Iglesia Ortodoxa Rusa de La Habana: Símbolo de amistad entre dos pueblos

Iglesia Ortodoxa Rusa "Nuestra Señora de Kazán" en La Habana. Foto: Beatriz Albert/ Cubadebate.

La iglesia, toda de blanco y de opulentas cúpulas doradas se erige desde el 2008 frente al mar de la Bahía de La Habana. Es el templo ortodoxo ruso de “Nuestra Señora del Kazán”, que el pasado domingo cumplió diez años de su Consagración en La Habana.

El contexto histórico y político de las festividades de la institución ortodoxa en Cuba, la presencia del Presidente de los Consejos de Estado y de Ministros, Miguel Díaz-Canel, en la nación euroasiática y su encuentro con el Patriarca Kirill, apuntan a la consolidación y afianzamiento de los nexos entre estas naciones.

La visita del Arzobispo Antoni de Viena y de Budapest es también prueba de ello. Su participación en la misa oficiada con motivo de la Consagración del templo en La Habana y en conmemoración de la primera vez que se encontró el ícono de “Nuestra Señora de Kazán” -día singular porque en Rusia es también una fiesta estatal, conocida como el día de la unidad nacional- dan razones para seguir creyendo en la fortaleza de las relaciones entre los pueblos de Cuba y Rusia.

El Arzobispo Antoni es la persona encargada del Departamento del Patriarcado de Moscú que atiende a todas las feligresías e instituciones de la iglesia Ortodoxa, allende a las fronteras rusas y con éste la prensa pudo sostener un intercambio con motivo de su tercera visita a suelo cubano.

El religioso destacó la importancia del templo de Kazán en La Habana por constituir un lugar especial en cuanto no se subordina a ninguna instancia regional de la Iglesia Ortodoxa Rusa, sino lo hace directamente al Patriarca.

Asimismo, comentó de su alegría al poder constatar la amplia asistencia de feligreses al templo:

Me causó una extraordinaria alegría la amplia congruencia de este domingo al templo y pude apreciar como es la vida real de la feligresía aquí. Cuando se iniciaron los primeros intercambios entorno a la posibilidad de construir esta iglesia se consideraron dos direcciones, una la cual el propio Comandante en Jefe, Fidel Castro le habló a Su Santidad, Kirill, en la que se refirió al templo como un símbolo palpable de la amistad de los pueblos de Rusia y Cuba.

“Este primer objetivo del templo es algo que se ha alcanzado en toda plenitud”, expresó el Arzobispo. El templo está ubicado en el Centro Histórico de La Habana, en uno de los lugares más hermosos de la capital, sitio donde acuden muchas personas de diferentes nacionalidades que se interesan también, ya sea por curiosidad, en la vida religiosa dentro esos muros blanquísimos.

Durante su estancia, el encargado del Departamento del Patriarcado de Moscú sostuvo un encuentro con el Dr. Eusebio Leal Spengler, Historiados de La Habana, de quien dijo ser una figura cumbre que desempeñó un papel extraordinario en todo el proceso de construcción este templo. En su momento histórico, Leal viajó a Rusia y pudo interactuar con el ya difunto Patriarca de todas las Rusias y con el actual Patriarca, Kirill.

“Quién mejor que Leal para haber tenido la misión de proponer y escoger el sitio donde habría que construirse la iglesia. En ocasión de esta visita, su Santidad me pidió que le reiterara su agradecimiento a Eusebio Leal por su labor en la evolución de la Iglesia Ortodoxa Rusa de La Habana”, dijo.

Asimismo, expresó haber tenido la oportunidad de reunirse con representantes de la comunidad rusa y los rusos devotos que residen de manera permanente en Cuba.

“Esta visita me ha permitido ver con mis propios ojos la realidad de este templo y reafirmar cuán magnifico es este país”.

Iglesia Ortodoxa Rusa e Iglesia Católica

Encuentro en La Habana entre el papa Francisco y el Patriarca Kirill, líder de la Iglesia Ortodoxa Rusa. Foto: Reuters.

De la presencia del Arzobispo en Cuba constituye también noticia y un punto de mira para las relaciones entre la Iglesia Católica y la Ortodoxa Rusa, un encuentro con el Arzobispo de la Iglesia Católica de La Habana y con el representante de la Iglesia Católica del Vaticano en esta misma ciudad, en el que se abordó el tema de la posible colaboración intercristiana en Cuba.

