Varias agencias de prensa señalan que los aviones tendrán su base en Sigonella (Italia) y tienen como objetivo ofrecer a los responsables militares una imagen global de la situación sobre el terreno obtenida a gran altura e independientemente de las condiciones meteorológicas y de luz.
13 países se harán cargo de la compra de dichos "drones" Global Hawk Block, de fabricación estadounidense. Bulgaria, República Checa, Estonia, Alemania, Italia, Letonia, Lituania, Luxemburgo, Noruega, Rumanía, Eslovaquia, Eslovenia y Estados Unidos pagarán por las naves.
De acuerdo con la informacidón, los aviones serán mantenidos y operados por la Otan "en beneficio de sus 28 miembros". Se tiene previsto que los aparatos estén disponibles entre 2015 y 2017.
Reino Unido y Francia aportarán al dispositivo sistemas de vigilancia adicionales que ya tienen a su disposición.
Se conoció que España estaba involucrada en este proyecto pero en 2009 decidió abandonarlo, al considerar que los cambios realizados por la organización al diseño original del mismo habían disminuido su interés desde el punto de vista de los retornos industriales, como en la generación de puestos de trabajo.
El programa, denominado Alliance Ground Surveillance (AGS), se sumará a los sistemas de vigilancia aérea con los que ya cuenta la Alianza Atlántica.
(Con información de AVN)