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Los “momentos de la verdad”, Estados Unidos en 2020

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Elecciones 2020 en Estados Unidos: todos los candidatos demócratas que compiten por enfrentarse a Trump. Ilustración: BBC.

Las primarias presidenciales están en pleno movimiento en Estados Unidos, donde una parte muy significativa de la población se apresta a darle batalla al fascismo corporizado en Donald Trump. Prácticamente a diario conocemos nuevas noticias, encuestas, declaraciones de los candidatos y una masiva propaganda electoral mediante anuncios pagados en los medios (lo cual nos hace pensar en cuántas formas más útiles podrían ser utilizados esos enormes recursos).

Hay tres eventos que deben ser decisivos para un país dividido y cada vez más polarizado desde el punto de vista político–social y de visión de su futuro:

  • El llamado “supermartes”, el próximo 3 de marzo
  • La Convención Nacional Demócrata, del 13 al 16 de julio en Milwaukee, Wisconsin
  • El día de las elecciones presidenciales y generales, el 3 de noviembre

Supermartes, aparece Bloomberg como contendiente por la candidatura

¿Serán Bernie Sanders y Michael Bloomberg los líderes y principales contendientes después del supermartes? Sus posiciones políticas, tal como en las fotos, de izquierda a derecha.

Aunque los candidatos han destinado sus esfuerzos a los cuatro estados que votan en febrero, la importancia numérica de estos es relativa. En Iowa, 41 delegados, y en Nuevo Hampshire, tan solo 24. Buttigieg lleva de momento 22–23, frente a los 21 de Sanders. En Nevada se disputarán 36 y en Carolina del Sur, 54.

Un total de 155, una minucia comparada con los 1 357 que están en juego en el supermartes, el 3 de marzo, cuando votarán 14 estados, entre ellos California (con 415 delegados) y Texas (228).

El supermartes está destinado a dibujar en gran medida la suerte de la contienda, y no solo por su importancia cuantitativa.

Después del desastroso inicio del que era el favorito, el exvicepresidente Joe Biden (cuarto lugar en Iowa, quinto en Nuevo Hampshire), es muy posible que la dirección derechista del Partido Demócrata, el poderoso Comité Nacional Demócrata, ponga toda su capacidad, recursos, habilidad manipulativa y mediática en apoyar a Michael Bloomberg como última alternativa ante lo que es una verdadera pesadilla para ese sector: que el pueblo estadounidense –sobre todo jóvenes y minorías– se decida por Bernie Sanders y dé al Partido Demócrata un histórico giro hacia líneas socialdemócratas.

Aunque tímido y de relativos alcances, sería un primer episodio conscientemente anticapitalista en la historia de Estados Unidos.

Una de las grandes interrogantes de este primer “momento de la verdad” gira en torno a cuáles serán los resultados de Michael Bloomberg en su debut. El sector derechista (que llaman eufemísticamente “moderado”) del Partido Demócrata está dividiendo sus votos entre Buttigieg, Klobuchar y Biden, a los que se sumaría Bloomberg a partir del 3 de marzo. En cambio, en el ala liberal y/o “socialista democrática” solo Elizabeth Warren compite con Sanders por la misma base de votantes.

Muchas interrogantes quedarán esclarecidas luego del 3 de marzo, cuando se conozca el voto de 1 512 de los 3 992 delegados que son elegidos por el pueblo, a los que después se sumarán los 771 superdelegados nombrados por el Comité Nacional Demócrata sin el voto de las bases.

No es solo la cantidad de delegados que obtenga cada contendiente; se trata, además, del gran impacto psicológico y la posibilidad de seguir recibiendo dinero (o no) para la campaña, como se ha visto dramáticamente en el caso de Joe Biden, cuyas dos fuertes derrotas en Iowa y Nuevo Hampshire han provocado un colapso de sus fondos de campaña.

Después, los días más críticos de las primarias serían el 10 de marzo (votan siete estados, con 365 delegados), el 17 de marzo (cuatro estados, incluido Florida, con 577 delegados) y el 28 de abril (seis estados, 663 delegados), y cerrarían el 6 de junio, con la última primaria.

La Convención Nacional Demócrata

En el Fiserv Forum de Milwaukee, Wisconsin se efectuará la Convención Nacional Demócrata (julio 13 -16), de donde saldrá el candidato presidencial del Partido Demócrata.

La Convención Nacional Demócrata (CND) se celebrará entre el 13 y el 16 en el Fiserv Forum de Milwaukee, Wisconsin. Durante la CND se votará (varias veces de ser necesario) y se escogerá al candidato presidencial demócrata, y se anunciará y votará su compañero de fórmula como vicepresidente. Asistirán delegados de los 50 estados, del Distrito de Columbia y de cinco “territorios” (Samoa, Marianas, Guam, Puerto Rico e Islas Vírgenes), y se conocerá el voto de los miembros del Partido Demócrata en el exterior.

En las primarias demócratas del 2016, votaron por Bernie Sanders los estados de Nuevo Hampshire, Colorado, Minnesota, Vermont, Kansas, Maine, Michigan, Nebraska, Alaska, Hawái, Idaho, Utah, Washington, Wisconsin, Wyoming, Rhode Island, Indiana, West Virginia, Oregón, Montana y Dakota del Norte, además de los demócratas en el exterior, pero fue superado por Hillary Clinton.

En esta ocasión, Sanders podría pelear las de Nueva York (con el apoyo de Alexandria Ocasio–Cortez, su real y poderoso opositor en la “gran manzana” sería Bloomberg), Illinois, Connecticut, Missouri, Puerto Rico y Kentucky, para alcanzar entre 28 y 31 primarias ganadas.

Un fenómeno de la mayor importancia, y del que se habla muy poco, es el papel de los superdelegados durante la Convención Nacional Demócrata. La mayoría de los 771 superdelegados apoyarían probablemente al candidato que sea más votado entre la derecha del partido. En la convención de  2016, de los 712 superdelegados, 573 votaron por Clinton y 42 por Sanders.

En la Convención Nacional Demócrata de 2020, los superdelegados tampoco van a apoyar a Sanders, aunque quizá sea menor la diferencia respecto a 2016. Son esos superdelegados no elegidos por las bases del partido, sino designados por su derecha tradicional, el arma del establishment para evitar perder el control de la convención y para “negociar” los votos con los delegados elegidos, la llamada “intermediación”.

Es indudable que Sanders necesita llegar a la CND con mayoría para aspirar a ser nominado candidato presidencial, para lo cual se requieren 1 991 delegados.

