Comenzamos nuestro podcast mostrando cómo los medios del sur de la Florida han mostrado a sus audiencias los recientes cambios de ministros en Cuba.
En uno de ellos, los comentaristas ignoran premeditamente las últimas líneas de la información oficial, donde se reconoce la consagración a la tarea y se anuncia que desempeñarán otras. Afirman que no se habló de nuevas responsabilidades y el término más suave que emplean para referirse a los cambios es "truene".
Según Reinier Duardo, en esa tesitura se ha movido la cobertura del tema en todos los canales de Miami. Los mismos que suelen usar los peores epítetos y acusaciones contra los funcionarios cubanos, en cuanto son sustituidos, cambian el discurso agresivo por la burla de condolencia.
No para defenderlos, apuntó, porque nadie que trabaje por el país sería defendido por los enemigos del país, pero sí para decir que fueron víctimas del sistema y todo lo que pueda colgársele, utilizando los más feos métodos de ataque. Contra la persona y contra la Revolución.
Lo paradójico, apuntó Bárbara Betancourt, es que "analistas de pacotilla" como los del programa A fondo, del Canal 41, se la pasan reclamando cambios en Cuba y ante cualquier anuncio, de repente parecen guardianes de todo lo que ellos atacan cotidianamente. Lo cierto es que, esta vez, como pocas, ha sido público y notorio el reconocimiento al esfuerzo y la consagración, en momentos difíciles para la nación, de quienes fueron relevados de sus cargos. Así se refleja en el mensaje de Díaz Canel en X, que, además, ha sido respondido con palabras de mucha dignidad y altura por los relevados.
Al margen de este detalle, comentamos que los cambios de ministros, por las razones que sean, son comunes en todas partes. Hay países donde es tan frecuente que no siempre se comentan en los medios. Pero, en una realidad como la nuestra, sometida al desafío cotidiano que impone un bloqueo de 62 años, cualquier tarea de gobierno es un acto particularmente difícil que supone también cambios de estilos y métodos de trabajo.
A todos ellos debe llegar el reconocimiento, como debe llegar el apoyo a los que asumen en momentos igualmente difíciles. Los ministros relevados no se van, como en otros países, con la cartera llena. Son compañeras y compañeros que terminan una tarea realmente dura y demandante que ha supuesto esfuerzo y entrega.
Pero esto no es lo único que abordamos en el podcast. Siguiendo una denuncia que el domingo hizo pública en su canal el Guerrero cubano, comentamos la posibilidad de que se haya activado una nueva Operación Mangosta 2.0 contra Cuba, que se insertaría en el plan, ya en marcha en América Latina, de recuperar influencia con injerencia en la región.
Para ilustrar su afirmación, el Guerrero cubano comenta las revelaciones recientes sobre un siniestro plan de la CIA y la DEA en Ecuador, a donde el ejército norteamericano ha regresado como "salvador" frente al boom de mafias de narcotraficantes y lo ha hecho de la mano de la jefa del Comando Sur, a recuperar la base de Manta. Cita también el apoyo del FMI, vía respaldo de Washington a la elección de Javier Milei, con planes de desmontaje de toda la obra social de los gobiernos anteriores.
En cuanto a Cuba, que Estados Unidos consideraría pieza clave en la evolución de la realidad regional, todo estaría indicando que se plantean el regreso a los peores tiempos, una suerte de guerra no declarada que operaria como la tristemente célebre Operación Mangosta.
Como recordó Reinier, este fue el más vasto programa emprendido por el Gobierno de Estados Unidos contra una nación extranjera en la década de los años sesenta del pasado siglo. Al punto de que aún hoy día permanecen secretos contenidos en esa operación que son considerados entre las «joyas de la CIA», es decir, de máxima seguridad nacional.
Más de 5000 acciones de sabotaje y actos terroristas se cometieron contra Cuba en menos de 10 meses como parte de ese plan subversivo, montado por el Consejo de Seguridad Nacional de Estados Unidos tras su fracaso en Playa Girón. Entre las acciones de la Operación Mangosta se incluyeron numerosos planes de atentado contra el comandante en jefe Fidel Castro y otros dirigentes de la Revolución.
Es una guerra no declarada pero muy activa y que incluye como elemento principal la desinformación y la manipulación de todo cuanto acontece en el país. El Guerrero cubano ponía el ejemplo de esa guerra en el campo de las finanzas, tal como hicieron en Venezuela con Dólar Today, que disparó la inflación a niveles estratosféricos. En el caso de Cuba se habla de una publicación, El Toque, con similar misión. Según anunció el Guerrero, en su programa dará más información sobre el tema, pero ya adelantó cómo se suma el Departamento de Estado, a esta guerra no declarada contra Cuba.
Habrá, al parecer, mucho tema para seguir Chapeando.