Dicta justicia brasileña apertura de juicio político a vicepresidente

El Supremo Tribunal Federal (STF) de Brasil ordenó hoy la apertura de un juicio político contra el vicepresidente, Michel Temer, ya que habría autorizado créditos extraordinarios gubernamentales sin el apoyo del Parlamento.

La decisión está fundamentada legalmente en el mismo tipo de irregularidad que habría cometido la presidenta de Brasil, Dilma Rousseff, y por la que ya hay un proceso de "impeachment" (juicio político) en su contra.

El magistrado Marco Aurélio Mello dictó de forma cautelar que se desarchive la denuncia desestimada en diciembre pasado por el presidente de la Cámara Baja, Eduardo Cunha, para abrir un proceso contra Temer, número dos de la escala de poder en Brasil.

Cunha -enemigo político de Rousseff y aliado y compañero de partido de Temer- había archivado el pedido de impeachment contra el vicepresidente presentado por el abogado Mariel Márley Marra alegando que no había fundamentos para ello.

Sin embargo, el juez del Supremo ordenó desarchivar la petición e instalar inmediatamente una comisión parlamentaria para analizarla.

La petición de juicio contra Temer se basa en que el vicepresidente cometió un crimen de responsabilidad cuando, al asumir la Presidencia de forma interina, firmó cuatro decretos para autorizar créditos extraordinarios gubernamentales sin el apoyo del Parlamento.

La gestión de las cuentas públicas por parte del Ejecutivo en 2014 es fuente de controversia y el propio Tribunal de Cuentas dijo en octubre que el Gobierno de Rousseff incurrió en irregularidades en el manejo de los gastos por medio de estos créditos, en particular con el objetivo de cumplir el déficit fiscal estipulado por ley.

Este pedido de impeachment contra Temer -que de prosperar podría tener un impacto también en el de Rousseff- puede ser recurrido aún por el líder de la Cámara Baja para que sea debatido por el plenario del STF, que daría un veredicto definitivo.

El presidente de la Cámara Baja dijo la víspera que recurrirá con el argumento legal de que el Poder Judicial no puede inmiscuirse en decisiones del Poder Legislativo.

Brasil atraviesa una compleja crisis política, agudizada tras el abandono de la coalición gubernamental del Partido del Movimiento Democrático Brasileño (PMDB), de Temer, sobre quien pesa la acusación de querer aprovechar la debilidad de Rousseff para asumir la Presidencia.

(Con información de Notimex)