Para respaldar estos esfuerzos los 28 países miembros llevarán sus presupuestos de Defensa a un mínimo de 2% del PIB, dice el acuerdo.
También decidieron mantener una “presencia continua” en el este de Europa con la creación de una fuerza militar de rápido despliegue, una medida para tranquilizar a los aliados inquietos por la “agresividad” de Rusia.
Esta fuerza, que contará con unos “miles de soldados”, permitirá a la OTAN “mantener una presencia continua en el este del territorio de la Alianza”, dijo el secretario general de la OTAN, Anders Fogh Rasmussen, en una conferencia de prensa.
“Acabamos de convenir sobre un plan de despliegue para reforzar la defensa colectiva de la OTAN. Esto expresa nuestra solidaridad y nuestra resolución”, añadió Rasmussen precisando que algunos países ofrecieron albergar los contingentes que serán desplegados de manera no permanente.
Ciberguerra
La OTAN también aprobó el uso de fuerza militar como respuesta a ataques cibernéticos, abriendo así la puerta a nuevas causas para provocar guerras.
Según la agencia Reuters, acordaron considerar un ciberataque a gran escala contra un país miembro como un ataque contra la totalidad de la alianza liderada por Estados Unidos, provocando potencialmente una respuesta militar.
La decisión marca una expansión en la jurisdicción de la organización, reflejando nuevas amenazas que pueden deshabilitar infraestructuras críticas, sistemas financieros y del gobierno sin hacer un disparo.
"Hoy declaramos que la ciberdefensa es parte de la tarea central de la OTAN de defensa colectiva", dijo el secretario general de la alianza, Anders Fogh Rasmussen, en una conferencia de prensa.
(Con información de agencias)