Reynaldo Costa: Pitcher lateral por excelencia

Reynaldo Costa Acosta, pitcher lateral que a mediados de los ochenta implantó un récord vigente hasta hoy, de 26 juegos ganados entre Series Nacionales y Selectivas, continúa amando el béisbol cubano, aunque le preocupa la situación actual.

Dueño de una recta rápida, slider encendida y óptimo sistema de viraje hacia las bases, el vueltabajero tiene buenas recomendaciones para dar. Lo hace de forma directa como solía dominar en el estadio Capitán San Luis cuando le coreaban que ponchara al bateador de turno.

—¿Qué hace Costa en la actualidad?

—Atiendo el Departamento de Atención de Atletas en la Comisión de Béisbol de Pinar del Río, y también presto con frecuencia ayuda técnica a la Isla de la Juventud y Cienfuegos.

En esa provincia del centro del país estoy en estos momentos al frente del pitcheo de todas las categorías y soy el entrenador principal de la de mayores.

—¿Qué importancia le atribuye al trabajo en la base como forma de pulir los cimientos para luego el techo?

—Es fundamental, representa la materia prima de la selección grande. Ahí es donde están la masividad, el talento, y donde debemos hacer énfasis.

La base tiene como sistema reagrupar a los muchachos que comienzan a jugar y a especializarse en el deporte. De su óptimo funcionamiento, depende que los monticulistas, al llegar al máximo nivel, tengan perfeccionados sus movimientos y cuenten con una cantidad considerable de encuentros en los que han lanzado.

—¿Cómo podemos lograr que nuestros pitchers dominen los diferentes ángulos de lanzamientos?

—A través del trabajo y la repetición. Algunos dicen que por el lado del brazo o tres cuartos no es factible lanzar porque te puedes lastimar. Yo no creo eso, siempre que nos preparemos.

Incluso, pienso que es muy importante tirar por los tres tipos de ángulos, pues los tres son envíos distintos; o sea, distintas salidas de la pelota.

Un pitcher que lance solo por encima del brazo resulta cómodo para los bateadores. Entonces, para lograr la efectividad requerida se debe enseñar la técnica desde edades tempranas. Esto aparece en la metodología de los planes de entrenamiento, pero en ocasiones se viola.

A los 12 años, debe trabajarse por el lado del brazo, y entre los 13 y 14 por encima. En los otros niveles empiezan los especiales.

En el caso de los tipos de lanzamiento, pasa lo mismo. Se debe incorporar el repertorio de manera ascendente. A los 12 años, le corresponde a la recta y el cambio. Luego, en la categoría 15-16, a la slider y la curva. Posteriormente, en la etapa juvenil se necesita un tiempo de consolidación para dar paso a los específicos como la sínker.

—En las Series Nacionales son palpables las dificultades del pitcheo de relevo. ¿Qué opinión sobre esta situación?

—Existen serias deficiencias, primero porque dan mucha bola y no strike. Lo más relevante en este sentido es enfrentar a los contrarios, especializarse en ese rol y que tengan cierta velocidad, lo mismo para cerrar que para ser intermedios.

En Cuba, la especialización se lleva a cabo, pero no podemos compararla con la de otro tipo de béisbol, porque, por ejemplo, en el de las Grandes Ligas se escoge a los mejores lanzadores del mundo y nosotros solo contamos con los nuestros.

Por lo tanto, no poseemos la cantidad necesaria para que algunos sean abridores y otros relevistas. También tenemos que lidiar con la realidad de que a muchos atletas no les gusta el rol de sustituto.

Lo que más les golpea es el control, son muy pocos los cerradores que tiran en zona. Por eso es vital especializarlos. Esa arma la hace el profesionalismo que tenga el pitcher, el tiempo que lleve lanzando, la responsabilidad en cada partido.

El control no solo afecta a los relevistas, sino también a los abridores, quizás por el ángulo o por miedo a que les den un batazo. La solución es lanzar, acechar al bateador, poner en zona todo lo que tengamos, hacerlo sin presión, preparar al rival que está en el home en un conteo que le puedas huir a la bola y estar cerca de la zona de strike.

—¿Cuáles serían las expectativas para Cuba en el Premier 12?

—En los últimos tiempos he visto en la arena internacional cierta recuperación del pitcheo; o sea, ahora el montículo no es el principal problema de los equipos Cuba.

De cara al Premier, se debe concentrar la calidad. Demoraron en designar el director. Esto se ha vuelto tendencia y empieza la inquietud dentro de la población.

Dar un pronóstico resulta difícil, no podemos subestimar a los contrarios. Creo que se debe llegar con la convicción de que la camiseta de Cuba pesa. Eso siempre nos inculcó el Comandante, tanto al comienzo como al regreso de la competición, cuando le traíamos el título, concluye emocionado Costa.

Reynaldo Costa tuvo una destacada participación en el triunfo cubano del Campeonato Mundial Amateur de 1984. Durante el torneo, celebrado en La Habana, el derecho conquistó tres victorias sin derrotas, otorgó 27 ponches en 27.1 entradas y trabajó para una efectividad de 1.65, tercera mejor de la lid.

Recibió de manos de Fidel la medalla de oro y esa temporada ganó en la Selectiva la triple corona de pitcheo. Serpentinero inteligente, con agallas, clave en el plantel Vegueros e integrante del selecto club de pinareños con 100 éxitos o más en Series Nacionales, es un referente en el difícil arte de lanzar.

Durante la actual campaña beisbolera, realiza un serio trabajo en la lomita cienfueguera. El aporte de su staff de lanzadores resulta esencial en las aspiraciones de los Elefantes de incluirse en la segunda fase. Hasta el momento, ese conjunto ocupa el cuarto puesto en la tabla de posiciones, con balance de 24 y 15.