El día decisivo: Las elecciones del 3 de noviembre

Todo lo escrito anteriormente se produce sobre un fondo de agresividad ultraderechista. El Centro sobre Extremismo de la Liga Antidifamación reportó 2 713 casos de propaganda difundida por grupos supremacistas blancos en 2019.

La propaganda impresa incluye material discriminatorio contra  judíos, personas LGBT y minorías, pero también mensajes de aspecto inocente que disfrazan el odio con una retórica más sutil de “patriotismo” y defensa de “los ideales de América”. Todo ello encaja perfectamente en una campaña electoral como la de Trump, basada en execrar a cualquier contrincante, en especial a los progresistas.

Bernie Sanders, “socialista democrático” y judío, es una víctima central de tales ataques. Igualmente, candidatas como Elizabeth Warren y Amy Kobluchar, por ser mujeres; Pete Buttigieg, por homosexual, y hasta Michael Bloomberg, por ser judío. Llegaremos al 3 de noviembre con un país fuertemente dividido, y una animosidad política extrema.

De la mayor trascendencia serán los debates entre Trump y el candidato que salga de la Convención Nacional Demócrata. Estos debates tendrán lugar los días 29 de septiembre (Universidad de Notre Dame, en Indiana), 15 de octubre (Universidad de Michigan) y 22 del propio mes (Universidad de Belmont, Tennessee).

Tres bellos centros universitarios serán la sede de los debates entre Trump y el candidato demócrata. Fotos: iServ.

Serán vistos por ¡más de 120 millones de personas! en Estados Unidos. Mucha gente opina que si Bernie Sanders sale, el candidato presidencial demócrata podría demoler a Trump y arrebatarle millones de votos en esos debates, donde Trump no tiene las condiciones intelectuales y de personalidad para imponerse. Mientras que Sanders va a presentar un plan muy organizado de gobierno, Trump solo gritaría: “Tengo una gran economía”, “No tengo desempleo” y muchísimas veces: “¡Tú eres un comunista, Bernie Sanders!”.

Afirmaciones que Sanders podría hacer aserrín en pocos minutos, con temas tan relevantes como el incremento de la desigualdad, del racismo y la xenofobia; la crítica a la negación irresponsable del cambio climático, el crecimiento del presupuesto militar y el decrecimiento de los recursos dedicados a salud, educación y demás programas sociales. Otros posibles candidatos demócratas (Buttigieg, Klobuchar, Bloomberg) también lucirían bien frente a Trump, excepto, en mi opinión, Biden, gris y colosal generador de bostezos.

Es importante recordar que en 1960, en el primer debate de candidatos, John F. Kennedy destrozó a Richard M. Nixon, a quien se creía el seguro ganador frente al “católico” advenedizo de Massachusetts. Lo mismo logró Jimmy Carter frente a Gerald Ford en 1976.

¿Qué pasará el día de las elecciones? El martes 3 de noviembre se votará por el presidente y vicepresidente, 34 escaños del Senado, las 435 plazas de la Cámara de Representantes y muchos puestos electivos. Para escoger al presidente y su vicepresidente, los votantes elegirán a los compromisarios de sus estados que, a su vez, deberán escoger al ganador a través del Colegio Electoral, donde se requiere obtener 270 votos o más para llegar a la Casa Blanca.

Como es bien conocido, D. Trump obtuvo los votos necesarios del Colegio Electoral en 2016 y por ende la presidencia, a pesar de tener casi tres millones de votos populares menos que Hillary Clinton. Tienen la palabra Arizona, Florida, Pensilvania, Michigan, Texas y Wisconsin, donde se acumulan 124 votos “cambiantes”. Es necesario derrotar a la ultraderecha racista, xenofóbica, guerrerista, enemiga del medioambiente y perpetuadora de la desigualdad social, por el bien de Estados Unidos y del mundo.

Son necesarios 270 o más votos del Colegio Electoral para ganar la presidencia; los “no decididos aún” determinarían el desenlace.

Se han publicado 110 comentarios



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  • Maria Pabon dijo:

    Queria comentar un poco acerca de las disensiones que est teniendo Trump dentro de las filas republicanas. El ex secretario (ministro) de la Marina de Guerra en el gobierno de Trump, Richard Spencer respaldó la campaña presidencial de Michael Bloomberg meses después de ser destituido por Trump. Spencer anunció hoy su apoyo al ex alcalde de Nueva York, diciendo: "Tengo la máxima confianza en que Mike ejecutará fielmente su deber como comandante en jefe".
    En un artículo de opinión, Spencer criticó a Trump por su "intervención impactante y sin precedentes" en los asuntos de la Marina.
    Este no es el único republicano importante que esta “virado” contra Trump. Muchos otros que incluso pueden costarle estados, han sido insultados, despedidos o rechazados por Trump, entre ellos: Mitt Romney senador por Utah, Jeff Flakke y la familia McCain (Arizona), Ryan Zinke, ex - Secretario del Interior (Montana). Otros muy influyentes que fieron despedidos u obligados a renunciar fueron: Steve Bannon, ultraderechista ex - jefe de estrategia; Tom Price, Secretario de Salud y Servicios Sociales; Reince Priebus: El Jefe de Gabinete estuvo 189 días en el cargo y fue sustituido por el Gen (ret) John Kelly. Michael Short: El portavoz de prensa de la Casa Blanca renunció el 25 de julio de 2017, reemplazado por Anthony Scaramucci, quien solo duró en el cargo 11 días. Sean Spicer: El 21 de julio de 2017 renunció el Secretario de Prensa de la Casa Blanca, quien estuvo en el puesto durante 183 días. Michael Flynn: Una de las salidas de la Casa Blanca más controversiales fue la del consejero en temas de seguridad del presidente Trump. James Comey: Estuvo al frente del FBI (Buro Federal de Investigaciones) desde el 2013 pero solo duró 110 días durante la administración de Trump. Mike Dubke: Estuvo tan solo 86 días como Director de Comunicaciones de la Casa Blanca. Sally Yates: La Fiscal General trabajó solo 11 días en el gobierno de Trump, fue la primera en caer. H.R. McMaster: Sacado de su puesto como Asesor de Seguridad para hacerle espacio a John Bolton. Rex Tillerson: Ex – Secretario de Estado. Separado de su cargo por no estar 100% de acuerdo con Trump en algunos elementos de su política exterior, sustituido por Mike Pompeo. Gary Cohn: El Asesor Principal de Economía renunció en oposición a la política de proteccionismo de Trump. Y por supuesto no se puede olvidar a John Bolton, de quien no hay que hablar mucho.
    Todo eso le hace un enorme perjuicio a Trump dentro de su propio partido, todos ellos son lideres y en algunos casos “caudillos locales” y no van a apoyar a Trump, este va a sufrir la ausencia de ese apoyo en comparación con las elecciones del 2016. Arizona (11), Utah (6) y Montana (3) están bien en peligro para Trump y suman 20 votos electorales de los estados.

