Fallece en La Habana destacado cineasta Daniel Díaz Torres

Daniel Díaz Torres, cineasta cubano.

En la madrugada de este lunes falleció en La Habana Daniel Díaz Torres, destacado y multipremiado director de cine cubano, producto de una penosa enfermedad. Será velado en la funeraria de Calzada y K, Vedado.

Díaz Torres nació el 31 de diciembre de 1948. Inició su labor como documentalista en 1975 y poco después realiza casi un centenar de ediciones del Noticiero ICAIC latinoamericano entre 1977 y 1981. Su debut como realizador de largometrajes tiene lugar en 1984 con el filme Jíbaro. Salta a la notoriedad internacional con la sátira Alicia en el pueblo de Maravillas (1991).

Se graduó en 1978 de licenciado en ciencias políticas en la Universidad de La Habana. Escribe críticas y artículos de cine para las principales revistas y periódicos y a su vez participa en la dirección de seminarios sobre cine en las Universidades de Oriente y de La Habana. A partir de 1971 comienza su trabajo como asistente de dirección, realizando paralelamente algunas menciones para la televisión. Colabora además como asistente de dirección en Muerte y vida en El Morrillo, Los días del agua, El hombre de Maisinicú, De cierta manera, Mella y Río Negro.

Inicia su labor como documentalista en 1975, que será incesante en la segunda mitad de los años setenta: Libertad para Luis Corvalán (1975), Encuentro en Texas (1977), La casa de Mario (1978), Los dueños del río (1980), Madera (1980), Vaquero de montañas (1982) y Jíbaro (1982). En 1986 realiza el largometraje de ficción Otra mujer, una comedia retro (la acción ocurre en los años sesenta) con guión de Jesús Díaz y fotografía de Raúl Pérez Ureta, que lo acompañará en varias de sus posteriores y más famosas películas. En 1995 concluye el mediometraje Quiéreme y verás, que continúa su sátira de los géneros convencionales (el policiaco, el melodrama, el cine de espías), la colaboración con Raúl Pérez Ureta, y entrega un brillante desempeño de Reinaldo Miravalles, uno de los mejores actores del cine cubano.

Su burla de los géneros convencionales luego se combina con el retorno a la situación y los personajes contemporáneos en las comedias Kleines Tropikana (1997) y Hacerse el sueco (2000). Más tarde realiza varios documentales (Entrevista a Ricardo Alarcón de Quesada, Los cuatro años que estremecieron al mundo —de la serie Caminos de Revolución—, Tres cantos a New Orleáns) y un filme con referentes históricos para la televisión española (Camino al Edén), 2007 antes de retornar a sus fueros paródicos con Lisanka (2009). Integraba la Unión de Escritores y Artistas de Cuba (UNEAC). Impartió clases de historia del cine en la Universidad de La Habana. Desde 1986 laboraba en la Escuela Internacional de Cine y TV de San Antonio de los Baños. A lo largo de su vida obtuvo numerosos premios y menciones en festivales internacionales, y era miembro del Comité de Cineastas de América Latina y miembro fundador del consejo superior de la Fundación del Nuevo Cine Latinoamericano.

FILMOGRAFÍA

Como asistente de dirección: