Cuba confirma 16 nuevos casos de la COVID-19 y dos fallecidos

Hasta el cierre del lunes 30 de marzo se confirmaron 16 nuevos casos de COVID-19, para un acumulado de 186 en el país. Lamentablemente, se reportaron otros dos fallecidos, informó este martes el doctor Francisco Durán García, director nacional de Epidemiología del Minsap.

En conferencia de prensa online y transmitida en vivo por la Televisión Cubana, Durán ofreció datos actualizados sobre la situación del nuevo coronavirus en el país y detalles de los últimos casos.

Están ingresados para vigilancia clínico-epidemiológica en los centros de aislamiento y atención creados con este fin, 2 837 pacientes (1 107 sospechosos); de ellos 73 extranjeros y 2 764 cubanos. Otras 27 139 personas se vigilan en sus hogares, desde la atención primaria de salud, dijo.

Para COVID-19 se estudiaron este lunes 315 casos, de ellos 168 en el Instituto de Medicina Tropical Pedro Kourí (IPK), 48 en el laboratorio de Villa Clara y 99 en Santiago de Cuba, resultando positivas16 muestras. El país acumula hasta la fecha 2 322 muestras analizadas para esta enfermedad.

Hasta el momento, buscando estudiar otros virus respiratorios, se han  investigado 2 160 casos, con 630 muestras positivas, predominando el virus de la Influenza A, precisó el doctor Durán.

De los 16 casos confirmados, fueron diagnosticados 14 cubanos y dos extranjeros procedentes de Francia. De los 14 cubanos diagnosticados, seis tienen fuente de infección en el extranjero: EE.UU. (3) y España, Canadá y Francia (uno cada uno); siete fueron contactos de casos confirmados y uno fue un contacto de viajeros procedentes del exterior (España).

Desde el pasado 24 de marzo, todas las personas que arriban a la nación son ingresadas durante 14 días en centros de vigilancia. Si en este tiempo, presentaran síntomas respiratorios, entonces son remitidas a los hospitales y centros de aislamiento designados para estos casos.

Continúa disminuyendo el número de viajeros

Ayer lunes fueron recibidos en el país 122 viajeros cubanos residentes, además de 11 tripulantes. Salieron del territorio nacional 529 viajeros, de ellos 465 extranjeros, 63 emigrados y un cubano residente. Se mantienen en Cuba 20 392, de estos 13 010 extranjeros y 7 382 emigrados.

Se realizaron este 30 de marzo solo cinco vuelos, pues van disminuyendo las operaciones aéreas; todas por el Aeropuerto Internacional José Martí de La Habana, procedentes de Nicaragua, Estados Unidos y Finlandia.

Respecto a los extranjeros que permanecen aún en las casas de renta, Durán García comentó que son 2 041, concentrados fundamentalmente en La Habana, en los municipios de Plaza, Playa, Centro Habana y La Habana Vieja, y en la provincia de Santiago de Cuba.

Detalles de los 16 nuevos casos confirmados:

De los 186 pacientes diagnosticados hasta ahora con la enfermedad, 165 presentan evolución clínica estable. Se reportan seis fallecidos, un evacuado y ocho altas (cuatro nuevas altas ayer lunes 30 de marzo).

Este lunes, explicó Durán García, fueron dados de alta, después de una evolución satisfactoria, desaparición de los síntomas y de ser realizados los estudios pertinentes, un paciente chino, uno español, una ciudadana belga y un canadiense.

Se reportan tres pacientes en estado crítico y tres graves

Pacientes reportados en estado crítico:

Pacientes reportados en estado grave:

La ciudadana cubana de siete meses de edad residente en el municipio de Aguada de Pasajeros, provincia de Cienfuegos, se encuentra ingresada en la terapia intensiva del Hospital Pediátrico Provincial Eliseo Noel Caamaño por medidas de precaución. Fue contacto de su padre, viajero procedente de Estados Unidos, y su madre de 26 años. Ambas confirmadas el 29 de marzo. Inició los síntomas el 27 de marzo. Evoluciona favorablemente y se mantienen los extremos cuidados.

Sobre el bebé de 18 meses de edad y su madre, de 19 años de edad, quienes fueron positivos a la enfermedad, Durán aseveró que permanecen ingresados en Santiago de Cuba y presentan una evolución favorable. No han sufrido ninguna complicación.

A pesar de todos los esfuerzos del personal médico y de haber aplicado todos los protocolos establecidos en el mundo para el manejo de la enfermedad, lamentablemente, se reportaron en el día de ayer dos fallecimientos:

El índice de mortalidad en Cuba por COVID-19 se sitúa este martes 31 de marzo en el 3.2%, precisó el director Nacional de Epidemiología del Minsap.

