Cubadebate

Desde pequeña fue alegre, traviesa e imaginativa, siempre tuvo claro que quería ser artista, y su familia lo celebró. Foto: Cortesía de la entrevistada.

¡Como pez en el agua!, así se sintió Danay Cruz la primera vez que actuó. Una niña que jugaba a crear personajes y guiones, sus amigos formaban parte del reparto y ella se metía por completo en la historia; hoy es una imagen conocida en nuestro país, que ha destacado tanto en el drama como en el humor, entregándose a cada personaje que interpreta.

Desde pequeña fue alegre, traviesa e imaginativa, siempre tuvo claro que quería ser artista, y su familia lo celebró. Para ellos, ella es sinónimo de risas y alegría, y fueron su mejor bastón de apoyo para desarrollar su vocación. “Mi mamá me llevó, desde que yo era pequeña, a la casa de la cultura de mi municipio, y mi papá, para motivarme, me regaló todos los cassettes de “Cantándole al Sol” porque por esos años todo parecía indicar que me iba a inclinar por la música, amo cantar”.

Su primera presentación en público fue cuando tenía 8 años, ella misma, con una grabadora y un background, preparó la canción con la que se presentó. Sin embargo fue participar en una obra de teatro lo que simbolizó un gran descubrimiento para ella, con certeza confirmó cual era su vocación.

Ingresó a la Escuela Profesional de Arte Manuel Muñoz Cedeño, de Bayamo, a estudiar actuación, cuando tenía 15 años: “Me esforcé mucho, pues por esa carrera optaban adolescentes de todo el Oriente y eran muy pocas plazas, además, los de municipios lo teníamos más difícil”, confesó. Allí pasó 4 años, y agradece a sus compañeros y profesores por contribuir a su desarrollo como actriz. Al graduarse realizó las prácticas en el grupo Trébol Teatro de la Provincia de Holguín, para más tarde trasladarse a La Habana y comenzar nuevos proyectos.

Danay disfruta con cada trabajo, bien sea drama o humor, pues cada uno le aporta un ángulo. El humor, por su complejidad, hace que ponga a prueba sus habilidades, hacer reír no es cosa fácil, debe introducirse en la psiquis del espectador, para ella todo el proceso es un aprendizaje que la nutre de recursos que luego pueden complementarse en estos dos géneros, pues nada es dramático o humorísticamente puro.

Foto: Cortesía de la entrevistada.

“Indudablemente Lola Mento es un personaje que me ha marcado y lo seguirá haciendo”, reconoció. Lola Mento nace en el programa humorístico Ottoxotto donde salió dos veces y por la gran aceptación del público tuvo la posibilidad de aparecer en el programa 25 por Segundo, creado para celebrar los 25 años del Centro Promotor del Humor.

Sobre este personaje aseguró: “Siento que hay mucho de mí en Lola: las dos somos del campo, la mayoría de las anécdotas que cuento en mis videos son mis propias vivencias y de mi familia, las palabras que digo que algunos no entienden, porque son netamente orientales, las he escuchado toda mi vida, en mi casa, en el barrio, soy una guajira orgullosa de mi tierra como lo es Lola de su Guasimita”.

También comentó: “Lola llama la atención porque no es el típico cliché de guajira, sino una moderna, que está al tanto de lo que sucede a su alrededor, dice las cosas como las piensa, con la mayor naturalidad, con su lenguaje único y guasimitero, y creo que es eso lo que resulta simpático”.

Foto: Cortesía de la entrevistada.

El humor femenino exige talento y capacidad; entre sus planes está continuar representando a la mujer cubana en el humor y demostrar que ellas no están exentas del género. “La mujer tiene que hacerse sentir en el humor cubano, desmintiendo cualquier prejuicio. Por suerte ya no somos tan excepcionales y se van sumando rostros y talentos cada vez con más naturalidad, una tendencia que considero irreversible”, comentó.

Desde el primer momento Danay ha recibido un gran apoyo de familiares y de personas que disfrutan al ver a Lola, por ello está muy agradecida con todos los que han impulsado a este personaje a convertirse en quien es hoy.

