Cubadebate

Cuando el pasado sábado en la mañana varios centenares de cubanos desfilaban frente a las oficinas de la congresista Republicana Ileana  Ros en manifestación de protesta en  contra de las crueles medidas impuestas por el Presidente Bush  que limita el  derecho de viajar a la isla en los vuelos familiares, allí estaban periodistas de El Herald y el Nuevo Herald para reportar el acontecimiento. Porque  independientemente de la posición editorial de esos diarios sobre el controversial tema de los vuelos a la isla, ambas publicaciones tenían el deber periodístico de informar a sus lectores de lo que constituía un evento de interés para toda  la comunidad miamense.

Sin embargo, ¿qué pasó con la noticia? En la edición de El Herald en  inglés apareció la información de la protesta frente a las oficinas de la congresista Republicana ilustrada con tres fotografías  de varios manifestantes levantando en alto sus pancartas de condena a la prohibición de los viajes humanitarios a Cuba. Se publicó el reportaje en las páginas locales interiores del periódico, pero al menos la noticia fue consignada. Gracias en nombre de todos los lectores del Miami Herald en inglés. 

Sin embargo, en su edición de ayer domingo en la mañana, El Nuevo Herald, la versión en español de la misma empresa Knight-Ridder ,   no publicó ninguna información de la protesta. Ni una sola línea, ni una sola  fotografía,   se publicó  de los cientos de manifestantes que protestaban en  contra  de las medidas de Bush frente a las oficinas de la Congresista Ileana Ros.

¿ Por qué? Habría que preguntárselo al señor director de esa publicación, el señor Humberto Castelló que por lo visto es mas un "censor verdugo" de la noticia, que un verdadero profesional del periodismo cuyo primer deber es el de  publicar los acontecimientos que conforman la actualidad, independientemente de su criterio personal o la posición editorial del medio  de comunicación social que esté bajo su dirección.

¿Por qué El Nuevo Herald no publica como debe ser, las informaciones sobre los actos de protesta contra las medidas de Bush que tanto afectan  los derechos  humanos de la familia cubana? ¿ Por qué? ¿ Por que?  ¿ Ese es la clase de periodismo que merece la comunidad hispana de Miami de parte de El Nuevo Herald?

 ¿Tiene respuesta el señor Castelló para esta pregunta que le estamos haciendo en nombre de tantos y tantos miles de cubanos residentes en Estados Unidos que hoy no pueden visitar  a sus familiares por una disposición inhumana, cruel, arbitraria,  y abusiva  dictada por la presente administración Republicana por vulgares intereses mezquinos políticos-electorales?

Los micrófonos de Radio-Miami están abiertos para el señor Castelló  a fin de que exponga con entera libertad-  libertad que el  no concede en su periódico  a los que pensamos de una manera distinta a la suya- la razón de su conducta arbitraria que lo convierte en el "verdugo" del periodismo en Miami.

!Tiene la palabra el señor Castelló! ¿ A que no se atreve? ¿ A  que no?

Habló para Réplica de Radio-Miami, Max Lesnik.