Cuba-EEUU: El poder de las artes
Cuando una derecha retrógrada acaba de tomar por asalto el Congreso norteamericano y el núcleo anticubano suma nuevas caras en ese ente legislativo, la esperanza de una mejor relación entre pueblos tan cercanos anda de la mano de las artes.
Anoche asistimos a la mágica función del American Ballet Theater en el Karl Marx, repleto en sus casi 5 mil capacidades. Nuestro pueblo pudo ver en todo el país por la televisión la histórica cita en La Habana de la compañía neoyorkina, la misma que dio a conocer al mundo a la gran Alicia Alonso. Era un hecho inédito en 50 años.
Las dos tardes anteriores, en el Teatro Mella, el New York City Ballet había mostrado sus dotes a una entusiasta y conocedora audiencia, educada por el privilegio de tener en Cuba una de las más renombradas compañías del ballet del mundo.
Ya Winston Marsalis y la Jazz Lincoln Center Orchestra nos habían mostrado cuántas corrientes culturales de ida y vuelta nos unen, en varias fabulosas actuaciones de octubre y un rico intercambio con nuestros jóvenes de las escuelas de arte.
Los artistas cubanos también han hecho lo suyo en Nueva York, Washington, Orlando, Los Ángeles. Chucho Valdés acaba de recibir vítores en el Lincoln Center a la altura de su maestría. También fueron acogidos Silvio, Los Van Van, Puppy y los que Son Son, y otros. Omara y Eliades Ochoa llevarán en las próximas semanas su música a los norteamericanos, impedidos durante mucho tiempo de conocer el arte diverso, rico, universal que se hace en la "isla prohibida", la que aún no pueden visitar.
Escuchando anoche las palabras de Alicia Alonso recordando su paso por el ABT; viendo al Director Artístico de la compañía estadounidense decir: "El ballet es un lenguaje muy universal. Su belleza y su honestidad construyen puentes y consolidan relaciones"; sintiendo aún los aplausos numerosos del público al final de la función y los que los mismos artistas norteamericanos se tributaron a sí mismos y a Alicia cuando las cortinas ya estaban cerradas, reafirmé la convicción en el poder de las artes para unir a los pueblos por encima del odio que impuso y mantiene el bloqueo; del odio que algunos tratan de emponzoñar en Washington a contracorriente del sentir de la mayoría de los ciudadanos de la nación del Norte.
Vivimos anoche un suceso para recordar. Pensemos que la lógica y la racionalidad triunfen y en el futuro sea usual este encuentro entre el arte y los artistas de Cuba y Estados Unidos.
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Randy todos deseamos que así sea...
Pienso que el arte y la esperanza son las unicas cosas que no se pueden bloquear, el sentimiento puede más que el bloqueo y más que las tropas que se podrían mover para colonizarnos, el arte el es color que pinta la vida que hoy llevamos ante tantos problemas mundiales, crisis, guerras. Todos estos eventos culturales que nutren las dos naciones son el vivo ejemplo que si se puede trabajando juntos hacia un entendimiento mutuo sin ningún tipo de políticas.
es lo maximo,
Randy, amigo, la verdad son cosas que no deben dejarse de la mano,a política imperial es algo que está en crisis, su credibilidad está cada vez más dañada ... el ¨Yes We Can¨de Obama no se ha hecho sentir y el propio mandatario Norteamericano lo ha reconocido así, al menos tiene mucho más ética que el bárbaro de Bush un hombre que destrozó la economía en EE.UU y lanzó una absurda guerra contra un terrorismo que solo ellos son sus propios patrocinadores, Posada y Boch son un ejemplo de su propio laboratorio.
La revolución se radicaliza y actualiza su modelo económico.
VIva Fidel, Viva Raúl .. Viva al ALBA