más difícil en la realización de este nuevo fonograma?

Para mí lo más difícil fue buscar en mis raíces, en mi familia, en lo que me alimenta, encontrar mi esencia. En este disco en particular, se puede ver mucho de mis raíces, de mi identidad como cubano, como afrocubano. Mezclar todo eso fue difícil,  pero fue saliendo y así logramos esa sonoridad.

—Has dicho que El Alimento marca un antes y un después en tu carrera.  ¿Por qué? ¿Es tan diferente?

Creo que lo diferente de este disco está en que puedes ver mi identidad reflejada, no solo el sonido o las letras, sino también en la forma en la que me proyecto ante la vida y en mi trabajo. Pasé tiempo estudiando, alimentándome de mucha música de diferentes lugares, de diferentes tiempos, para ayudarme a entender de dónde vengo, quién soy musicalmente y hacia dónde me quiero dirigir.

—Alimento para el alma, a juzgar por los adelantos como Funk Aspirin y  Caramelo, es una propuesta con mucha energía, mucha mezcla de todo cuanto quisiste. ¿Qué te motivó a escribir estas canciones? ¿Cuál sería el ingrediente especial?

El ingrediente principal de este disco y de estas canciones es el sexo, la familia, la diversión, los amigos, todo lo que forma parte de mi vida diaria. Eso es lo que me alimenta y lo que me inspira.

—Es un disco lleno de colaboraciones, ¿qué experiencias te deja trabajar con leyendas de la música como George Clinton, Chucho Valdés, Los Papines y artistas como CeeLo Green, Lupe Fiasco y El Micha?

Tener a personas como George Clinton, CeeLo Green, Chucho Valdés y ChocQuibTown y hasta al Micha, todos con su sello y su originalidad, es un sueño cumplido, un gran privilegio.  En general, todas las colaboraciones están motivadas por su talento y su sonido.

Pude darme cuenta que todos los artistas invitados tienen sus raíces africanas profundamente presentes en la música que hacen. No importa su nacionalidad, en todos está muy presente su negritud en su arte, y eso es algo que me motivó muchísimo.

—Conocer a Jack Splash, ¿cómo fue, cuánto te aportó, cómo fluyó el proceso?

Jack Splash, un productor con tanta experiencia, me aportó mucho, me abrió otros horizontes. Nos dejamos llevar por la música, a donde ella nos llevaba, allí íbamos. Fue un proceso que disfrutamos muchísimo. Trabajar con una nueva tecnología más avanzada le dio mucho potencial al disco también. Descubrí muchas cosas nuevas en mí y en lo que podía hacer con mi música.

 

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—Cuéntame un poco de la experiencia que te está dejando tu actual gira por Europa y Estados Unidos ¿cómo acoge el público extranjero tu música?

No hay nada como cantar para tus fans donde quiera que estén, hay gente que te descubren y me encanta ver sus reacciones también. Creo que trasmitimos buena música y las mejores energías y eso siempre se recibe bien dondequiera que nos presentamos. Ha sido una gira maravillosa y ahora nos espera Europa, cada vez asiste más gente a los conciertos y eso nos motiva a seguir creando y seguir divirtiéndonos. Disfruto mucho el baile, la música y el escenario dondequiera que me presento.

Un disco de pura diversión, de innovación, de búsqueda de otros horizontes . Foto: Sama Dizayee

—Temas para descargar, amar, bailar, gozar, y hasta enamorar cuál sería el resumen de este disco y cuánto te aporta y te aportará aún como artista?

En resumen es eso, un disco de pura diversión, de innovación, de búsqueda de otros horizontes y también tiene mucho de mí y de mi esencia. Creo que como Terapia es un disco muy importante en mi carrera.

—¿Las canciones de El Alimento son historias independientes o cada una enlaza a la otra? ¿cómo lo concebiste?

Las canciones fueron saliendo de forma muy orgánica, todas son diferentes, cuentas diversas historias, pero creo que lo que las une es la sabrosura, la sensualidad, la raza.

—¿Cuánto extrañas presentarte en los escenarios cubanos?

Mucho, extraño mucho tocar en mi Cuba, con mis fans los que me apoyaron siempre desde el inicio. Tocar en Cuba es otro nivel de gozadera, de complicidad con mi gente.

Confiesa que vamos a bailar mucho con El Alimento. Que fue este disco el que lo ayudó a procesar con positividad estos días pandémicos. Que cumplió no uno, sino varios sueños con estas canciones. Descubrió mucho de él que desconocía. El mismísimo padre del funk George Clinton, confesó que Cima lo traslada allí, al pasado, manteniéndolo a su vez en el presente. Siempre, como nos tienes acostumbrados, buscando maneras de reinventarse, con mucha frescura, con mucho flow.

Descubrió mucho de él que desconocía. Foto: Fernanda de la Torre.

Las canciones fueron saliendo de forma muy orgánica, todas son diferentes. Foto: Fernanda de la Torre.

Nos dejamos llevar por la música, a donde ella nos llevaba, allí íbamos. Foto: Fernanda de la Torre.

El Alimento es "intrépido", y su enfoque "rompe muchos límites musicales". Foto: Ellen Miller.

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