La movilización, desde ya bautizada como 9A, fue una iniciativa surgida de las organizaciones que hace parte del conglomerado social llamado "Marcha patriótica", cuya cabeza visible es la ex senadora Piedad Córdoba.
La fecha de la iniciativa coincidió con la conmemoración del asesinato de Jorge Eliécer Gaitán, el dirigente político que fuera precandidato presidencial, y el primer llamado "Día Nacional de la Memoria y la Solidaridad con las Víctimas", una de las tantas iniciativas impulsadas por la Ley de Víctimas.
A la marcha se unió inicialmente el alcalde de Bogotá, Gustavo Petro, que, entre otras, decretó este martes como día cívico con el fin de que los funcionarios de la administración distrital tomen parte de la manifestación.
Luego el presidente Santos le dio su respaldo a la marcha y sumó el apoyo de algunos sectores políticos de la coalición de gobierno, además de la iglesia Católica.
Sin embargo, la caminata tiene como principal crítico al ex presidente Álvaro Uribe (2002-2010), quien se opone a toda iniciativa que respalde el gobierno, al manifestar que se no se marcha en favor de las víctimas sino de los victimarios, en referencia a las FARC.
La prensa local y diversos analistas coinciden en que la marcha es un nuevo escenario del pulso político que mantienen desde hace meses Santos y Uribe, distanciados luego que fueran aliados.
(Con información de ANSA)