Cubadebate

Fue en Moscú de tránsito hacia Indochina en 1982 donde comprobé por primera vez lo chiquito que es este mundo, cuando sintiendo sudor en la cabeza fui a quitarme el gorrito pelú que me habían prestado. Una mano salida del tumulto me lo impide, al tiempo que me dice en perfecto “cubano” que no lo hiciera porque se me congelaría el cráneo instantáneamente. Habían – 27 º C y resultó ser una güajirita muy bonita que me había sacado por la pinta y dijo que era nada menos que de Cumanayagua. Mira para eso. Dos cienfuegueros que se encuentran a 9550 km. bajo un frio que pelaba. Nunca más supe de ella pero nunca más he olvidado aquel episodio. Creo que se comprueba que el mundo es efectivamente chiquitico solamente si media la solidaridad, sino creo que sigue siendo inmenso y a veces, hasta adverso.
Con Reynaldo González, entonces presidente del INDER me pasó algo parecido en 1989 en el aeropuerto de Sofía, Bulgaria. Resulta que los dos que cumplíamos la misión habíamos llegado hacia unas horas y nadie nos recogía. De repente viene aquel gordito, bajito y nos dice: ¿Qué pasa compañeros están botao aquí? Venía acompañado con una delegación deportiva cubana que enseguida nos sacamos por la pinta los unos a los otros. Y Reynaldo en el carro de protocolo que lo recibió, hasta que no nos dejó en la embajada cubana con los compañeros que tenían que ver con nuestra misión no se fue a sus tareas. Por segunda vez el mundo fue entonces chiquitico para mí. Tampoco he olvidado aquel episodio, pero si he sabido por la prensa a lo largo de todos estos años transcurridos, sobre alguna referencia a Reynaldo. Me conmueve ahora conocer por CD su deceso y siento la obligación de contar esta anécdota que aunque natural entre los cubanos, no deja de ser indicadora de los valores humanos donde quiera que se esté y las funciones que se ostenten, como mi mejor tributo al compañero humilde que entregó lo mejor de sí a nuestra patria. Me conmueve también conocer ahora que somos contemporáneos en edad.
Reciban sus familiares las condolencias de la mía.

Mis mas sinceras condolencias a la Familia, en Especial al Gallego y a Cabilla,heremanos de sangre y de trincheras, Cuba ha perdido un buen hijo.