    • Uri S dijo:

      Me encantó leer su comentario que me parece muy profundo. Si, es verdad que se habla mucho de la real división que hay dentro del Partido Demócrata, pero nada de la que tambien hay dentro del Partido Republicano, que es bien seria.
      Todos los que omiten la cantidad de enemigos que se ha buscado Trump, le están apoyando en la práctica.

  • Manolo dijo:

    Se produjo un problema cuando envie mi comentario. Por favor suprimanlo, el adecuado comentario seria:
    El exasesor de seguridad nacional John Bolton acusó a la Casa Blanca de tratar de suprimir su libro aún inédito luego de que se dio a conocer que el Consejo de Seguridad Nacional le había enviado una carta en la que expresó inquietudes sobre que el manuscrito contenía información confidencial.
    La Casa Blanca ha examinado el libro de Bolton, que se publicará el próximo mes, para detectar material confidencial como parte de un proceso estándar de revisión. Sarah Tinsley, principal asesora de Bolton, emitió un comunicado en el que informó que el consejo había enviado la carta a Chuck Cooper, el abogado de Bolton. “Esta filtración del proceso de revisión previo a la publicación del CSN plantea preocupaciones aún más serias de que el proceso ha sido infringido completamente y que se trata más de suprimir el libro del embajador Bolton que sobre cuestiones de confidencialidad”, aseveró Tinsley, utilizando las siglas del consejo.
    Agregó que Bolton estaba revisando la carta y respondería. Dijo que el exasesor sigue creyendo que “el manuscrito no contiene ningún material legítimamente confidencial”.
    El libro expone que el presidente Donald Trump vinculó la suspensión de ayuda militar a Ucrania con la disposición del país europeo para ayudar con investigaciones sobre adversarios políticos del mandatario. Esa acusación contradice un argumento de defensa que los abogados de Trump esgrimieron durante el juicio político en su contra en el Senado: que no hubo algún quid pro quo en relación con la ayuda para Ucrania. Trump fue absuelto de cargos de abuso de poder y obstrucción al Congreso.
    Las revelaciones sobre el libro de Bolton se dieron a conocer durante el juicio político contra Trump. Los demócratas exigieron que fuera citado para testificar, pero los republicanos rechazaron las solicitudes para emitir la citación a declarar ante el Senado.
    Todas estas cosas están fracturando mucho el campo republicano, es decir sea Bloomberg o Sanders quien salga también enfrentarán a un Trump con mucha menos unidad de la que alardea tener
    Excelente, realmente muy bueno el articulo de J. Oro, información muy valiosa y util!

  • Arango dijo:

    No me impresionó mucho la primera presentación de Mike Bloomberg en los debates televisados, y no me gustó para nada Buttigieg queriendo (o exigiendo) el reporte de salud de Sanders, en lo que parece una maniobra para trtar de descalificarlo por esa razón. Creo que el unico que me pareció coherente y enfocado fue Sanders.
    Como dice Oro (y lo explica magistralmente) son tres momentos de la verdad.

    • Jose R. Oro dijo:

      Buttigieg lució muy mal atacando a Sanders por su edad, tratándole de poner una zancadilla politica. Creo que le va a pesar. Un fuerte abrazo para usted, estimado Arango!

    • Ileana dijo:

      No me gusta opinar mucho de temas de politica, pero vi el debate y si como dice Arango, eso es todo lo que la derecha del partido demócrata tiene para "echarle" a B. Sanders, no me impresionó gran cosa. Creo que Biden puede ganar en Carolina del Sur, y despues del 3 de marzo quizas se tenga que ir de la lid y en la practica quedan Sanders y Bloomberg (a golpe de dinero, nada impresionante como persona), puyes veremos una batalla de un gran candidato contra otro que tiene todo el dinero del mundo. Creo que ganaria Sanders.

    • Villegas de Cardenas dijo:

      Creo que a casi nadie le impresionó mucho Bloomberg, aunque son de la misma edad, cuando habla parece mucho mayor que Sanders o hasta que Biden. El dinero es muy importante, pero por si sólo no puede ganar una candidatura presidencial.

  • Elizabeth Franco dijo:

    Las irregularidades en las primarias de Iowa fueron solo un atisbo de lo que podemos esperar del resto de las primarias, ¿le habrán robado allí uno o dos delegados al candidato socialista democrático? Veremos el sábado en Nevada. Bernie Sanders se ha convertido sin duda en un fuerte candidato a la nominación (el más fuerte, en este momento), y el establishment del partido está tratando de bloquear su victoria en las primarias a como de lugar. No me sorprenderia otro episodio raro en Nevada.
    El problema es que no hay un candidato “moderado” (lo que quiere decir derechista) que pueda consolidar todo el apoyo de los grandes donantes del partido. La mediocre actuación del otrora favorito, Joe Biden, ha empujado a los grandes donantes, como Steyer y Bloomberg, a saltar a la arena electoral, a tratar de manejar al país no indirectamente, sino con sus propias manos. No confían en los políticos de derecha, creo que con razón, por ser bastante mediocres.
    Puede que no sea suficiente, entonces, con que el establishment del partido vuelque su apoyo (financiero y logístico) al mejor contendiente de entre los “moderados” (ya sea Bloomberg, Biden, Buttigieg o una Elizabeth Warren cada vez más “moderada”). Aunque se lo presentó como una falla técnica, hay fuertes indicios que sugieren que el escándalo de Iowa podría ser otra maniobra del Comité Nacional Demócrata para asegurarse de que Sanders no gane. Por supuesto, esto no es nuevo.
    En 2016, el Comité Nacional Demócrata se esforzó mucho por darle la nominación a Hillary Clinton, por ejemplo dándole la ventaja de acceder a las preguntas del debate de antemano, hasta usar la carta de triunfo de los superdelegados para aplastar la esperanza de una nominación de Sanders. Sin embargo, cuando Sanders perdió las primarias, en lugar de denunciar el carácter amañado del proceso de selección y el papel nefasto de la dirección del partido, cerró filas detrás de Clinton pidiendo a sus partidarios que la respaldaran, apuntalando la legitimidad del Partido Demócrata. Sanders ya ha indicado que hará lo mismo este año: apoyará al candidato del Partido Demócrata, sin importar quién sea. Lo cual tiene lógica, actuar de otra manera es apoyar directamente a Trump.

