Cubadebate

  El terror de la dictadura argentina fue bendecido por el "Premio Nobel de la Paz" Henry Kissinger  

Hay un decir muy norteamericano según el cual cuando  alguien  tiene algo oculto en su pasado se dice que "tiene esqueletos en su closet". En otras palabras que aunque la persona sea aceptada socialmente siempre estará  presente la sospecha de que algo podrido se esconde detrás de su fachada. Son por los políticos los que más esqueletos guardan en sus closets. En muchas ocasiones son esqueletos de verdad, porque se trata de complicidad en muertes de seres humanos.

  Ese es el caso que acaba de salir ahora  a flote ante la opinión pública  sobre el ex Secretario de Estado  norteamericano Henry Kissinger  y su complicidad manifiesta en la desaparición y muerte de mas de 30 mil ciudadanos de Argentina. Fue en la "Guerra sucia" desatada por los militares de ese país en los años setenta y  principios de los ochenta, bajo los gobiernos de las  sucesivas Juntas Militares.

 Los esqueletos guardados hasta ahora en el closet de Henry Kissinger no era solo un decir. Se trata de esqueletos de verdad. De 30 mil muertos asesinados o desaparecidos en nombre de la lucha contra el "peligro de la izquierda", crímenes  perpetrados por los militares golpistas de Argentina que tuvieron la aprobación manifiesta del gobierno norteamericano de entonces, así como el silencio cómplice de muchos de los llamados organismos internacionales defensores de los "Derechos Humanos".

  De Buenos Aires llegó una información que ha provocado la ira de los argentinos contra el ex Secretario de Estado norteamericano Henry Kissinger.  De acuerdo a documentos que acaba de ser desclasificados por el gobierno de los Estados Unidos, Kissinger le dio su aprobación al plan de criminal  de exterminio decretado por los militares contra sus opositores políticos llevado a cabo   en aquellos turbulentos años de dictadura  y represión. Los muertos fueron muchos. Mas de 30 mil esqueletos llenaron los closet del ponderado y muy "honorable" señor Secretario de Estado de los Estados Unidos.

 En los documentos desclasificados hay una trascripción de la conversación sostenida por Kissinger  en la ciudad de New York el siete de diciembre de 1976 con el entonces Secretario de Relaciones Exteriores de Argentina, Almirante de la Armada Cesar AugustoGuzzeti. En la  conversación sostenida entre ambos funcionarios, el  militar argentino le expresa   a Kissinger que "la lucha contra las organizaciones terroristas" habrá de continuar a sangre y fuego hasta finales del año 1976. A lo que Kissinger respondió diciendo que la actitud  suya era de que ellos- los militares- triunfaran en ese empeño. "Yo soy de los que piensa-dijo Kissiger- que a los amigos hay que apoyarlos. Porque lo que no se entiende en Estados Unidos es que Uds. están envueltos en una guerra civil.  Yo leo sobre los derechos humanos -rubricó el Secretario de Estado norteamericano- pero no en el contexto de los acontecimientos. Mientras más rápido Uds. triunfen, mejor", terminó expresando Henry Kissinger al militar Argentino.

  ¿ Cómo interpretar esta conversación entre el máximo representante de la diplomacia norteamericana y el Secretario de Relaciones Exteriores de la Junta Militar Argentina si no como una complacencia ante los crímenes   perpetrados en nombre de la democracia y de  la libertad?

¿Y los derechos Humanos donde estaban entonces? Pues estaban bien, pero que  muy bien guardados por mas de 30 años en el closet del  honorable Secretario de Estado de los Estados Unidos Mr. Henry kissinger.

 Buena compañía tuvo por muchos años el librito de los Derechos Humanos del Departamento de Estado. Estaban en el mismo closet, junto a los 30 mil esqueletos de Henry Kisinger. !Buena compañía!! Cuanta hipocresía!