Un oddun de Ifá es un órgano viviente (I parte)

Entrevista con el babalao José

RMLG: ¿Existen diferencias en los sistemas adivinatorios que se utilizan en Cuba y Nigeria?

José: Por lo que he podido apreciar, existen.

RMLG: ¿Cómo usted se las explica?

José: Se trata de modificaciones asociadas fundamentalmente al sincretismo. Eso ocurre en todos los procesos sincréticos. Todas las culturas son sincréticas. Y obviamente, también en nuestro caso tiene que haber habido fenómenos de este carácter. Hay algunos odduns -o sea, letras- de Ifá que se refieren a determinados animales y plantas nativos de África, y aquí ha habido que cambiarlos. Y es posible también que algunas de las historias sean historias un poco cubanizadas, por llamarlas de alguna forma. Creo que sería útil revisar lo que están escribiendo los diferentes autores nigerianos y los babalaos de otras latitudes, comparar y precisar qué queda de las historias nuestras que están en los odduns, qué ha sido incorporado. Pues un oddun Ifá es un órgano viviente. Hace unos años atrás, cuando en el proceso adivinatorio salía que tuvieras cuidado  con un accidente y no existían los aviones, a ningún babalao se le ocurría decirle a alguien que se cuidara de los accidentes de aviación, es decir, que no montara aviones. Aunque Orula conoce pasado, presente y futuro, no deja constancia explícita y detallada de su saber para cada etapa diferenciada de la historia. Su vaticinio es más general. Es decir, ha habido incorporaciones que pueden tener aspectos positivos y negativos. Quizá la solución consista en reunir un grupo de religiosos, estudiar el asunto y proponer las cuestiones que deben mantenerse y las que deben ser ajustadas, para llamarlo de alguna forma.

RMLG: ¿Y si las modificaciones se refieren a la propia naturaleza de los odduns?

José: De eso te estoy hablando. Hace dos siglos, un babalao estaba obligado a interpretar el oddun de Ifá en correspondencia con la realidad que vivía. Por ejemplo, hay un oddun muy concreto que dice: "Usted no puede pasar el mar ni el río sin autorización". Cuando eso sale aquí, casi siempre se le advierte al aleyo -al que se inicia- que no se le ocurra atravesar el mar, o sea, abandonar el país de forma ilegal, porque se lo están advirtiendo: "Dice el oddun este que, si lo haces, mueres o vas preso". Es muy probable que, en otra latitud, esto haya que interpretarlo de otra forma. La interpretación siempre está vinculada con las circunstancias concretas en que se vive.

RMLG: Yo le pregunto otra cosa: ¿existen o no diferencias en los propios odduns que se leen o interpretan en Cuba y en Nigeria, o en Brasil? Apunto a la posibilidad de que, en un libro de Ifá cubano, aparezca en una letra algo distinto de lo que aparece en el libro correspondiente de Nigeria o Brasil.

José: No es que quiera evadir la pregunta, pero yo no tengo suficiente información sobre los odduns de Ifá en Nigeria -para no hablar de Brasil o Venezuela-. De modo que no puedo comparar. Siempre habría que ir a la fuente, pero ese es un trabajo pendiente, algo que sin dudas hay que hacer. De igual forma, si le preguntas a un psiquiatra cubano cuál es la diferencia entre la última versión del glosario cubano de clasificación de las enfermedades mentales y el glosario internacional actual, es casi seguro que no te pueda responder.

RMLG: ¿Se debe considerar que es una la verdad religiosa?

José: Sí.

RMLG: Entonces, en el caso de que existan divergencias, ¿se debe considerar que una de las dos versiones está errada?

José: Bueno, nosotros decimos que Orula no se equivoca, que los que nos equivocamos somos nosotros al hacer la interpretación. Es por eso que puede haber diferentes interpretaciones, y sí, verdadera sólo puede ser una. Justamente por eso, cuando se presenta un problema serio o una situación de mucha importancia, no nos servimos sólo del oráculo con que trabajamos a diario, el écuele; y se establece que debe haber más de un babalao, porque la sabiduría se repartió entre muchas cabezas. Cuando se realiza una ceremonia de envergadura, deben estar presentes tres babalaos como mínimo.; y lo que uno no puede interpretar, lo interpreta el otro; van adecuando los juicios y las valoraciones, y al final sale una resultante que debe ser de unidad de, por los menos, tres cabezas. Esto es importante para que no ocurra que uno haga una interpretación, y el otro, otra. En los famosos itá -los registros que se hacen al pie de Orula- participa más de un babalao; habitualmente participan tres.

RMLG: Pero, bueno, en el caso de que, ante una misma letra, en el código interpretativo de Cuba, y en el de Nigeria, se identifiquen ideas diferentes, ¿querría decir que uno de los dos está errado?

José: Metodológicamente, la interpretación tiene que ser igual. Metodológicamente. Claro, hay variaciones en el uso del oráculo en Nigeria y en Cuba, incluso variaciones de carácter metodológico. Pero no me atrevo a ser categórico en esto. Si ahora tú haces un registro aquí, y ese registro se escribe como si fuera una historia clínica y tú se lo das a leer a otro babalao, puede que él haga otra interpretación, lo asocie a otra historia u oro camino. Yo insisto en que cuando se trate de una cuestión seria, debe haber tres babalaos, incluido uno mayor.

RMLG: ¿Es posible admitir la idea de que en un país el oricha se contenta con una cosa y en otro país lo haga con otra cosa?

José: No sabría decirte.

(Continuará.)