Vaticinios y bolas de cristal

El profesor de Historia de la Universidad Americana de Washington D.C. Allan Lichtman, quien predijo la victoria de Donald Trump y ha acertado el resultado de las últimas ocho elecciones en el país, afirmó que el recién electo presidente será sometido a un juicio político. (Fuente: Russia Today)
Guillermo Tell

BIRCH RUN, MI - AUGUST 11: Republican presidential candidate Donald Trump speaks at a press conference before delivering the keynote address at the Genesee and Saginaw Republican Party Lincoln Day Event August 11, 2015 in Birch Run, Michigan. This is Trump's first campaign event since his Republican debate last week. (Photo by Bill Pugliano/Getty Images)

Transcurrido el capítulo de las elecciones presidenciales en Estados Unidos, con el conocido desenlace contra casi todos los pronósticos previos, le suceden entonces los vaticinios de académicos, politólogos y hasta de cabalistas y “pitonisos” de bola de cristal que nunca faltan a la hora de especular sobre futuros para un país con una dinámica tan intrincada y sorpresiva.

Aunque a la predicción del profesor no le falta un cierto fundamento cuando afirma que es muy probable que Trump le dé motivo al Gobierno para destituirle al poner en juego la seguridad nacional y llenarse los bolsillos. Sostiene que la cúpula del triunfador Partido Republicano no lo quiere porque no lo pueden controlar ya que es impredecible, y le encantaría que el mandatario fuera el vicepresidente electo Mike Pence, “un republicano de rango inferior, conservador y totalmente controlable”.

Entretanto medios internacionales han recogido temores de varios funcionarios de la CIA, bajo anonimatos, de que Trump no está acostumbrado a trabajar con secretos de Estado y podría utilizar la información proporcionada por la Agencia de manera insensata.

Por lo visto influyentes círculos de poder anticipan tropiezos con el
presidente número 45 la Unión, pero ni siquiera antes, según el diario The Huggington Post, el selecto Club Bilderbeg, el denominado “gobierno mundial en la sombra”, pudo frenar la llegada de Trump a la Casa Blanca. Otras coordenadas políticas y sociales más determinantes dijeron y tal vez dirán la última palabra, lo que solo el tiempo esclarecerá.