    • Jose R. Oro dijo:

      Es eso mismo lo que digo en el articulo, pero usted lo sintetizó mejor, estimada Elizabeth Franco. Son los pasos iniciales de un formidable movimiento que en el futuro será un potente partido o agrupacion de centro - izquierda. Ya Sanders es una leyenda a nivel mundial, ha puesto al "socialismo" por tenue que el de el sea, en el candelero estadounidense. Se ha atrevido a acusar claramente al capitalismo de la desigualdad y de muchos males sociales del los EE.UU y del mundo. Eso es un gran merito! Y con toda esa malignidad contra el que usted tan claramente describe, Bernie va ganando primarias en los estados, pese odio y el pánico de muchos reaccionarios y del fascismo.

  • Ernestina de Pinar dijo:

    El senador Bernie Sanders sigue discutiendo temas difíciles con una gran sinceridad, haciendo temblar a los politicos tradicionales del partido demócrata. Ya prometió legalizar la marihuana a nivel nacional y eliminar los antecedentes penales de los condenados por posesión de esa droga. Sanders hizo las observaciones mientras hablaba sobre la reforma de la justicia penal ante 5.500 personas. "Por orden ejecutiva, puedo y legalizaré la marihuana en todos los estados de este país", dijo Sanders a la multitud. "Vamos a eliminar los registros de los arrestados por posesión de marihuana. También abordó otras cuestiones relacionadas con las prisiones y el encarcelamiento.
    "No es aceptable para mí que tengamos más gente en la cárcel en Estados Unidos que cualquier otro país en la tierra, incluyendo China, con una población cuatro veces más grande que nosotros", dijo Sanders.
    "Vamos a poner fin a prisiones privadas y centros de detención", añadió. "Las corporaciones no deberían estar obteniendo millones de dólares en ganancias por encerrar a sus compatriotas." ¡Estas cosas no se escuchaban con frecuencia en la política estadounidense!

  • Shiffman dijo:

    (Continúa)
    El intelectual que desarrolla la idea de que es demasiado rígido calificar de fascista a Trump sostiene que posiblemente el presidente no conocía estos precedentes y utilizó su eslogan tan solo como símbolo de su patriotismo, que contagió a sus seguidores, la mayor parte de ellos desconocedores de la historia.
    El supremacismo blanco, el maltrato a la mujer, los rasgos de racismo, la calificación de lala prensa como “enemigos del pueblo”, el trato inmisericorde a los inmigrantes y la separación de sus hijos en la frontera, la insensibilidad ante el sufrimiento de los más débiles, sus políticas a veces contradictorias e inconsistentes, la negación del cambio climático, su neutralidad ante los disturbios de Charlottesville (un grupo de extrema derecha desfilando con antorchas encendidas que atacó a los contramanifestantes, defensores de los derechos civiles, con el resultado de una treintena larga de heridos y una víctima mortal). Trump condenó estos sucesos pero sin señalar la responsabilidad principal de los supremacistas, sino repartiendo implícitamente las culpas entre ellos y los contramanifestantes. Todos ellos son síntomas de un personaje autoritario y demagogo, pero no de un fascista en sentido estricto. Los lideres fascistas son mucho mas claros y directos, muchos de ellos pelearon en guerras a diferencia de Trump que se escapo cobardemente del servicio militar.
    El fascismo es una ideología cerrada y un movimiento político de carácter totalitario y antidemocrático que ha tenido mucha más presencia en Europa que en EE UU, donde una gran parte de la población manifiesta desinterés, e incluso rechazo, ante las ideologías cerradas, que se ejemplifica en la ambigüedad con la que en muchas ocasiones se diferencian (o en realidad no lo hacen) los partidos Demócrata y Republicano. Aunque estoy claro que se puede ser fascista, y de la peor especie, y no saberlo
    El fascismo tiene un significado preciso, con unas ideas, un ethos y un régimen específico, aunque con el paso del tiempo se haya degradado y se haya utilizado en el lenguaje cotidiano como un agravio más, que funciona muy bien. Trump es un personaje arbitrario y xenófobo con muy mala reputación, pero etiquetarlo de fascista sería otorgarle una coherencia y sofisticación intelectual que no posee (Pence tampoco). Aunque quien así le describe supone que llamar fascista a un fascista sirve para verificar pronto sus acciones, antes de que ellas puedan hundirse hasta el fondo de ese pantano político. La Administración de Trump se ha ganado a pulso, desde el principio de su mandato, su papel de heredera de los peores instintos y acciones de la historia estadounidense.
    A pesar de este comentario, debo expresar que para mi Jose R Oro es el principal y mas profundo analista de la politca estadounidense de hoy. En realidad sea Trump fascista o no, la tarea en defensa de la humanidad es sacarlo de la Casa Blanca en las elecciones de noviembre.

  • Ing.Luis Enrique Fuentes Salas dijo:

    Muchas Gracias a mi colega José R. Oro por su sustancial y amplio articulo, como siempre nos tiene acostumbrado...!!!

    • Jose R. Oro dijo:

      Muchisimas gracias estimado colega Ing.Luis Enrique Fuentes Salas! Este es un proceso importante para Cuba, los EE.UU. y el mundo entero. Mantendre el contacto para seguir informando las cosas importantes que vayan ocurriendo. Por lo pronto el 3 de marzo, sera el primero de los "momentos de la verdad", ya veremos!

  • Jose R. Oro dijo:

    Estas elecciones no es más una votación entre dos partidos sin grandes diferencias o disimiles objetivos futuros. El concepto de "socialismo democrático" ha llegado para quedarse, sobre todo en la juventud estadounidense. Irá creciendo cada vez más. Esa es para mi la gran diferencia de estas elecciones con respecto al pasado. El super - martes del 3 de marzo mostrará hasta donde este desarrollo positivo de la conciencia popular ha calado en muchos estados de los EE.UU..
    Un sector político emergente en los EE.UU. liderado en primer lugar por Bernie Sanders, si está atacando muchos problemas de la sociedad capitalista estadounidense donde les duele a los fascistas, con programas concretos contra el descomunal presupuesto militar, contra que los multimillonarios paguen una cantidad insignificante de impuestos, y los déficits en los servicios sociales, denunciando el robo de muchas decenas de miles de millones por las farmaceuticas, etc.. El mensaje “socialista democrático” de Sanders es un punto de partida para hoy detener y después abrir el camino para derrotar al fascismo, para lo cual hacen falta transformaciones mucho más profundas, desde luego. La capacidad de movilización de B. Sanders, muestra a millares de seguidores en un ambiente de erupción volcánica en cada uno de sus discursos (asistí al de New Hampshire, que fue espectacular)
    Es imprescindible y perentorio lograr la unión de la izquierda y fuerzas progresistas, y no solo de los partidos políticos, sino también de otros movimientos, sean religiosos, de orientación sexual, de género o de raza. Actuar unidos por el bien común. Los enemigos de los pueblos nos quieren divididos y limitados en nuestro accionar. Movimientos feministas, LGTB, de pueblos negros u originarios de América, iglesias progresistas, fuerzas políticas de centro – izquierda e izquierda, sólo si se unen podrán ser una auténtica vanguardia de los pueblos. Si no se unen, pueden incluso crear un efecto divisorio dentro de las masas populares.
    La doctrina del bien, la convivencia y la razonable igualdad entre los seres humanos, debe imponerse al odio, el racismo, la xenofobia y las desigualdades extremas y humillantes. Esta es una tarea multifacética y que requiere de la unidad más estrecha de los sectores explotados y discriminados, que son legión.

