Al presentar a periodistas brasileños y extranjeros acreditados en este país el informe sobre la resolución Necesidad de poner fin al bloqueo económico, comercial y financiero de los Estados Unidos de América contra Cuba, Zamora precisó que no dice unámine rechazo porque Washington se empeña en desconocer su aislamiento.
El embajador refirió que América Latina y el Caribe se ha opuesto en bloque a esa política de Estados Unidos contra La Habana en todas las citas regionales y cumbres, posición que -refirió- no debe variar este martes en la sede de la ONU.
Zamora reconoció en particular la tradicional postura de rechazo terminante y claro de Brasil al bloqueo, tal y como lo expresó su canciller, Celso Amorim, en el inicio de los debates de la Asamblea General en septiembre pasado, cuando llamó además a Estados Unidos a poner fin a esa política contra Cuba.
Recordó que esta será la décimo novena ocasión en que Cuba presenta a debate y votación en la Asamblea General esa política unilaterial, ilegal, genocida y contraria al derecho y la Carta de la ONU, que por casi medio siglo mantiene el gobierno estadounidense contra la isla caribeña.
En los 18 años anteriores y de manera consecutiva su país ha recibido el respaldo de la comunidad internacional y solicitado poner fin a ese bloqueo que ya resulta obsoleto y con el cual Estados Unidos pretende rendir por hambre al pueblo cubano, que por su parte está dispuesto a enfrentarlo el tiempo que sea necesario.
El embajador denunció que ese cerco económico ha causado desde 1961 hasta 2009 pérdidas a Cuba por 751 mil 363 millones de dólares, e impide las relaciones comerciales de la isla caribeña con terceros, al aplicar de manera extraterritorial leyes creadas al efecto, como la Torricelli y la Helms-Burton.
(Con información de Prensa Latina)