Recordar que en el año 2016, ocurrió un hecho sin precedentes en las relaciones históricas de ambas instituciones religiosas cuando coincidieron en la Isla, el Papa Francisco y el Patriarca Kirill, visto desde la óptica que según el Arzobispo Antoni, “no han sido relaciones fáciles y en ocasión de aquel encuentro, recuerdo que su Santidad Kirill dijo: Nos estamos encontrando en el lugar oportuno y en el momento oportuno porque La Habana es un lugar los suficientemente alejado de Europa, entorno en el que nuestras iglesias han tenido determinados enfrentamientos. Es evidente que La Habana fuese el lugar escogido para aquel diálogo que se efectuó desde una perspectiva constructiva”.

Apuntes históricos: El templo en La Habana y “Nuestra Señora de Kazán”

Imagen de "Nuestra Señora de Kazán" en La Habana. Foto: Beatriz Albert/ Cubadebate.

Cuando Fidel expresó en una de sus Reflexiones a propósito de la inauguración en La Habana de la Catedral Ortodoxa Rusa Nuestra Señora de Kazán, que “esta religión en los momentos críticos de la historia de Rusia, jugó un papel importante”, daba por sentada la importancia de esta construcción, útil para la vida religiosa y política entre los países de Cuba y Rusia.

La obra de esta catedral fue resultado de la proposición que le hiciera Fidel Castro Ruz a Su Santidad Kirill durante la visita que este realizara en noviembre de 2004 a la nación caribeña, en su condición de Metropolita Smolensk y Kaliningrado.

“Su Santidad tuvo una participación directa en todas las etapas de construcción de este templo, partiendo del encuentro personal con el Comandante Fidel Castro”, explicó el Arzobispo Antoni.

De acuerdo con algunos datos, la Iglesia Ortodoxa Rusa de La Habana es el mayor edificio de esta Institución en América Latina, construido en un tiempo record de poco más de 32. Con respecto a esto, el Arzobispo de Viena y de Budapest expresó:

“Me atrevería a decir algo de por qué la construcción fue en tiempo récord. Cuando se estaba analizando la edificación del templo, hubo un momento que Fidel dijo: yo voy a ser el comisario de esta construcción, y así lo hizo”.

Existen versiones sobre el origen del ícono de Nuestra Señora de Kazán, virgen venerada y de alta devoción por los ortodoxos rusos.

La imagen fue llevada por los generales a las batallas y se hizo conocida como la Kazanskaya, la “Protectora de Rusia”. Se convirtió en el símbolo ruso de la Victoria y la libertad. Nuestra Señora de Kazán es la patrona de miles o quizás millones de hogares rusos.

Una de las historias más difundidas cuenta que en 1579, una niña de nueve años de edad llamada Matrona, cuya casa se incendió en Kazán, vio en un sueño la imagen de la Virgen María y escuchó una voz que le pedía recuperar un icono sagrado oculto en las cenizas de su hogar. La niña descubrió el ícono envuelto en un antiguo lienzo y oculto bajo una estufa, donde habría sido enterrado desde la persecución cristiana emprendida en el siglo XIII por los tártaros. La imagen fue trasladada triunfalmente a la iglesia más cercana, el templo de San Nicolás y luego a la Catedral de la Anunciación, donde se hizo famoso por milagrosas curaciones de personas ciegas que acudían a rezar.

Cien años después, en 1679, se construyó un templo en honor al icono en Kazán. Sin embargo, ahí se instaló una copia porque la verdadera imagen fue conservada en Moscú desde la victoria rusa sobre los polacos. En 1821 la imagen original se mudó una vez más, esta vez a San Petersburgo donde fue instalada en la nueva Catedral de Kazán. Para esa época, el ícono ya era muy popular ya habían nueve copias “milagrosas” en todo el país.

Conocida como “La Liberadora y Protectora de la Santa Madre Rusia”, la imagen fue utilizada en todas las crisis nacionales –incluyendo la invasión napoleónica- cuando la victoria rusa fue directamente atribuida por el pueblo a Nuestra Señora de Kazán.

A mediados del siglo 19, el ícono original recibió una cobertura en oro así como diamantes y esmeraldas incrustados.

Altar, Iglesia Ortodoxa Rusa "Nuestra Señora de Kazán" en La Habana. Foto: Beatriz Albert/ Cubadebate.