  • Mercy oriental dijo:

    Se esta produciendo un ataque masivo contra Bernie Sanders en los medios canallas. La razón es que puede ganar Nevada y que en la ultima encuesta esta con considerable ventaja en California, uno de los estados que Jose Oro menciona como parte del primer momento de la verdad. Lo están atacando por todas partes, se nota un cierto pánico en la dirección anquilosada del partido demócrata, que ademas vió a un Bloomberg bastante pálido y poco enérgico.. En el Nuevo Herald está atacando a Sanders el reaccionario Andres Oppenheimer tratando de calumniar de que Sanders no es una buena opción para los latinos. La batalla por Florida comienza "al duro"

  • Trabajadores socialistas dijo:

    Hay una larga historia de iniciativas para "utilizar" al Partido Demócrata para llevar a cabo una transformación social de caracter progresista en los Estados Unidos. Desde el escritor socialista Upton Sinclair, que se presentó como candidato a gobernador demócrata de California en 1934 (perdiendo) con una campaña para terminar la pobreza y un programa de reformas similar a lo que posteriormente fue el New Deal, pasando por el apoyo del Partido Comunista de EE. UU. a Franklin Delano Roosevelt durante el período del Frente Popular, hasta la “Coalición Arco Iris” de Jesse Jackson en los años 80; la historia de la izquierda en EE.UU. está salpicada de intentos fallidos de transformar el Partido Demócrata en una herramienta para la clase trabajadora. Nunca ha sucedido y probablemente nunca sucederá. La izquierda socialista en los EE. UU., que en la actualidad está resurgiendo y por el momento está hegemonizada por la organización de origen socialdemócrata DSA [Democratic Socialists of America] está, sin embargo obstinadamente obsesionada en la idea de trabajar dentro del Partido Demócrata con la esperanza de conseguir que Bernie Sanders llegue a la Casa Blanca.
    No hay muchas esperanzas de que Bernie Sanders denuncie al establishment del Partido Demócrata si se enfrenta a irregularidades similares a las de Iowa y en otros lados. A partir de 2016, Sanders se ha integrado cada vez más en el partido, impulsando reformas en el proceso de las primarias, y otra vez, prometiendo apoyar a cualquier candidato que termine siendo nominado. Esta actitud pragmática de hacer presión por una agenda más progresista, pero comprometiéndose con los demócratas del establishment cuando lo considera necesario, ha marcado su carrera política en Vermont y en el Senado. Sería necio esperar que ocurra ahora algo diferente.
    Incluso en el hipotético caso de que Sanders termine ganando la nominación y más tarde las elecciones generales, se enfrentará a una oposición insurmontable por parte de su propio partido en el Congreso que, con o sin la ayuda de los republicanos, podría bloquear cualquier reforma importante que vaya más allá de lo que el gran capital estadounidense está dispuesto a conceder. Mientras tanto, cientos de miles de nuevos socialistas se pondrán a recaudar fondos para el Partido Demócrata, pidiendo el voto para los candidatos demócratas, y se verán inmersos en la política de hacer lobby tras bambalinas, construir acuerdos y empujar la línea un poco a la izquierda. Enredados en las complejidades de un sistema político que se destaca por su carácter antidemocrático y su inclinación hacia el statu quo, enrolados como soldados rasos en un campo de batalla electoral durante todo el año (luchando por el mal menor), la energía explosiva de una nueva generación de socialistas se podria desperdiciar.
    Pensamos que muy pronto, despues de estas elecciones, habria que hacer un congreso unificador de 6 o 7 partidos menors de izquierda y centro izquierda, e invitar al ahora poderoso y numeroso sector centro - izquierdista del partido democrata y fundar una organizacion partidista que podria tener inicialmente mas de 10 millones de simpatizantes. Despues de las elecciones. Mientras tanto apoyar a Sanders y al que sea el rival de Trump, el engendro fascista del KKK y los hegemonistas blancos.

  • Carolina dijo:

    Uno de los temas que se han analizado poco con respecto a la "batalla contra Trump", ya que estas no son elecciones comunes y corrientes, sino una batalla muy fuerte contra el fascismo, es el tema de la religión. Los votantes judios tienden a ser pro - demócratas, y la mayoria va a votar contra Trump, pero el actvismo sionista lo defiende a ultranza, por razones obvias. Muchos católicos van a votar contra Trump, pero una cantidad considerable de evangelicos de derecha y de sectas extremistas apoyaran a Trump, quien se la está "jugando" con el tema del aborto, que es politicamente hablando un arma de doble filo, muy controversial. El que Trump se haya definido contra el aborte, puede ser realmente problematico contra el. Vivir para ver

  • Ruben dijo:

