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Después de las elecciones regionales en tres estados federados de Alemania con fuertes pérdidas para los partidos tradicionales, el debate sobre la política hacia refugiados surge nuevamente, sobre todo en el campo conservador.
El primer ministro del estado de Baviera, Horst Seehofer, responsabilizó la línea de la canciller federal, Angela Merkel, del resultado favorable para el derechista partido Alternativa para Alemania, AfD.
"Este resultado nos demuestra claramente las dudas de la población sobre la política de inmigración de Berlín", dijo el también jefe del partido socialcristiano, CSU, uno de los socios de coalición de Merkel.
El jefe socialcristiano demandó -a la par- "cambiar esta política para mostrar a la población que tomamos en serio sus preocupaciones".
Seehofer es un conocido crítico de la gestión de la acogida de refugiados en Alemania.
No obstante, el gobierno federal rechaza el cambio de rumbo que demanda Seehofer.
"Yo seguiré, en principio, la política que he realizado durante los últimos meses“, contestó por su parte la canciller federal.
También el jefe del Partido Socialdemócrata de Alemania (SPD), Sigmar Gabriel, quiere mantener la actual política hacía refugiados.
A la par, Gabriel atribuyó la culpa para el surgimiento del derechista AfD al propio Seehofer y sus posiciones que algunos consideran racistas.
Si uno propaga consignas de esa tendencia derechistas no deberá quedar sorprendido si la gente vota por la verdadera derecha, comentó Gabriel.
(Con información de Prensa Latina)