Llegan a Las Tunas primeras cajas fuertes producidas por cuentapropistas bajo la marca Cepwar

Cajas fuertes en la provincia de Las Tunas, producidas por Cepwar. Foto: Periódico 26.

Producidas por el único proyecto cuentapropista de cerrajería integral de seguridad aprobado en Cuba, llegan a la provincia de Las Tunas las primeras cajas fuertes con el objetivo de proteger el dinero recaudado por las Empresas de Comercio, Gastronomía y los Servicios del país en esa zona del Oriente.

“El sector tiene hoy 1 148 centros de costos, o sea, unidades que manejan efectivo. Por lo tanto, una de las principales necesidades, a partir del ordenamiento económico del país, reclama la seguridad de ese dinero. Tenemos una demanda de 990 cajas fuertes y hoy no contamos con ellas”, comenta Rolando Rodríguez Rojas, director general del Grupo Empresarial de Comercio, Gastronomía y los Servicios en la provincia.

El cuentapropista Edwar García Ramírez afirma:

“Comenzamos a innovar diseños, que tuvieran que ver con las características de Comercio y de sus bodegas intrincadas en el campo. A través del Departamento de Comercio Exterior, Inversión Extranjera y Cooperación Internacional logramos encadenarnos con las empresas que nos suministrarían las materias primas esenciales. Hablamos, por ejemplo, de las balas del gas licuado para obtener su chapa, que reúne las características de las normas atendiendo a su resistencia y durabilidad; y con la Empresa de Materias Primas del territorio, obtuvimos el aluminio necesario y otros materiales que nos eran imprescindibles para estas producciones”.

A los diseños tradicionales de cajas de seguridad, se sumaron otros, aprovechando suministros disponibles en la propia provincia. Bajo la marca Cepwar operan estos trabajadores no estatales -tres en total-, que se abren camino a la sustitución de importaciones en el país. Pueden apreciarse entre sus catálogos productos hechos a partir de envases de gas licuado, como bien particularizara García Ramírez, que ya perdieron su valor de uso para proveer el combustible.

“Debido al proyecto que nos han presentado, les estamos facilitando todos los cilindros que nosotros desechamos ya por los aspectos de calidad para el almacenamiento de gas. Evaluamos la necesidad que ellos tienen de obtener esos envases para sus producciones, que irán destinadas a salvaguardar el efectivo de las empresas del territorio tunero”, añade Rolando González Labrada, jefe del Grupo de Gas Licuado.

El Proyecto de Cerrajería Integral de Seguridad firma el primer contrato comercial con su mayor cliente en Las Tunas (el Grupo Empresarial de Comercio, Gastronomía y los Servicios), para el que fabricarán cerca de mil ejemplares. Comienza así el camino que los lleva a ser parte de la economía cubana, en el empeño de acercar alianzas entre el Estado y los cuentapropistas.

(Con información de Periódico 26)