    El nivel de ataque mediático contra Bernie Sanders está llegando a la estratósfera. Pánico absoluto de que Sanders tome firmemente la delantera en las primarias sobre todo después del súper – martes del 3 de marzo, el primero de los 3 momentos de la verdad de Jose R Oro. Bernie ha tomado una amplia ventaja en los vaticinios de las primarias presidenciales demócratas de California, y cuatro rivales están virtualmente empatados en un distante segundo lugar, según una encuesta publicada febrero 20, por el Instituto de Políticas Públicas de California, que no es partidista. Encontró a Sanders favorecido por el 32% de los posibles votantes en la primaria del 3 de marzo, seguido por el ex vicepresidente Joe Biden, 14%, la senadora de Massachusetts Elizabeth Warren, 13%, y dos ex alcaldes, Michael R. Bloomberg de Nueva York y Pete Buttigieg de South Bend, Indiana, ambos con un 12%.
    Los hallazgos fueron particularmente desalentadores para Biden y Warren; cada uno de ellos bajó 10 puntos porcentuales de su posición en la encuesta del mismo instituto en enero. Sanders ha sido especialmente exitoso en consolidar el apoyo entre los latinos y los votantes menores de 45 años; una amplia mayoría de ambos grupos favoreció al senador de Vermont.
    "A medida que la campaña llega hacia estados más grandes y diversos, el apoyo a Sanders entre los latinos y los votantes más jóvenes es notable", dijo Mark Baldassare, presidente y director ejecutivo del Instituto de Políticas Públicas.
    California es el más grande de los 14 estados que celebran primarias en el Súper Martes. En California están en juego 415 delegados para la Convención Nacional Demócrata de este verano en Milwaukee. Se necesitan 1.991 delegados para ganar la nominación presidencial del partido, como explica Jose R Oro en su brillante artículo, lo mejor que he leído en mucho tiempo sobre las elecciones de los Estados Unidos.
    Según las reglas del partido demócrata, los candidatos deben ganar al menos el 15% de los votos en todo el estado o en un distrito del congreso para obtener delegados de California. El margen de error de muestreo de la encuesta fue del 5.7%. Se llevó a cabo del 7 al 17 de febrero.
    A la zaga se encontraban la senadora de Minnesota Amy Klobuchar con un 5% y el multimillonario Tom Steyer, que estaba en sólo un 3% a pesar de gastar casi 26 millones de dólares de su fortuna personal en anuncios de televisión y radio en el estado, según Advertising Analytics, una empresa de seguimiento de medios.
    La encuesta también confirmó la tendencia de Bloomberg a subir al nivel más alto del campo a nivel nacional. Ha invertido más de 300 millones de dólares de su propio dinero en publicidad en todo el país. La mejora de sus índices de audiencia lo calificó para participar en el debate presidencial demócrata del miércoles en Las Vegas.
    Una encuesta nacional publicada el martes por NPR, PBS NewsHour y Marist encontró que Bloomberg es apoyado por el 19% de los demócratas e independientes que se inclinan por los demócratas, después de Sanders, quien lidera con el 31%.
    Otra encuesta nacional del Wall Street Journal y NBC News mostró que Sanders lidera con 27%, seguido por un cuarteto virtualmente empatado en segundo lugar: Biden, 15%, Bloomberg y Warren, 14%, y Buttigieg, 13%.

  • Humberto dijo:

    Aferrándonos a las lecciones fundamentales del movimiento socialista desde Marx y Engels hasta estos días, el primer paso para crear un proyecto socialista viable en los EE. UU. es reconocer al Partido Demócrata como un partido que no representa a la clase obrera e invertir todas nuestras energías en la construcción de una herramienta política independiente de la clase trabajadora. La insistencia del DSA en trabajar dentro del Partido Demócrata para más tarde, en algún momento del futuro, romper con él para formar una nueva organización, es la receta perfecta para una lenta disolución en el poderoso aparato del partido. Los enormes esfuerzos que el DSA ha puesto en la elección de los candidatos progresistas del Partido Demócrata simplemente destaca una tendencia hacia una colaboración cada vez más estrecha, lo cual tiene sentido como una forma de enfrentar al fascismo actualmente en el poder. Pero mas tarde es necesario un partido propio, que sea el vehículo para concretar un proyecto socialista.
    El dia 22 de febrero se sabrá más sobre que sucederá entre los candidatos del partido demócrata. Los resultados de la primaria en Nevada son observados con atención por el resto de los Estados Unidos. De las 17 ultimas elecciones presidenciales, 14 candidatos que ganaron la nominación de su partido en este estado después se convirtieron en presidentes. En los otros casos, el aspirante que llegó en segundo lugar fue quien finalmente llegó a la Casa Blanca. En otras palabras, hay poca esperanza histórica para quien llega en tercer lugar.
    Pero en estas elecciones con 7 candidatos demócratas aun en liza, es mas difícil hacer proyecciones. El ex vicepresidente Joe Biden, que es el favorito del ala derechista de ese partido, en especial del Comité Nacional Demócrata y apoyado por los esposos Obama, se estima puede quedar tercero en este estado, detrás del senador Bernie Sanders quien es el favorito y del ex alcalde de South Bend (indiana) Pete Buttigieg. Y cuidado, que pudiera quedar cuarto, dada la influencia que la cercanía con Massachusetts le da a E. Warren. Mañana se esclarecerá mas el panorama de la oposición contra Trump

  • Erisberto dijo:

    Este articulo sin dudas tiene muy buena información, acepto que contiene datos que llevaron a Oro a trabajar muy duro, para obtenerlos, procesarlos y ponerlos a nuestra disposición, ademas muy bien razonado. Lo felicito!
    Pero sin ofensa, para mi lo mas importante falta, que es una valoración de como influiria en Cuba el que ganen los republicanos o los democratas, no creo que traiga cambios sustanciales, ambos son de la misma camada imperialista

  • Marquinho dijo:

    Muy buen e informativo documento, ahora tengo una hoja de ruta que me permite entender mejor que es lo que va a ocurrir de aqui a noviembre y cuales son los momentos decisivos de este proceso. Se que a Sanders le van a "echar plomo" muchisimo de parte de los republicanos y de la derecha demócrata, fuego cruzado, para tratar de evitar que el pueblo lo elija, sin esa terrible oposicion y sabotaje de su accionar politico, salia sin problemas. Veremos que pasa!

  • Lina dijo:

    Al perecer los "caucus" de Nevada que son el dia 22 (el sabado) no son tan importantes por el numero de delegados, como sicológicamente. Cual seria el apoyo de Sanders alli, si han logrado los derechistas enfrentarlo con el principal sindicato del estado, que ahora apoya a Bloomberg. En Cuba habiamos visto de sindicatos espurios pre-revolucionarios, como los mujalistas, y este parece lo mismo, un sindicato alineado con la derecha

  • Cary dijo:

    Una pregunta muy sincera, usted cree que tengamos serias oportunidades de para al dictador Trump, por el bien del pueblo cubano? Digame por favor su mas directo pensar en la materia.

  • Coqui dijo:

    Desde el debate de Las vegas en que Bloomberg se mostro tan poco atractivo a los televidentes, se han multiplicado los ataques contra bernie Sanders, quien es claramente ahora para la derecha una amenaza de marca mayor. Hasta cosas risibles pasan, en una estacion de radio que escuchaba yendo al trabajo, la locutora no mencionó que Sanders encabeza las encuestas y dice en cambio que Bloomber parece esta alcanzando "un sólido segundo lugar". Los niveles de manipulación mediática contra Bernie Sanders van a ser algo desconocido y desvergonzado.

