"He advertido un convoy de 22 vehículos militares de las fuerzas gubernamentales, todos llenos de soldados, y han establecido un punto de control", asegura Lamb y supone que el Gobierno podría estar preparando una trampa para los rebeldes: les permite celebrar en la plaza Verde para luego contraatacar súbitamente.
Mientras, tanques y francotiradores del Gobierno libio siguen defendiendo los últimos reductos de resistencia en Trípoli.
(Con información de Noticias RT)