Con su peculiar estilo para interpretar flamenco, en una fusión entre la música cubana y el folclor argentino, el cantautor español Diego "El Cigala" presentó esta noche su más reciente material discográfico "Romance de la luna Tucumana", en el Auditorio Nacional.
Poco antes de las 21:00 horas, las luces del recinto se apagaron y el escenario adquirió tonalidades rojizas para recibir a los cinco músicos que dieron la bienvenida al público y a Diego "El Cigala", quien arrancó la velada con "La canción de las simples cosas".
"Muchas gracias México, les voy a presentar mi nuevo disco para luego pasar a los recuerdos, pero antes de comenzar quiero agradecer a dos personas que están en la concurrencia, que son muy especiales para mí, tenía muchas ganas de verlos, los amo con todo mi corazón desde el día que los conocí, señor Gabriel García Márquez y su esposa Mercedes", expresó el intérprete.
Sentado en el centro del escenario, El Cigala aplaudía, lanzaba besos al público, tocia un poco y continuaba con la interpretación de los temas de su nuevo disco, entre ellos "Naranjo en flor", "Los mareados" y "Romance de la
luna Tucumana".
En una permanente complicidad con los cinco músicos que lo acompañaron esta noche y que sorprendieron por su habilidad para tocar el piano, las guitarras, el contrabajo o las percusiones, El Cigala cantó para su público "Déjame que me vaya" y "Niebla del riachuelo".
Como parte del repertorio de esta noche El Cigala incluyó los boleros "Historia de un amor", que compuso el autor panameño Carlos Eleta Almarán en 1955 e "Inolvidable", de Julio Gutiérrez.
Le siguieron "Por una cabeza" y "Canción para un niño de la calle", de su nuevo disco, así como "Quiero emborracharme corazón", "Veinte años", con la que recordó al músico cubano Bebo Valdés, quien murió en marzo pasado.
En el cierre del concierto, El Cigala interpretó "Lágrimas negras" y "Bien pagá", con la que daba fin a la velada, pero al oír los aplausos del público regresó para regalarles "Dos gardenias".
(Con información de Notimex)