  • Rafael Cantero P. dijo:

    El profe Oro poniendo el punto en la i; para mí conque salga el Trompeta me basta y me sobra, o sea jeje, conque no salga el Trompeta, discúlpenme

  • Rolando dijo:

    El próximo 3 de noviembre en las elecciones presidenciales y generales el donde el voto latino será de suma importancia para decidir el rumbo del país. Más de 32 millones de latinos son elegibles para votar, lo que representa un 13% del electorado a nivel nacional, lo que es sumamente relevante, y la comunidad hispana debe ayudar a detener al fascismo. Los votantes de origen cubano deben saber que votar por Trump es hacerlo contra sus familias y amigos que sufren por el implacable Bloqueo contra la patria que los vio nacer.

  • Teruel dijo:

    Felicitaciones a Jose R Oro, mi amigo y colega, por este interesante análisis, lo aprecio mas porque es la primera vez que creo entender como funciona toda la tramoya de las elecciones en los Estados Unidos.. Apoyo fervientemente a Bernie Sanders! Coincido con los foristas que Trump es la corporización del fascismo en nuestros tiempos, el peor peligro para la humanidad

  • Lorenzo Almaguer dijo:

    Felicito a Jose R Oro. Esto es lo mejor que he visto escrito sobre las elecciones de los Estados Unidos. Yo vivo en Cuba, en San Germán, provincia de Holguin. Aunque salga Trump no nos derrotarán a los cubanos, pero nos va a hacer la vida durisima innecesariamente. Por eso apoyo a los que aunque sean burgueses, no son fascistas asesinos como Trump, quien en una de sus perretas puede crear un conflicto que acabe con el mundo.

  • Jose R. Oro dijo:

    Uno de los aspectos que quisiera tratar (pero obviamente no se podía extender mucho el texto del artículo, ya de por sí bastante extenso) era la posición de los afro - estadounidenses (a partir de ahora "el voto negro") en estas primarias y elecciones. Primero que todo quiero advertir que el concepto mismo de "voto negro" en los Estados Unidos es una extrema simplificación. Pero uso ese término como una forma de expresión para que sea entendible y me refiero a la mayoría de la población negra.
    A medida que la batalla primaria demócrata llega a estados con más diversidad racial, los datos recién publicados de la encuesta NBC News/Wall Street Journal encuentran que Bernie Sanders ahora disfruta de niveles similares de apoyo entre los votantes de las primarias demócratas negros que el ex vicepresidente Joe Biden, mientras que todos sus otros rivales con la excepción de Mike Bloomberg no han logrado obtener ningún bloque significativo con este bloque crucial.
    La misma encuesta también muestra que los votantes negros le dan al presidente Trump una calificación de aprobación de sólo 14 por ciento, y que elegirían abrumadoramente a cualquiera de los candidatos demócratas sobre él en una elección general.
    Según los datos recién publicados, Biden cuenta con el apoyo del 31 por ciento de los votantes de las primarias demócratas negros, mientras que Sanders capta el respaldo del 29 por ciento. Bloomberg, con más de $300 millones en gastos personales de campaña en las últimas 10 semanas, recibió aproximadamente la mitad de apoyo con los votantes primarios negros como Biden o Sanders, mientras que todos los demás candidatos demócratas estaban empatados en un solo dígito.
    La encuesta subraya particularmente cómo P. Buttigieg y Amy Klobuchar, quienes esperaban utilizar votaciones fuertes en las primarias abrumadoramente de estadounidenses blancos de Iowa y New Hampshire para catapultarse al estatus de líder, pero no han logrado hacer incursiones significativas en la comunidad negra.
    Para Klobuchar, un 25 por ciento combinado dice que están cómodos o entusiasmados con su candidatura, mientras que el 35 por ciento dice que tiene reservas o incómodo. Para Buttigieg, un 28 por ciento combinado es cómodo o entusiasta, mientras que el 41 por ciento tiene reservas o es incómodo. Mientras que Elizabeth Warren parece obtener poco apoyo de los votantes negros en la carrera demócrata, pero aun así más dicen que son entusiastas o cómodos (46 por ciento) que aquellos que expresan incomodidad con ella (35 por ciento).
    (Continuará)

  • Jose R. Oro dijo:

    (Continúa)
    El doce por ciento de los votantes negros expresan su malestar con una candidata femenina. Eso se compara con el 14 por ciento de todos los votantes registrados que dijeron lo mismo. En general, los votantes negros expresan mucho más afinidad con Sanders y Biden que con sus rivales, aunque ninguno de los candidatos tiene una ventaja significativa cuando se trata de entusiasmo por su candidatura. Un 65 por ciento combinado son entusiastas (20 por ciento) o cómodos (45 por ciento) con Sanders. Para Biden, es un 69 por ciento combinado, ya sea entusiasta (16 por ciento) o cómodo (53 por ciento).
    Siete de cada diez votantes registrados negros desaprueban enérgicamente a Trump.
    La aprobación de Trump entre todos los votantes negros es de sólo 14 por ciento, con 84 por ciento de desaprobación, incluyendo 69 por ciento que dicen que lo desaprueban fuertemente. Hay una brecha de género significativa en las opiniones haciaTrump; entre los hombres negros, el 24 por ciento aprueba y el 72 por ciento lo aprueba, mientras que entre las mujeres negras, sólo el 6 por ciento aprueba y el 93 por ciento lo aprueba. En los enfrentamientos hipotéticos entre Trump y otros candidatos, la abrumadora mayoría dicen que elegirían al candidato demócrata. Joe Biden lidera con ellos sobre Trump 89 por ciento a 8 por ciento; Sanders lo lleva 87 por ciento a 7 por ciento; y Bloomberg lo lleva 84 por ciento a 11 por ciento. Klobuchar y Buttigieg tarifa ligeramente peor, pero todavía disfrutaría de alrededor de tres cuartas partes de apoyo negro en estos enfrentamientos. Buttigieg lidera sobre Trump del 75 por ciento al 16 por ciento, y Klobuchar lleva el 77 por ciento al 15 por ciento.
    La opinión de los Obama, que hasta ahora dieron su apoyo a J. Biden ha sido determinante en estas posiciones de los votantes negros. Se espera que tanto Barack como Michelle Obama, puedan ser decisivos en apoyar al candidato demócrata que salga como candidato del partido, en su enfrentamiento final contra Trump.
    La encuesta se llevó a cabo del 14 al 18 de febrero

  • Leandro dijo:

