El derrrumbe de otra operación política del macrismo: La justicia archivó la causa por el mausoleo Néstor Kirchner

Después de 11 años, la justicia archivó por inexistencia de delito el expediente por el mausoleo de Néstor Kirchner. . Imagen: EFE.

Después de 11 años, la justicia archivó por inexistencia de delito el expediente por el mausoleo de Néstor Kirchner. El caso motivó tapas y tapas en los grandes medios, allanaron el cementerio de Río Gallegos, la legislatura de Santa Cruz, la intendencia de la capital provincial, el Concejo Deliberante, las oficinas de Austral Construcciones, la empresa de Lázaro Báez, y hasta se presentó un testigo, alineado con el macrismo, que cinco años más tarde dijo que en 2013 hubo bolsos con dinero en el mausoleo.

En un extenso fallo, el juez federal Ariel Lijo, analizó todas las evidencias y concluyó que la cesión del terreno fue votada por el Concejo, luego la Legislatura aceptó la donación, la construcción no le costó un peso a la administración ni nacional ni provincial, no hubo beneficio para nadie y --como señala la norma votada por los legisladores de Santa Cruz que lo declararon Patrimonio Histórico-- se construyó “para que los residentes cuenten con un sitio especial para homenajear y visitar al expresidente, como así también recordar su trayectoria”.

Como fue habitual durante el macrismo, la causa tiene los ingredientes presentes en toda la utilización de la justicia para perseguir opositores. La denuncia de Patricia Bullrich, la instrucción en Comodoro Py, primero a cargo del juez Sergio Torres, pero después con irrupción de Claudio Bonadio, la intervención de los fiscales Guillermo Marijuan y Carlos Stornelli, la larguísima serie de allanamientos con integrantes de la Policía de Seguridad Aeroportuaria enviados por Bonadio desde Buenos Aires, y, por supuesto, la descomunal cobertura mediática.

En las 18 páginas del fallo en el que ordenó el archivo de la causa por inexistencia de delito, Lijo detalló todo lo que se hizo en el expediente y las conclusiones:

En el momento de resolver, el juez Lijo transcribió la Ley de Ética Pública por la cual los funcionarios no pueden recibir regalos, los que en cualquier caso deben ser incorporados al patrimonio estatal. “No se advierte --concluye el magistrado-- que se haya violado la ley ni que se haya cometido ilícito alguno”, entre otras cosas porque el mausoleo fue incorporado, mediante una ley, al patrimonio histórico provincial de Santa Cruz.

El terreno y la construcción en sí misma siempre fueron propiedad provincial, no de la familia Kirchner, que tiene un panteón en el que se depositaron los restos al principio. “Los fondos utilizados para la construcción del mausoleo tuvieron como objetivo que los residentes puedan rendir homenaje y recuerden la trayectoria e importantes cargos que ostentó en todos los niveles del Estado, así como la trascendencia internacional de su figura. No se advierte que se trate de un regalo para un funcionario público”, finaliza el magistrado.

El caso no sólo motivó tapas de los grandes medios sino coberturas de diarios de España y la BBC de Londres. Hasta se cuestionó en algún momento la existencia de una custodia, algo elemental si se tiene en cuenta el antecedente del robo de las manos en la tumba de Juan Domingo Perón.

Como en casi todas las denuncias iniciadas por el macrismo, el objetivo no fue otro que el hostigamiento y la persecución política y su correspondiente cobertura mediática, destinada a la campaña de desprestigio permanente sobre el peronismo en sus múltiples formas.

(Tomado de Página 12)