Otro tiempo para América Latina

Otro es ahora el tiempo que corre en nuestras tierras de América, bien diferente de aquel en que, sucesivos regímenes golpistas permanecían sin la merecida condena de Estados, salvo muy honrosas excepciones, ni de organizaciones regionales del tipo OEA. Esta vez, al menos, el repudiado asalto a la constitucionalidad en Honduras, hace más de un año, sigue teniendo consecuencias hemisféricas para sus perpetradores, pese a contar con el auspicio y el apoyo del Imperio que antes imponía con éxito legitimidad a lo espurio.

Además de la opinión pública, la comunidad iberoamericana nunca reconoció al régimen de facto, encabezado por Roberto Micheletti, ni a su continuidad, el actual gobierno del presidente Porfirio Lobo, que mantiene intacta la maquinaria represiva.

Cualquiera puede explicarse entonces, como una motivación más, el apuro manifestado en Washington por estos dias para articular una suerte de cruzada ultra derechista y reaccionaria contra los países integrantes de la Alianza Bolivariana, y otros más en la región, que se han mostrado soberanos y desobedientes a los dictados de antaño. Pura añoranza por la época siniestra de la Operación Cóndor y el retorno a la dependencia y el timón de las transnacionales saqueadoras en el revuelto "patio trasero".