    Pienso que intentar encontrar en Trump y su administración una réplica de Hitler o Mussolini es como querer encontrar en nuestros tiempos otro Alejandro Magno o un Julio César. El devenir histórico social nos trae otra época y Trump no puede confundirse con un fascista tradicional, porque hoy el fascismo tradicional es inviable. Sé que hay mucho debate en los marcos académicos al respecto, no obstante al igual que hoy se habla de neoliberalismo, se habla de neofascismo, que no es el fascismo convencional, aunque sí posee esencias similares.
    Yo sí creo que Trump y su camarilla en la Casa Blanca tienen puntos de contacto con características del Fascismo, lo que no quiere decir que en los EE.UU. impere un sistema fascista. Una cosa es la Presidencia como parte del sistema y otra el sistema en su conjunto.
    Según el prestigioso politólogo e historiador estadounidense Robert Owen Paxton: “Se puede definir el fascismo como una forma de conducta política caracterizada por una preocupación obsesiva por la decadencia de la comunidad, su humillación o victimización y por cultos compensatorios de unidad, energía y pureza, en la que un partido con una base de masas de militantes nacionalistas comprometidos, trabajando en una colaboración incómoda pero eficaz con élites tradicionales, abandona las libertades democráticas y persigue con violencia redentora y sin limitaciones éticas o legales objetivos de limpieza interna y expansión exterior.”
    Para Paxton, el fascismo se caracteriza por un grupo de ideas, que subyacen en sus acciones y que él denomina “pasiones movilizadoras» entre las que señala:
     un sentimiento de crisis abrumadora contra la que nada valen las soluciones tradicionales;
     la primacía del grupo, respecto al cual uno tiene deberes superiores a cualquier derecho, sea individual o universal, y la subordinación del individuo a él;
     la creencia de que el grupo de uno es una víctima, un sentimiento que justifica cualquier acción, sin límites legales y morales, contra sus enemigos, tanto internos como externos;
     el miedo a la decadencia del grupo por los efectos corrosivos del liberalismo individualista, la lucha de clases y las influencias extranjeras;
     la necesidad de una integración más estrecha de una comunidad más pura, por el consentimiento si es posible o por la violencia excluyente en caso necesario;
     la necesidad de autoridad a través de jefes naturales —siempre varones—, que culmina en un caudillo nacional que es el único capaz de encarnar el destino histórico del grupo;
     la superioridad de los instintos del caudillo respecto a la razón abstracta y universal;
     la belleza de la violencia y la eficacia de la voluntad, cuando están consagradas al éxito del grupo;
     el derecho del pueblo elegido a dominar a otros sin limitaciones de ningún género de ley divina ni humana, derecho que se decide por el exclusivo criterio de la superioridad del grupo dentro de una lucha darwiniana.”

    Señala Paxton que: “El fascismo, de acuerdo con esta definición, así como la conducta correspondiente a estos sentimientos, aún es visible hoy … Sabemos, por haber seguido su rastro, que el fascismo no precisa de una «marcha» espectacular sobre alguna capital para arraigar; basta con decisiones aparentemente anodinas de tolerar un tratamiento ilegal de «enemigos» de la nación…Los posteriores avances fascistas hacia el poder dependen en parte de la gravedad de una crisis, pero también en muy alto grado de elecciones humanas, especialmente las de aquellos que detentan poder económico, social y político.”
    ¿Hay o no coincidencia entre lo que plantea Paxton y la administración de DT?
    Algunos ven al líder fascista estrechamente vinculado a la guerra convencional, pero hoy las concepciones de la guerra han cambiado y sin negar el papel de la guerra convencional, predominan las denominadas Guerras No Convencionales, ampliamente empleadas por la administración Trump. Además, Trump ha destinado al presupuesto militar cifras record.
    Por todo ello, aunque sigo insistiendo que en los EE.UU. no existe un sistema fascista, si hay elementos de ese sistema con características fascistas, principalmente en la administración de DT.

  • Karina dijo:

    Hoy son las primarias de Nevada, en medio de un vendaval de ataques contra Sanders por cualquier pretexto, pero la verdadera causa es que el está obteniendo más apoyo popular que el que alta jerarquia demócrata esperaba y estan muy asustados. Creo que el trabajo de J. Oro explica muy bien porque si Sanders sale delante despues del super - martes, va a ser muy dificil atajarlo y que la derecha reaccionaria dentro del Partido Demócrata tendria que dar una especie de golpe de estado en la Convencion Nacional usando a los "superdelegados". Tratan de evitar algo tan bárbaro, y hay masas de propaganda contra Bernie, más incluso que contra Trump. A ese nivel de bajeza ha llegado la derecha del partido demócrata.

  • dream dijo:

    Bingo Shiffman!!!

  • Emilio Fonseca Amador dijo:

    Oh, buen debate, este ambiente me gusta, comparto los calificativos positivos sobre el artículo de Oro y, sobre todo, simpatizo mucho con su total disposición a mantenerse en contacto con sus lectores. Sí, es muy complejo todo lo relacionado con las elecciones en EEUU, hay muchas variables a tener en cuenta, es un tablero de ajedrez en el que hay más de 32 piezas y su evolución futura todavía es incierta. Pero, para mi análisis casero, muy personal, me gustaría pregúntale a Oro por dos aspectos, por supuesto si está en sus manos hacerlo, con cuántos votos-personas podría contar Trump para la recta final de su campaña y su composición social (aun sabiendo que este no es el factor decisivo) y cuánto ha cumplido este personaje con lo prometido en su programa-discurso electoral del 2016. Un tercer elemento y esto ya se apartaría un poco del tema de la campaña electoral ¿Si Trump saliera vencedor, se haría realidad los vaticinios de Johan Galtung de que sería el fin del Imperio Estadounidense?

  • Manzanillero dijo:

    Parece que Sanders va delante en Nevada. Esperemos unas cuatro horas mas y sabremos los numeros definitivos (si no hay un rollo tipo Iowa)

  • Eduardo Ortega dijo:

    Un saludo afectuoso y cordial para el compañero José R Oro. Sus análisis de la política en EEUU son muy valiosos e ilustrativos. Ojalá y el pueblo norteamericano coloque a Trump en el lugar que le corresponde. Es muy importante que el Pueblo norteamercano sepa las atrocidades que hace contra Cuba. Lamentablemente él hace y deshace y los grandes medios se encargan de decir solo lo que les conviene. Un fuerte abrazo.

    • Jose R. Oro dijo:

      Un fuerte abrazo para usted, estimado Eduardo Ortega, su apoyo y aliento me es muy importante. Hay, como usted dice claramente, que defender a Cuba y que demostrar y evidenciar las atrocidades que estamos sufriendo por culpa del fascismo que quiere apoderarse permanentemente de la Casa Blanca

Se han publicado 110 comentarios



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José R. Oro

José R. Oro

Ingeniero cubano residente en los Estados Unidos.

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