“Cada caso que ha fallecido se ha hecho lo posible por salvarlo, no solo en cuanto a los recursos humanos disponibles, sino al uso de los medicamentos y protocolos de atención disponibles en el mundo para el manejo de esta enfermedad”, explicó el especialista.

Hay factores de riesgo asociados a algunos de estos fallecidos, que han incidido desfavorablemente en la evolución de la enfermedad, y no se trata solo de la edad sino de enfermedades crónicas no transmisibles como la hipertensión arterial, la diabetes mellitus, los problemas cardiovasculares o la enfermedad pulmonar obstructiva crónica. Estos padecimientos previos hacen que la evolución de los casos sea tórpida, explicó Durán.

No obstante –dijo–, existe una comisión que analiza a cada paciente y los aspectos que incidieron, para, además, sacar enseñanzas que ayuden al mejor manejo de otros casos.

Durán recordó que uno de los fallecidos acudió tardíamente al sistema de salud. Se hace necesario que la población no esconda síntomas ni contactos con viajeros, enfatizó.

Hasta el 30 de marzo, se reportan 174 países con casos de COVID-19, un total de 715 660 casos confirmados a nivel global (+58 520 en las últimas 24 horas) y 33 579 fallecidos (+ 3128), para una letalidad de 4.69%. Reportan transmisión local 154 países.

En la región de las Américas se reportan 164 538 casos confirmados (el 22.9% del total de casos reportados en el mundo) y 2 932 fallecidos, para una letalidad de 1.78%.

Fuera de China se registran 633 447 casos confirmados y 30 268 fallecidos, para una letalidad de 4.7%.

“El comportamiento de la pandemia es muy alarmante, por el número creciente de casos y fallecidos que ya desborda las posibilidades sanitarias de algunos países”, apuntó Durán García.

Desde hoy dispondrá Cuba de test rápidos para el diagnóstico de la COVID-19

Para el control epidemia, insistió, un elemento fundamental es lograr pesquisar el mayor número de personas, con el fin de diagnosticarlas, aislarlas, hacer los controles de foco e identificar los virus que están circulando.

Fueron estas acciones, además de las medidas de restricción, lo que le permitieron a China, junto a la  cooperación de la población, controlar la enfermedad en un periodo de tiempo relativamente  breve.

A partir del día de hoy, informo el epidemiólogo, Cuba dispondrá de 100 mil pruebas de test rápido que en solo 30 minutos permiten conocer el diagnóstico de la enfermedad. Dichos test, dijo, serán aplicados a las personas que están en un proceso de aislamiento por algún riesgo epidemiológico y que se encuentran en los centros dispuestos para este fin en el territorio nacional, así como a todas las personas que arriben al país procedentes  del exterior que van para esos centros, de forma tal que pueda conocerse de manera inmediata si portan el virus.

“Tenemos además más de 40 000 pruebas de PCR en tiempo real, que es el diagnóstico molecular, muy confirmatorio e importante, que nos permitirá extender el universo de población a la que le hagamos la pruebas”, señaló el director nacional de epidemiologia.

De ahí que en los próximos días se pueda conocer con mayor exactitud cuál es la posible presencia de personas que tengan el virus, dijo.

Sobre la adquisición de los medios diagnósticos comentó que Cuba ha tenido la colaboración de organizaciones internacionales como la Organización Panamericana de la Salud y la Organización Mundial de la Salud, así como la ayuda de Francia, y la adquisición de recursos en China, los cuales se han logrado traer al país pese a las dificultades con la transportación.

Ello nos permite mayor cobertura de pesquisaje, afirmó. Las pruebas de test rápido proceden de China, y ya hoy se les están aplicando a un número importante de personas, reiteró.

Ante la COVID-19, formar nuestros propios profesionales de la salud ha sido una fortaleza

Cuba forma sus propios recursos humanos en las ciencias médicas, en dependencia de las necesidades del sistema nacional de salud, lo cual le ha posibilitado al país llegar a una situación epidémica como la que actualmente enfrenta el mundo, con un número importante de médicos, enfermeras, técnicos y demás profesionales de este sector.

Ello facilita darle cobertura a la atención de salud de toda la población cubana y al mismo tiempo enviar brigadas de colaboración médica a otras naciones, dijo el especialista.

Estas, remarcó, son brigadas entrenadas, que han participado de otras misiones con características similares como la lucha contra el ébola,  y su ayuda en otras naciones no pone en peligro la atención a nuestro pueblo.

Si tuviésemos incluso que incrementar todavía más los servicios para el enfrentamiento  a esta enfermedad, como las terapias intensivas, pues a la hora de decidir enviar un especialista a otro país para cumplir con el principio de solidaridad e internacionalismo de la Revolución y la salud pública cubana, se tiene en cuenta no desproteger en Cuba ningún servicio, ni en la situación actual, ni en la futura en que podría producirse un incremento de los casos, afirmó.