“Cuando recibo una foto o un video de alguna niña imitándome me siento orgullosa de mi trabajo, llegar a las personas haciendo humor es difícil, más aun a los niños, son el mejor público pues ellos no mienten. Que Lola llegue a ellos me hace sentirme dichosa y con ganas de seguir adelante, si alguna vez pensara en renunciar, creo que miraría antes uno de esos videos y se borraría en mí todo intento de retroceso”.

Como antes mencionó, cantar es una de sus pasiones, por eso valora tanto haber interpretado el personaje de Ada, una campesina que se entretiene escuchando la radio y fantasea con formar parte de una radionovela, en el mediometraje musical “En el Aire”, que le dio la posibilidad de grabar los temas musicales en los estudios de la EGREEM, y formar parte del pequeño grupo de actores que han hecho musical para televisión.

Foto: Cortesía de la entrevistada.

El parecido entre Judith y ella está en el profundo amor hacia las abuelas, Danay conserva una gran relación de respeto y amor con las suyas. “Es una niña mimada por su abuela, sí, pero nunca esperé que fuera considerado un personaje negativo pues no tiene malos sentimientos. Me alegra leer los debates y polémicas que ha generado y no desecho ningún comentario. La novela está empezando, aun falta mucho por descubrir de ella”, comentó al hablar de su personaje en la telenovela Vuelve a Mirar.

En un principio Danay fue escogida, mediante un casting, para interpretar el personaje de Aidana (la amiga de Karla). Luego la llamaron para ofrecerle el personaje de Judith pues la actriz que lo iba a interpretar no podría hacerlo. “Me puse muy contenta porque es un personaje con más peso en la historia y lo asumí con un poco de temor pues era mi primera gran producción. Sin embargo no fue difícil interpretarla porque es una muchacha bastante cercana a mí en cuanto a la edad, y aunque su forma de actuar es muy diferente a la mía, poco a poco me fui adentrando en los conflicto del personaje y disfruté de la experiencia”, confesó.

El equipo y el elenco de Vuelve a Mirar la acogió y apoyó durante todo el proceso y ella guarda con gratitud todas las experiencias. “La escena más traumática, sin dudas, fue decir un texto en inglés, porque no domino mucho este idioma, y tenía el temor de decirlo mal, estuve intranquila hasta el día en que salió, que gracias a Dios, fue antes de lo que esperaba”. “También tengo otras muy divertidas: en una escena donde tenía que limpiar nunca me dijeron que cortaron, y yo seguí limpiando la casa como si estuvieran grabando, mientras todo el equipo se reía de mí”, recuerda entre risas.

Foto: Cortesía de la entrevistada.

A Danay le gusta hacer ejercicios, disfrutar del buen cine y de las series, compartir con su familia, pareja y amigas, además de dedicar tiempo a las redes sociales y a sus seguidores. Le apasiona la historia, sino fuera actriz le hubiera encantado ser arqueóloga, pues encuentra interesante el estudio de las sociedades de otros tiempos.

La ciudad la complementa de varias formas pero el campo le transmite la tranquilidad que tanto le gusta. Su natal Báguanos la recuerda del mismo modo en que ella lo tiene presente a él, “Creo que nunca debemos olvidar de donde venimos, siempre digo con mucho orgullo de donde soy porque el arte de vivir es precisamente eso, cambiar las hojas sin perder las raíces”.

Le encantaría hacer cine. En estos momentos tiene proyectos por confirmar y algunos de los que aún no puede decir nada, pero tiene verdaderos deseos de trabajar y enrolarse en nuevas propuestas, se siente realizada, ha luchado por sus sueños y en poco tiempo se ha convertido en lo que siempre deseó, ser artista.

“Mi mejor experiencia como actriz siempre será presentarme ante el público y lograr abstraerlo, formar una perfecta conexión de reciprocidad de sensaciones y ante todo, recibir el aplauso verdadero”.

En Video, Danay haciendo humor

En video, entrevista a Judith, la de la novela Vuelve a Mirar

(Tomado de ¡ahora!)