Cataluña: Probable declaración unilateral de independencia

Un manifestante ante la sede de la Comisión en Bruselas. Foto: Reuters

La victoria del sí en el referendo separatista del domingo en Cataluña, a pesar de los esfuerzos de la Justicia supeditada al gobierno español de paralizar las votaciones, allanó este martes el camino hacia una probable declaración unilateral de independencia en esa comunidad autónoma.

Pese a su suspensión por el Tribunal Constitucional a petición del ejecutivo central de Mariano Rajoy, la accidentada consulta concluyó con una victoria del 90 por ciento de los votos emitidos a favor de la ruptura con España de esa región, de 7,5 millones de habitantes.

El portavoz de la Generalitat (gobierno catalán), Jordi Turull, confirmó la participación de dos millones 262 mil 424 personas en el turbulento referéndum, que acabó con más de 800 heridos como consecuencia de una inusitada respuesta policial para impedirlo.

En una jornada en la que los cuerpos de seguridad enviados por Rajoy a la región nororiental confiscaron por la fuerza urnas y papeletas, el recuento anunciado esta madrugada por Turull registró dos millones 20 mil 144 votos por el sí a la secesión.

Además, hubo 176 mil 565 catalanes que apostaron por su permanencia en este país europeo (el 7,87 por ciento), 45 mil 586 boletas en blanco y dos mil 129 nulas.

Más de 5,3 millones de ciudadanos estaban llamados a responder a la pregunta: "¿Quiere usted que Cataluña sea un Estado independiente en forma de república?".

En las últimas semanas, la consulta sufrió duros golpes judiciales y policiales contra su aparato logístico que dificultaron su celebración y cuestionaron seriamente su legitimidad.

A esas dificultades se sumó la víspera el cierre de unos 400 colegios electorales por parte de la Policía Nacional y la Guardia Civil, los dos institutos armados españoles, cuyas cargas contra ciudadanos inermes recorrieron el mundo.

Horas antes de conocerse la victoria del sí, el presidente de la Generalitat, el nacionalista conservador Carles Puigdemont, afirmó que los catalanes se ganaron el derecho a proclamar su separación de España.

"Con esta jornada de esperanza y también de sufrimiento, los ciudadanos de Cataluña nos hemos ganado el derecho a tener un Estado independiente que se constituya en forma de república", subrayó Puigdemont en una comparecencia solemne.

Anticipó que en los próximos días trasladará los resultados del escrutinio al parlamento autonómico para que aplique las llamadas leyes de desconexión, aprobadas a principios de septiembre por la mayoría independentista de la cámara.

Una de esas normas establece que en caso de ganar del sí, el Parlamento catalán proclamará la independencia de ese próspero territorio español en cuestión de 48 horas tras conocerse los cómputos oficiales, un escenario rechazado hasta la saciedad por Rajoy.


(Con información de Prensa Latina)

"Viva España" gritaron en el estadio del Real Madrid

 

Aficionados del Real Madrid muestran la bandera de España durante el encuentro ante Espanyol. Foto: Ap

La afición del Real Madrid ha enarbolado miles de banderas de España en el partido del conjunto blanco contra el RCD Espanyol, correspondiente a la séptima jornada de la Liga Santander que se disputa en el Santiago Bernabéu, y entonado cánticos de 'Viva España', en alusión a la jornada del referéndum ilegal en Cataluña del 1-O.

En el minuto 12 del encuentro, el número de la afición, los seguidores del equipo blanco han mostrado miles de banderas con el lema 'Todos somos España', que se habían repartido en los alrededores del Bernabéu en las horas previas a la disputa del partido.

(Información de agencias)

 

Cataluña sugiere mediación internacional en conflicto con España

Presidente de Cataluña Carles Puigdemont. Foto: Lluis Gene / AFP

El presidente de Cataluña, Carles Puigdemont, propuso este lunes un diálogo sin condiciones bajo mediación internacional para zanjar la crisis territorial en esa región, que la víspera se pronunció por la secesión de España en un referendo unilateral.

El momento aconseja mediación y esta debe ser internacional para que sea eficaz, subrayó el líder nacionalista conservador, quien reclamó restituir la normalidad institucional alterada, según su criterio, por decisiones desproporcionadas del gobierno de Mariano Rajoy.

Tras una reunión con su gabinete para valorar el triunfo del sí a la independencia de Cataluña, en una consulta prohibida por la justicia española, Puigdemont exigió la retirada de las fuerzas de seguridad enviadas por el ejecutivo central a esa comunidad autónoma.

Denunció los graves actos de violencia protagonizados el domingo por los “comandos del miedo”, en alusión a los miles de efectivos de la Policía Nacional y la Guardia Civil desplegados por Rajoy en ese territorio para impedir que se votara.

Según datos ofrecidos por la Generalitat (gobierno catalán), las brutales cargas policiales contra ciudadanos inermes, por apenas defender su derecho a decidir en las urnas, causaron casi 900 heridos, algunos de ellos con lesiones graves por impacto de balas de gomas.

“No somos responsables del operativo policial que llenó de sangre este domingo”, remarcó el gobernante regional.

En esa línea, emplazó a la Unión Europea (UE) a dejar de mirar para otro lado ante la violación de derechos humanos que, sostuvo, está ocurriendo en su propio espacio, en clara referencia a la excesiva actuación de los cuerpos de seguridad del Estado español.

Luego de considerar tímida y moderada la respuesta de la UE a los acontecimientos de la víspera, Puigdemont recomendó al bloque apadrinar su iniciativa de mediación internacional entre la Generalitat y la administración del también conservador Rajoy.

Ante la creciente condena mundial a la represión perpetrada por tropas antidisturbios, la Comisión Europea (CE, ejecutivo comunitario) exhortó este lunes al diálogo a todas las partes implicadas en el conflicto catalán.

“Hacemos un llamamiento a todos los actores pertinentes para que avancen muy rápidamente de la confrontación al diálogo. La violencia nunca puede ser un instrumento en política”, señaló la CE en un comunicado.

Bruselas, sin embargo, rechazó una eventual participación en el diferendo como solicitó la Generalitat.

Puigdemont dejó en manos del Parlamento catalán y de los grupos soberanistas -con mayoría en la cámara regional- los próximos pasos a seguir en el llamado proceso de desconexión, incluido el formato y tiempo de una eventual declaración unilateral de independencia.